Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

I Don't Live In A Dream

Cuando despierto Matt no está. Salgo rápido y sin hacer ruido hacia la ducha. Me cambio en el baño y regreso a mi habitación por mis tenis.

— Buenos días — dice Matt desde la cocina.

— Buenos días — meto mi teléfono a mi bolso y camino hacia la puerta.

— ¿A dónde vas? — pregunta serio.

— Tengo que ir a comprar algo a la farmacia — abro la puerta.

— ¿Quieres que te acompañe?

— No, voy a comprar cosas de chicas — ya no dice más.

Salgo corriendo del departamento. Camino ocho cuadras hasta un gran almacén de muebles y cosas para el hogar. Me dirijo al primer vendedor que encuentro y le pido un sofá/cama. Pago con la tarjeta de crédito que utilizo para emergencias y pago la comisión extra para que sea entregado esta misma tarde.

¿La emergencia? Sacar a Matt de mi departamento hoy mismo, no quiero que se encariñe conmigo o que piense que algo puede pasar. Disfruto mi soledad y mi tranquilidad.

Hoy ponemos en práctica las ideas locas de Matt. Esta noche hay juego de béisbol y voy a abrir el bar un rato. Solo se venderá cerveza, por lo que no requiero a Sean, Phoebe o Beth para que me ayuden.

Después de comer con mi pronto ex roomate, voy al bar a preparar todo. El juego comienza cerca de las 6, pero quiero limpiar un poco y tener todo en orden.

Las pantallas instaladas y que hace mucho no se usan, sintonizan el juego de los Cubs. El béisbol no me gusta, prefiero el fútbol americano y ni siquiera le voy a los Bears.

Los chicos empiezan a llegar al bar poco a poco. La mayoría se acomoda en las mesas frente a las pantallas y desde la barra despacho sus cervezas.

— ¿Qué haces aquí?— le grito cuando se sienta en un banco de la barra.

— Vine a ver el juego — se encoge de hombros.

— Pudiste verlo en el departamento, ¿sabes? — arqueo una ceja.

— ¿Y dejarte sola con todos estos chicos? — Mira hacia las mesas — es peligroso Sam.

— No lo es, conozco a la mayoría, vienen seguido al bar... Cuando tocas de hecho.

— ¡Hey amigo! — Sean se sienta a su lado — Fiera...

— Idiota — le gruño.

— ¡Vaya! No pensé que de verdad vendrían — se sienta al otro lado de Matt.

— ¿Phoebe? ¿Qué haces aquí? Es su día libre, deberían estar en otro lado.

— Es bueno tomar algo sin tener que trabajar — se ríe.

Niego con la cabeza y les paso unas cervezas. Platican sobre el juego y otras cosas mientras los escucho, son los únicos sentados en la barra.

— Hey, ¡por fin llegan! — saluda Matt a sus amigos.

— ¿Ustedes también? — Frunzo el ceño — ¿cuál de estos tres idiotas les llamó?

— Los tres — sonríe Erik.

Traigo tres cervezas más para Erik, Mark y Willis, quien se sentó junto a Phoebe y se dan sonrisas bobas. Un chico se acerca por el otro extremo del mostrador y me hace una seña.

— ¿Si?

— Somos del almacén, traemos su sofá — dice serio.

— ¡Excelente! Por detrás hay una puerta, les abro — le hago una seña.

El chico asiente y sale del bar. Voy a mi oficina por las llaves de la puerta trasera y abro. Dos chicos grandes entran cargando el sofá y les indico el lugar dentro de mi oficina.

— ¿Qué es eso? — dice Matt detrás de mí.

— Tu nueva cama — le sonrío. Los chicos del almacén se van.

— ¿Me estás echando de tu departamento? — arquea una ceja.

— No, pero este era el trato. Te quedabas en mi casa unos días hasta que te conseguía algo aquí — señalo mi oficina.

— No quiero — dice serio.

— Es lo mismo, se hace cama, allá está el baño y puedes usar el refrigerador del bar.

— No gracias, prefiero dormir en tu cama — se gira y sale de la oficina.

— Esa no es una opción — lo sigo — ¡es esto o nada! Además te ibas a quedar en el sillón, ¡no en mi cama!

Le grité. ¡Mierda! Estoy parada en un extremo de la barra y todos me miran con los ojos muy abiertos. Sean se ríe y los amigos de Matt contienen su risa.

Me tapo la cara con las manos pero siento que irradia calor. Mierda, estoy sonrojada. Matt idiota, me hace decir cosas que suenan mal.

Me quedo junto al fregadero para lavar unos tarros que ya estaban limpios y me distraigo limpiando el mostrador.

De reojo veo a Matt sentarse de nuevo con sus amigos, luego Sean palmea su hombro y le dice algo que lo hace reír. Phoebe se levanta y se para junto a mí.

— ¿Qué Phoebe? — le digo molesta.

— Ya basta con tu actitud hermana, solo quiero saber si estás bien — me dice bajito.

— Estoy bien — la miro a los ojos.

— Yo sé que no lo estás, pero bueno, mejor dime ¿qué hay entre tú y Matt? — arquea ambas cejas.

— ¡Nada! — le digo bajito — apenas y somos amigos, es todo.

— Si claro — pone los ojos en blanco — los amigos no duermen juntos Sam.

— Es una larga historia, ¿si? Ya sabes que me dan ataques de pánico y él se queda conmigo hasta que se me pasa, eso es todo.

— Pues qué buen amigo tienes — suspira — yo soy amiga de Willis — me guiña un ojo.

— ¡Phoebe! No necesito saber eso — me burlo.

Una hora después de que el juego acaba, estoy cerrando el bar con Matt siguiéndome como sombra. El terco se negó a quedarse y me sigue hasta mi departamento.

Necesito una nueva estrategia para sacarlo de mi casa. Afortunadamente estoy tan distraída en este asunto que no he tenido momentos de tristeza o llanto. Después de cenar cereal, me voy a dormir a mi habitación.

(...) I live right here with you,
Walk the same earth you do,
I don't believe that we're so different,
I live right here with you.

Your twisted heart
is a cruel and wonderful thing,
It tears me apart,
hanging from every string,
I don't live in a dream... (...)

Desde mi cama lo escucho: ¡Matt y su jodida guitarra!

Canción en Multimedia:

Jackie Greene - I Don't Live In A Dream

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro