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Final

Renuncia de derechos, los personajes que salgan aquí son de sus respectivos autores.

"¡GAAAAHHH!"

Los siete titanes, todos hijos de Urano y de Gaia, soltaron un grito desgarrador que repercutió por la vasta superficie del Olimpo habiendo sacado todos ellos una serpiente dentro de un frasco.

Todos ellos, al igual que el imponente Tifón, comenzaron a brillar llenando de luz todo el área, impidiendo que los dioses y Goku pudieran ver lo que estaba sucediendo en estos momentos.

Las valkyries igualmente estaban sorprendidas por lo que estaban viendo, lo positivo de todo es que el número de bestias se estaba reduciendo y pronto terminarían con toda esta batalla.

"Tuve que acabar con ellos desde el principio, realmente no hubo necesidad de alargar esta batalla. Ahora he de ser consecuente" -se dijo Goku mientras su aura brillaba con fuerza.

Hermes cogió unos prismáticos intentando ver lo que ocurría con los hijos de Gaia pero no tuvo resultados positivos, lo cual aumentó la tensión en los dioses pues podían verse derrotados.

"Ella parece tranquila, tal vez no deba preocuparme"- pensó Apolo observando la expresión facial de su hermana consanguínea Artemisa, quien a su vez observaba a Goku.

"Goku aguarda todavía más poder en su interior, pero la sensación que emiten los titanes es tan... terrorífica"- indagó la diosa de la luna y la caza.

Finalmente la luz que emanaban ellos se extinguió... revelando la figura de no siete sino un solo titán de unos tres metros de altura, un cuerpo andrógino pero con piernas de dragón y que a simple vista se notaba lo poderoso que era.

-¿Se han... fusionado? -Athenea intentó establecer un algoritmo coherente a lo que sus ojos estaban viendo. ¿Cómo es que podían haberse fusionado los titanes? Sin duda era un suceso imposible.

-Esto... no puede estar sucediendo... -aquellas palabras formaron parte de las murmuraciones de Poseidon, Apolo, Hermes, Hefesto y Athenea.

Zeus sólo podía apretar sus puños con crispación por aquello que contemplaba entretanto que Ares mantenía una expresión neutra en su rostro.

Artemisa se giró para ver si sus cazadoras estaban bien: Phoebe tenía una herida en el brazo izquierdo, Thalia en el costado derecho, Zoë en su rodilla izquierda... por lo general estaban bien.

Goku igualmente estaba muy sorprendido, en ninguno de sus planes contó con una fusión de titanes. Sin duda Vegeta se sentiría ofendido al ver que ellos no tuvieron que pasar por lo mismo que él para fusionarse, ni hacer poses ridículas ni ponerse unos zarcillos Pothara en las orejas.

"Tal vez sea una asimilación, como hacen los Namekianos... es lo más posible porque sus energías se han sumado"- se dijo Goku observando a la criatura que tenía frente a él.

-Con las serpientes de Ophis aumentamos nuestro poder, así que como último recurso unimos nuestras almas en un solo cuerpo... ¿ahora qué, Son Goku? -preguntó el titán sonriendo descaradamente al pelinegro.

"Ophis... en estos momentos no recuerdo realmente de quién se trata pero si sigue siendo tan problemático tendré que intervenir"- habló en su mente Goku haciendo una nota mental.

-En primer lugar, ¿cómo debería llamarte? Antes de eliminarte definitivamente de este mundo me gustaría me gustaría saber ese dato -farfulló el pelinegro con soberbia en aquellas palabras.

El titán soltó una carcajada al oír aquello mientras Goku todavía mantenía una expresión tranquila en su rostro, no de dejaría amedrentar.

-Mi nombre es Gaia, al igual que mi madre -se presentó finalmente el titán mientras que Goku asentía- ahora mortal, vas a presenciar el poder de lo infinito. ¡Prepárate Son Goku! -exclamó Gaia.

