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Capitulo 5

Era una nueva mañana en Paris y el rubio favorito de todos se levanto con los ánimos al máximo, tenia sesenta horas aproximadamente para planear una cita perfecta y entre eso solo tendría sus pocos ratos libres para poder transformarse y lograrlo.

Su mañana fue tranquila, según Nathalie le informo su padre estaba muy ocupado en el trabajo así que lo mas probable es que no lo viera en un par de días, lo que normalmente lo entristecería pero significaba que tendría un par de horas extras al día así que estaba contento.

Al llegar a la escuela no fue el único en notar como una exageradamente emocionada Alya acosaba con preguntas e ideas de quien sabe que cosas a una Marinette sumamente nerviosa por algún asunto que solo ellas dos conocían.

Todos estaban muriéndose de la curiosidad pero por petición de Marinette su mejor amiga no dijo nada sobre el asunto que las tenia en ese estado de animo, que si bien era propio de ellas en esta ocasión parecía ser algo mucho mas grande.

Al notar que ni siquiera la vieja chismosa que tenia por mejor amigo consiguió sacarle información a las chicas el rubio simplemente se rindió y todo el día estuvo haciendo pequeños apuntes y garabatos en sus cuadernos sobre cada detalle de la cita que tendría con su lady.

Esas palabras aun sonaban demasiado irreales, la sola idea de que ella le había correspondido por fin hacia que se cuestionara si estaba despierto, ni siquiera en sus mejores sueños las cosas parecían tan perfectas por lo que no iba a negar que tenia un poco de miedo pero este se veía opacado por la emoción y la felicidad que experimentaba al mismo tiempo.

El día se termino rápido, el maestro de esgrima se enfermo y su maestro de chino estaba de vacaciones por lo que tenia bastante tiempo libre, así que después de pasar un par de horas en casa de Nino jugando videojuegos llego a su casa para transformarse, tomando una pequeña bolsa con dinero en efectivo, ahí era cuando agradecía ser rico y poder reservar un lugar para estar solos.

Se escabullo por la ventana y entro por una de las puertas de servicio a el Gran Paris donde Jean ya lo esperaba.

-Buenas tardes Chat noir- saludo el hombre con la libreta de reservaciones especiales del hotel en mano y divertido por el exceso de emoción del héroe.

-Hola Jean, bueno, creo que es hora de poner el plan en marcha- dijo feliz y listo para tener las cosas a la perfección.

Mientras tanto en otro lado de Paris, una chica de coletas estaba siendo sofocada de preguntas e ideas por parte de su mejor amiga que no dejaba de dar vueltas en la habitación de la primera pidiéndole sugerencias a los kwamis.

-Ok, entonces como no se van a tocar temas que revelen sus identidades obviamente no puedes mencionar que estas en la escuela, pero es obvio que tenemos cerca de la misma edad así que si puedes mencionar temas sobre la situación estudiantil, un momento, no hemos elegido un atuendo ¿alguna idea chicos?- pregunto la morena mirando a los kwamis.

-¿Talvez el nuevo vestido elegante que Marinette confecciono?- pregunto Daizzy.

-Mmm, demasiado elegante, es una primera cita.

-¿Su ropa casual?- sugirió Xuppo.

-Tampoco, es una ocasión especial, tiene que haber un avance necesita ser perfecto- dijo la reportera para luego vaciar el closet completo de la chica intentando encontrar un atuendo apropiado.

-Alya, creo que se te olvido que iré como Ladybug y usare mi disfraz- dijo la chica viendo como su mejor amiga sacaba ropa que ni recordaba que existía.

-Tienes razón- dijo separándose de la montaña de ropa que había dejado y tomando el libro de los miraculous -¿Tikki tienes idea de como cambiar el aspecto del traje para una ocasión especial?- tanto la kwami cómo su portadora suspiraron cansadas.

Se supone que Alya estaría ahí para preparar a Marinette y darle confianza pero parecía que ella era la que tendría la cita y que estaba por explotar en un ataque de ansiedad.

Al día siguiente hubo la aparición del clásico de Shadow Moth, el señor pichón, los héroes no entendían porque el villano seguía usando al señor Xavier pero no le dieron mucha importancia y se pudieron a derrotarlo.

Las batallas contra ese akumatizado solían ser muy cortas lo que en esta ocasión fue una excepción, al parecer aprovechando lo fácil que era derrotarlo, los héroes parecían mucho mas... sociables de lo normal.

