44:Jóvenes Estúpidos.
Exactamente 20 minutos había pasado desde que ambos adultos habían llegado al departamento y el incómodo silencio sólo podía asfixiarme a cada segundo que pasaba sentando en aquel sofá de mi sala.
La mirada de aquel hombre veterano me tenía con los vellos de punta.
El abuelo de Yugi era muy intimidante, no recordaba que fuera así. Siempre lo recordé como un abuelito dulce y agradable que no podría matar ni siquiera una mosca, pero al parecer sólo eran apariencias o es lo que mi mente figura ahora.
Pues aquel viejo me miraba de pies a cabeza como si fuera la peor mierda que se a topado en su vida.
Sin embargo, mi padre solo está a su lado, comiendo una banana sin decir nada, en silencio y disfrutando de su fruta con una sonrisa y despreocupado.
"Idiota", es en lo único que pienso cuando lo veo.
El carraspeo de la garganta del abuelo de Yugi llama mi atención, al parecer por fin va hablarme de lo quiere o busca.
Espero que sea bueno, pero creo equivocarme, él me ve con ganas de matarme y de llevar mi cuerpo sin vida a un basurero.
"Dios, estoy asustado."
- Mira joven. - Comienza el abuelo hablar. Yo me pongo mudo por la forma tan seria del veterano en la que se dirigió a mi. - A pasado un tiempo desde la última vez que nos vimos tu y yo. - Pase saliva ruidosamente mientras voy notando como el abuelo se va levantando de su lugar y se dirige a mí con unos ojos fieros queriendo matar mi alma. - Estoy aquí única y exclusivamente por que me han informado de algo que no me parece. -
Entro en nervio total, ¿Informado?, ¿de que se trata esto?, ¿quién le informó que cosa?.
- Yo... -
-Silencio. - Dicta con una voz grave que me hace callar en seguida y bajo la cabeza como cachorro regañado.
Mi mente empieza a formular varios escenarios en los que supone que tipo de información le han dado.
¿Se entero de mi pasado con Yugi?.
¿Se entero que yo alguna vez estuve casado?.
¿De mis problemas familiares?.
¿De qué Yugi me ayuda con la empresa?.
¿Se entero de la situación actual?.
¿¡DE QUÉ DIABLOS SE ENTERO?!.
- ¿Cómo pueden ser tan estúpidos y actuar de esa forma?. -
Mi cuerpo tiembla.
- Señor...
- Dije que guardarás silencio, niño. -
"mierda".
- Por tanto años le he dado mi confianza a Yugi, el jamás me ha dado la espalda y me ha mentido. - Dice con voz molesta. Tan molesta que comienzo a sentir que esa molestia se debe totalmente a mi culpa. - Pero llegas tú y mi querido nieto comienza a mentirme descaradamente. -
"Estoy muerto."
Probablemente el abuelo piensa que soy una mala influencia para su nieto, y no se equivoca, siempre he sido malo para él.
- ¿Cómo se atreven a no decirme de la gran estupidez que hicieron?. -
Aún que no estaba seguro de que estupidez estaba hablando , estaba seguro que tenía que ver conmigo y mis mierdecillas.
- ¿Se casaron?. - Habla yendo a un punto que no esperaba.
- Ah.... ¿Qué?. -
El veterano pone los ojos en blanco y luego pone una mueca harto, para luego verme con ese ceño fruncido .
- Esto no estaba en el contrato que me dijiste cuando querías a mi nieto de vuelta a tu vida. Creí que serias más sensato. Pero eres un estúpido niño. - Dijo. - Corrección, ¡los dos son Estúpidos!, ¡¿por qué creyeron que casarse era una opción a este convenio que tienen, eh?!.
Ahora comprendía un poco, ¿por eso es que vino hasta acá?. Si esa era la razón, me sentía aliviado.
- Ya veo. - Comencé hablar más tranquilo. - Verá señor Salomón. Lo único que puedo responderle es que sólo paso así de la nada. -
- ¿Cómo que pasó así de la nada?. - Cuestión muy molesto cruzando sus brazos.
- Ni siquiera lo pensamos, solo lo hicimos. - Respondió otra voz, la voz de Yugi, que se notaba un tanto sorprendido por ver a su abuelo en medio de la sala.
Yugi pasó hacia la sala cargando a Yami en un brazo mientras que con la otra cargaba una bolsa lleno de ingredientes mientras lucia un traje en color mate negro con una camisa azul desabotonada del pecho.
Mi chico si que sabía como hacerse notar, y más con aquella voz que parecía cambiar de a poco para una más profunda.
-Creí que estarías en el trabajo. -
Yugi dejó la bolsa en la mesa de la cocina y luego regresó para estar a mi lado.
- Terminé temprano. - Me dijo, aún que pude distinguir aquella mentira en sus palabras. . - Y vine a casa. -
- Eres muy rápido. - Comenta por fin padre y se pone de pie, para este punto, Yugi le mira mal, suelta un gruñido molesto que no pasó desapercibido y luego Yugi me da a Yami, para luego dirigirse directo a mi padre y darle un puñetazo mandando a mi padre al suelo quien se cubre la nariz.
¿Se la rompió?
Mi respuesta llega a mi cuando veo manchas de sangre manchar mi suelo.
La acción, aún que me había gustado presenciarlo, me había descolocado por completo, pues jamás había esperado eso de Yugi. Al igual que el abuelo que miraba sin poder creer la actitud y la acción de su nieto, más sin en cambio a Yami le pareció gustarle pues río mientras presencia a a su abuelo detener la hemorragia en su nariz.
Mi padre, aun con la nariz rota, se reincorpora de un salto como si no hubiera pasado nada y luego dice:
- Admito que tienes buena derecha, pero, quisiera saber del porqué el golpe, ¿acaso tratas de meterte en un conflicto grave con tu querido suegro?. -
- Eres un ser miserable. - Siseo Yugi con veneno en sus palabras.
- Oh, parece que si te quieres meter en problemas. . - Vuelve a decir mi padre. - No te recomiendo que lo hagas, chico. -
-Largo de mi casa. - Demando Yugi con voz grave. - No eres bienvenido aquí. -
Mi padre ríe.
- ¿Quién eres tú para decirme que debo....? -
Mi padre guarda silencio en cuanto Yugi toma a mi padre del cuello de su camisa y lo acerca a él a la par de la oreja de mi molesto padre y murmura algunas cosas que no alcanzo a escuchar, sin embargo me doy cuenta las cosas que le Yugi debió ser una amenaza tan grande como para poner pálido a mi padre de esa forma y ponerlo nervioso.
Mi padre me ve por un segundo, sus ojos tintinean con miedo y yo lo miro extrañado.
¿Qué tanto podría haberle dicho?.
Ambos se reincorporan y mi padre sin decir nada solo se limpia su nariz con un pequeño pañuelo de su saco y luego se va chocando intencionalmente el hombro de Yugi, pero dándole una palabras inentendibles para mi.
- Alguien dígame que putas está pasando aquí. - Dice el abuelo haciendo reír a Yami.
Yugi se voltea a vernos con una agradable sonrisa a los tres y sólo dice:
- Cosas de adultos. -
*Continuará...
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro