~Midorikawa~

- ¿Cómo has estado tú? - trataba de abrir la puerta de la oficina pero la traidora de la secretaria la cerro con llave desde el otro lado - No se va abrir hasta que yo lo diga así que basta - estaba irritado

- Abre...

- No. - Fue al su sillón atrás de su escritorio

- Abre - Empujaba la puerta

- No - miraba interesado unos papeles

- Por favor, Abre - me queje de una forma infantil

- Nooo... - contestó de igual manera

- ¡Me quiero ir!

- Entonces para que viniste - me miró y le hice una mueca de disgusto

- ¿Ves estas marcas de aquí? - señale en su cara un pequeño rasguño - Te la acabó de hacer cuando me arrastraste aquí adentro

- No te hagas ibas a entrar si yo no fuera salido primero - dijo molesto

- En ese momento lo estaba pensando así que no vale - estaba siendo un poco inmaduro en ese momento

- Ya dejate de esto y dime ¿qué haces aquí? - se para y se acercó a mi

- Esta bien, esta bien... Yo viene a devolverte tu carta, yo viene a decirte lo siento...

- Yo creó que este asunto ya estaba resuelto, tú ya tomaste tu decisión y ¿cómo están tú y Haruya? - Sonaba molesto y apretaba su puño

- Él y yo no tenemos nada, y ¿Por qué te enojas por eso? ¿acaso tienes celos? - y tenía el desacato de enojarse.

- No me enojo, no te creas tanto yo no tengo celos - puso los Ojos en blanco

- Bueno lo que te iba a decir, es que yo no había leído esa carta si no hasta ayer. Me quería disculpar por eso y quería responderte - no dude y le di una cachetada que le voltie la cara - Si llorar por varios días es estar bien, bueno digamos que si lo estaba.

- ¿Estas loco? - se sobaba la mejilla

- Tú eres el loco, vas a terminar con Suzuno que él te ama y sólo por mi... Arhhg - yo también estaba enojado- Ni siquiera me quieres ni nada, eres un maldito pervertido y puto.

- Claro que te quiero, eres mi amigo. Que esta muy bueno y quiero tener sexo con él, pero mi amigo - le di esta vez un golpe a puño cerrado pero en el brazo

- Si me fueras querido la mitad de lo que dices o me consideras tu amigo no me hubieras seducido sabiendo que yo estaba enamorado de ti - me estaba descargando y diciendo todo lo que sentía

- ¿Y por qué no te negaste? Pudiste haberte resistido - discutíamos casi gritando nos frente a frente

- Porque soy un estúpido y débil, tenía la esperanza inútil de que un día te enamoraras de mi. Que me mirarás, que pensarás en mi como yo pienso en ti, que hagas cosas estúpidas por amor que no seas tan frío, que un día me abrazaras y que no me quisieras soltar, que un día me dijeras: "solo quiero estar junto a ti". Yo sólo quería eso y lo peor del caso es que yo creí que tu no sabias nada pero tu sólo jugabas con mis sentimientos hacia ti- golpeé suave su pecho y pero no lloraba sólo nos mirábamos y el me abrazo, era más obvio que yo estaba con un nudo en la garganta de la tristeza de pensar en todo eso

- Lo siento, Lo siento, Lo siento - trato de consolarme y me alejé de sus brazos

- Eso ya no me sirve de nada ahorita, sólo abre la maldita puerta ahora y bien ya dañamos nuestra amistad es obvio que no va hacer la misma que antes. Yo desapareceré de tú vida y yo de la tuya si prometes hacer feliz a Suzuno, a enamorarte de él y tratar de ser feliz con su matrimonio o lo cancelas y buscas al amor de tú vida y ya - la frustración corría por mis venas y el se quedó en silencio unos segundos

- Cancelaré mi matrimonio, sería inutil lograr enamorarme de él - cuando dijo eso fue a su sillon y suspiro - Sólo por algo a cambio...

- No

- Ni siquiera te he dicho que es - me miró amargado

- Yo ya no hago pactos con el diablo, así que abreme la puerta inmediatamente - pateé la puerta suave

- Sólo quiero una noche y se acabará todo - sacudió sus cabello con las manos

- Ni que fuera como tu - lo mire con desprecio

- Sólo una noche y ya - no dejaba de verme

Sabía que no debía hacerlo pero... La tentación es grande y la car es débil

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~Suzuno~

A quién engañábamos Hiroto y yo, por Dios se notaba a lenguas que sólo eramos amigos. Pero casarnos, sabía que él no estaba enamorado de nadie y sólo quería un casamiento para mejorar su imagen; y yo bueno tratar de escapar de Haruya que me era imposible.

Deja la carta en el escritorio de la habitación de Hiroto y con mis maletas me dispuse a irme de su casa, este no era lugar para mi y menos ser su esposo. Tal vez debería adoptar un gato y irme a un lugar frío.

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Adivinen quién lo continuó y lo va a terminar. Si este es el penúltimo capítulo y se preguntaran ¿por qué? Pues por que veo que no tiene nada más para dar y si no lo término ahora no lo hare nunca, creó que mi problema con este Fic es que nunca Pensé en el final, sólo se me ocurrió el principio