“Se piensan. Se quieren. Se adoran.
Se desean. Se necesitan, pero no
están juntos”

  J U L I E T T

Nota #3
Estoy emocionada. Salir con Evans fue recodar nuestra amistad, los momentos juntos y es que siempre me la paso muy bien con él.

Tuve la dicha de verlo de cerca y admirar cada detalle de su rostro. Fingiendo frente a él, evitando suspirar y no sonreír como boba cuando lo escuché hablar o reír.

Todo era perfecto, hasta esa llamada de Lisa.

Evans me confunde.

Sus palabras me molestaron y tal vez si fue una imprudencia de mi parte decirle que saldría con Marco. Use sus celos de amigo solo para hacerlo molestar, funcionó. Sin embargo, no me esperé esa respuesta de su parte:

>Salir los seis juntos<

Por supuesto con Gina y Ulises pero Lisa no se incluye en el paquete.

Sería mejor los cuatro juntos:

Gina y Ulises.

Juliette y Evans

Lástima que las cosas son de otro modo o tal vez:

Lisa y Marco

¿Por qué no puede ser así?

¿A quién engaño? No puedo engañarme a mi misma. Evans solo me ve como su amiga de infancia. Es cierto que hay problemas entre nosotros. Ya nada es como antes. Mil veces va a preferir a Lisa...

No puedo dejar de pensar en nuestra salida. En él y en el casi posible beso.

¿Habrá sentido lo mismo?

No puedo besarlo. No porque es mi amigo y nada más...

Bufo fustrada y cierro la computadora de golpe.

Cada palabra es lo que siento. Un significado y un secreto que oculto.

Me regaño a mi misma. Prometí no volverle a escribir. Estaba molesta con él pero no puedo evitarlo. Esto me ayuda. Me desahoga. Me siento un poco mejor. Es casi parecido a que lo gritara. La diferencia es que son palabras escritas en una simple hoja.

Me recargo en la silla y empiezo a dar vueltas al esta tener llantitas. Mi vista viaja a mi celular que se encuentra boca abajo en el escritorio. Dudo un momento y finalmente lo tomo y le mando un mensaje a Evans:

Me regaño mentalmente al preguntar primero por ella. Sin embargo es demasiado tarde ya que presioné el enviar y dos palomitas azules me muestran en el chat indicando que Evans ya lo vió. Me emociona al ver el escribiendo en la parte de arriba.

Tenemos una conversación y sin evitarlo. No borro la sonrisa en mi rostro. Termino por enviar ese último mensaje.

Miro el mensaje visto por él. Evans dura en responderme. Me arrepiento enseguida por escribir eso.

El aún está en línea y ese escribiendo tarda mucho. Hasta que mi celular suena. Aparece una videollamada. Al principio dudo, peino mí cabello o lo intento y acepto la llamada apareciendo en la pantalla de mi celular un Evans un poco despeinado.

Juliett:
¿Ocupado?

Evans:

Para ti nunca.

Sonrio. Rápido recargo mi celular y coloco mis brazos en el escritorio.

Juliett:
¿Qué hacías?

Puedo distinguir su habitación. Evans se encuentra sentando en su escritorio al igual que yo. La diferencia es que el tiene desastre de lápices distintos regados con su libreta de dibujos cerrada (que nunca me a mostrado. Ya es muy reservado. Los pocos dibujos que me mostró eran de paísajes o un cielo)

Evans:
Dibujar

Juliett:

¿Qué dibujas?

Evans:
Dime, ¿todas las mujeres son
t

an curiosas?

Juliett:

¿Por qué lo preguntas?

Apoyo mi mano en mi barbilla.

Evans:

Olvidalo. No me hagas caso.

Evans sonríe.

Y sin importar el tiempo. Pasamos las horas hablando de cualquier cosa por medio de una simple videollamada.

(...)

Días después..

Ha transcurrido la semana. Pocas veces hablo con Evans por mensaje. Casi no lo he visto en persona, aunque aveces nos cruzamos en el instituto, solo fue un rápido saludo y cada quien siguió en lo suyo. Ni siquiera una llamada nocturna. La última vez que hablamos con extensión fue ese día de la videollamada. Por su culpa dormí, hasta largas horas de la madrugada, sin embargo, valió la pena al hablar por él.

Es viernes, último día de clases.

A sido un semana difícil entre trabajos, proyectos, exámenes. Muy fustrante.

Con la que hablo más es con Gina. Solemos hacer el trabajo juntas en casa o simplemente, juntarnos para platicar. Aunque Gina ya tiene novio, seguimos siendo muy unidas. Entiendo que aveces quiera pasar tiempo con Ulises y lo acepto.

