Chapter thirteen
[Holaa <3 ¿Me extrañaron? Jsjs espero que este capítulo les haya gustado, últimamente no he tenido tiempo para actualizar las historias que tengo :( pero ya me iré poniendo al día con todas <3]
Yoongi.
Mi cabeza pesaba considerablemente, hoy había tenido que dar algunos ensayos con calificación acumulativa para ganar puntos extras en las evaluaciones al final del semestre. Solté un suspiro gustoso al momento en que mi espalda tensa tocó el colchón suave y blandito de la cama.
No había llegado hace mucho de mis clases, esperaba ver a Mei con Jimin aquí como es de costumbre, pero ninguno se encontraba dentro del departamento. Y es que a último momento había recordado que Hoseok había salido con ella, por un motivo el cual no quiso decirme por celular y que apenas llegarán me diría sin mayor problema. Por ello de cierta forma me había mantenido inquieto en la tarde.
Justo cuando me disponía a dormir un poco antes que el resto de la familia llegara, el timbre del departamento sonó.
Abrí mis ojos y pase mis manos por mi rostro, quitando todo rastro de sueño. Me puse de pie y camine hacia la puerta del apartamento, me llevé una sorpresa al ver al Omega frente a mí, con semblante muy preocupado, me asuste un poco.
—Jimin..—dije—Son las ocho y media, ¿Qué haces aquí? ¿Buscas a Hoseok?—pregunté al ver que el chico estaba solo.
—A eso es precisamente a lo que he venido, Yoongi—dijo mientras jugaba con sus manos—Pase por Mei a la escuela como es de costumbre, y me dijeron que ya se había ido, supuse que Hoseok la había pasado a buscar, pero es que él no ha respondido a mis llamadas tampoco, esperaba verlo por aquí a estas horas ..
Le miré un poco más calmado.
Le di una sonrisa.
—Seguramente olvidó avisarte, él fue por Mei a la escuela, hubo un problema y la tuvo que retirar antes..—el semblante de Jimin se suavizo—Me dijo que saldría con Jungkook y Dongju, los cuatro, pero al parecer también estaba incluido Taehyung —le dije, viéndome como Jimin ya estaba más calmado—¿Lo recuerdas verdad?.
—Él padre de Mei, por supuesto—sonrió.
—Así que no te preocupes, se que tal vez estuviste preocupado toda la tarde por no haber encontrado a Mei en la escuela—dije tocando su hombro efimeramente—¿Gustas pasar? Puedes tomarte un café si deseas, estas en tu casa, Jimin—sonrió.
Me hice a un lado y deje que el Omega ingresara al departamento.
—Muchas gracias, Yoongi—comentó.
Sonreí a gusto con su presencia.
—No agradezcas, sabes que eres muy bienvenido en esta casa, todos aquí te apreciamos demasiado, Jimin-ah—cerré la puerta del apartamento y le seguí hasta la sala de estar en donde nos detuvimos—Toma asiento, iré a preparar algo para que bebamos en lo que esperamos a Hoseok.
—Te acompaño.
No le discutí.
Sonreí y le hice señal a que me siguiera.
Me acerque a los muebles más altos y de ahí saque dos tazas junto a sus platillos correspondientes y los deje sobre la mesa pequeña que había en medio de la cocina.
—Te sienta el rol de jefe de hogar, Min Yoongi..—sonreí ante tal comentario del Omega—Ustedes sin duda hacen una muy hermosa familia, seguro son la envidia de muchas otras personas, ¿No es así?.
Reí poquito.
—No exageres, somos una familia normal. Aquí el verdadero jefe de hogar es Hoseok —dije con aire divertido—Es el mejor, claro, muy organizado y responsable, es por eso que me gusto la primera vez que lo vi hace tres años. Me enamore de él al poco tiempo después de comenzar nuestra relación..—sonreí enternecido, suspirando—¿Tú te has enamorado alguna vez, Jimin? ¿Has amado inmensamente a una persona con la que hayas coincidido en la vida?—parecería que le tome por sorpresa con esta interrogante—Puedes no decirme nada, si así lo quieres—trate de sonreírle.
—No, descuida, no es un tema del cual me moleste hablar con otra persona..—desvío su mirada, mientras mordía levemente su labio inferior con cierto nerviosismo—Si me he enamorado de alguien, tan profundamente que aveces suele parecer un tanto asfixiante—carcajeo levemente—Y es que es la primera vez que me pasa, así que al principio fue abrumador, no sabía como sentirme al respecto porque eran emociones que desconocía, y lo que lo hacia aún más complicado, era saber que aquella persona le pertenecía a otra..
Miré las tazas con los cafés ya servidos, fueron segundos en los que me quedé viendo como el vapor se elevaba de las tazas calientes, para luego tomar una y ofrecérsela al Omega frente a mí.
—Así que.. ¿Un amor no correspondido?.
—Así parece..—rio—Me resigne a la idea de tan solo poder amarlo libremente en mis sueños, y dedicarme a observarlo en cada oportunidad que tengo, desde hace tres años..—noté como sonreía apenas.
—Así que es un él..—sonreí—Bueno, solo me queda decirte que él se lo pierde, eres un Omega excepcional Park Jimin, y espero de todo corazón que algún día ese hombre al cual amas sepa ver todas esas hermosas virtudes que tienes—noté como sus mejillas se tiñeron de color carmesí.
Jimin le dio un sorbo a su café.
Noté como su rostro decaia poco a poco.
—No creo que suceda, ese hombre vive feliz, no creo que cambie esa maravillosa felicidad que tiene por mi, pero la vida está llena de sucesos inciertos, cualquier cosa podría pasar..—amague acercarme pero me detuve a mitad de poder hacerlo.
El timbre de la casa sonó.
—Seguro debe ser Mei y Hoseok—comentó Jimin felizmente. Ambos nos dirigimos hacia la puerta de entrada, un risilla maravillosa se escuchaba desde acá. Jimin espero metros detrás de mi.
Abrí la puerta.
—¡Yoongi, mira quien esta aquí!—exclamó con efusividad la pequeña cachorrita.
Sonreí poquito.
—Puedo verlo perfectamente, preciosa—el Alfa Kim Taehyung se limitó a sonreír de esa manera tan peculiar que poseía—Buenas noches, Kim Taehyung, es un gusto tenerte aquí, a Mei la hace felíz..
—Lo mismo digo, siempre es un gusto verte, Min Yoongi—dijo, mientras seguía cargando a Mei en sus brazos.
Mi amado se posó frente a mí.
Besando efimeramente mis labios.
—También estoy aquí por si no lo habías notado, Min Yoongi—rio, eventualmente y de la misma manera le regrese el beso.
—Por supuesto que sabía que estabas también aquí, tu aroma es irresistible—susurre en su oído—Y bueno, pasen, que esta medio fresco afuera, dentro estarán más cómodos, Jimin también esta aquí..
—¡Oh, Jimin-ah!—exclamó Hoseok cuando todos estuvimos dentro—Olvidé por completo avisarte que a Mei la iría a buscar yo esta mañana, de seguro que estuviste toda la tarde preocupado ¿No?..
—Es exactamente lo que sucedió..—rio Jimin—Pero descuida, cualquiera puede olvidarse de algo cuando la diversión es mayor ¿No es así?—Hoseok asintió con una sonrisa resplandeciente y hermosa.
—Mei y Dongju se divirtieron demasiado.
—¡Papá Tae obtuvo un peluche muy pero muy grande como premio en un juego de adivinanzas! ¡Y me lo obsequio a mi!—comento con mucho entusiasmo, Mei—¡Y es tan bonito, es blanco, tiene un lazo rojo y, y!—comenzó a mirar a su alrededor, titubeante, su sonrisa se esfumó—¿Y en donde está el peluche, papá Tae?—indagó la pequeña. Kim la dejo sobre el suelo.
El peluche no estaba aquí.
—Quizá lo dejamos en el auto de Jungkook—dijo con duda—Papá Hoseok lo irá a rescatar mañana ¿De acuerdo linda?.
Mei asintió con un casi imperceptible puchero en sus labios delgados.
—¿Irás por el papá?—indagó refiriéndose esta vez a Hoseok, quien se agachó a su altura y le acarició el rostro, suavemente.
—A primera hora, mi vida, ¿Ok?. No estés triste, Dongju lo cuidara muy bien en lo que nosotros vamos por él—le sonrió.
—Bien, es un regalo de papá Tae así que estaría muy triste si ese peluche se pierde—comentó con afecto por la situación.
Todos guardamos silencio ante el comentario tan lindo y adorable de Mei.
—Bueno, creo que es momento de que comience a marchar—habló Taehyung—Ya es tarde, mañana todos debemos salir y enfrentar la realidad, y está nenita bonita ya se debe ir a la cama, ¿No es así hija?.
—Supongo que si..—dijo con una sonrisa pequeña, mientras jugaba con su cabello.
—Creo que yo también me retiraré, tan solo quería verlos a ustedes, y calmar a mi mente paranoica—comentó Jimin—Nos vemos mañana, dulzura—se acercó a Mei y beso la coronilla de su cabeza—Adiós a todos, que pasen linda noche—sonrió.
Pase mis manos por mis pantalones y me acerque al Omega que estaba por irse.
—Iré a dejarte abajo. Claro, si no te molesta, por supuesto—dije rápidamente.