Muchos parisinos fueron testigos de como Chat noir volvía a la cantidad de coqueteos hacia la heroína como no se había visto en meses e inclusive muchos mas, rompiendo en ocasiones el espacio personal, pero la gran sorpresa para todos fue ver como Ladybug se sonrojaba y soltaba alguna risa tonta o incluso como le regresaba los coqueteos.

Después de aproximadamente 30 minutos de ignorar casi por completo al villano y perdidos en su mundo, al parecer sin notar como varias personas los grababan, por fin los superhéroes se enfocaron en derrotar al villano cosa que lograron en poco menos de 5 minutos.

Al finalizar chocaron los puños como era costumbre pero en esta ocasión el chico entrelazo los dedos de su mano con la mano de la heroína quien con una sonrisa hizo los mismo pero al ver a lo lejos a unos cuantos civiles grabando se apeno y se separo rápidamente lo que solo hizo que su compañero riera.

Fue cuando el confundido hombre amante de las palomas se les acerco un poco confundido pero estando casi seguro de lo que había pasado que ellos salieron de su burbuja.

-Siento mucho que esto se allá repetido Ladybug y Chat noir- dijo el hombre arrepentido -¿Aceptarían un helado como disculpa?- pregunto ofreciendo lo que ya se había vuelto una tradición entre ellos.

En ese momento los aretes de la chica emitieron un pitido, tenia dos minutos.

-Lo siento mucho pero creo que será en otra ocasión- dijo agitando la mano y el hombre entendió, volteando a ver al chico.

-Lo siento pero tampoco tengo tiempo, además de que ocupo terminar algo- dijo recordando los deberes de cinco días que había dejado acumulados.

-Lo entiendo, muchas gracias por todo de cualquier manera- dijo el hombre para luego alejarse.

La heroína estaba por irse así que tomo el yoyo de su cintura y estaba por lanzarlo cuando sintió la mano de su compañero en el hombro reteniéndola.

-Espero que no hayas olvidado estar lista para mañana- dijo con una sonrisa coqueta que sonrojo a la chica.

-Nunca lo olvidaría, hasta mañana en la noche mi gatito- dijo lanzando su yoyo y mandándole un beso mientras se alejaba.

-Hasta mañana m'lady- dijo con una sonrisa de enamorado viéndola alejarse, si que se saco la lotería con esa chica.

El chico llego a casa contento y se destransformo para luego acostarse feliz en su cama viendo como su kwami se dirigía a por un trozo de su preciado queso camembert.

-Pareces muy confiado chico- dijo el kwami acercándose a su portador.

-Lo estoy Plaga, la cita esta lista, todo esta preparado y Ladybug por fin parece enamorarse de mi, creo que nada podría arruinar mi humor en este momento.

Nunca hay que decir esas palabras.

En ese momento la puerta del cuarto del chico fue abierta de golpe por su padre que parecía bastante enfadado y la rapidez del momento hizo que el kwami apenas alcanzara a esconderse dejando su queso encima de la cama del chico.

-Me entere de que tus clases se cancelaron Adrien, sin embargo tu llegaste a casa a la hora normal ¿podrías explicarme a que se debe esto?- pregunto el hombre con un tono de voz molesto y acercándose a su hijo.

-Y-yo asumí que como tenia algo de tiempo libre podría usarlo para mi, así que fui a casa de Nino y jugué un rato videojuegos con el- dijo el chico pero un golpe en la cara por parte del hombre lo hizo callar.

-Eses es el problema contigo, siempre asumes cosas que no están bajo tu jurisdicción, tienes que entender de una vez por todas, sin mi permiso no tienes permitido ir a ningún lugar ¿quedo claro?

-Si padre- dijo el chico aun con la cabeza baja, sentía sus ojos cristalizarse pero sabia que si dejaba ver indicios de llanto solo enfadaría mas a su padre.

-Ponte a practicar tus lecciones de piano unas horas mas y después ve a dormir, no quiero enterarme que volviste a desobedecerme- dijo con un tono de voz serio para luego salir de la habitación.

Cuando esto paso el chico se sentó en su cama con ganas aun de llorar pero soportándolas y viendo como su kwami preocupado se acercaba queriendo ver el lugar del golpe.

-Estoy bien- dijo alejando un poco al pequeño gato.

-Por supuesto que no lo estas Adrien, tu padre esta llegando muy lejos, no voy a permitir que siga haciéndote esto- dijo el kwami furioso.

-Plaga por favor no intentes nada, mi padre solo esta estresado ya pasara, y si dejo que se desquite conmigo las demás personas no tendrán que sufrir tanto, es temporal, estaré bien- dijo con una sonrisa algo forzada mirando a su kwami que lo vio no muy convencido.

Si Gabriel Agreste no se controlaba conocería el poder de la destrucción en todo su esplendor.

Al día siguiente los ánimos eran distintos, ambos chicos se notaban emocionados y nerviosos durante clases y eso despertó el interés de muchos de su compañeros que no pudieron obtener información alguna.

 Para Adrien el día paso cumpliendo sus responsabilidades lo mas rápido que podía para después dirigirse al Gran Paris para revisar que todo estuviera en orden, regresando a su casa para reportarse y mentir diciendo que dormiría temprano por que fue un día cansado, pidiendo que no lo molestaran y regresando el lugar.

En cambio Marinette se la paso con tantos nervios que ni siquiera pudo remarcar bocetos de algún diseño en su libreta, recibiendo el poyo constante de Alya que le aseguraba que todo estaría bien, llegando a su casa a practicar ejercicio se respiración para ayudar a calmarse y practicar las cosas que diría en la cita y sobre que cosas hablaría.

La hora finalmente llego y en cuanto el cielo de Paris dejo ver las primeras estrellas ambos chicos salieron de sus hogares rumbo a su punto de encuentro habitual en uno de los tantos tejados de Paris.

-Buenas noches m'lady- saludo el héroe una vez vio a la chica aterrizar.

-Buenas noches- dijo nerviosa, en que rayos estaba pensando Alya al querer vaciarle el bote de perfume encima si su cita tenia un olfato mejorado, cuanto agradecía solo dejarla ponerle un poco.

-Estas igual de hermosa que siempre bogaboo ¿Qué te parece si hoy te llevo yo?- pregunto sin darle tiempo a la chica a responder y tomándola por la cintura para después cruzar por los tejados de Paris.

La heroína rodeo con sus brazos el cuello de su compañero y disfruto de la vista recargando la cabeza en el hombro del chico hasta que llegaron al tejado de un edificio frente al hotel mas famoso y lujoso de Paris.

-Hemos llegado- dijo dejando a la chica en el piso un momento pero aun sujetándola de la cintura.

-¿T-tu alquilaste una habitación de hotel?- pregunto la heroína sin procesar las cosas.

El chico le iba a responder pero luego miro la cara completamente roja de su acompañante y entendió lo que ella estaba pensando.

-¡No es eso!- exclamo avergonzado -Estaremos en la terraza no te preocupes, esta todo preparado- dijo apenado por la confusión para luego volver a cargar a la chica y aterrizar en la azotea del lugar donde apenas tocaron el piso todas las luces se encendieron.

La chica observaba cada detalle del lugar asombrada, en verdad se veía todo muy elaborado, pero en eso un pensamiento se hizo presente en su cabeza, el Gran Paris por lo general solo admitía celebridades, y puede que ellos sean superhéroes pero aun así es ridículamente caro el quedarse una noche en cualquier habitación, no se imaginaba cuanto costaría alquilar toda la terraza y organizar todo eso, aunque decidió no preguntar, si obtenía esa información sabia que su mente se pondría a investigar demás.

-Bonjour mademoiselle Ladybug, monsieur Chat noir- saludo el mayordomo que termino de acomodar unas cosas.

-Buenas noches Jean- saludo el chico al hombre quien se dirigía al ascensor.

-Deje todo listo tal cual me lo pidió, si necesitan algo no duden en llamarme- dijo subiendo al elevador y yéndose del lugar.

-Creo que ya se quien es tu amigo- dijo la heroína riendo un poco.

-¿Que puedo decir? Ser un héroe te da la oportunidad de conocer a muchas personas- dijo acercándose al barandal y siendo seguido por la chica.

-Es hermoso- dijo la heroína recargando sus codos en el barandal y observando la maravillosa vista que el hotel ofrecía de la noche parisina.

-Lo es- dijo el rubio enfocando su vista en su compañera mas que en la vista siendo notada por esta que miro a otro lado sonriendo sonrojada.

-Alguna vez ¿has pensado como seria la vida si no fueras superhéroe?- pregunto la chica luego de varios minutos de una charla casual.

-Oh por dios no- dijo el dramatizando y haciendo reír a la chica -A decir verdad, no creo que fuera feliz- dijo son una sonrisa algo deprimente -Ser Chat noir me dio la confianza para hacer cosas como civil que jamás hubiera hecho, sin ellos mi vida seria bastante aburrida, además combatir villanos y tener superpoderes es la tercera mejor cosa que me ha pasado, la segunda fue ser nominado al chico mas guapo de Paris- dijo sacándole una carcajada a su compañera.

-Dejaste en segundo lugar a Adrien Agreste, toda una hazaña- dijo recordando como aun con el segundo lugar su amigo parecía doblemente orgulloso de si mismo -¿Y cual es la mejor cosa que te ha pasado?- pregunto finalmente.

-Haberte conocido- dijo con una sonrisa sincera viendo como la chica adquiría un color rosa en sus mejillas que la mascara apenas dejaba ver.

-También me alegra haberte conocido- dijo casi en un susurro que el chico escucho perfectamente haciendo que se acercara mas a la chica abrazándola por un lado.

-Me encantaría poder quedarme así para siempre- dijo el chico abrazando a la ojiazul que solo sonrió enternecida-

Pero el momento fue acabado por un sonido proveniente de la panza del chico el cual indicaba que claramente tenia hambre y ahí fue cuando el recordó que llevaba mas de 8 horas sin comer.

-Creo que tu estomago no piensa lo mismo- dijo la chica riendo para luego separarse del abrazo y acercándose a la pequeña mesa que había con un par de bandejas de comida encima -Vamos gatito, no querrás que la comida se enfrié- dijo para luego ver como el chico contento se acercaba.

La cena paso sin mas que algunas bromas, comentarios casuales y algunos datos pequeños sobre la vida del otro, un momento lindo que no necesitaba de mas.

Y el ambiente no se fue aunque Chat noir casi se ahogara con un pedazo de zanahoria y Ladybug riera hasta que le doliera el estomago.

Porque cuando encuentras a una persona con la que tienes tal vinculo de confianza cualquier cosa de ella te hace puramente feliz.

-¿Y alguien sabe tu identidad?- pregunto la chica cuando ya estaban terminando.

-En realidad no, he pensado en revelársela a mi mejor amigo porque creo que el desconfía y hay ocasiones en las que me vendría bien una mano pero no estoy seguro de querer involucrarlo en mis movidas- dijo recordando que Nino era Carapace pero aun así no quería exponerlo de mas.

-Tuve el mismo problema, la chica detrás del antifaz de Scarabella es mi mejor amiga y tuve mucho miedo de involucrarla pero creo que salió bien- dijo liberándose de un secreto menos.

-La verdad es bastante agradable, aunque creo que ella estaba incluso mas emocionada que yo cuando empecé- dijo divertido recordando la actitud de la chica.

-Le di tantos consejos y no leyó ninguno, se dejo llevar por sus conocimientos de comics- dijo recordando todo ese día.

-Fue bastante divertida a decir verdad- dijo con una sonrisa con algo de nostalgia -¿Alguna otra confesión antes de terminar bogaboo?- dijo medio en broma pero al parecer la chica se lo tomo en serio.

-En realidad- dijo nerviosa -Tengo a Alya Cesaire trabajando en secreto como Rena Fourtive, le hice creer a Shadow Moth que ya no estaría activa para que en batallas donde el se pueda presentar ella lo siga, talvez así podríamos descubrir su identidad, perdón por no decírtelo antes- confeso apenada y esperando no arruinar la noche con eso.

-Ladybug- dijo el chico llamando su atención -En verdad lo entiendo, y siendo sincero me parece una técnica muy efectiva e inteligente, eres asombrosa y me alegra que me lo hayas contado, yo entiendo que necesitas tiempo- dijo posicionando su mano sobre la de la chica.

La chica lo vio con ojos cristalinos, no entendía como el podía ser tan ridículamente comprensivo con ella, definitivamente estaba loco pero lo quería tan loco por ella como lo estaba y no le cambiaria absolutamente nada. No tardo en levantarse y acercarse a el para abrazarlo.

-No te merezco- dijo poniendo su cabeza sobre le pecho del chico.

-Tu te mereces el mundo m'lady- dijo abrazándola de vuelta para después separarse y regresar a sus lugares para continuar con la cena.

Los héroes terminaron de cenar y siguieron platicando lo que podían sobre sus vidas cuando ambos escucharon el típico canto del heladero de los enamorados que al parecer pasaba al lado del hotel.

-¿Te gustaría un postre m'lady?- dijo el chico extendiendo la mano y su compañera solo asintió y la tomo para luego ser cargada por el héroe hasta la calle frente al hotel donde no se separaron sino que la chica tomo valor y paso su brazo bajo el de el rubio entrelazándolos.

Esto sorprendió al chico al principio pero después solo sonrió y ambos se acercaron al hombre con el carrito que no dudo en detenerse al visualizarlos.

