Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

O6.

Viendo los ojos oscuros de Min Yoongi, recorrer cada centímetro de mi piel descubierta, sé bien que está encantado conmigo, sus ojos brillan de manera especial, algo que hace mi piel helarse de arriba hasta abajo.

Inmediatamente como termino mi baile al centro del club, me encamino hasta mi camerino, donde procuro ponerme lo más sensual y perfumado que puedo, puesto que Min Yoongi ha pedido un baile privado conmigo.

-Hoy es el día -le susurro a mi reflejo en el espejo, intentando disipar todas y cada una de las dudas que abordan mi cabeza en cuanto recuerdo los besos calientes y excitantes de Taehyung sobre cada rincón de mi cuerpo -Concéntrate -me digo a mi mismo, mientras que acomodo un par de los cabellos que han caído sobre mi rostro.

Deslizando una de mis manos por mi torso desnudo, me acaricio lentamente con los ojos cerrados, imaginando al hombre más sensual que haya conocido antes para así evitar pensar que estoy a nada de acostarme con el hombre que destruyo la vida de papá, lo cual si lo pienso lo suficiente no tiene sentido, ya qué, tanto mi madre como mi padre nunca se habían llevado bien.

Oyendo un par de toques en mi puerta, sé que todo dentro del privado esta listo, incluido, Min Yoongi.

Una oleada de adrenalina corre por mi cuerpo al cubrir mi casi desnudes con una bata de seda azul claro. Mis manos sudan en cuando giro con lentitud el picaporte de la puerta y comienzo a abrir la misma.

-Entre más me de prisa, antes va a terminar esto -metiendo aire a mis pulmones por cinco segundos, me apresuro a terminar de abrir la puerta, salir del camerino y volver a cerrar esta, conmigo ya estando fuera.

-¿Te sientes bien, Jin? -pregunta amablemente mi compañero de camerino, Jimin.

Sin dudarlo le doy una sonrisa y asiento, dando pasos firmes hasta el privado numero uno, donde tan pronto me adentro, este ya se encuentra a oscuras y con una silla metálica dándome la espalda. Sobre ella, hay un hombre sentado y de el, solo se puede contemplar su cabellera oscura.

-Sabes, por un puto momento creí que tú y yo teníamos algo especial -habla una ronca voz, erizando cada vello detrás de mi nuca.

-¿Taehyung? -cuestiono confundido y hasta algo perdido.

Parándose lentamente de la silla de metal, Taehyung se encamino hasta a mi con una expresión por demás molesta. Tomando y tirando uno de los listones de la bata que traía puesta, sus ojos rápidamente se deformaron al ver mi cuerpo casi desnudo. Abriéndola un tanto más, su vista se posa en mis pezones totalmente erizados, debido al suave roce de la tela de la bata pasar por ellos. Deslizando la bata por uno de mis hombros, fijo mis ojos en los suyos oscuros al sentir como la bata que se encontraba cubriendo mi cuerpo, ahora yace inerte en el suelo negro y frio con mi poca vergüenza dentro de ella -¿En verdad ibas a bailarle así a alguien? -replica con sus ojos negros sobre los míos.

-¿Qué tiene? -lo provoco, al ver como su mandíbula hace presión entre sí.

-¿Qué tiene? -tomándome del antebrazo, Taehyung comienza a jalarme hasta el otro lado de la oscura habitación, haciéndome quedar frente a un espejo de cuerpo completo. Parándose detrás de mi, siento sus dedos apretar levemente mi cintura, rodándome un gemido bajo al instante -Eres mío -susurra, dejándome obsérvalo tan solo desde el espejo frente a nosotros.

-Tú me rechazaste, hoy -menciono con tranquilidad en el tono de mi voz.

-¿Y así es como quieres vengarte de mi? ¿Entregándote al primer hombre que encontraste mirándote de manera tan descarada?

Al parecer, Taehyung había estado observando las miradas que Min Yoongi, me había dado durante todo mi baile.

-¿Con que derecho vienes siquiera a reclamarme? -suelto con molestía fingida, dándole sin más la cara.

-¿Qué parte de "eres mío" no comprendes? -me encaró, sosteniendo dos mechones de mi cabellera, rebeldes -entre su dedo índice y corazón -, colocándolos en la parte trasera de una de mis orejas.

Sosteniendo mi cadera firmemente, sentí su mano deslizarse hasta mi entrepierna, para enseguida darle un ligero apretón por demás experimentado.

-Te-te odio -jadeé con los ojos cerrados.

-Eres mío, Kim SeokJin -me asegura muy roncamente, mientras que me roba el aliento.

Las caricias a mi miembro totalmente duro, me hicieron sentir por demás abochornado. Mi respiración salía cada vez más pesada.

Alzando y afianzando una de mis piernas a su cadera, sentí como velozmente su polla rozaba la mía de manera abrumadora. Un par de espasmos recorrían por completo mi columna vertebral, al sentir como unos besos húmedos se esparcían por mi cuello largo y fino.

-Hazme tuyo -susurro perdido entre los besos, caricias y roces de su persona a la mía.

Soltando mi pierna, siento sus manos rodear mi cadera y enseguida a él guiarme hasta la silla metálica unos metros al lado de nosotros.

Llegando al respaldo de la misma, Taehyung me hizo poner mis manos sobre el respaldo de la misma, quedando mis nalgas frente a su polla erecta. Sujetando mis caderas entre sus fuertes manos, siento como su entrepierna se restriega contra mis nalgas, haciéndome sentir ansioso porque entre en mi cuanto antes.

-No -formula, sacándome un poco de mi excitación -Estás castigado -dice seriamente, apartándose de mi, encaminándose hasta un pequeño sillón donde toma tranquilamente un abrigo negro, volviendo a mi, dejando tan solo un beso casto en mis labios.

-¿Es en serio? -me quejo, observando como emprende sus pasos hasta la salida -Idiota -musito lentamente, contemplando como se detiene y vuelve con pasos largos hasta a mi.

-Una verdadera pena que quieras a este idiota dentro de ti -se burla, tomando con su gran mano uno de mis glúteos -Eres mío, no lo olvides -me recuerda antes de encaminarse de nueva cuenta fuera del privado.

-Maldito.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro