Two
Jongho miraba a su alrededor, los hospitales no le gustaban siempre que iba lo miraban con lástima, justo como en ese preciso instante que no dejaban de ver el hematoma en su pómulo, él no debería estar ahí pero había culpa en su ser, culpa que no debería sentir luego de tantos años que soportó.
—Honnie, te traje un café— Jongho miró a su hermano.
—Gracias.
Llamar a su hermano fue lo único que se le ocurrió luego de ver el cuerpo de Yunho. En cuanto llegó no necesito que el menor le dijera que había pasado y porque le había pedido desesperado que fuera a la casa, Jongho estaba asustado porque su intención no había sido esa, solo quería que se alejará y no le hiciera daño, luego de eso habían llamado a emergencias y mientras llegaba una ambulancia, Jongho le contó que había pasado y como es que terminó en esa situación.
—Honnie, si quieres puedes irte, yo me encargo de todo— Jongho lo miró — Esta es la oportunidad que tanto necesitabas, puedes irte lejos de aquí.
—Bomin...
—Puedes tener la vida que realmente quieres— Acarició su rostro— Jongho solo vete y se feliz.
—N-no puedo— Murmuró— No podré vivir en paz, yo no quería nada de esto, no era mi intención que cayera.
—Lo sé, pero no es tu culpa, eras tú o él y me alegra tanto que fuera él— Jongho bajo la cabeza— Si hubieras sido tú ¿Crees que él hubiera llamado a alguien? Claro no que, ya hiciste lo que tenias que hacer, ahora huye...
—¿Y si muere? Los Jeong van a querer saber quien fue el culpable de la muerte de su hijo, aun si me voy ellos me encontrarían y seguiría en el mismo infierno— Bomin suspiró y lo abrazó para protegerlo— No era mi intención— Balbuceó.
A petición de Jongho se tuvieron que quedar a esperar noticias del alfa, pero en dos horas no recibieron nada y eso estaba preocupando a Jongho temía que en cualquier momento le dijeran que Yunho había muerto y después llegarán los Jeong a hacer su vida de un infierno peor del que ya tenía.
En algún punto se quedó dormido y Bomin solo lo dejó descansar su hermano se lo merecía, podía sentir algo de tranquilidad en él, hace tiempo no sentía eso. Para ser sincero jamás le agrado que su hermano se casará tan joven, muchas veces demostró que odiaba a ese alfa, más de una vez se enfrentó a él por hacerle daño a su hermano y siempre estuvo dispuesto a ayudar a su hermano para que se escapará, hizo todo solo para dejar en claro que siempre estaría para Jongho, tanto así que no le importó cuantas veces Jongho le pidió que dejará de enfrentar a Yunho, lo haría las veces que fuera necesario sin importar cuantas veces visitará el hospital.
—Honnie— Lo llamó con suavidad— Honnie, despierta— Jongho frunció su ceño.
—¿Qué?— Balbuceó— Tengo sueño.
—Lo sé, Honnie pero ya debes despertar— El menor negó y giro su cuerpo, Bomin sujeto bien el cuerpo de su hermano cuanto estuvo por caer, solo en ese momento Jongho lo recordó todo, se levantó para quedar sentado y miró a Bomin.
—¿Que hora es?— El mayor reviso la hora en su reloj.
—Las nueve— Respondió, Jongho lo miró atentamente— No, no han dicho nada, en realidad no entiendo por que te preocupa, luego de todos estos años.
—Porque no soy una mala persona— Respondió.
—Aún así, pero bueno vamos a comer— Se levantó y le extendió su mano al menor— Tienes que comer.
Jongho terminó por aceptar, su estómago le estaba exigiendo algo de comer.
[...]
Luego de un largo tiempo finalmente llegó un doctor a dar noticias sobre Yunho. Aún cuando sólo llamaron a Jongho por ser su esposo, Bomin también se acercó tan solo por su hermano, el doctor les explicó que su cabeza había sido golpeada con fuerza durante la caída lo que había causado una contusión cerebral, les dijo que eso podría dejar secuelas y que era probable que al despertar pudiera no recordar nada, después de eso se retiro dejando al par de hermanos.
—Bueno no murió— Jongho miró a su hermano— Era lo que te preocupaba.
—¿Y si recuerda todo?— Soltó con preocupación— Entonces esta vez si hará lo que le pedí, y-yo le dije que terminará con mi vida...
—Hey, no— Bomin tomo su rostro con delicadeza— Eso no pasará, Honnie ya que sabes que no murió, vete lejos de aquí.
Eso es lo que debería hacer, irse lejos cuanto antes, sin embargo sus valores y la culpa no se lo permitían, se odiaba por ello, por tantos años deseo estar lejos de ese alfa, incluso hace un par de horas todavía deseaba estar lejos y vivir plenamente.
—Honnie— Jongho negó y rehusó a verlo— ¿Sientes algo por él?