-¡Chat noir, Ladybug!- exclamo el heladero feliz de ver a los héroes de nuevo -Un gusto que vengan conmigo, como siempre- dijo para luego mirar con curiosidad los brazos entrelazados de los chicos.

-Hola André- dijeron los dos con algo de pena pero aun así sin separarse.

-¿Sera lo de siempre?- pregunto sacando un barquillo pero quedándose mirando a la heroína antes de empezar- Aunque noto algo diferente, a la joven Ladybug ya no le va la menta con durazno- dijo y la chica se puso nerviosa.

Mientras veía como su compañera intentaba explicarle nerviosa las cosas a el heladero el chico solo pudo sonreír enternecido, talvez le dirían que era muy crédulo o infantil pero el en verdad creía en el helado del amor de André, y ver que la chica que le gustaba en realidad había olvidado a la persona que le gustaba antes y le estaba dando una oportunidad le hacia muy feliz.

-En realidad André- dijo interrumpiendo a la chica que se estaba quedando sin aire -Esta vez será uno solo para los dos- dijo un poco sonrojado y sorprendiendo a heladero y apenando a la chica que se escondió tras el brazo del rubio.

-El amor por fin emergió, puedo verlo mas claro que el agua- dijo el hombre emocionado apenando a ambos héroes -Fresa con chispas de chocolate, pistacho y nuez y mora azul con chispas verdes- dijo entregándole el helado a los chicos que sonrieron por la clara referencia a sus atuendos como superhéroes y al color de sus ojos.

-Gracias André- dijeron los dos al mismo tiempo y cuando la chica tomo el helado el ojiverde se apresuro en sacar el dinero y ponerlo sobre el carrito para luego tomar a su acompañante por la cintura y subir rápidamente al tejado.

Había muchas personas que solo por el hecho de ser superhéroes elegían no cobrarles las cosas que compraban y André era una de ellas por lo que se acostumbraron a dejar el dinero y salir corriendo antes de que los regresaran.

Los chicos rieron un poco al escuchar los reclamos del hombre que les aseguraba no debían pagar pero ya era tarde, y ambos se sentaron a orillas del edificio para poder disfrutar de su helado, la chica se sonrojo cuando ambos estaban por tomar la misma cuchara.

-Se supone que quien comparta un helado de enamorados de André será feliz con la persona con la que lo comparte para el resto de la vida- dijo el chico recordando esa pequeña leyenda local.

-Solo si ambos creen- dijo la chica en bajo -Y creo que yo decido creer- dijo sonriendo y desviando un poco la mirada.

-Yo siempre he creído- dijo el héroe acercándose un poco mas a la ojiazul que empezaba a ponerse un poco nerviosa.

-Creo que nos estamos encadenando- dijo nerviosa metiéndose otra cucharada de helado a la boca.

-Sera un placer pasar el resto de mi vida a tu lado bogaboo- dijo dejando un beso en la mejilla de la chica que se sonrojo.

Unos minutos mas para terminarse el helado y ambos chicos decidieron despedirse e irse cada quien a su hogar.

El rubio fue saltando por los tejados y realizando piruetas lleno de felicidad por el éxito de su cita con el amor de su vida, llegando a casa para acostarse en su cama sonriendo como idiota y sin poder dormir en horas por estar recordando cada segundo de la noche que había tenido.

Siendo finalmente convencido de dormir por su kwami que amenazo con embarrarle un queso camembert completo en el cabello durante el día siguiente en la escuela.

La azabache por su parte fue todo el camino a casa con un ligero sonrojo y muy contenta con todo lo que había pasado, llegando a su balcón para destransformarse y caer en su cama, enterrando la cara en la almohada y gritando de felicidad ahogando sus gritos.

-Parece que enserio te estas enamorando de Chat noir Marinette- dijo Tikki siendo secundada por el resto de kwamis.

-Debo admitir que el gatito tiene sus trucos- dijo la chica contenta y yéndose a dormir con el peluche que ella misma había hecho de su compañero entre sus brazos.

Todo parecía tomar un rumbo maravilloso.



Sali del bloqueo y las ocupaciones :D

Se me había olvidado que yo solo podía escribir estas cosas de madrugada asi que hoy me desvele para hacerlo, mañana con suerte actualizare las aventuras de Chat noir y Scarabella y sino será hasta dentro de dos días.

Voten, comenten su parte favorita que siempre los leo, compartan para llegar a mas personas y nos vemos después.

-LazuliMine

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