Miércoles 10 de marzo

Desde aquella mañana que lo vi por primera vez, supe que había quedado perdidamente enamorado de él.

Todas las mañanas, tomaba el segundo tren con intención de verlo, y siempre vestía mis mejores ropas para impresionarlo y pensara que era lindo. Nunca fui alguien con mucha autoestima y parte de eso, me impedía acercarme a él y entablar una conversación decente.

Por ello, siempre lo observaba de este lado del vagón, por eso, no había tenido el valor de entregarle personalmente su cuaderno, y por eso, había sentido rabia y tristeza al verlo con un chico lindo y tan adorable como lo era su hermano.

Kim SeokJin, el chico introvertido y poco sociable se habia enamorado. Y como cada mañana, prefirió observar al chico de sus sueños, en lugar de hablarle, prefirió mirarlo a hurtadillas, que ser valiente y mirarlo de frente. Porque si, yo sabía que él lo sabía, y mirarlo directamente a los ojos, sólo hacia que mis nervios explotaran y mis entrañas se retorcieran.

Yoongi había provocado sentimientos en mi que pensé nunca experimentaría. Y se había encargado de avivar el fuego en mi pecho cada mañana, con sus miradas, sus sonrisas y sus palabras no dichas.

Algo dentro de mi gritaba que me acercara a él, que tuviera el valor de hablar con él, porque el tiempo no es eterno y pasa como un suspiro. El tiempo no se detiene y por mas que lo deseemos, no nos espera. Pero como cada mañana, guardo silencio y bajo del tren sin decir nada de nuevo, me giro y lo observó a través del cristal y sonreímos, porque sólo así somos capaces de algo, porque ni él ni yo somos valientes para hablar de frente con el otro.

Preparen sus pañuelos 😭

El final se acerca...

✿Kim☆Palomita✿