"No será tan fácil teniendo en cuenta que sus habilidades también se han fusionado... tal vez deba utilizar eso desde ya para terminar con el combate de una vez por todas"- se dijo Goku.

Gaia soltó su aura con brutalidad haciendo retroceder a la mayoría de dioses, mientras que Goku se protegió cruzando sus brazos para no ser arrastrado por la ventisca hecha por Gaia.

"Este viento... es una habilidad de Tifón, sin duda esto será muy difícil"- indagó Athenea compartiendo un pensamiento por Poseidón.

"Si se han sumado todas las habilidades las opciones de ganar se reducen... con la incandescencia de Hiperión, la brutalidad de Cronos, la magia de Crio, la inteligencia de Ceo, el poder de Tifón, la fuerza física de Jápeto y de Atlas el asunto pinta mal"- pensó Poseidón con una mueca de frustración en su rostro.

"¡¿CÓMO?!"

Todos gritaron con sorpresa al ver que Gaia apareció a una velocidad monstruosa delante de Goku, quien abrió sus dos ojos al ver aquello.

Gaia intentó golpear el cuerpo de Goku. Sin embargo, sólo consiguió golpear una imagen residual que creó el rubio moviéndose a gran velocidad sin haber sido notado por el titán.

Goku reapareció detrás del titán juntando sus dos manos para simular un golpe de hacha en la cabeza de Gaia, no se esperó que su golpe fuera esquivado con tanta facilidad por aquel titán.

Como un guerrero experimentado Goku no bajó la guardia esperándose un ataque frontal de Gaia, lo que ocurrió es que el titán soltó una bocanada de fuego desde su boca directa hacia el saiyajin.

Goku se protegió creando una ráfaga de ki que, a su vez, contrarrestó las llamas que creó Gaia aun así el rubio se acercó intentando conectar un golpe pero Gaia lo detuvo con su antebrazo.

-Es imposible intentar vencerme mortal -declaró Gaia con una sonrisa desquiciada en su faz- soy la encarnación de la perfección, es imposible que pueda ser derrotado -añadió con gran soberbia.

-Créeme he oído eso de muchos que en estos momentos están bajo tierra. ¡No serás el primer tirano que vea caer! -exclamó Goku alzando su aura dorada mientras Gaia le observaba.

Todos los dioses sintieron el suelo temblar ante aquella demostración de poder, bien sabían que Goku todavía no estaba usando todo su poder.

"Vamos Goku tú puedes, derrota a ese monstruo de una vez por todas"- Artemisa mandó mensajes de ánimo a su amigo desde su mente mientras le veía acumular una energía azul en sus manos.

"¡¡HAAAAAA!!"

Goku lanzó una onda de energía azul en dirección a su rival titánico, quien sonrió sin ápice de temor mientras recibía aquel poderoso ataque de lleno.

-¡Ha dado en el blanco! -exclamó Hermes esperanzado al ver que la técnica impactó en Gaia pero los demás dioses estaban serios, sabían que todavía no había sido derrotado.

-Esto va a ser más difícil de lo que creía... sus ataques no están haciendo daño alguno en Gaia -farfulló Poseidón con el ceño fruncido mientras Apolo y Hefesto asentían ante aquellas palabras.

"Gaia es la unión resultante entre siete titanes, por lo tanto se trata de un ser inmortal... intentar vencerle con ataques corrientes no va a servir de nada"- se dijo Artemisa mirando la expresión difícil de Goku que representaba el momento.

"Si es inmortal no las tengo todas a mi favor... Sigh tal vez tenga alguna debilidad así que debo seguir atacando para descubrirla" -discurrió Goku mientras pensaba en la estrategia más adecuada para vencer al titán fusionado de nombre Gaia.

-¿Esto es todo? Menuda decepción -con voz grave Gaia comenzó a caminar hacia el pelinegro mientras éste terminaba de definir su estrategia.

Goku comenzó a dar vueltas alrededor de Gaia apareciendo y desapareciendo en un borrón de velocidad. Sin embargo nadie se percató de que cada vez que daba un paso dejaba una pequeña esfera de energía de color azul en el lugar.

"Es inútil... no tiene puntos ciegos"- discurrió Goku mientras giraba en torno a Gaia y habiendo pensado que al tener un mayor tamaño emsu número de puntos ciegos habrían aumentado.

-¡¿Qué pretendes mortal?!  -Gaia exclamó al ver que Goku apareció delante de él para plantarle un puñetazo en su rostro. El titán tomó la mano de Goku y le dio una fuerte patada en su tórax.

Goku salió volando al mismo tiempo que escupía sangre, consiguió restablecerse girando sobre sí mismo mientras que veía a Gaia corriendo hacia él para acabar lo que había empezado antes.

Gaia comenzó a pisar las pequeñas esferas que antes había dejado Goku implantadas en el suelo y de repente comenzaron a sucederse explosiones,  Goku había usado minas de ki.

-Es increíble... sin duda estamos ante uno de los seres más fuertes de la existencia -murmuró Athenea al observar la inteligente estrategia que se le ocurrió a Goku- esas pequeñas esferas que están sobre el suelo funcionan como minas, así que cada vez que Gaia pise una explotaran.

La mayoría asintió en de acuerdo con aquellas palabras, Ares de forma simple soltó un bufido mientras Zeus no se pronunciaba al respecto.

"Esa técnica no va a acabar con él... así que no me queda de otra que utilizarla"- discurrió Goku observando la cortina de humo que se formó a consecuencia de las minas de ki en el suelo.

De repente Gaia apareció en un borrón de velocidad delante de Goku, quien abrió sus ojos ante aquella muestra de poder. El titan fusionado estiró su gigantesco brazo para conectar un puño en la figura de Goku, pero éste tuvo en tiempo suficiente como para reaccionar y cubrirse.

A raíz de aquel golpe Goku retrocedió varios metros, alzando su mano derecha al cielo creó una esfera de ki amarilla y comenzó a girar su brazo en círculos hasta formar un círculo de ki.

"¡KIENZAN!"

Con un grito estridente Goku lanzó aquel disco de ki con el objetivo de cortar en pedazos al titán, quien, sabiendo esto, se apartó inteligentemente.

El disco cortó una pequeña formación rocosa que había en la zona llenando de más sorpresa e incertidumbre a los dioses del panteón griego.

-*Silbido* increíble, cualquiera de nosotros habría sido partido en dos con ese ataque con forma de disco -Hermes se mostraba eufórico ante lo que veía, sabía que nunca volvería a ver algo así.

-Quizás a ti pero a mí no -Ares se cruzó de brazos mostrando su gran indignación por el momento, siendo un dios de la guerra y estar presenciando una batalla sin intervenir no era de su agrado.

Gaia y Goku comenzaron a intercambiar golpes, si bien el titán carecía de velocidad en la mayoría de sus movimientos lo compensaba con su enorme fuerza y eso sumado a las habilidades que posee.

Goku se alzó al cielo creando una sombra bajo la luz de sol mientras extendía las palmas de sus manos y las colocaba a la altura de sus sienes.

"¿Qué pretende hacer ahora?"- Athenea estaba en busca de algoritmos que pudiesen explicar el siguiente movimiento que haría Goku.

"¡TAIYŌKEN!"

Una resplandeciente luz inundó la vasta superficie del Olimpo cegando a casi todos los dioses salvo a Apolo que tenía unas gafas en sus bolsillos.

"¿Qué es lo que ha podido pasar?"- aquella era la pregunta que circulaba en la mente de todos los presentes incluidas las guerreras de Odin.

Rossweisse aplicó magia a sus ojos para diluir el efecto de la luz cegadora, cuando abrió sus ojos se llevó una sorpresa al ver que Gaia no se cegó.

-¡¡Cuidado!! -gritó la muchacha de cabello plateado al ver que el titan avanzaba a gran velocidad al lugar donde estaba Goku.

"¿Tampoco ha funcionado esto? ¿Cómo es posible?"- se preguntó Goku ya que le costaba descifrar alguna debilidad presente en el titán.

-Mi ser está formado por Hiperión, el titán primordial del sol, ¿lo recuerdas mortal? -farfulló Gaia con suma soberbia- todo ataque relacionado con el Sol y la luz no va a funcionar sobre mí.

-Con o sin el sol voy a destruirte, eso no cambiará basura -habló Goku apretando sus puños con gran fuerza mientras dejaba escapar un grito al mismo tiempo que se encendía su aura dorada.

Goku estiró sus brazos y creando una potente corriente de aire consiguió que Gaia retrocediese bastante y no solo Gaia sino que incluso también los dioses tuvieron problemas para mantenerse en pie debido al enorme poder desprendido.

"Increíble"- Rossweisse indagó al ver el aura de Goku, lo mismo aplicaba para sus hermanas valkyries.

-¿Guardaba tanto poder? -preguntó Apolo girándose hacia su hermana melliza, quien asintió de acuerdo sabiendo que todavía quedaba más.

-Quizás intente el último asalto para acabar con él de una vez por todas -sugirió el dios de los mares al ver que Goku se lanzaba volando hacia Gaia.

Gaia se protegió con su antebrazo ante la magnitud del golpe de Goku, había incrementado enormemente su poder. El pelinegro no dejó que el titán respirara y comenzó a asestarle una serie de golpes que resultaban de combinar patadas y puñetazos que el titán no pudo detener.

-¿Qué te parece esto? -preguntó Goku sonriendo pero su sonrisa se esfumó al ver que Gaia detenía su puñetazo fácilmente, habia estado fingiendo.

-Ciertamente te has hecho más fuerte, lo cual es digno de admirar... pero es insuficiente para vencerme... ¡PORQUE YO SOY INMORTAL! -rugió Gaia liberando brutalmente su poder y haciendo que el cuelo cambiara a uno rosa carmesí.

Gaia tomó el brazo de Goku y le alzó al cielo antes de aparecer detrás de él y plantarle una patada en la espalda que le envió directamente al suelo sobre el cual se formó un enorme cráter.

Artemisa abrió sus ojos e hizo ademán de ir a socorrer a su amigo pero su hermano se lo impidió tomándola fuertemente del brazo.

-¡Suéltame! ¿No ves acaso que si no hago nada él morirá? -se quejó Artemisa viendo cómo Gaia descendía lentamente hacia el cráter.

-¡Tú también morirás si vas ahí! -exclamó a su vez Apolo mirando fijamente a la diosa de la luna y la caza- y eso es algo que no puedo permitir.

Artemisa bajó su cabeza ignorando sus pulsiones mientras Apolo comenzaba a soltar su brazo.

Goku intentó levantarse pero su cuerpo no respondía, los golpes de Gaia eran sumamente pesados debido a su fuerza y cada uno de ellos incidía drásticamente en su cuerpo.

-Lamentable, es hora de acabar con tu existencia -Gaia habló tomando del cuello al pelinegro, quien sonrió victoriosamente- ¿Por qué sonríes mortal?

-Porque he ganado y has caído bajo mi trampa estúpido -con esas últimas palabras el cuerpo de Goku se desvaneció como si de polvo se tratase.

"¡¿QUÉ?!"

Todos gritaron debido a la sorpresa que les suscitó ver el desvanecimiento de Goku, sabían que no había podido morir pero la duda era saber dónde estaba, algo que todos querían saber.

Gaia anduvo buscando durante varios minutos hasta que alzó la vista al cielo... y le vio a él... También vio una gigantesca esfera plateada sobre la figura de Goku, eso fue suficiente para que comenzará a enfadarse. Sin embargo ese Goku estaba en su estado base.

-¡Está ahí arriba! -indicó Rossweisse señalando un punto en el cielo donde había un segundo sol de color plateado por encima de Goku.

-¿O-otro sol cómo es posible? -preguntó Athenea ya que no hallaba lógica a que hubiera otro sol.