No entiendo porque no puedo hacerlo con Evans.

En fin, lo único que quiero es que las horas de clases terminen y poder irme a casa a descansar.

Tenía pensado invitar a Evans a mi casa. Sin embargo, dudo que acepte. Se rumora que hoy es el cumpleaños de Lisa, que hará una fiesta que estoy segura que Evans irá como su novio que es. Una fiesta que no he sido invitada y sinceramente, prefiero no asistir.

Pero, al menos puedo hablar un rato con él.

Es la hora del receso. Estaba por buscar a Evans pero, la necesidad de ir primero al baño, me gano y con rapidez, muy apenas llegué al baño. Sin darle importancia a las dos chicas que se encuentran maquillandose frente al espejo, corro y entro al primer baño desocupado.

Termino por hacer mis necesidades. Escucho la voz de esas chicas irse entre risas. Estoy por abrocharme mi pantalón cuando escucho la puerta ser abierta de golpe, escucho risas y voces. Lo más extraño, es escuchar una voz varonil en el baño de chicas.

>No es posible<

—Vamos, date prisa. —escucho la voz de la chica y ríe.

Rápido la reconozco como Lisa.

—Por supuesto que estamos solos. Aquí nadie nos va a ver.

Termino de abrocharme el pantalón rápido y retrocedo hasta chocar con la taza.

—Revisare... Espera... Deja reviso.

Pienso en salir e irme. Lástima que no soy invisible. Tengo el presentimiento que está con Evans.

Evans con Lisa en el baño de chicas a solas. Encerrados en un baño lo bastante urgidos.

>Un mal pensamiento<

—Lisa, no tenemos tiempo.

Un momento...

Frunzo el ceño.

Esa no es la voz de Evans.

Sin dudar. Tomo mi mochila con cautela y me subo arriba de al taza. Al menos antes bajé la tapa.

>Que incómodo<

Puedo escuchar los pasos de Lisa y como abre las puertas de los otros baños.

Rezo para que no me encuentre y sobre todo, no me vea de esta forma. Pienso una posible respuesta: Holi

>En que situaciones te pones Juliett<

Se me acelera el corazón cuando veos los zapatos de tacón de Lisa por debajo de la puerta. Veo los zapatos de ese chico.

—No hay nadie. Venga, no tenemos tiempo.

Escucho como el chico interviene y enseguida, dejo de verlos frente a mí.

Escucho como entran a un baño y cierran la puerta entre risas y se empiezan a besar.

>Juliette es momento de huir antes de que sea tarde<

Bajo los pies con lentitud. Me cuelgo mi mochila y me acerco a la puerta. La abro despacio y me asomo al exterior. Sin su presencia. Con cautela salgo, ellos no me escuchan o están lo suficiente ocupados. A pasos rápidos y de puntitas, salgo del baño.

Apenas salgo y dejo salir el aire acumulado.

>Maldita Lisa<

>Evans no se merece esto. Tengo que decirle<

Enseguida ajusto mi mochila en mi hombro y corro en busca de Evans.

...

Logro encontrarlo en el patio. Sentado en una banca. Sin esperar, corro hasta él y tomo asiento frente a Evans dejando mi mochila caer al suelo.

—¡Evans!

Él alza la vista en mi.

—Juli, que sorpresa.

—Evans, necesitamos hablar. —le digo apresurada.

Él suelta el lápiz y asiente.

Bajo la vista en lo que estaba haciendo y frunzo el ceño.

—Estás dibujando a ...¿Lisa?

Analizo el dibujo. Es un bonito dibujo con el rostro de Lisa muy bien marcados. Pero esa esa cara angelical, es una farsa. Deberia colocarle cuernos.

—Sera un regalo para ella. Hoy es su cumpleaños y se lo prometí tenerlo para hoy en la noche. Solo me falta retocar ciertos detalles.

Azlo la vista y la poso en Evans.

—Te quedó bien. —murmuro— si escuché sobre la fiesta.

—¿Irás?

—No fui invitada.

Evans enarca una ceja.

—Lisa me comentó que ya te había invitado, que incluso aceptaste ir.

—Pues te a mentido. No he hablado con ella toda esta semana.

Lo miro fijamente.

—Que extraño, Lisa no tenía porque mentirme.

—No deberías confiar tanto en ella.

—Es mi novia, Juli.

Dudo en contarle.

—Tal vez, se le debió pasar. Está muy distraída por su fiesta.

—Si, debe ser. —me limito a decir.

>Claro y ese chico es su distracción<

—Como sea, te invito yo. Serás mi invitada.

Evans me sonríe.

—No iré a la fiesta Evans.

