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Era una fría mañana en el hospital nacional de Japón, allí se encontraba una madre leyendo un libro en voz alta para su hijo que estaba en coma. Esa mujer no era ni más ni menos que la madre de izuku, inko, quien desde hace un tiempo visitaba a su hijo para leerle libros y hablarle, con la esperanza de que este pudiera escucharla. Estaba apunto de irse cuando escucho algo, la débil voz de su hijo llamándola. Como si fuera lo más importante en el mundo inko se acercó a su hijo, quien lentamente abrió sus ojos con algo de esfuerzo.
Izuku estaba desorientado, hasta hace un instante estaba hablando con una tal ochako uraraka, y ahora ni siquiera podía mover su cuerpo. Un destello rojizo hizo que perdiera la visión y cuando intento abrir los ojos para recomponerse sus párpados le parecían realmente pesados. Lo único que pudo oír no fue la voz de ochako, sino la de su madre, despidiéndose de él y comenzando a salir de la habitación. Lo único que pudo hacer fue reunir toda la fuerza que le quedaba, y en un intento desesperado la llamo.
Izuku: ma- ma- mamá‽‽
Inko: uh? Izuku!! Izuku estás bien?!
Izuku: mamá? Dónde estamos?(ya se que estamos en el hospital, ¿izuku? A qué viene ese nombre?)
Inko: estamos en el hospital, espera aquí, traeré al doctor!
Izuku:bien(me preguntó que habrá pasado en estás seis semanas.)
Izuku continuo observando la habitación en lo que su madre traía al doctor. Pensaba en todo el tiempo que había pasado dentro de su mundo, lo que fueron seis semanas para él fueron cerca de seis o siete años, esperaba poder recordar todo lo que necesitaba saber sobre el mundo real. Cuando su madre volvió estaba con una doctora algo vieja y un detective. Con algo de esfuerzo pudo recordar quienes eran los personajes luego de que se presentaron como el detective naomasa y la heroína recovery girl. Está última le hizo un chequeo rutinario al joven, comprobando que estaba en perfecto estado, claro para alguien que acababa de salir de un coma. solo había errado en una pregunta, su nombre, inko se preocupo al instante por posible daño cerebral. Pero rápidamente izuku cambio su respuesta de zuk, su nombre como baku, a izuku, el nombre que su madre no paro de repetir desde que despertó.
Recovery: parece estar bien, aunque mañana vendrá un psicólogo a realizar algunos exámenes por el intento de suicidio, probablemente le cueste recordar cosas, así que no lo presione demasiado tesukaushi-kun.
Naomasa: bien, señora mido...- paro antes de decir el apellido del ex esposo de la mujer- señora choo, puede salir necesito interrogar al joven.
Inko salió a regaña dientes, no quería dejar a su hijo otra vez. Con la mujer fuera el detective se acercó a izuku, quien tenía las manos esposadas a la camilla. Saco una carta de uno de los bolsillos de su abrigo. La carta era blanca y en ella había rastros de sangre. Le tomo un tiempo pero izuku pudo reconocer la carta, acaso esa era la carta de suicidio que había escrito durante el tiempo que espero a los invitados de su padre.
Naomasa le explicó al joven que encontraron la carta, junto con su cuerpo, en su habitación, y que su intento de suicidio fue frustrado por una lámpara inestable. Izuku entonces se tocó la cicatriz en su cuello, le estaba doliendo. Luego de un breve interrogatorio el detective le dijo las opciones que podría llegar a tomar, a lo que izuku tuvo claro lo que tenía que hacer.
Izuku: no quiero presentar cargos, bakugo puede ser un buen héroe si se lo guía de una manera adecuada, para que dañarle tal oportunidad?
Naomasa: y tu padre?
Izuku: no quiero nada que ver con el, a demás no planeo quedar en Japón mucho tiempo, quiero viajar a Francia.
Naomasa:ya veo, entonces me retiro, espero que su sueño de viajar a Francia se cumpla, adiós.
Izuku estaba seguro de su decisión de irse de Japón para vivir en Francia, se podría decir que volvería a sus raíces. Durante el día baku no está en servicio, por lo que tenía 12 horas libres, que generalmente utilizo para leer y aprender diversos artes, como tocar el piano. En una de sus lecturas se topó con la familia Lestrange, una antigua familia francesa que su apellido se perdió con el paso de las generaciones. Su interés fue tal que el baku busco entre los registros el árbol genealógico de los Lestrange. Entonces descubrió el nombre completo de la amada de su maestro, Gumillia Leta Lestrange, también su hermana, Michelle Margaret Lestrange. Siguiendo con el árbol genealógico descubrió dos cosas, una, de esa familia nació el primer humano con quirk. Y dos, su madre ,y por lo tanto él, son descendientes de Michelle Lestrange.
Izuku: esa frase... La he dicho tantas veces, naomasa-kun, que tus sueños se cumplan, mejor dicho que los hagas realidad.
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