Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

♦ Capítulo 28 ♦

Remordimiento

Robert

Al salir de la casa, veo a un hombre hermoso, parecía distraído ya que miraba fijamente unas flores en el jardín vecino, se veía inocente, atractivo, como si a su alrededor brillará una luz que te invitaba a mirarlo sin apartar la vista de él. Pero, entonces volteo en mi dirección. Sonrió, era una sonrisa de esas sinceras, genuinas, de esas que permiten conocer y creer en una persona.

Siempre he pensado que las sonrisas hablan mucho de una persona, solo hay que saberlas descifrar.

—¡Hola, Robert! ¿Cómo estás?

—¡Hola, muy bien gracias! ¿Y tú?

—Muy bien. Bueno, vámonos que se nos hace tarde y hay trabajo que realizar el día de hoy.

—Claro, vamos. Oye pero no tenías que pasar por mí, ¿llevabas mucho tiempo afuera?

—Tienes razón, no tenía, pero quise. Y tranquilo, solo esperé un par de minutos.

—Bueno, gracias. Te veo de muy buen ánimo, ¿puedo saber por qué? No tienes que contarme, no quiero meterme en tus cosas, solo que tienes una sonrisa que no puedes borrar de tu rostro.

—Tienes razón, estoy muy feliz. Solo podría decirte que es porque me están pasando cosas muy buenas después de mucho tiempo, siento que la oscuridad por fin se está alejando de mí y hay una nueva luz que me acompaña, es como si toda la vida hubiese estado esperando por esto y eso me pone contento.

—Me alegro mucho, de verdad que por lo poco que te conozco se ve la calidad de personas que eres, así que mereces que te pasen cosas buenas. Me alegro por tu felicidad.

—Gracias, yo sé que sí. Eres muy transparente, eso me gusta.

El trayecto al trabajo la pasamos hablando sobre nuestros estudios, algunas anécdotas universitarias y de la vida en general. Sin embargo, no podía sacarme las palabras de Alex de la cabeza, « tienes razón, estoy muy feliz. Solo podría decirte que es porque me están pasando cosas muy buenas después de mucho tiempo, siento que la oscuridad por fin se está alejando de mí y hay una nueva luz que me acompaña, es como si toda la vida hubiese estado esperando por esto y eso me pone contento», me dijo esto mirándome fijamente, como si estuviese hablando de mí, sus ojos tenían un brillo especial, hace mucho tiempo no veo a alguien con una mirada así.

Llegamos a la empresa, Katherine y nuestros asistentes ya se encontraban trabajando. Sara mi asistente me da unas anotaciones sobre el proyecto en el que ando trabajando y un itinerario de reuniones que debía cumplir el día de hoy, por lo que estaría por fuera de la empresa todo el día, cosa que me favorecía ya que podía salir más temprano e ir a hablar con Eric y fue exactamente lo que hice.

Al salir de la última reunión del día, llamé a Eric para citarlo, quería que nos viéramos en una cafetería pero él insistió tanto para que fuera al lugar donde se está quedando. Al llegar, no pude evitar recordar el último beso con mi ex, pero en definitiva no me provocaba nada, no al menos la sensación de querer repetirlo. Llamé a su puerta y me hizo pasar.

—¡Hola, Ro! ¿Cómo te encuentras?

—¡Hola! Te agradecería que no me llames así, estoy muy bien. Vengo a hablar contigo y espero me escuches.

—Lo siento, no quise molestarte. Claro, vamos a sentarnos y hablamos, ¿quieres algo para tomar o comer?

—No, gracias. La verdad quiero decirte esto lo más rápido posible, siéntate por favor.

—Claro, me estás preocupando.

—Tampoco es para preocuparse, quiero que me escuches atentamente y no me interrumpas, luego si quieres al terminar puedes hablar todo lo que quieras.

»Eric, los dos sabemos todo el daño que me has causado y quizá yo también a ti a juzgar por tus cartas. Hoy quiero pedirte disculpas, por haber llegado a tu vida en el momento equivocado, por los malos momentos que te hice pasar, por todo eso que tuviste que fingir para estar a mi lado en el pasado, por hacerte sufrir (si lo que dicen tus cartas es cierto); también, quiero decirte que te perdono, si, hoy te perdono de corazón, durante mucho tiempo creí que te había olvidado y fingía que ya no me acordada de ti, pero cuando volviste me di cuenta que es no era así, pude comprender que te guarde un rencor muy grande todo este tiempo y hoy ya eso no existe más, con el último beso que nos dimos que también te perdono y me disculpo por eso, pude comprobar que ya no me importas, pero esta vez es de verdad.

Ya no me importa tenerte cerca, ya no me da miedo estar en el mismo lugar que tú, ya no quiero odiarte, porque ya no siento nada por ti. No creo que podamos ser amigos, porque sabes perfectamente que pienso de la amistad y eso es algo que no podría brindarte y tampoco aceptar de ti, quiero pedirte algo especial.

