Estaba en casa de mamá y me puse a revolver placares. Nunca imaginé la sorpresa que me esperaba... Allí mismo, entre la ropa de mamá, encontré dos poemas escritos por papá, de su puño e inconfundible letra...
Para mí, fue hallar un tesoro...
Uno de esos poemas es el que sigue.
... ... ... ... ... ... ... ...

Quisiera alargar el tiempo,
quisiera ver el futuro
y hasta saber lo que pienso.

Quisiera saber si llego
a concretar mis anhelos,
quisiera saber que puedo
en el tiempo que me queda.

El tiempo pasa tan rápido
y no puedo detenerlo,
yo debo apresurarme
y concretar esos sueños.

Yo quiero saber si puedo
pedirte, a ti Señor, una ayuda.
No quiero Señor, dinero,
solo quiero que me ayudes
a concretar mis anhelos.

¡Anhelos que son tan caros
para poder concretar!
Necesitaría Señor, mil años,
para poder realizar
las obras que yo quisiera.

¡Erradicar el hambre! ¿Es posible?
¡Que los niños no murieran!
Que todos felices fueran,
¡que las guerras no existieran!

Señor, cuando eso tú consigas
que se haga realidad,
mis sueños ya concretados,
mis anhelos alcanzados.

Deja correr el tiempo, Señor,
que a mí ya me ha alcanzado.