-- N-no creo poder hacer eso. Yo... Yo creí que solo me haría cargo de Yami, no me esperaba esto. --

Tenía miedo. Yo no estaba preparado para enfrentarme a varios ejecutivos y jefes de empresas que querían hacer un trato con la compañía de Atem.

¡Yo no sabía nada de eso!.

-- Esto... De esto no me mencionó nada Atem. -- Dije hacía a Haku que me miraba con una sonrisa divertida. -- No voy a entrar ahí. --

-- Pero debe de hacerlo. Es su deber cómo el nuevo jefe ya que el señor Atem no está disponible. Usted es la salvación. --

Voltee a ver el lugar, un enorme edificio se presentaba en frente de mi. Volví a mi mirada hacia Haku y negué varias veces.

-- No, no puedo hacerlo. -- Dije.

-- Señor Yugi usted puede hacerlo, descuide, no me separare de usted ni por un minuto. -- Me alentó. -- Además de que al amo Yami le gustaría estar con usted también. -- Mire hacia Yami, este seguía sobre su sillita mientras me sonreía .

Suspire.

"recuerda que lo estás haciendo por el niño. Solo por él."

-- Está bien. -- Acepte no muy seguro.

Haku asintió y me dirigió hacia adentro del edificio.

Al entrar me impresione al ver lo elegante y cuidado que estaba, la alta tecnología se podía presenciar por todos lados, el personal parecía estar sumamente ocupado o recién comenzaban a ingresar para trabajar o para irse a casa.

-- ¿Fascinante, no?. -- Dijo el chico de ojos azules.

-- Es increíble. -- Contesté impresionado. -- Esto, ¿lo construyó Atem?. --

-- En realidad el imperio le pertenece a su madre, pero Atem aporto la mayoría de las ideas para innovar proyectos que se han lanzado al mercado y los que están en desarrollo. Cómo es el segundo hijo y el único que acepto encargarse de la empresa le toca claro la herencia de esta. -- Me explicó mientras me dirigía hacia lo que se suponía era la recepción, ah había una señorita la cual al verme hizo una reverencia me dio la bienvenida y me dio una placa plateada con mi nombre: Yugi H.M. Decía en la placa.

Haku me coloco la placa en donde se viera a simple vista.

--Listo, ahora sabrán quien eres en este campo. -- Me dijo orgulloso mientras sonreía de lado.

-- No estoy tan seguro de eso. -- Murmure bajamente, aún me encontraba incomodó en el lugar.

-- Descuide, apuesto a que verá rostros familiares por el edificio.--

--¿Y eso te incluye a ti?. -- Pregunte dudoso, él había prometido que no se iba alejar de mi, que estaría en todo momento cuidándome y protegiendo a mi y Yami.

-- Sí. -- Contestó. -- Pero a pesar de que vea rostros familiares aquí, también debe de cuidarse de aquellos que quieran perjudicarlo. No todos aquí son amigos, algunos de sus compañeros en el área hasta pueden llegar hacer sus enemigos, le pido que se aleje de ellos. --

Entendía, había leído algunos artículos sobre lo famosa y lo importante que era la empresa en innovación Halackti muchos de sus rivales en el mercado trataban de perjudicar la empresa, así que debía de andar con cuidado con quién trataba en este lugar.

-- Comprendo. -- Dije.

--Bien... Por favor sigame. -- Me pidió. Comenzó caminar hacia el elevador, apretó el botón número 30.

-- ¿Tan alto?. --Pregunte algo impresionado.

-- Así es. -- Me contestó, yo me apegue hacia la pared de la cabina, Haku me vio de reojo. -- ¿Le causa algún problema las alturas?. --

--Vértigo. -- Dije. -- Y me da algo de pánico al pensar que estamos muy lejos del suelo. El elevador podría detenerse y desprenderse y caer y entonces moriríamos. -- Hablaba tan rápido que comenzaba a sucumbir al pánico, sin embargo, aquel Guardaespaldas hizo lo impensable, sacó a Yami de su sillita, me lo dio a cargar por lo que lo vi confuso y después me abrazo por la cintura un poco fuerte.

-- ¿Qué está haciendo?. -- Pregunte al ver que me estaba calmando.

-- Calmarlo. -- Me dijo.

--¿Por qué?. --

-- He sido entrenado y capacitado para proteger a mis señores de diferentes maneras, por ejemplo si usted se encontrará en peligro, si alguien lo amenazara con un arma de fuego o punzo cortante, yo saltaría a protegerlo, tanto física, mentalmente y verbal. Si usted tiene enemigos, ellos son mis enemigos tan bien. -- Dijo. -- Sin embargo, si mi señor no tiene idea de que hacer en cierta situación puedo darle mi opinión de lo que debería hacer y eso incluye regañarlo si ha hecho algo mal. Por último y déjeme hacerle saber que mis sentimientos no pueden interferir en mi trabajo, pues va en contra de lo que me han enseñado y tendré que reportarlo con el jefe y seré despedido. Así que Señor Yugi, ya lo sabe. --

Al escucharlo solo pude entender  que él era como mi propio robot que estaría ahí para ayudarme en lo que sea y si me equivocó me llamara la atención y será informado hacia aquel abogado que creo lo contrato.

