Había estado pensando en mi conversación con Jungkook toda la tardé.  Con Mei llegamos al departamento hace unas pocas horas, ella rápidamente pidió un baño de agua tibia con burbujas, tal y como acostumbraba a hacer cada tarde.

Ahora se encontraba acostada en el sofá mientras veía uno de sus programas favoritos a esta hora, mientras que yo me dedicaba a terminar la cena y ordenar una que otra cosa que se encontrará fuera de su lugar, en su mayoría eran juguetes de Mei y cosas que ocupaba en la cocina.

Y aún cuando me mantuve tan ocupado después de llegar al departamento, no dejaba de pensar en todo lo que hablé con Jungkook en el local de comida. Y estaba tan sumido en ello, dándole vueltas una y otra vez que no repare en que Yoongi ya había llegado a la casa, y daba vueltas por el living con Mei colgando de su cuello.

Rápidamente dejé todo lo que estaba haciendo en la cocina y fui con ellos. Con una sonrisa en mis labios me pare en el umbral de la cocina al living, y los observé con cariño, mi corazón y mi lobo felices de ver a las personas más importantes de nuestras vidas divirtiéndose juntos.

—¡Papá! ¡Mira quién llegó!

Le sonreí.

—Lo estoy viendo Mei, no se sobresaltes tanto, puede hacerte mal—me acerqué y besé los labios de mi Alfa, fue efímero—¿Qué tal te fue hoy cariño? ¿Muy pesado?.

—Tuve que rendir algunos exámenes que debía de algunas semanas atrás. Casi me explotan las neuronas—bromeó. Acaricie su mejilla suavemente, esta se encontraba de un tono carmín, haciéndolo ver aún más pálido de lo que era, se veía lindo así.

—¿Las neuronas pueden explotarnos?—preguntó intrigada Mei.

—La verdad no lo sé dulzura, solo estaba bromeando—acarició su nariz con la suya y eventualmente la bajo de sus brazos, Mei corriendo de vuelta al sofá, viendo el programa que se seguía reproduciendo en la televisión. Yoongi la observó hasta que llegó y se acostó nuevamente. Luego me miró y una sonrisa encantadora se bordó en sus labios, se acercó a mi y apoyo sus manos en mis caderas—Casi lo olvidaba, feliz día del padre mi amor—me abrazó.

Me sentí muy a gusto en su pecho, sintiendo su aroma colarse por mi nariz.

—Gracias cariño—murmure entre sus brazos—Este día también lo puedes celebrar tú ¿No? Eres como un padre para mí Mei, y ella te lo ha demostrado..—me separe de su abrazo y acaricie su pecho.

—Me halagas Hoseok..sabes cuán importante es para mí todo este tema—sonaba emocionado—Mei es como la hija que siempre deseé, y aunque no lo creas, le ruego a la Diosa Luna que ella algún día pueda llamarme padre también..—un leve dolor atacó a mi corazón, mi lobo feliz de escuchar a nuestro Alfa hablar así.

—Se que algún día ella lo hará. Te quiere demasiado y lo sabes..—Yoongi asintió—Bueno, iré a preparar la mesa, la cena ya está lista, para que vayas y laves tus manos—el Alfa se despojó de su chaqueta y fue por el pasillo hacia el baño—Mei ve con Yoongi a lavarte las manos, es hora de cenar—le avise a mi hermosa niña.

—¡Si papá!

Sonreí complacido y fui por las cosas a la cocina y eventualmente las fui dejando en los respectivos lugares que prontamente serían ocupados por mi familia. Risas y murmullos se escuchaban en el pasillo, ya estaba todo listo, la comida ya servida.

Tome asiento.

—¿Qué es tan gracioso?—pregunté con buen humor al ver las risas y miradas cómplices que compartían Mei y Yoongi.

—Nada, so-

—¡Yoongi quiere hacer una fiesta sorpresa para su aniversario contigo, papá!—sus ojitos brillaban maravillosamente, la cara de Yoongi fue todo un dilema, mirando con pena a Mei y luego a mí. Sus mejillas se enrojecieron, y un leve puchero adornó sus labios—¿Por qué tienen esas caras?.

—Mei..—habló con decepción y una sonrisa apenada—No tenías que contarle a papá lo que estábamos planeando..

El rostro de mi bebé se puso triste.

