Allison

Los rayos del sol se cuelan por mi ventana, miro el despertador y apenas son las 10:00 de la mañana. Me muevo por toda la cama disfrutando del espacio y al mismo tiempo extrañando la calidez de su cuerpo pegado al mío.

Hace un año que Mateo y yo estamos juntos. Ha sido increíble acostumbrarme a él, a su manera de besarme, su forma de tocarme, como me hace el amor. Son tantos recuerdos que hemos creado que mi mente no puede evitar imaginarse cada momento a su lado. Todas las risas, también los llantos y todo el amor que me demuestra.

Ya hace cuatro meses que comencé la universidad y no podría estar más contenta con la carrera que escogí, estuvo difícil decidirme pero no me arrepiento de la elección. He hecho nuevas amistades, he frecuentado lugares nuevos y también me he estresado muchísimo con los trabajos asignados.

Este tiempo ha sido un período para conocer, aprender y crecer no solo en mi nueva vida como universitaria sino porque  la convivencia con Mateo no ha sido fácil. Nuestras peleas siempre duran muy poco, sin embargo, han sido fuertes, él por sus celos y yo porque no olvido el pasado. Además su personalidad impulsiva ha hecho que tengamos diversos tropiezos aunque los hemos ido superando.

Casi termina este año y solo pensar que comenzaré otro con él me hace sonreír. Todavía me emociono al recordar cuando me pidió que fuera su novia en aquella cita, que parecía que iba a ser la peor en la historia de las citas, para luego convertirse en el inicio de esta aventura. Desde ese día monté en el tren de la locura para transitar por los carriles de su amor.

Me encuentro tan ensimismada en mis pensamientos que no noto cuando mi hermana entra al cuarto. Dejamos de compartir uno desde que empecé la universidad y Mateo comenzó a quedarse con más frecuencia conmigo. Se sienta a mi lado en la cama y le indico que se acueste unos segundos.

— Bella durmiente ¿a qué hora te vas a levantar? —preguntó.
— ¿Y tú desde cuándo despiertas primero que yo un sábado?
— Desde que hoy, me toca limpiar y necesito hacerlo rápido para poder salir después — dijo
— Ya sabía que no era por espontaneidad — agregué levantándome y ella siguió mi ejemplo.
— Solo quería entregarte esto — dijo dándome un sobre blanco — el señor del correo se lo dió al abuelo.
— Que extraño, parece que es de una persona salida de Juego de Tronos lo que no pudo encontrar al ave para enviarlo o ¿será que Hogwarts me está reclamando porque descubrió que soy una bruja?— pensé en voz alta y reímos por mi absurdo comentario.
— ¡Estás loca! — dijo mi hermana todavía riendo — Ya hice mi recado así que iré a adelantar mis quehaceres.
— Gracias — respondí abriendo el sobre.

Me invadió un inexplicable nerviosismo porque nunca había recibido una carta por el correo postal. Enseguida pensé que sería una broma de Mateo, pero a medida que sacaba la hoja que se encontraba adentro pude ver que estaba equivocada.

El remitente era Brian, el hermano de Ariana. Me sorprendí porque no había sabido de él en más de un año, desde que me dejó para irse a Rusia a estudiar.

Comencé a leer.

Querida Allison:

Te quise sorprender y se me ocurrió enviarte esta carta del modo tradicional. Sé que me vas a regañar porque no te he escrito  hace más de un año, desde que nos separamos, pero es que quería dejar pasar el tiempo y que la distancia ya no doliera.

Te parecerá ridículo que no haya utilizado el email o simplemente un mensaje por WhatsApp, pero es que creí gracioso hacerlo por la presente porque siempre estás hablando de que la juventud ha perdido el romanticismo que había antes y me arriesgué a recrear una escena salida de una de las películas que vimos juntos y tanto nos gustó: "Querido Jhon".

Te imagino acabada de levantar y con cara de asombro. Lo único que espero es que no te hayan entrado ganas de llorar o que la rabia te haga romper en pedazos está carta (sinceramente cruzo los dedos para que no suceda). Disculpa por no darte noticias y por prohibirle a mi hermana hablar de mí, se que no hay excusa, solo que no estaba preparado para afrontar nuestra separación.

He pensado mucho en tí y te he extrañado un montón, no sabes lo difícil que ha sido empezar en este país desconocido yo solo. Sin querer aburrirte me despido, nos vemos pronto.

PD: Sé que la curiosidad va a ser mucha y te preguntarás por qué digo que nos veremos pronto, así que para evitar tu ansiedad te comparto que este fin de semana regreso a casa. Pasaré fin de año en familia o quizás más tiempo, ¿quién sabe?

Te quiere y no te olvida, Brian.

No me lo podía creer, después de tanto tiempo, en una simple carta me dice que vuelve a casa y me trata como si no hubiera pasado nada entre nosotros.

Solo lo hace para ocasionar un caos inmediato, es lo mejor que sabe hacer, lo hizo estando conmigo, al separarnos y ahora. Siempre poniendo mi mundo patas arriba.

No entiendo ¿por qué?, ni ¿por qué ahora? ¿Es que ha hecho un plan para arruinarme la vida?