—Estoy enamorada de ti, Taehyung. —confiesa con temor So Hyun.

—¿Qué? ¿Por qué?

—Porque estando contigo he descubierto lo que verdaderamente quiero, lo que es ponerme a mi primero antes que a cualquier persona.

—Tienes dos hijos, So Hyun. Yo tengo dos hijos. Sabes lo complicado que es eso, ¿cierto? No voy a dejarlos por nada del mundo. —se sincera, Taehyung, dándose cuenta de que ella en verdad no piensa en nada más que ella misma.

—¿Me quieres? —indaga la castaña.

—Nada de eso importa si quieres que renuncie a lo que más amo.

—No te pido que hagas nada, tan sólo quiero saber si me quieres.

—Eres hermosa, lo noté desde los primeros instantes en que te vi pero tú tienes no sólo dos hijos, sino un esposo y no voy a romper algo tan significativo de años para tu familia, no por algo que no va a durar.

—Si dices que no va a durar es porque no sientes algo por mi, ¿cierto?

—Si siento algo o no por fin creo que eso seria lo ultimo que debería importarte. 

—Te quiero, en verdad que lo hago y eso es lo único que me importa ahora. Solo quiero estar contigo. 

—Quizá si nos hubiéramos conocido en otro momento, en otras circunstancias, esto de verdad podría tener un rumbo. 

—¿Y si me divorció? ¿Esto tendría un rumbo? 

—Entiende que yo no quiero ser el culpable de que tu matrimonio se arruine, de que tus hijos te odien o algo peor. 

—Entiende tú que yo no quiero estar con nadie más que no seas tú. Mis hijos ya están grandes, ellos bien podrán entender la situación, además, más de una vez te he dicho que las cosas entre Suwoo y yo no están bien, todo empezó mal desde el momento en que nuestro matrimonio fue arreglado. —Quiero estar contigo, por favor, déjame demostrarte que podemos estar bien juntos. 

Las cosas entre la madre de Jin y Taehyung no habían tenido un buen inicio, era más que obvio por la manera en que la castaña se empeño en quedarse a su lado y claro, ese fue el principal error por el cual tiempo más tarde sus hijos comenzaban a quererla por ella siempre estar para ellos convirtiendo aquello que había comenzado como lastima en cariño forzado que más tarde se volvería una petición para que él hablase con sus hijos de ella para demostrarles que él de verdad hablaba enserio y que en verdad quería a su madre. 

Y por supuesto que a partir de ahí todo empezó a salir peor. 

***

—¡Bienvenidos a Pearl Dark! —saludó amablemente el guardia del bar a Yoongi y Taehyung. 

—Gracias. —contestó Yoongi con una leve sonrisa mientras Taehyung caminaba totalmente incomodo entre hombres con ropa interior muy diminutiva o extraña. 

—¿Me puedes decir que hacemos en este antro, Yoongi? —preguntó sin más Taehyung sin saber si matarlo ahora o después. 

—¿Cómo que qué hacemos aquí? Me pediste que te consiguiera las direcciones de los trabajos de los hijos de So Hyun, y ya te di la dirección del mayor y esta es la dirección del trabajo del menor, por eso inclusive te traje a esta hora. 

—Seguramente te confundiste con el nombre. —aseguró Taehyung mientras intentaba buscar la libreta donde So Hyun le había escrito tanto el nombre como una foto de sus hijos, algo verdaderamente afortunado para Yoongi quien podría confirmar que estaban en el lugar correcto y viendo a la persona correcta.

Sosteniendo entre sus manos la libreta con los datos y fotos, Taehyung rápidamente se centró en lo que a él le interesaba, sin embargo, Yoongi no le dio suficiente tiempo para tomar bien entre sus manos la foto de los hijos de So Hyun. 

—Mira, este de aquí. —señaló al más joven mientras Taehyung le daba una mala mirada a Yoongi y sus malos modos. —Es ese hermoso chico de ahí a mitad de la pista de baile con solo un pantalón de vestir y tirantes.  

Dirigiendo de manera breve su vista al centro de aquel antro de mala muerte, Taehyung visualizo al chico más hermoso que jamás había tenido el placer de ver y claro que no fue el único encantado con tremenda vista pues su entrepierna se había puesto más que despierta. 

