La Maestra Real suspiro mientras acomodaba una pila de papeles firmados en el escritorio de la oficina de la reina.

El reino entero estaba enterado del estado actual de la Grand Princess de las Flores, y si bien era una información que se sabía que debía mantenerse en el reino. La Maestra Real tenía la suficiente experiencia para saber que tarde o temprano los reinos exteriores se enterarían de esto.

-Por supuesto que lo harán, como la vez anterior -ella pensó con una burla.

Si fuera honesta, ser una victima era horrible, no por ser considerada débil ni nada, sino por la impotencia de lo que sucedió.

Ella debería haber hecho más, debería haberse esforzado mas para escapar. Para mantener a las llaves protegidas. Para lo que fue creada. Era lo que ellas hubieran querido.

Por desgracia, sabia que eso ya no era posible y solo le quedaba seguir adelante.

Aun se sentía completamente enferma del anterior rey. Ese bastardo adoraba la atención y el poder. Y la peor parte, sabia como obtener ambas de buena luz.

Ser una victima te otorgaba la atención indiscutible de los más nobles que querían ofrecer ayuda a los necesitados, y ser increíble para ganar respeto de todos aquellos que quieran seguirte y escucharte.

Pero ambas tenían sus lados negativos, que desgraciadamente, el anterior rey no vio.

Ser una persona increíble significaba que tendrías que tomar decisiones difíciles cuando llegara el momento, incluso tu vida y las de los demás si la situación lo exigía.

Ser una víctima significa sufrir física o emocionalmente, llevar esa carga de impotencia y tener esa lección quemada en tu cabeza por el resto de tu vida.

La maestra entendía totalmente el porque la gente como el anterior rey pensaba que era buena idea mentir al respecto con esos "títulos", pero aun pensaba que era una tontería.

Sobre todo, cuando se descubre la verdad.

Y por desgracia, el descubrimiento de la verdad casi siempre significaba que alguien saldría lastimado emocionalmente o físicamente.

A veces los dos, y más de una persona.

-La Princesa Towa tuvo que aprender esto por las malas, al menos ella ahora lo sabe, gracias a dios lo hizo a tiempo -pensó girándose para mirar por la ventana.

La mayoría puede haber pensado que la princesa de Hope Kingdom descubrió tarde la verdad, pero la Maestra Real tenia experiencia en lo que era realmente "demasiado tarde". Towa lo hizo a tiempo, y agradecía a todos los dioses por eso.

Su mirada se posó en el jardín debajo de la oficina, y vio que las flores ya se veían como las de la tierra.

-Mhm, realmente creo que te hubieras llevado bien con ella, Yei.

Pensando en la propietaria del nombre, no puedo evitar recordar a esa persona y lo que sabia de la Princesa de las Flores Actual.

Era cierto que ella al principio pensaba que Haruka no tenía lo necesario para ser una princesa. Pensaba que ella se lo tomaba demasiado relajado, demasiado confiado.

Luego la vio luchar como Flora y la realidad la golpeo en la cara.

Definitivamente, Cure Flora era diferente de su antecesora en muchos aspectos, el principal seria en que ella no era tan transparente como parecía.

Y diablos, la Maestra Real estaría mintiendo si ella no se asusto la primera vez que vio lo que era capaz la joven castaña, sin necesidad de transformarse.

Pobre el que pensaba que meterse con ella era buena idea.

La antecesora de Cure Flora, a diferencia de ella, avanzo rápido en sus Princess Lesson, sin embargo, ella no era tan fuerte como Princess Haruka y no solo físicamente, también emocionalmente.

Las palabras que dijo antes de revivir el Templo de las Flores, en ese momento, no podía sacarlas de su cabeza y siempre tenía esta sensación dolorosa en su corazón cada vez que las recordaba.

Esto fue, por supuesto, antes de que la gema de la corona se hiciera pedazos y recordara todo.

Tenia que admitir que fue inteligente de parte de los reyes. Cualquiera que tuviera bastante conocimiento en magia sabia lo difícil que era mantener los hechizos en funcionamiento, en especial, cuando eran hechizos destinados a la mente. Entonces, para mantener el hechizo se colocaba en una gema, que poseían una cantidad impresionante de energía debido a su edad y origen natural.

De hecho, ese tipo de estrategia era usada en los traductores que poseían los miembros de la familia real, generales y sirvientes del reino. Por que si bien las Princesas tenían conocimiento de un segundo o hasta tercer idioma, lamentablemente la mayoría de las personas en Hope Kingdom no se molestaron en gastar tiempo en aprender un idioma y preferían usar el traductor.