Pero antes, quiero agradecerte por los momentos que compartimos, ya sé que para ti todo era mentira y todo lo fingías y aunque yo estuve engañado ese tiempo, fui feliz y disfrute cada cosa que vivimos, bueno en su gran mayoría tú me entiendes. Por eso, en nombre de todo eso lindo que yo viví y que hoy me permite perdonarte, en nombre de todo eso que me dijiste en tus cartas te quiero pedir que te alejes para siempre de mi lado, no te odio, pero no te quiero cerca. Quiero dejar el pasado contigo a donde pertenece, verte es recordar lo feo de toda esa situación y no quiero más eso, no quiero odiarte más, no quiero que me estés recordando con tu presencia la maldad de las personas, no quiero seguir lastimándome, lastimarte o lastimar a otras personas por toda esa situación. Espero de verdad que puedas entenderme, perdonarme y hacer esto que te pido.

Es todo lo que tengo para decirte. —Durante el tiempo que estuve hablando Eric me dio la espalda, cuando busqué una respuesta que vi su cara estaba llorando, como nunca lo había visto.

—Perdóname, Robert —fue lo único que dijo.

—Ya te perdoné, no te preocupes.

—No me entiendes, quiero que me perdones por todo el daño que te hice, por todo el daño que estaba dispuesto a hacerte, por llegar con mi maldad e intentar acabar tu vida, por humillarte, por no valorar el amor que me brindaste, seguramente jamás vuelva a tener la oportunidad de conocer a alguien cómo tú, tan transparente, tan fiel, tan amoroso y tan inocente. Por favor, perdóname.

»Sabes, hasta este momento no fui consciente de todo lo que había hecho. Para mí, todo era un juego y lo seguía pensando hasta hace un momento, pensé que eras muy infantil, un inmaduro que sobreactuaba las cosas, que te merecías eso por ser tan ingenuo, no medí el daño que te hice y que estaba por hacerte. Soy una persona egoísta, seguramente merezco todo lo malo que pueda pasarme, pero de corazón me arrepiento y te juro que me voy a ir de tu vida para siempre, es lo mínimo que puedo hacer por ti después de todo lo que he hecho.

—¿A qué te refieres con qué no eras consciente del daño que me hiciste y que me ibas a hacer?

—Es una forma de decir, pues yo pretendía que tú volvieras conmigo cuando en el pasado la pasaste muy mal, por mi culpa.

—Entiendo, en todo caso no te preocupes por nada. Lo importante es que ahora ambos vamos a seguir adelante de una manera diferente haciendo las cosas bien. También gracias por entenderme y alejarte de mí, es lo mejor para ambos.

—Cuenta con eso, te deseo lo mejor del mundo y sobre todo que seas feliz. Yo sé que encontraras una persona que te va a hacer feliz, que valorará todo ese amor que tienes para ofrecer y que será correspondido de la mejor forma. Cuídate mucho, por favor.

La despedida de Eric estuvo muy diferente a como lo imaginaba, al principio al salir de su casa nos dimos las manos, pero me halo hacia el él y me abrazo, mientras lo hacía lloraba tan fuerte que hizo que llorara igual, me seguía pidiendo perdón, que no debí cruzarse en mi camino nunca, que lamentaba todo el daño que me hizo. Lloramos abrazados no sé por cuanto tiempo, hasta que llegó el taxi que había pedido.

Vi por primera vez, tristeza en sus ojos, vi a un Eric perdido, un Eric ausente, con culpa y con mucho remordimiento. De camino a casa le rogué a Dios, para que él mismo se perdonará, a juzgar por sus palabras nunca fue consiente de los que hacía, estaba acostumbrado a hacer este tipo de cosas, tal vez solo necesitaba un buen escarmiento que alguien hiciera ver los errores y el daño que causaba. Necesitaba perdonarse si quería seguir adelante.


Eric

Las cosas no salieron como pensaba, me alegro por eso. No puedo creer la clase de persona que soy, lo peor es que él sigue creyendo en mí, eso fue lo que no me dejó seguir adelante con mi plan. Creyó lo de mis supuestas cartas, cree que cambié y que puedo mejorar, cree que seré diferente. Pero, no tengo remedios, soy lo que soy y no puedo cambiar, es muy tarde para mí, pero él no se merece que lo siga haciendo sufrir, que lo siga haciendo parte de este mundo tan negro que vivo y que será por siempre mi cruz.

Estoy tan metido en mis pensamientos que no noté en que momento llegó mi prima, la tenía en frente y me estaba viendo muy raro.

—¡Hola, prima! No te sentí llegar, ¿cómo te fue?

—A mi muy bien, ¿pasó algo?

—No nada, ¿por qué la pregunta?

—Porque nunca en mi vida te había visto así, mucho menos llorar.

Me toqué la cara y efectivamente estaba llorando, tenía lágrimas en mis mejillas, no era común que llorara así que no me percaté de eso, tampoco me importaba, pero no le iba a dar explicaciones o a decir la verdad a mi prima, cualquier cosa que le dijera iba a creerme.

—No pasa nada grave, cosas personales. Pero quiero decirte que mañana me regreso a Panamá, fue un error venir a buscar trabajo acá.

—Si es eso lo que te preocupa, quizá pueda ayudarte a conseguir trabajo.

—No hace falta, no me quiero quedar en esta ciudad. Mañana me voy, así que me despido voy a dormir un rato y mañana cuando vuelvas del trabajo a no estaré, te dejaré las llaves sobre el comedor, te agradezco tu hospitalidad y todo lo que hiciste por mí en este tiempo.

—Fue con todo el gusto, nosotros no nos llevamos tan bien; pero somos familias y estamos para ayudarnos. Si en algún momento decides volver, puedes contar conmigo, te deseo un feliz viaje y saludos a todos allá.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro