Hyemin entro a la habitación donde yacía Jongho envuelto entre sus sábanas, probablemente estaba dormido o llorando pues era lo que llevaba haciendo los últimos cuatro días desde la visita de su madre. Dejó la comida que le trajo para tratar que comiera un poco, no encendió la luz y tampoco abrió las cortinas para que la luz del sol iluminará el lugar, tenia la sensación que eso lo iba a molestar demasiado.

Se sentó en un espacio donde no molestará al omega y espero algo, aunque Jongho no había hablado y lo último que dijo era que quería estar solo y que no tenía hambre, a penas y aceptó que ella estuviera ahí.

—Se que lo último que quieres es que te moleste o te siga insistiendo que comas un poco— La voz de Hyemin salio baja y con suavidad, se podía sentir un aura maternal, pero Jongho ni lo distinguió muy bien— Pero me preocupó por ti, todos están preocupados.

Hyemin no esperaba respuestas y no iba a presionar para que lo hiciera, solo quería hacerle saber al omega lo que pensaba de toda la situación, en cierta forma lo entendía y quería ayudarlo a sobrellevarlo.

—Escuche lo que tu madre dijo, es una pena que una mujer como ella te haya tenido, eres mucho que ella, tenlo por seguro— Pudo escucharlo sollozar y eso le rompió corazón— Estas aprendiendo a ser padre y créeme lo haces bien, Jungwon piensa lo mismo.

Jongho negó aún bajo la sabana sin poder creerlo en realidad. De verdad quería creer lo que Hyemin decía, pero las voces de su madre y de Yoomin eran más altas, no paraban de torturarlo y hacerle saber que nunca sería un buen padre, perdió a sus cachorros y Jungwon ni siquiera era suyo.

Por un breve instante se sobresalto al sentir una calidez por encima de la manta comenzaba a dar suaves palmaditas y caricias, Hyemin ya no mencionó nada, pero le hizo saber que ahí estaba si necesitaba decir algo, ella lo escucharía como una madre si fuera necesario.

Paso un largo tiempo para que Jongho se calmará y su cuerpo se relajará lo suficiente como para dejar de cubrir su cabeza, acepto el tacto y el aura maternal de Hyemin, se permitió no ser el miserable que era, quería ser él mismo o el que era antes de conocer a los Jeong. La omega no lo forzó a hablar, simplemente lo cuido como si fuera un hijo, uno que la necesita más que nada en el mundo.

—Odio sentirme asi— Hyemin lo observó al escucharlo murmurar— El sentimiento siempre vuelve, pero todos tienen razón.

—Nadie tiene razón al hacerte sentir de esa forma— El menor negó mientras sus ojos se volvían a llenar de lágrimas.

—Eran mis cachorros y no los cuide, quería usarlos para asegurar un poco de tranquilidad, iba a traerlos a este infierno con tal de que me dejaran en paz un tiempo— Hyemin paso su pulgar con delicadeza por su mejilla limpiando una lágrima que se escapó— Yo no quería cachorros de él, nunca los habría querido.

—Eso no te vuelve una mala persona y tampoco un mal padre— Jongho sollozo negando repetidas veces— Ya te darás cuenta de eso, sabrás que eres una persona maravillosa y brillaras tanto, y ni hablar del maravilloso padre que eres para Jungwon.

—Yo...

—Tú te darás cuenta de todo eso cuando finalmente sanes, pero para eso necesitas ayuda— El menor la miró— Es momento de ir a terapia ¿no crees? Es hora de que pienses y te preocupes por ti, ya no estas solo, cariño.

Más lágrimas recorrieron las mejillas de Jongho, no por tristeza o culpa, sino que finalmente pudo sentir la presencia maternal de Hyemin hacia él, por primera vez alguien estaba para él y lo sostenía al ya no poder más.

Se había terminado la soledad que lo acompañaba desde que tenía memoria.

Hyemin lo acompaño y le permitió llorar tanto como quisiera para dejar salir ese dolor que se acumuló por tantos años, fue desgarrador verlo de tal forma, pero tenía que llorar una última vez por todo, incluso por aquellos cachorros que perdió, lo consoló y lo cuido cuando se quedó dormido.

[...]