-- Esta bien. -- Es lo único que puedo decir, aún que tenía mis dudas. -- Entonces yo, ¿puedo pedirte lo que sea?. --

--Mientras no sea ilegal, puede pedirme lo que sea. -- Me dijo de nuevo.

-- Okey, entonces, esto es lo que quiero. -- Me gire a verlo. -- Deja de llamarme señor, no estoy tan grande para que me digas así ;Solo llamame por mi nombre y no estoy esperando a que actúes como un robot frente a mis ojos o frente a Yami, solo haz tu trabajo y siéntete libre de hacer tu trabajo cómo comúnmente lo haz hecho siempre. --

Esto último lo dije con duda, la verdad es que no sabía como Haku trabajaba, pero parecía que le habían prohibido hacer varias cosas. O eso yo presentía.

Al decir mis condiciones, vi como le brillaron los ojos a Haku.

Mire el contador del elevador, ya mero íbamos a llegar al piso treinta y los nervios volvieron.

-- ¿Debo de saber otra cosa antes de enfrentarme con aquellos ejecutivos?. --

-- Por favor, sonría, salude cortesmente y de su más sincera opinión acerca sobre los proyectos, si no sabe de qué están hablando los ejecutivos, puede preguntarle a la señorita que estará a su lado derecho. Ella es una aliada de la compañía, ya la conocerá más adelante si usted se lo permite. --

--¿Y cómo se llama?. -- Pregunte con curiosidad, parecía que Haku hablaba muy bien de ella, si era aliada y era buena persona debía de conocer su nombre.

-- Su nombre es Mana y es diseñadora de modas. Es aliada de la compañía  y amiga del señor Atem desde hace 5 años. --

¿Son amigos desde 5 años?, ¿Cómo es que Atem no me dijo nada con respecto a ella?, ¡yo era su amigo y nos contábamos todo!, creí que teníamos la suficiente confianza para contarnos todo. Ya veo que no era así.

-- Entiendo, entonces solo entro a la reunión, me presento, me siento, escucho doy mi opinión, si tengo una duda le pregunto a la Señorita Mana y después salgo de ahí. ¿Es un buen plan cierto?. --Me dirijo a él.

-- Sí, un buen plan. -- Me contestó viéndome fijamente, sus ojos tan azules me veían con un extraño brillo, por fin las puertas del elevador se abrieron, Haku se alejo de mi y me indico que saliera de la cabina.

En cuanto salimos nos topamos con tres personas que realmente tenían cara de que me iban a matar.

Enseguida Haku se puso en frente de nosotros y me susurro que todo estaría bien.

-- ¿No creen que son demasiado hostiles con el nuevo jefe?.-- Enfrento Haku a esas tres personas.

-- Solo queríamos saber quien era el nuevo esposo de Atem. -- La primera en hablar es una morena con rasgos finos, cabello castaño, ojos verdes y mirada seria, realmente presentía que aquella mujer se me quería hecha encima y asesinarme.

-- Por mi parte puedo ver que es alguien... Lindo. -- Sobre el hombro de Haku pude ver a un hombre que se parecía mucho a Atem, él era moreno con ojos rojos, el cabello tricolor, sus rasgos parecían ser más maduros, tendría unos 40 años creo yo.

-- Yo solo me acerque para saludar a Yugi. -- Reconocí la voz de Seto. Me alegre al verlo, una cara familiar, ¡por fin podía ver una cara familiar!.

--¡Seto!. -- Dije el nombre del castaño y salí para saludar a mi amigo, en cuanto lo hice las dos personas restantes jadearon de sorpresa al ver a Yami entre mis brazos y los murmullos entre ellos comenzaron.

-- Él tiene al bebé. -- Dijo el hombre.

--Carajo, entonces si era cierto. --Dijo la castaña.

Me dirigí a Seto, este me saludo de mano y acaricio la cabeza de Yami con gentileza.

--La junta empezará en cinco minutos, ¿quieres que te acompañe a dejar a Yami a la guardería?. -- Se ofreció.

-- No, de hecho, quiero que se quede en la junta. -- Dije.

Otro jadeo salió de los labios de aquellas dos personas, Seto me abrazo por el hombro y acepto a que Yami se quedara en la junta, mientras tanto Haku se limitaba vernos mientras nos aleja vamos, me di cuenta de su mirada, parecía estar...

Mirando mi trasero...

-- Haku. -- Lo llame, el salio de su estupor y me siguió hasta quedarse a mi lado.

-- Lo siento, me distraje. -- Me dijo.

Inevitablemente solté una carcajada mientras nos adentrabamos a la oficina donde sería la junta.

*Continuará...