-Ha creado una copia de sí mismo para distraer a Gaia... ¡Bien pensado! -Hermes exclamó ya que aquélla había sido una gran estrategia.

"Crear una copia aprovechando la luz del Taiyōken y luego crear la Genkidama fue una buena idea, sobre todo teniente en cuenta que el Olimpo está hecho de energía divina"- pensó Goku ya que las plantas, animales, los seres mitológicos y dioses menores a los que pidió energía para vencer a Gaia estaban hechos de ki divino y no ki normal como cualquier otro.

Con eso obtenía una Genkidama diferente a la habitual, hecha de divinidad y mucho más poderosa, de ahí que su color fuera plateado.

La copia que creó en mientras duraba el Taiyōken es la que se había mantenido luchando contra Gaia hasta ahora, debido a que sólo tenía un veinte por ciento del poder del original no pudo hacer gran cosa salvo distraer a Gaia mientras el Goku original preparaba la Genkidama.

Gaia apretó sus dientes debido a la furia que sentía y de alzó al cielo dispuesto a acabar con Goku de una vez mientras éste sonreía.

"D-debo intentarlo, así podré vencerle"- se dijo Goku ya que manejar aquella cantidad de energía divina estaba agotando sus reservas de energía, así que se transformó en Súper Saiyan.

-¿Qué pretende? -preguntaron Artemisa y Athenea al mismo tiempo al haber visto cómo Goku volvía a transformarse y cómo aquel sol comenzaba a reducir su tamaño alrededor de la figura de Goku.

Goku sonrió ya que había pensado en hacer una locura, así que siguió concentrando toda su energía mientras absorbía la energía divina de la Genkidama. Su pelo entonces comenzó a hacerse más largo, sus cejas desaparecieron del rostro y su expresión se endureció facial sumamente.

"..........."

Todo el mundo se quedó callado ante aquella transformación, Goku alcanzó la tercera fase del Súper Saiyan mientras mantenía la energía de la Genkidama en su mano derecha cerrada.

Sin perder tiempo apareció delante de Gaia utilizando la teletransportación, sorprendiendo así al titán, llegó el tiempo de vencerle.

-¡¿CÓMO?! -Gaia exclamó al ver la rapidez con que se había desplazado Goku hasta él. Solo pudo ver un aura plateada sobre el aura dorada de Goku.

-Hasta aquí has llegado maldito Gaia este es tu fin... ¡¡PUÑO DEL DRAGÓN!! -gritó Goku estirando su brazo mientras que un dragón de ojos carmesí aparecía atravesando el abdomen de Gaia.

Su esencia física había sido destruida, aunque bien es cierto que dentro de ciento de miles de años volvería a formarse en el Tártaro pero aun así la hazaña de Goku quedaría grabada dentro de la larga historia del panteón griego.

Con Kuro.

Kuroka había perdido la noción del tiempo, sólo veía oscuridad en el lugar donde se encontraba.

Estaba atada con cadenas supresoras de Sennjutsu, por lo que la energía no circulaba correctamente sobre su cuerpo, aquello era una muerte lenta debido a la restricción de Sennjutsu.

Varias veces intentó escapar pero no pudo, ahora mismo le era imposible debido al frágil estado de su cuerpo, aun asi logró saber que estaba en el Inframundo.

Kuroka sabía que su hora había llegado, se arrepentía de no haber disfrutado lo suficiente con Goku o con su hermana Shirone pero ya era tarde. Demasiado tarde como para arrepentirse.

"Go-chan... Shirone... perdónenme"- se dijo Kuroka mientras que lágrimas bajaban por sus mejillas, aquella tortura era demasiado para ella.

Kuroka escuchó un ruido proveniente de fuera y abrió sus ojos al ver a un pelirrojo frente a ella. Sabia que era el Maou más fuerte. Sirzechs.

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Fin del capitulo.

Quiero llegar a los cuarenta capítulos antes de que acabe el año, así que voten hasta reventar el botón ya que tengo muchos planes con el fic.

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