Borra su sonrisa.

—¿Por qué no?

—Aunque hubiera sido invitada por ella, le diría que no y ahora que tú me invitas, me niego a ir. Lisa no me cae bien, no te merece Evans.

Él se recarga en la silla.

—Juli, ¿por qué me dices eso? Creí que Lisa te caía bien.

Bufo.

—Por favor Evans, date cuenta. —coloco ambas manos sobre la mesa—. Lisa es una mentirosa. No debería ser tu novia, es más, para tú información, no me cae bien, he fingido por ti. No la soporto.

Él pestañea varias veces y se inclina.

—Juli, no voy a permitir que hables así de ella. Lisa a hecho todo lo posible para caerte bien, se comporta amable contigo.

—Estas ciego Evans.

—Basta Juliett —emite en tono alto— Lisa es mi novia y te voy a pedir que la respetes. Entiendo tus celos de amiga pero creí que ya habíamos quedado en algo, que ninguno de los se metería en al felicidad del otro.

Guardo silencio mientras me limito a verlo.

—No son unos simples celos de amiga Evans. —muerdo mi labio inferior— es, lo que pasa es que... No quiero que Lisa te lastime porque al final de cuentas, yo tengo que soportar verte triste por una chica, consolarte por alguien que no vale la pena.

—Ya es suficiente Juliett. No quiero seguir escuchandote.

Él empieza a recoger sus cosas.

—Evans, escuchame. Tienes que saber algo de Lisa, como tú amiga que soy...

—Juliett no quiero escucharte. —me interrumpe— y mucho menos para decirme cosas feas de Lisa. Está bien que te caiga mal pero esto Juli, ya es demasiado. No la calumnies.

Soporto el nudo en mi garganta.

—¿La vas a preferir a ella que a mí? Soy tu amiga Evans, desde la infancia.

—Juliett, ella es mi novia. No me hagas elegir cuando es difícil para mí.

Niego y desvío la vista.

—No es necesario que lo hagas.

Me pongo de pie y tomo mi mochila de mala gana y me la cuelgo en el hombro.

Tan pronto, me arrepiento de contarle.

—Juli...

—Tu solo vas a darte cuenta de la clase de novia que tienes. Vas a llevarte una gran desilusión.

—Ya me la estoy llevando. —me mira fijamente— de ti Juliett. No lo creí de mi amiga. Te desconozco, estos celos de amiga te rebasan. Entiendo que...

—Callate. —emito con brusquedad— no volverás a batallar conmigo.  Con esto. Quédate con Lisa y a mí déjame en paz Evans.

Me doy la vuelta y me alejo de él a pasos rápidos.

Una lágrima rebelde baja de mi mejilla. Intento limpiarla, fallando al salir más. Avanzo rápido, ignoro las miradas, choco con varios alumnos.

Solo quiero escapar.

—Juliett, ¿qué tienes?

Me detengo al chocar con Gina. Ella me coloca sus manos en mis hombros y me analiza.

—Evans es un idiota. No quiero saber de él.

—¿Qué hizo esta vez?

—Me quedo claro que prefiere a Lisa. Ya estoy harta Gina. Harta de esto. Ya me quedo claro que nuestra amistad terminó.

Me safo de su agarre y la rodeo avanzando por el pasillo lejos de ella.

—Juliett, espera —oigo sus pasos— ¿A dónde vas?

—A casa

—¿Las clases aún no terminan?

—Entonces lejos de Evans. Solo quiero estar sola Gina.

Dejo de escuchar sus pasos y continuo hasta que alguien bloquea mi camino. Alzo la vista encontradome con Lisa frente a mi.

—¿Todo bien?

—No me dirijas la palabra. —doy un paso adelante— Sabés Lisa, ganaste, quedate con Evans. Ya no seré más su amiga— ella sonríe ampliamente— pero te digo algo, Evans se va enterar de la clase de chica que eres. Le mientes, lo engañas. —sus ojos se abren en sorpresa— no seré quién se lo diga. —me encojo de hombros— tarde o temprano lo va a descubrir.

Y dicho esto, la empujo con mi hombro y prosigo con mi mano.

Avanzo por ese pasillo sin evitar las lágrimas, todas por culpa de mí supuesto amigo.

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Nota de autora:
Holaa, gracias por la oportunidad a mi historia. Por seguir leyendo y su apoyo. Espero hayan disfrutado el capítulo. Las conversaciones de WhatsApp que aquí se muestran son falsas, imitaciones con ayuda de una aplicación llamada WHATSMOCK, la pueden encontrar gratis en Google App Store. Solo para darle más realismo a la historia. Sigan leyendo ✨❤️