Cosa que cambio cuando la magia del reino se apagó momentáneamente, debido a la magia del caos de las llaves, un hecho que desconecto la magia por varios días.

La Maestra real sabia que eso fue una pequeña venganza de parte de las llaves por todo el daño sufrido a todas sus elegidas.

Princess Haruka fue la gota que rebalsó el vaso, y estaban en su total derecho de hacerlo. Honestamente, estaba sorprendida de que solo apagaran la magia unos días, ella sabía que eran capaces de cosas peores.

La magia de Precure era milagrosa si, hasta que le das una razón para enojarla.

Y la magia de Precure odia que te metas con sus elegidas.

Hope Kingdom tuvo suerte.

Así como las Precure pueden borran reinos oscuros que quieren destruir y arruinar el orden de los demás, también pueden destruir los reinos de luz que se aprovechan de la ayuda que le brindan.

Y no sería la primera vez.

Despues de todo, ningún reino mágico era especial para la magia de Precure. Y en lo que respecta a la magia de Precure, la Maestra Real estaba segura en este momento.

Pueden arder en el infierno.

...

La puerta se cerro suavemente con un clic apenas audible y Kanata se apoyo por un momento en la puerta con los ojos cerrados y tomando una respiración honda.

Era difícil verla sabiendo el estado en el que estaba, y las probabilidades que hay en este.

Finalmente, sintiéndose listo, mostro una sonrisa suave y se dirigió a la gran cama de la habitación.

-Buenos días, Haruka. Te ves mejor hoy -Kanata se arrodillo y acaricio el flequillo de la castaña-

Él lo decía enserio, su piel antes en un tono pálido casi enfermizo, ahora había tomado un color rosado pálido más vivido, pero seguía siendo pálido.

-Sera porque la primavera se esta acercando. Seguro estas feliz, las flores han comenzado a florecer también, estoy seguro de pronto podremos verlas juntos. Espero que te gusten.

Y si, ciertamente, la primavera comenzaba a mostrarse, el calor comenzaba a entrar en el reino. Las flores comenzaban a florecer y algunos arboles estaban comenzando a florecer despues de haber recuperado finalmente sus hojas.

Era casi cruel que el mundo se viera tan hermoso y vivo comparado con la situación actual.

El pensamiento de que si Haruka despertaba y encontraba todo tan hermoso... El sonreía al pensar que estaría encantada por eso.

Aunque en este momento, estaba triste porque parecía que aún no podía hacerlo.

-Tus padres vendrán mas tarde de lo habitual, parece que la tienda esta en auge por la primavera y tienen que mantener el flujo de la tienda. Pero dijeron que te traerían una sorpresa, que no sé qué es, pero parecían emocionados y como son tus padres, estoy seguro de que te gustara -Kanata sonrió suavemente a la Haruka dormida, él se sentía extraño hablándole mientras aún estaba dormida, pero pensaba que ella podía escucharlo, así que continuo- Entonces, uh, bueno -movió sus manos nervioso jugando con las mangas de su camisa- Pensé que te gustaría si te tocaba algo, así que traje mi violín -el agarro su estuche y lo puso sobre su regazo- Estuve pensando sobre que tocar, pensé en la que siempre tocaba, pero no estaba seguro, Miss Shaymin dijo que te encantaba esta canción, así que es la que tocare hoy, pero despues te prometo que traeré otras, o componer una... Aunque no soy muy bueno en eso, pero lo intentare.

Kanata miro un momento el delicado rostro de Haruka dormido. Su mirada se tornó triste por unos momentos, pero luego sus ojos brillaron determinados y bajo su estuche para sacar su violín.

Con el instrumento en sus manos se alejo unos cuantos pasos de la cama, se puso en posición, colocando el violín en su clavícula, y puso el arco a punto de tocar.

Miro unos momentos más a la joven princesa dormida en la cama. Tomo una respiración honda, y la soltó suavemente.

Las notas bajas comenzaron a sonar en la habitación.

Mientras tocaba, él no pudo evitar recordar muchas cosas con respecto a la canción.

Esta canción la había encontrado entre las partituras de la Maestra Real, Miss Shamour en ese momento, y cuando ella le mostro como sonaba, inmediatamente quiso aprender a tocar esa canción.

Algo que siempre le llamo la atención, es que la partitura no tenía nombre, lo cual era algo confuso tanto para él cómo Miss Shamour, que no recordaba de donde obtuvo la canción.

Pero dejo de pensar en eso, y simplemente se concentro en aprender a tocarlo. Cuando finalmente domino la canción, inmediatamente fue para tocarla a su madre.