La vista de Mingi estaba perdida en algún punto de su oficina mientras golpeteaba las puntas de sus dedos, de vez en cuando bufaba sabiendo que su madre llegaría en cualquier momento y sinceramente no quería verla sabiendo que es por su culpa que Jongho estaba mal de nuevo, y peor aún es que sabía que ella estaría ahí solamente por una cosa que claramente no era saber como estaba alguno de sus hijos.

Escuchó como la puerta de su oficina fue abierta y no le sorprendió ver la presencia de su madre, no necesito decirle que pasara y se sentará pues fue justo lo que hizo juntó a una sonrisa falsa.

—Me sorprendió que me citaras— Murmuró la omega observando algunas cosas en la oficina, haciendo gestos al ver fotos de su ex pareja.

—No fue porque tuviera ganas de convivir con la mujer que me dio la vida— La omega frunció ligeramente su ceño.

—Soy tu madre, Mingi— El alfa asintió dudosamente.

—No vamos a discutir si eres mi madre o la mujer que me abandonó— Murmuró— Hay cosas más importantes.

—¿Por ejemplo?— Se acomodó sobre la silla y se cruzo de brazos, estaba disgustada por el despreció de su hijo, Mingi lo sabía pero igual no iba a cambiar su actitud.

—¿Que le hiciste a Jongho?— La mujer alzó las cejas.

—Nada en particular, solo tuvimos una pequeña conversación— Respondió despreocupada— Alguien tiene que hacerlo entrar en razón.

—Tú no cambias, Soonyoung— La omega gruñó cuando fue llamada por su nombre, lo consideraba una total falta de respeto— ¿Hace cuanto no te dan dinero?

—¿Por qué crees que es por dinero?— Mingi rodó los ojos.

—Dudo mucho que tú y Jongho tengan algún tipo de conversación, es sabido que solo te importa el dinero que los Jeong te dan— La mandíbula de la omega se tenso con evidente molestia— La vida de Jongho esta arruinada, pero solo así consigues dinero ¿no?

—Escucha muy bien, Song— El alfa observó como su madre se levantaba dispuesta a mostrar que ella tendría la última palabra— Yo soy su madre, yo elijo que es lo mejor para él, le di la oportunidad de tener un buen estatus y estar dentro de una de las mejores familias de Corea, es su maldita culpa que las cosas pasarán de esa forma y a nosotros no nos daña de ninguna forma...

Mingi juro que su mirada se oscureció tan pronto como escuchó a esa mujer, gruñó con ira y se levantó imponiendo su presencia, jamás le tuvo un respeto a Soonyoung como madre por lo que no la veía así, y no era delicado al tratarla.

—¿A costa de qué? Tiene todo eso, pero ha sufrido de mil maneras, ha sido tratado de formas inhumanas por esa maldita familia ¡Intento quitarse la vida por su culpa!— La omega gruñó— No te importan tus hijos, eso lo sé muy bien, y cuando si te importan es porque te pueden dar algo.

—Tú eres diferente a Jongho y Bomin— Mingi asintió, siempre lo supo— Ellos son mis hijos.

—Y vendiste a Jongho cuando las cosas se volvieron difíciles, al igual que me abandonaste cuando mi padre se quedó en la ruina— De nuevo la escuchó gruñir, jamás le gustó que le dijeran la verda— Haces que Bomin viaje todo el tiempo para que se alejé de Jongho y no te dejen sin dinero.

La omega se levantó dispuesta a irse, Mingi la siguió y antes de que saliera la detuvo de la forma menos convencional, pero de la única forma con la que aseguraba tener toda la atención de Soonyoung.

—¿Cuanto dinero quieres?— La omega frunció el ceño, cualquiera creería que estaba desconcertada, pero por desgracia Mingi sabía que era porque no se imaginaba que él le propusiera tal cosa— Sólo dilo realmente no importa, si con eso dejas de arruinar la vida de mi hermano.

—Song...

—No te hagas la digna ahora, solo dilo— Soonyoung sonrió y Mingi solo pudo despreciarla más de lo que ya lo hacía.

Tenía parte de la culpa en todo lo que paso Jongho, y aunque no le enorgullece la forma en que pensaba deshacerse de su madre, sabía que Jongho tendría una preocupación menos en su vida.

Hace unos días tuve una pequeña crisis por inseguridades que me dejaron mis relaciones pasadas, y me inspiré, (aunque me ayudo mucho hablar con mi novio)

Gracias por la espera 🥺💕