Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Capítulo 5: La advertencia.

Allison

Me desperté porque mi almohada no paraba de vibrar. Eran las 8:30 am del sábado, no entendía porqué Ariana estaba despierta antes que yo y menos después de haber salido de una fiesta. Contesté todavía medio dormida.
— Dime — dije sentándome en la esquina de la cama.
— Ábreme la puerta — gritó
— ¿Por qué estás tan temprano en mi casa ?— respondí tomando las llaves para abrir.
— Solo ábreme ¿quieres?
Cuando entró en la sala tenía puesta la misma ropa de ayer.
— ¿Tú dormiste anoche?— pregunté.
—  Continuamos la fiesta en un bar al que me llevó Jonatan, por cierto tu galán bailarín estaba allá— seguía hablando muy rápido mientras entrabamos de nuevo en el cuarto que compartía con mi hermana.
— Habla bajito que Alicia está durmiendo — se sentó en el colchón y empezó a descalzarse.
— Sabes, baila muy bien — la miré un poco confundida.
— No te hagas la que no sabes — dijo fingiendo enfado.
— Pues no sé, además no es mi galán bailarín, solo es un muchacho más.
— Ali, no digas que no te has fijado en él porque te conozco y sé que lo has hecho. Ví como lo mirabas y cómo él te miraba a ti— dijo acostándose a mi lado.
— Pues no, no lo he hecho — le respondí y me volví a acomodar para dormirme.
— Aunque lo niegues ahora, tarde o temprano vas a aceptarlo, lo sé — escuché antes de volverme a quedar dormida.
                          ***

La semana había pasado muy rápido está vez, ya estábamos en octubre y dentro de poco comenzábamos los parciales, así que he estado ocupada estudiando. La conversación entre Ari y yo había quedado sepultada y agradecí que no volviera a sacar el tema. Reconozco que me había fijado en el muchacho, que me daba curiosidad y quería por lo menos conocer su nombre, pero eso no iba admitirlo frente a Ariana cuando todavía no sabía si lo admitía para mí.

Iba tan entretenida escuchando música en mis auriculares que no sentí cuando una moto se detuvo a mi lado, llamando mi atención. La reconocía del día de la competencia y sabía quien bajaría de ella. Aún así seguí caminando.
Él, me agarró por la muñeca como otras veces había hecho. Me viré y le dije:
— Te estás acostumbrando a retenerme, eso no es muy romántico intento de príncipe.
— Parece que tú también estás disfrutando que yo me acostumbre a hacerlo ¿o me equivoco?
— Pues sí, parece que tus trucos de magia no están funcionando.
— Tranquila, que lo harán dentro de poco.
— Estás muy confiado, creo que me subestimas.
— Puede ser, pero quiero comprobarlo.
Me solté de su agarre y entré a la heladería de la esquina. Sabía que me seguiría y no me equivoqué.
— Un helado de chocolate​— le pedí al dependiente. Enseguida pagué y salí de ahí.
— No has brindado — me dijo cruzando los brazos.
— ¿Quieres ?— le señalé el barquillo y él respondió que sí con un movimiento de cabeza — pues cómpratelo — me burlé de él y seguí caminando.
Pensé que me había dejado sola, pero me seguía a corta distancia.
Avanzamos así unas cuadras hasta que cerca de mi casa lo paré haciéndole señas con la mano.
—  ¿Por qué me sigues? — pregunté
— No lo hago, solo te acompaño — contestó.
— No hace falta, no lo hagas más— cerré la puerta y por el filo de ella vi cómo se iba riendo.

                             ***
El incidente de la moto no había vuelto a ocurrir. No había visto al "principe mago", como le decía al no saber su nombre, en dos semanas. Estaba contenta aunque hubo momentos en los que me preguntaba cuándo me lo volvería a encontrar.

En estos días no he podido bailar, las pruebas han consumido todo mi tiempo, pero hoy hice la última y antes de irme para la casa fui al aula de arte.
Esta vez puse "Let me love you" de Justin Bieber, que era una canción con la que hace rato venía ideando una coreografía. Bailé como nunca porque mi cuerpo ya me pedía a gritos realizar algunos movimientos.

Al cabo de un rato estaba tomando agua toda sudada y sin fuerzas cuando vi que deslizaban un papel por debajo de la puerta, que cierro con precaución desde el día en que aquel joven me espiaba. Me acerco y veo que es el cartel que estaba en la parte de afuera donde se leía:  ADVERTENCIA NO ENTRE.

Lo había colgado yo misma para no ser interrumpida. Abro y no veo a nadie por el pasillo y me dispongo a volver a ponerlo en la puerta, ya un poco estrujado. Cuando una mano, salida de algún lugar, coloca encima de las palabras NO ENTRE, otro más pequeño, que decía: DE AMOR

Me giré para encontrarme con su cuerpo muy pegado al mío. Quería moverme pero sus brazos se encontraban a mis costados apoyados sobre la puerta.
— ¿Has leído? — preguntó y lo único que pude hacer fue asentir, las palabras no me salían.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro