Me tomó en su luz,
acarició mi alma,
susurró en mi corazón...
Mi verde mirada
se prendió en sus rayos,
me elevó tan alto
que pude flotar
Brotaron mis lágrimas,
gemí sorprendida,
me elevé muy alto,
grité de placer
¿Acaso soñaba
que estaba en mi luna
y quien me acunaba
eras tú?
Mis ojos se abren,
sonríe mi cuerpo,
mi alma palpita
y arde mi sangre
Porque estás ahí,
porque no te fuiste,
porque me amaste
y no te escondiste
La luna me acuna
cuando tú no estás,
y si estás presente,
ella se oculta
y se va...
Nos regala una noche
llena de misterio,
la magia va en coche
y nuestro amor,
nuestro amor
en cautiverio...