Jimin negó con una sonrisa.
—Vamos.
—Adiós Jimin-ah, nos vemos mañana—se despidió mi Omega. Mei agitaba su mano lentamente, sin emitir palabra alguna.
No reparé más tiempo, y ambos salimos del departamento. Dejando atrás al resto.
Hoseok.
Vi como el Alfa salía detrás del Omega, la puerta cerrándose a sus espaldas. Gire y miré a las dos personas restantes que me acompañaban aún en el departamento, llevándome una sorpresa al notar que el Alfa me veía atentamente con una sonrisa excepcional. Sonreí de vuelta por inercia.
—¿Pasa algo?—indague.
—Aún te sigues sonrojando cuando me la paso mirándote más del tiempo normal..
Aún me seguía sonrojando.
Y él seguía recordando aquellos detalles del pasado. Detalles que perfectamente él podría haber olvidado en estos años.
—Así parece..—dije riendo, mientras posaba mis manos en mis mejillas. Intentando de manera inútil alejar esa absurda sensación de vergüenza ante él.
—Hay cosas que definitivamente no cambian, aún cuando pueden pasar miles de años, siguen intactas—se acercó, con Mei en medio de nosotros, la cachorrita observandonos en silencio a ambos—¿Aún te gusta escuchar música antes de dormir? Recuerdo que te relajaba mucho.
Me alejé considerablemente.
—Aún lo hago, me sigue relajando, y creo que es momento de que esta señorita se vaya a la cama—dije de buen humor—Y tú te ibas hace cinco minutos, Taehyung..
Agachó la cabeza levemente, mientras sonreía de oreja a oreja.
—Quiero creer que no acabas de echarme de tu casa Jung Hoseok..
—No he dicho eso..
—Descuida, solo bromeaba—carcajeo—Me voy, adiós princesa hermosa—se acuclillo a la altura de Mei y beso su frente—Te veo en estos días ¿De acuerdo, hija?.
—Si, si. Yo te esperaré y estaré atenta al celular de mi papá Hoseok—asintió.
—Te dejaré en la puerta—el Alfa asintió y ambos caminamos a la entrada del departamento. Nos detuvimos allí—No te lo dije temprano, pero gracias por haber estado presente en la reunión de la escuela y bueno, gracias también por haberme defendido de las críticas de esa mujer..—pase una de mis manos por detrás de mi nuca—Lograste que Mei se olvidará completamente de aquello.
—Lo logramos, ambos lo hicimos—comentó—La pase muy bien, fue perfecto—me miro a los ojos—Espero que este día no sea el último en el que podamos divertirnos los tres, A Mei le fascina salir..
—Claro, por supuesto no será el último.
—Bien, te veo cualquier día, Hoseok.
—Cuídate Taehyung, nos vemos.
Me despedí, y me quedé de pie mirando la espalda del Alfa, alejarse cada vez más.
Suspire, sintiendo aquella pesadez en el pecho, tan incomoda. Cerré la puerta a mis espaldas y regrese con mi cachorrita.
Jungkook.
Había salido de casa más temprano de lo que hubiera querido. Me había estado paseando por el centro y en los únicos locales que estaban abiertos a estas horas. El movimiento en las calles era ya más concurrido, mire mi reloj por quinta vez, ya eran las ocho con cincuenta, lo que quería decir que faltaban cinco minutos para la reunión que había coordinado con una persona hace unas cuentas horas.
Había sido tan repentino.
Que ni siquiera me había dado tiempo de organizarme completamente bien. Había despertado tarde y con Dongju habíamos llegado un poco atrasados a la escuela. Y sus incesantes preguntas sobre con quien me vería en breve, no hacían más que aumentar la ansiedad en mi interior. Solté un suspiro cuando llegue a la cafetería que habíamos destinado para nuestro encuentro, di una mirada rápida para ver el lugar, ella aún no estaba por aquí.
Ingrese y tome asiento en las primeras mesas que estaban cerca de la entrada.
—Bienvenido señor, ¿Desea que tome su orden?—preguntó amablemente uno de los empleados del lugar. Negué.
—Por el momento no, esperaré a que llegue la persona con la que me veré en unos min-
—Aquí estoy.
Giré mi rostro rápidamente.
—Traiga dos cafés y una tarta de tres leches por favor—habló la Omega frente a mis ojos. El empleado anoto el pedido en su libreta y se retiro con una reverencia—Siento la demora, sabes como es la locomoción a estas horas de la mañana, lentísima como una tortuga—rio poquito, yo aún no decía nada—¿O es que acaso no te hice esperar? Ni siquiera he visto que hora es..—tomo asiento frente a mi—¿Jeon Jungkook estas conmigo?—indagó al notar que no le respondía a nada.
—Sigues tal cual a como te recuerdo hace siete años, Alice—me anime a decir—Y me sorprende enormemente la actitud que has tomado justo ahora..—reí poquito—Teniendo esos aires de confianza cuando no nos hemos visto hace tantos años..
—Se me olvidaba que tienes un carácter algo delicado, lo siento, ¿Esta bien?—dijo con simpleza, dejando su cartera sobre la mesa—Bien, a lo que hemos venido, ya te adelante algo por teléfono la vez pasada, ¿Lo recuerdas, verdad? Quería saber de Dongju, como a estado, como a crecido.
—Dongju afortunadamente a crecido perfectamente, en todos estos años, ha sido completamente felíz, es un buen niño—dije con mucho orgullo—Lo he criado tan bien solo, que en todos estos años logre que tu ausencia no fuera un dolor para él..
Vaya, había tocado un punto delicado.
—Sabes que quiero enmendar eso..
—¿Haciendo que, precisamente? Dongju apenas y puede recordarte, apenas tenía tres años cuando corriste detrás de otro Alfa y nos abandonaste a nosotros en ese departamento, ¿Eso se te olvidó, Alice?. Él no correrá a tus brazos así como así, y si es que algún día llega a hacerlo, yo no pienso incentivarlo a que te acepte y quiera pasar tiempo contigo, ¿Esta claro?.
—Tú debes, soy su madre y también tengo derecho a que Dongju este conmigo..
—Déjame decirte una cosa, Alice. Los derechos se ganan, no se otorgan porque sí—ella guardo silencio—Tú no has estado a su lado siete años de su vida, yo he sido el único que calmaba sus llantos por las noches, yo fui el único que lo recibió con los brazos abiertos después de la escuela, yo fui el único que estuvo en cada uno de sus logros, y he sido el único al que ve como un padre, tú no existes en su vida. ¿Cómo pretendes enmendar todo eso? ¿Qué le vas a decir cuando pregunte quien eres o a donde te fuiste? ¿Pensaste ya?.
—Yo pensare en ello, sabré que hacer y entonces podré tener a mi hijo otra vez, Jungkook—parecía decidida, y aquello no hacía más que aumentar mi ansiedad—No me rendiré, esta vez no me iré Jungkook, lograré que Dongju me acepte y se quede conmigo, es solo cosa de tiempo.. yo he cambiado, quiero hacer las cosas bien..
—Quizá te acepte, pero nunca se irá contigo, Alice—dije a la defensiva—Él permanecerá a mi lado, tal y como ha sido siempre, tú no vas a quitármelo, no tienes ese derecho por más argumentos que tengas y digas que no es así ¿De acuerdo?—una sonrisa casi diminuta apareció en los labios delgados de la Omega.
—Veamos que dice un juez, Jungkook. Ya te lo había dicho, quiero la custodia de mi hijo—dijo seriamente—Y no me rendiré hasta conseguirlo, quiero recuperar a Dongju, cueste lo que cueste, y tú no vas a ser un obstáculo para conseguirlo ¿Ok?.
Me puse de pie, abrumado y enfadado.
—No permitiré que lo alejes de mi lado, y puedes hacer lo quieras, contratar un abogado, llevar este problema a un juez, y aún así no dejaré que Dongju este cerca de tí—tragué saliva, mis manos temblaban—No te mereces su cariño, Alice, ni menos que él te diga madre, simplemente no..
Ella solo guardo silencio.
Baje la vista sin saber con que me encontraría en el camino, sus manos descansaban sobre su vientre abultado, y juzgar por el tamaño, parecía de cinco meses. Pareció notar que la observaba.
¿Cómo no lo note cuando llegó?.
—Dongju podrá crecer en un ambiente grato y familiar, Jungkook. Será tan feliz como lo es contigo, seguramente..
—No me vas a convencer, mi respuesta siempre será la misma, Alice, Dongju se mantendrá a mi lado el resto de su vida, tú puedes ser feliz con la familia que tienes ahora, tendrás un cachorro que podrá decirte madre, y espero que este no corra con la misma suerte que el cachorro que dejaste en el pasado..—saque mi billetera y deje algunos billetes sobre la mesa.
—No hagas esto más complicado, Jungkook..—pidió la Omega.
—Disfruta tu café, Alice. Tengo que irme.
—Pero Jungkook..-
—Eso fue lo último que diré, espero no volver a verte Alice, y por favor abstente de esto, lo único que vas a lograr es hacerle daño a Dongju, y si tus palabras son sinceras y de verdad has cambiado, sabrás que lo mejor es que él se quede a mi lado, piensa un poco en eso, Alice.
Le di una última mirada y salí de allí antes de demostrarle cuán afectado estaba por esa conversación que habíamos tenido.
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