—¿Lo eché a perder Yoongi?—mordió su labio inferior, mientras jugaba con las orillas del mantel. Finalmente Yoongi asintió—Lo siento tanto, yo no quise, pero es que me emociono tanto la idea que no pude mantener mi boquita cerrada..

—Yoongi no querrá contarte más secretos bebé—dije con diversión. Viendo como su rostro decaía levemente, el Alfa también soltó unas carcajadas inocentes, pero nos detuvimos al ver como aquel puchero en los labios de Mei se intensificaron y un sollozo casi imperceptible se escuchó—Ay, no, no, no, mi niña por favor no llores..

Mi Alfa se puso de pie y se acercó a ella.

—Dulzura, me rompe el corazón verte llorar. Con tu padre solo bromeamos, claro que seguiré contándote de algunos planes que se me vayan ocurriendo–Mei sorbio su nariz y nos observó a ambos. Yoongi le acarició el rostro con suavidad.

—No me gustan sus bromas, son feas—reclamó con ternura—Me hacen llorar con facilidad, yo soy una niña grande que no llora por estas cosas, pero ya ven..—se encogió de hombros, reí ante su actitud.

—Ya, ya paso dulzura. Sécate esas lágrimas y terminemos nuestra cena, ¿Te parece si después nos reunimos en el sofá a ver una película? ¿Te gusta la idea?—indagó Yoongi. Acariciando su cabello.

—¿Tierra de osos, y con palomitas?—sugirió con una mirada tierna.

—Lo que tú quieras mi vida—le dije—Ahora, vamos a terminar de comer para ver pronto la película ¿De acuerdo?—ella asintió y regresó a tomar sus cubiertos.

Su cambio de humor siendo evidente.
Mi bebé había comenzado a cantar en un volumen bajo una canción de la película.

—Que sepa el mundo, que en marcha estoy..—se veía tan dulce, me llenaba el corazón de calidez y amor al verla feliz.

Yoongi la veía enternecido.
Desde ese momento, la cena transcurrió de manera alegre y como debía ser.

El reloj marcaba las nueve con quince de la noche y Mei ya se encontraba dormida. Yoongi la había tomado en brazos con cuidado y llevado a su habitación, mi bebé se acurruco en el pecho del Alfa, soltando un suspiro largo en medio del camino.

Le seguí por el pasillo hasta el cuarto de la niña. Abrí la puerta y dejé que Yoongi pasará con cuidado, encendí la luz cuando Mei fue dejada sobre la cama, sus manos buscando el cuerpo cálido del Alfa, llamé la atención de Yoongi y le dije que fuera a darse un baño, ya que lo había estado posponiendo desde que comenzamos a ver la película y que yo me quedaría aquí.

—Te esperaré en nuestra habitación si es que salgo primero del baño..—dijo y se acercó a besar mi frente. Le asentí.

Una vez que Yoongi había salido de la habitación, miré por una última vez como mi bebé descansaba plácidamente en su cama, para luego salir finalmente de allí.
Mi habitación no se encontraba muy lejos, ingresé y cerré la puerta, me despoje de mis zapatos y me acosté en la cama. Hoy había sido un día bastante ajetreado, mi cuerpo había pedido a gritos mi cama en todo el día, pero como soy padre de una niña bastante hiperactiva, acostarme en un horario temprano era algo imposible.

Tome mi celular y encendí la pantalla.
No tenía ningún mensaje, aparte de los que me llegaban de la compañía telefónica por un plan que había expirado. Fui a una de las plataformas más virales actualmente, necesitaba matar el tiempo mientras esperaba a que Yoongi saliera.

Me aparecieron muchos vídeos de gente que no conocía, en su mayoría bailando o haciendo un tipo de actuación diferente a la que estaba acostumbrado a ver en las películas. La idea de pronto que había sugerido mi mejor amigo Jeon Jungkook, renacía entre mis memorias, mi Omega hallándose entusiasmado por lo que estaba por hacer, aun cuando la duda iba de la mano conmigo, sin tener la intención de querer soltarme en algún momento.

Y es que me seguía pareciendo algo monumentalmente descabellado, ¿Qué sentido tenia buscarlo ahora? No tenia la certeza de si dejarme influenciar por las palabras de Jungkook, seria la mejor de las acciones. No obstante, no me detuve en lo que estaba haciendo, aun cuando le había dado mil vueltas al asunto en solo un par de minutos, me había replanteado la pregunta de ¿Qué podría salir mal de todo esto? Siempre hice todo con el pensamiento de que es y será, por el bienestar de mi pequeña Mei, ella merecía saber la identidad de su padre biológico.

Debía dejar de pensar de manera pesimista, y saber que podía conseguir de esto. No le haría ningún daño a nadie. o eso quería esperar. Quizá este alfa nunca vea el video, todo podía pasar, y ya me estaba preocupando de mas por la situación que prontamente se presentará.

—Bien. Veamos que tal me va..—apreté el icono en donde podía hacer mis videos, elegí una música de fondo y comencé a grabar. Busque unos de mis videos que tenia con Mei en galería y lo incluí en la grabación. Mordía de vez en cuando mi dedo pulgar, hasta que finalmente había acabado, cerré mis ojos y le di a publicar, ya no podía volver atrás, estaba hecho—Ya esta..

—¿Que, ya esta mi amor?—indago Yoongi mientras ingresaba a la habitación, con uno de sus brazos en alto mientras secaba su pelo con una toalla. Le mire sorprendido, sentía mis mejillas enrojecerse cada vez mas. Lo bueno es que en ese momento el Alfa no reparo en ello.

—Nada cariño. Solo unas cosas del curso de arte terapia—intente sonar convincente. 

—¿Y que tal vas con todo eso? No me has querido decir como te han recibido en la academia—se giro a sonreírme, para luego volver su vista al closet y sacar una camiseta de allí—De seguro tus nuevos alumnos te amaron, tienes una facilidad increíble para caerle bien a las personas..

—Fueron muy agradables conmigo. Supieron ir a mi ritmo y conocer mi manera de trabajar, aun cuando solo estuve hasta las diez y media de la mañana—sonreí bonito, dejando mi celular de lado para sentarme en una posición similar a la flor de loto—Realmente pensaba que podía irme peor, me había mentalizado hasta para el peor de los escenarios, pero todo salió mas que bien. 

—Me alegro mucho, mi vida—se giro después de subir sus pantalones de dormir, y me tomo de mis mejillas para besarme cálidamente—Recuerda cada mañana que eres el mejor de todos—asentí, viéndole con una sonrisa enorme en mis labios—Porque para mi lo eres, y debes creértelo tú también, mas que nadie en este mundo ¿De acuerdo solcito?. 

—Lo hare, no te preocupes..

Me sonrió, y luego se separo de mi lado para irse al lado izquierdo de la cama. Metiéndose entre las sabanas y tapándose con ellas hasta la cabeza. Un suspiro largo se escucho de su parte. 

—Nuestro aniversario es en tres días—comenzó diciendo, le mire con atención—Y como ya sabes, tenia una sorpresa preparada para ese día, algo muy especial para los dos. Sera algo sencillo e intimo, nadie mas que nosotros y Mei, y siempre que quieras podemos invitar en la noche a Jimin, y por supuesto a Jungkook junto a Dongju, y a Namjoon que es mi hermano, ¿Qué te parece Hoseok?—parecía bastante ilusionado con la idea. Que simplemente no podía negarme ante su dulce petición—Prometo hacerme cargo de cualquier desorden que dejen..  

No pude evitar reír levemente por su comentario. 

—Me parece estupendo mi vida, podemos disfrutar nuestro aniversario en la tarde y ya para la noche recibir a los demás—me incline y acaricie el cabello, cerro sus ojos ante la sensación—¿Cae día viernes cierto? Para no tener que preocuparme al día siguiente por ir a trabajar..

—Te recuerdo mi solcito que cae día viernes y es festivo, así que no debes ir a trabajar tampoco el día viernes, tendremos fin de semana largo—chillo gustoso—Que fantástico, tendré tiempo para ponerme al día en la universidad, tú tendrás tiempo para descansar y además celebraremos nuestro tercer aniversario juntos, este será sin duda un buen fin de semana. 

Me limite a guardar silencio por un momento. Yoongi me lanzo un beso y se acomodo mejor en la cama, dispuesto a dormir de una vez, después de haber dado por finalizada nuestra charla. 

 —Buenas noches solcito. 

—Que descanses cielo..—musite. 

De pronto no podía dejar de pensar en lo que había hecho a escondidas. Mi celular sobre la mesita de noche comenzó a vibrar, notificándome que había llegado un mensaje. No lo vi hasta la mañana siguiente. Solo quería dormir por ahora.