A ella le encanto, y lo felicito por lograr tocar una canción complicada de tan joven.

Por esta misma canción tan hermosa, su hermana quiso aprender violín de él.

Y por eso él dejo de estar celoso de ella y comenzó a quererla como su hermana.

Por mucho tiempo, esta canción siempre represento un vínculo entre él y Towa, algo que sabía que Towa estaba consiente, pero también sabía que ella no tenía la menor idea de lo profundo que era para él.

Cuando Towa desapareció, y él estaba hundido en la tristeza. Por una casualidad, el llego a la Tierra gracias a la llave.

Donde conoció a Haruka, que, en ese momento, solo se había acercado a ayudarla porque le recordaba a Towa. Porque ambas tenían el mismo sueño.

Pero en el instante en que ella dijo que se esforzaría con esa sonrisa y ojos brillantes...El no pudo sacársela de la cabeza.

Por mucho tiempo, años, el espero para volver a ver a Haruka y ser su amigo, quería ser su amigo.

Y cuando finalmente sucedió, el estaba asustado, estaba asustado de que Haruka terminara siendo como la mayoría de las personas en su vida que solo veían al príncipe en él.

Eso no duro mucho, Haruka realmente lo sorprendió demasiado, y lo asusto un poco momentos despues.

Despues de eso, él quería seguir conociéndola, quería seguir a su lado. Incluso sin memoria, él quería seguir haciéndolo.

Lentamente, ese sentimiento de amistad comenzó a crecer, y no fue hasta que casi perdió la sonrisa de Haruka para siempre, que se dio cuenta de que se enamoró de ella.

Quería que Haruka fuera feliz, no importaba que estuviera con el o no, incluso si lo odiaba. Si ella era feliz y estaba a salvo, el estaría bien con eso.

Fue gracias a Haruka que el comenzó a aceptarse y valorarse a sí mismo, a dejar de pensar que era un problema para la vida de su madre.

Y él quería ser ese mismo tipo de ayuda para ella, que ella pudiera confiar en el para ayudarla si lo necesitaba. Al menos, con cosas del corazón.

Sabía que ella no lo necesitaba, pero incluso sabiendo eso, quería ayudarla en todo lo que estuviera a su alcance.

O detenerla de meterse, o crear, situaciones que eran un potencial peligro para sí misma.

Exceptuando cosas que eran necesarias, como salvar su reino, incluso si ella acepto luchar en la batalla contra Dyspear, el aun odiaba que se metiera en ella.

Pero, aun así, ella lo hizo. No por salvar su reino o ser una guerrera legendaria con un destino. No. Ella lo hizo porque quería proteger a su familia y amigos.

Él se sorprendió cuando le dijo que era una de esas personas.

Y a pesar de que odiaba la situación. Él se sintió inmensamente feliz cuando dijo que era importante para ella.

Casi lloro de la felicidad en realidad, pero logro contenerse.

Es que siempre pensó que Haruka lo odiaba, o al menos lo consideraba una molestia por todo el peligro en que la metió. Así que, ¿Pueden culparlo por querer llorar de la felicidad?

Y gracias a Haruka, su hermana había vuelto y se convirtió en una Precure.

Él le debía demasiado.

Y aun así... Pareciera que él siempre la está metiendo en peligro innecesario.

A pesar de la culpa que sentía, todo lo podía hacer en este momento era estar ahí para ella. Incluso si estaba dormida por tiempo indefinido y quien sabia cuando despertaría.

Mientras las notas del violín seguían sonando por toda la habitación. Los parpados de la otra persona presente comenzaron a moverse.

Los parpados de la joven castaña se abrieron un poco, para luego cerrarlos y parpadear unas cuantas veces.

Cuando finalmente pareció estar completamente consiente, ella parpadeo confundida por la habitación en la que estaba. Para luego darse cuenta de que una canción muy familiar estaba sonando cerca. Ella volteo y abrió sus ojos sorprendida por la persona que estaba tocando el violín.

Estaba confundida por ver a Kanata tocando el violín en una habitación desconocida para ella, pero la melodía familiar rápidamente estaba calmando todo su ser.

Decidió sentarse un poco en la cama, y al hacerlo escucho un pequeño tintineo muy familiar.

Volteo la cabeza a su derecha para encontrar a la llave de la Princesa de las Flores en una mesita de noche, al lado de la gran cama en la que estaba acostada.

Ella parpadeo hacia la llave. Lentamente, dirigió su mano para agarrarla y llevarla cerca de su pecho.

Miro la llave detenidamente y luego al príncipe que tenía los ojos cerrados mientras tocaba el violín.