—Claro que no, ¿Cómo podría sentir algo por el alfa que me ha lastimado de todas las formas existentes? Es sólo qué... siento culpa y tengo miedo.
—No lo comprendo, deberías odiarlo.
—Lo odio, pero entiende que tengo mis valoro, porque sin importar cuanto lo odiaba yo no quería que cayera, no quería terminar en esta situación, y ya se que si me hubiera pasado a mi él habría huido, pero yo no soy como él, y aunque te desagrade me quedaré aquí— Bomin gruñó molesto— Lo siento.
—¿Que pasará si lo recuerda todo? ¿Aún así te quedarás a su lado por la culpa?— El menor suspiró.
—Min, ya me odio lo suficiente como para que me hagas esto, si lo recuerda me voy a arrepentir de por vida, pero sinceramente lo único que él puede quitarme es la vida— Bomin frunció el ceño— Ya no me queda nada, mi felicidad se acabó hace bastante al igual que mis sueños e ilusiones, mi autoestima esta por los suelos, si recuerda la poca esperanza que me queda se acabará, tan solo tendré vida si así se le puede llamar... Honestamente ¿Que más da? Quitármelo de encima solo fue un estúpido impulso de supervivencia, debí dejar-...
—Basta, solo basta Jongho, eres mi hermanito y que digas todo esto duele, me hace sentirme horrible porque a pesar de todo lo que hice nada te ayudo— Jongho lo abrazó.
Por un pequeño momento ambos disfrutaron del abrazo hace años no habían podido estar tan cerca, no habían hablado de esa forma, tan solo fueron ellos dos.
—Señor Jeong— El mismo doctor de hace un rato lo llamo— Su esposo despertó— Jongho miró a su hermano y luego al doctor.
—É-él...
—No recuerda nada, es posible que a usted tampoco— El omega sintió la tranquilidad en su hermano— Esta bastante confundido.
—¿Cree que llegue a recordar pronto?
—Quizás no pronto, podría tomar incluso meses por la fuerza del golpe, es una suerte que este vivo— Jongho jadeo por lo último— Lo mejor será no agobiarlo con nada sobre lo que paso.
—Bien— Asintió— No es necesario que me presente ¿Verdad?
—Bueno creo que seria bueno que lo conozca dado que es su esposo y vivirá con usted ¿No? Aunque sus padres ya fueron avisados— El terror inundó su cuerpo— ¿Tiene un problema con presentarse ante su esposo?— Jongho miró a su hermano quien le asintió para que respondiera.
—Supongo— Murmuró.
—Doctor, el señor Jeong quiere conocer a su esposo— El terror no dejo el cuerpo de Jongho ¿Lo habría recordado?
—¿Me acompaña?— Las ganas de decir que no quedaron atoradas en su garganta, volteó a su hermano que se mostraba ciertamente preocupado, y avanzó junto al doctor.
Sus pasos eran lentos e inseguros, no quería ver aquella cruel mirada llena de despreció y odio, empezaba a arrepentirse de todo, Bomin tenía razón, debió irse lejos de ese infierno, quería llorar porque tuvo la oportunidad que tanto había pedido en su día a día y la dejo ir por sus malditos valores, le sorprendía cuanto se podía odiar.
Al llegar a la habitación ya se había resignado a volver a su infierno, ya veía sus días contados, el doctor abrió la puerta y lo dejó pasar primero, escuchó una voz suave, que no reconoció, aquella voz preguntaba cuando conocería a su esposo. Cuando quedó frente a la camilla sus ojos encontraron otros ojos llenos de brillo, relajados, era una mirada agradable, no estaba esa mirada intimidante, oscura y llena de despreció, tuvo que asegurarse que si fuera Yunho quién estaba ahí porque le pareció irreal, incluso la sonrisa en sus labios.
—¿Tú eres mi esposo?— Le preguntó en un tono suave.
Entonces recordó cuando conocieron.
—¿Tú serás mi esposo?— Soltó con burla, y buscando algo bueno en él pero solo decepcionandose del mal gusto de sus padre— Esperaba algo mucho mejor.
Yunho lo miraba tan solo con una pequeña sonrisa tímida, esperaba una respuesta que no llegó, porque Jongho estaba perdido en su desconfianza, sentía que en cualquier momento empezarían las burlas.
—Bueno les daremos un momento— Jongho entró en pánico demasiado tarde.
—¿Entonces si eres mi esposo?— Jongho asintió lentamente— Vaya— Soltó— Lo lamento pero ¿Como te llamas?
—Jongho— Respondió bajo pero aun así el alfa lo escucho.
—Lindo nombre— Jongho lo miró incrédulo.
No podía confiar en él, sentía que solo jugaba con él y en cualquier momento terminaría lo que estaba haciendo antes de caer, además una pérdida de memoria no haría tal cosa, el alfa era como era así que si debía estar jugando.
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