Dos días habían pasado...

JiMin no salía del apartamento y YoonGi se tomó esos días para calmar a su asustado Omega.

- Cielo...- le llama y le entrega un té de manzanilla con menta. El Omega está en la cama, sentando junto a su cachorrito. Según su estado asustado, JiMin temía que el hombre malo se llevara a su bebé, y no lo había dejado solo, después de dormitar un momento sobre el cuerpo del Alfa.

JiMin mira la taza, y suspira, la toma entre sus manos aspirando el aroma.
YoonGi se sienta a su lado y lo observa en silencio.

- ¿Te sientes mejor?- pregunta luego de unos minutos. JiMin asiente sin decir nada.- Tengo una propuesta... ¿quieres escucharla?

JiMin le mira curioso. Y en ese momento cierto cachorrito también lo observa.

"Para tu información, Kookie, papá Omega fue mío primero..."

- Debemos ir a la casa de tus padres...- JiMin se angustia- No irás solo, iré contigo, irá Kookie...

- Ellos le harán daño, Alfa...- está a nada de llorar. Teme lo que sus padres puedan hacerle a Kookie o a Yoonie... ¿y si nunca más lo dejan salir?

YoonGi toma su mano.

- Escuchame atento- pide suavemente. JiMin encuentra calma en los ojos de su Alfa- Podemos hacerlo, pero habrá una condición... y puede ser muy atrevido de mi parte, porque no he terminado de cortejarte, si vamos, será necesario...- suspira y se sonroja levemente- ... que lleves mi marca...

JiMin le mira sorprendido, no esperaba esa alternativa. Mira a su cachorro y sabe que YoonGi no lo dice para aprovecharse, el Alfa le ha mostrado respeto, no lo ha tocado sin su permiso, ni en sus celos... sabe que es porque desea protegerlo...

Mira a su cachorro, no quiere que lo alejen de ellos... YoonGi y JungKook son su familia ahora.

- Estoy seguro de que seas mi Omega, pero... no se trata de mí, esta es una decisión en la que tienes el control...- YoonGi le dice con una sonrisa. JiMin asiente en silencio...

Sabe que un buen Alfa usa la marca para defender a su Omega, o a su pareja. La marca de enlace no es en sí un atadura, al menos eso escuchaba JiMin de su abuelo. Una marca limpia, era la forma en que el Omega resistía incluso la voz de mando de otros Alfas, además que el lazo les permitía a sus lobos comunicarse y hacer saber sus emociones, YoonGi no le estaba diciendo que se acostaran directamente, pues una marca podría generarse mientras se relajaban con ambos aromas juntos.

JiMin mira a su Alfa... es cierto. YoonGi es su Alfa...

JiMin mira de nuevo a su bebé, JungKook está acostadito comiendo sus piecitos.

- ¿No volveremos a verlos?- pregunta. Si JiMin es sincero, no desea volver a ver a sus padres, realmente no quiere. Su abuela puede ir a verlo, pero ni siquiera ella lo había visitado en ningun momento... su hermano era un lobo salvaje y no deseaba eso para él ni para su pequeño.

- Si eso quieres, nunca los verás de nuevo- le promete con seguridad. JiMin asiente lentamente...

El silencio entre ambos se prolonga, pero no es incómdo, ambos observan a su cachorro jugar con las sábanas, y reír lindamente.

- Pa... pa...- gatea torpe hasta su papi Omega, haciendo a JiMin tomarlo en brazos, su bebé quiere ser consentido.
Mira de reojo a YoonGi, el Alfa observa la interacción de ambos y su aroma le delata al dejarse sentir emocionado y feliz.
JiMin le sonríe, y JungKook voltea mirando a su padre Alfa, para el cachorro, tanto YoonGi como JiMin son sus padres.

JiMin recuerda, antes de presentarse, sus padres eran los mejores con él, quizás tenían la esperanza de que se convirtiera en Alfa. Desde el nacimiento de su hermano, los primeros cinco años no hubieron diferencias... hasta los diecinueve... se presentó como Omega, un Omega lactante...
Se asustó, la única que lo seguía tratando bien era su abuela, la mujer discutió con su madre muchas veces, por esos días le dejaban comer solo en la cocina, no lo dejaban ir a eventos de la familia ni siquiera podía estar presente, sus padres lo encerraban en su habitación...

Fueron diez meses oculto, hasta que su abuela lo sacó una noche, luego de gritos y acusaciones, y lo envió a Seúl...
Pasó desapercibido, hasta YoonGi...

- Alfa...- JiMin le llama, capturando la atención de su pareja. Le sonríe y YoonGi solo puede pensar en lo bonito que se ve su Omega sonriendo.

- Dime, cariño...- responde suavemente.

YoonGi no era un Alfa intimidante si de su Omega se trataba, en el mundo de los negocios era lo suficientemente serio, y respecto a proteger a su familia era un lobo a la defensiva.

- ¿Me quieres?- pregunta en un susurro, JungKook descansa sobre el cuerpo de papi, mirando a papá Alfa con brillos en sus ojitos.

- Te quiero, JiMinnie...- le dice acariciando la mejilla de su pareja.- El cortejo sé que no ha sido de lo mas tradicional contigo, pero es especial porque puedo estar contigo de nuevo... hay mucho que debemos saber, pero el JiMin que estoy conociendo me hace sentir enamorado... no solo es tu aroma o el hecho de que eres mi destino, es todo tu, tu forma de ser y el amor que has tenido por nuestro cachorro...

JiMin siente sus ojos llenarse de lágrimas, su aroma es aun más dulce, haciendo balucear a cierto lobito.

- ¿Nuestro Kookie?- su voz suena conmocionada.

- Nuestro Kookie...- sonríe YoonGi.

Unos minutos y el aroma a almendras atrae a YoonGi.

- Yoon...- mira los ojos de JiMin- Puedes marcarme... quiero llevar tu marca, Alfa...

Esa era una declaración que no esperaba...