Parpadeo otra vez mirando hacia la llave, antes de sonreír suavemente y mirar tranquilamente como el príncipe de Hope Kingdom tocaba el violín.

Las notas de la canción finalmente estaban llegando a su fin, y el príncipe termino con la tan característica nota final con un vibrato.

El príncipe soltó un suave suspiro, y finalmente abrió los ojos suavemente, solo para ensancharlos al ver a la castaña sentada tranquilamente en la cama.

Ella estaba sonriéndole.

-Gokigen you, Kanata. Ha pasado un tiempo, neh -Haruka le sonrió inclinando un poco su cabeza-

Kanata se quedo congelado mirando a la joven castaña, su boca un poco abierta por la sorpresa.

Finalmente, recuperándose de su estado de congelamiento. El dejo el violín junto con el arco en el suelo, sin quitarla la mirada a Haruka, y se dirigió a ella.

-Haruka... ¿Eres... Realmente eres tú? -Kanata la miro fijamente negándose a actuar ante la posibilidad de que se trataba de un sueño nuevamente-

-Si, ¿Paso algo? No te ves bien -Haruka pregunto mirándolo preocupada-

Kanata simplemente se agacho y llevo una mano lentamente a su mejilla, causando que Haruka se sonrojara. La calidez de la mejilla parecía ser suficiente confirmación para el príncipe, por que sus ojos se aguaron muy rápido y su boca estaba intentando claramente formar palabras.

- ¡Ha-Ha-Haruka! -el grito antes de lanzarla a abrazarla firmemente entre sus brazos con fuerza y seguridad, todavía completamente asustado de que fuera un sueño-

- ¿¡Ka-Kanata, que pasa?! ¡¿Estas bien?! ¡¿Por qué estas llorando?! -Haruka apoyo sus manos en el pecho del príncipe por la sorpresa repentina de que Kanata la abordara en un abrazo, del que siente que se niega a soltarla, pero sin asfixiarla-

- ¡Lo siento mucho, Haruka! ¡De verdad lo siento mucho, mucho! -el príncipe hundió su rostro en la curva de su cuello sin siquiera intentar detener las lágrimas que caían de sus ojos-

Haruka miro de reojo al príncipe y soltó un suspiro, sabiendo que en ese momento no podía preguntarle nada, cuando Kanata se ponía así no se detenía hasta calmarse, así que solo abrió sus abrazos y correspondió el abrazo acariciándole la espalda. Ella intento ignorar el hecho de que apenas ella hizo esto, Kanata la abrazó un poco más fuerte y estaba segura de que el estaba llorando todavía más.

Simplemente se quedó ahí en silencio acariciando la espalda, y a veces el cabello, de Kanata para tranquilizarlo y hacerle saber que realmente estaba ahí con él.

Despues de unos cuantos minutos, el príncipe finalmente se calmo lo suficiente como para soltarla del abrazo y simplemente sentarse al lado de ella, sin embargo, al aun tenia sus manos en un abrazo a medias.

-L-Lo siento, simplemente que... -Kanata estaba respirando entre cortadamente debido a la emoción que aun recorría su cuerpo y corazón-

Haruka soltó una risita, y alzo sus manos para sacar las lágrimas en los ojos de Kanata con sus pulgares.

-Está bien, parecía que realmente lo necesitabas -Haruka le sonrió suavemente, pero luego lo miro seriamente- Kanata, ¿Que paso?

El príncipe soltó un suspiro, sabía que tendría que contarle todo en cuanto despertara, pero incluso si lo sabía, él nunca estaría listo realmente.

-Primero que nada, ¿Qué es lo último que recuerdas?

-Que tu padre me apuñalo con una espada y me llevaste corriendo al Ala Medica -ante la mirada sorprendida de Kanata, Haruka le sonrió astutamente- Me desperté hace unos cuantos minutos, y la tensión de mi cuerpo mi dijo que estaba dormida desde hace algún tiempo y me concentre en recordar que paso antes de este momento.

-No estaba sorprendido p- Sabes que, no importa, no debería sorprenderme -Kanata suspiro, Haruka era muy franca cuando su trataba de cosas que la pasaron a ella misma, cosa que a veces lo asustaba- Pero si, eso es correcto... Supongo que tienes preguntas del por que mi padre te apuñalo, que en realidad es más profundo de lo que piensas -Kanata interrumpio a Haruka, que sabía lo que estaba por decir-

Haruka lo miro por unos momentos para luego suspirar y recostarse más cómodamente en la cama. Por la mirada de Kanata sabía que esto sería largo.

-Está bien, ¿Cuando comienza todo esto?

-Hace mas de tres mil quinientos años....