A mitad del escenario un precioso chico de cabellos negros y lacios colgaba de un tubo de bailarín erotico, mostrando su excelente condición fisica al simplemente sujetarse del mismo tubo con nada mas que la parte trasera de su pierna derecha mientras daba vuelvas alrededor del mismo tuvo con bastante agilidad, bajando muy lentamente por el mismo.

—¿Él, él es Kim SeokJin? —balbuceó Taehyung, total y completamente fascinado con el joven en el tubo enfrente suyo.

—Sí, él es el hijo de So Hyun.

—Yoongi, tengo tres problemas ahora. —murmuró el menor de los dos, llamando la atención de su amigo.

—¿Cuáles?

—Número uno, creó que soy gay —comenzó diciendo —, número dos, creó que me he vuelto a enamorar —continuó sin poder mantener su boca cerrada —, y número tres, creó que es de ese chico. —finalizó como tonto Taehyung, viendo a su mejor amigo sonreír.

—Solo diré que me alegra mucho que por fin puedas ver a otra persona como viste a mi hermana. —Con una palma sobre el hombro de Taehyung, Yoongi sonreía al ver a su cuñado nuevamente ilusionado con alguien después de la muerte de su esposa.

—¿Es posible volverse a enamorar?

—Claro que sí, pero déjame decirte que no va a pasar nada si sólo los miras desde aquí. —Dándole un ligero empujón hacia enfrente, el castaño vio al chico arriba del escenario fijar sus ojos en su cuñado.

—¿Qué dices?

—Ya te vio, diviértete un poco. —le sonreía y volvía a darle un empujón al frente en un intentó porque disfrutará el show del menor.

***

—No pudiste haberte enamorado de otra persona, así como así y cuando ibas justamente a hablar con mis hijos. —sollozó la castaña.

—Yo te dije que no podía ofrecerte nada más que una amistad y un gran cariño. Tú insististe en quedarte a mi lado, con mis hijos. Yo no te lo pedí. —discutía Taehyung.

—Pero, yo te quiero...

—Pero yo quiero a alguien más... —Volvía a confesar el mayor.

—¿Te quiere? —preguntaba derrotada So Hyun y recibiendo rápidamente un asentimiento por parte de Taehyung. —¿Es linda?

—Es sumamente atractivo. —contestaba el pelinegro, notando velozmente la confusión en el rostro ajeno.

—¿Atractivo? —Quiso saber si había oido bien.

—Me enamoré de un chico, So Hyun. —Atrayendo la completa atención de So Hyun, Taehyung se sintió un poco mejor al notar como está no se burlaba de él y mucho menos insultaba.

—¿Cómo se llama?

Callando por un par de segundos, Taehyung abrió la boca, la cerró y volvió a abrirla nuevamente, intentando calmar sus nervios.

—Kim... Kim SeokJin... —respondía, viendo la mirada en shock de So Hyun, la madre del chico con el que actualmente estaba saliendo.

—¿Mi Jin?

—Sí, So Hyun. Yo, yo, lo siento. No sé exactamente como pasó pero... Él me conquistó en cuánto lo ví. —sonrió tontamente enamorado.

Siguiendo exactamente las mismas actitudes de Taehyung, So Hyun sonrió y dijo —No me sorprende, Jin es un imán total de felicidad y amor.

—¿No estás molesta? —preguntaba Taehyung, a lo que ella simplemente negaba.

—Jamás podría estarlo. No cuándo yo misma les hice mucho daño a las personas que más quería por algo que como tú dijiste, no iba a durar. —cantaba algo triste. —Me alegra que mi bebé tenga a alguien tan bueno como tú en su vida, alguien que lo cuide y mime siempre.

—Gracias, So Hyun.

—Solo una cosa, Taehyung. Él no sabe que tú y yo estábamos juntos, ¿verdad?

Negando, Taehyung veía los vellos de sus brazos erizarse.

—Debes decírselo en cuánto tengas la oportunidad correcta, porque si él llega a enterarse por si solo, te va a odiar por habérselo ocultado. —aconsejaba la castaña.

—Ya me odia sin siquiera saberlo. —murmuraba el mayor, recibiendo una dulce palmada en la espalda y un consejo final.

—No tiene motivos para hacerlo, yo fui la causante de todo y sabré aceptar las consecuencias de mis actos pero eso sí, la sinceridad es lo primero en una relación con mi niño, tú sabrás en qué momento ser verdaderamente sincero con él pero recuerda que entre más tiempo tardes, más tardará en perdonarte...