capitulo 52
En la pantalla de la tablet en las manos de un pensamiento Mikel, se veía el reflejó de sus ojos hermosos y melancólica mirada. Mirando foto tras foto de la única persona importante en su vida, y la cual no ha podido ver, o hablarle ya desde hace muchos años. Extraña demasiado a su pequeño hermanito, ese joven amable, dulce y feroz con quién lo hiciera enojar.
Con impotencia muerde el interior de su mejilla, hasta que sintió el sabor a sangre filtrarse a su paladar, solo entonces dejo de morder al mismo tiempo que apagaba la tablet y la deja sobre la mesa. Acto seguido dejó salir un pedazo y agotado suspiró.
—¿Cuándo empezó a desmoronarse la vida de cada una de esas personas, incluyendo la mía?—Con pañuelo de alta costura limpio el interior de su boca, ese lugar que había mordido.—Ya me acordé del momento exacto, fue en la primera línea de tres reinició.
Mikel humedece su boca con un poco de café negro, mirando a lo lejo unas cuantas parejitas cómo familias de lo mas felices, sin saber absolutamente nada del mundo en el que viven. De igual manera Mikel piensa que eso es lo mejor, ¿es malo y triste el vivir en una mentira? Sí, pero Mikel prefería eso a tener que vivir con el corazón roto, añorando el día en que se encuentre con su pequeño y amado hermanito.
—Crees que vas a poder hurgar en mi cabeza, pedazo de mierda.—Bufo.
Si alguien escuchará hablar a Mikel, lo verían como un loco por estar hablando solo pero en realidad está hablando con alguien, ese alguien es esa voz, queriendo entrar al cerebro de Mikel. Ver lo que está escondiendo.
Mikel tras la muerte de su hermanito, él encontró una manera de blindar sus pensamientos, impidiendo que esa voz logré describir sus secretos, planes.
<¿Crees que vas a poder seguír manteniendo tus pensamientos fuera de mi alcance para siempre? Estás muy equivocado.> Podría escucharse sin preocupaciones, pero era todo una fachada, esa voz se encuentra muy intranquila.
—Pues sigue intentando entrar en mi cabeza tanto como quieras, no lo vas a lograr.—Le da un sorbo a su café.—Y aunque lo hagas no cambiará el resultado que está por ocurrir.—Sonríe perverso.—Veras arder este mundo justamente como ardió las últimas tres veces, le distes demasiado poder a una creación que se terminaría liberando de tus manos...
<¡Todo fue culpa de esa maldita alma intrusa!> Rechino sus dientes. <Todo estába yendo bien, son mis creaciones por la tanto es su obligación seguír mis órdenes.>
—Nadie te pidió que nos crearás para empezar, y déjame decirte que está creación es una verdadera mierda.
<Puedes decir lo que quieras, si pude manipular la mente de Dean, haciéndole creer que el alma en el cuerpo de tu hermano, es lo que había estado buscando, entonces podré hacerlo una vez más. Él volverá a seguir el curso de la trama tal como lo había planeado. Tu hermano no verá ese final feliz para su mejor.> sonríe.
Mikel tuvo un mal presentimiento, no quería prestarle atención a las palabras de esa voz, pero sus instintos le decían que no será fácil del todo el completar el reinicio de este mundo, un reinicio donde esa voz ya no ejerza poder en ninguna de estas personas.
<Luther fue creado para ser el villano y tiene que seguir de esa manera, al igual que está nueva alma maldita que fue la causante de todo esté lío. Es por eso mismo que provoqué ese accidente en su mundo, para traer su alma.> Solo que no quería que estuviera en el cuerpo de Luther, quería ponerla en el cuerpo de Lander.
—Sí, intenta manipularlo para que vuelva a convertir este mundo en cenizas.—Sus ojos se oscurecen.—Eliminando a tus “amados protagonistas” lo que llevó a este mundo volverse nada, obligando a reiniciar todo, no solo una vez, tres veces. ¿Que te hace pensar que esta vez será diferente?—.Sonríe con burlas.—¿Cuántos reinicios te quedan antes de perder por completo la soberanía de este mundo? ¿Dos? ¿Ninguno?
Mikel solo sonrió ampliamente al no escuchar mas esa voz, con ese silencio obtuvo la respuesta que ha estado buscando. Si esa voz pierde perderá para siempre.
‹Todo comenzó desde ese día, con la llegada de esa alma a este mundo, a la cual mas tarde se le consideraría un maldito intruso, un error en la matrix de este mundo se podría decir.
Esa alma era nada menos que alguien también llamado Luther, como el mejor amigo de mi hermano. Pero ese era un Luther de otro mundo, su alma llegó a la de un adolescente que se le podría considerar un simple extra sin nombre, de esos que ni siquiera aparecen en la historia.
Su llegada sería el primer problema para esa voz, el segundo problema sería el encuentro de ese Luther con Dean. Fue entonces cuando la trama planeada por esa voz, no se podría llevar acabo.
Se suponía que quien tenía que encontrar a un Dean todo lastimado entre la vida y la muerte, ese tendría que ser mi hermanito, Lander. De esa manera Dean terminaría con una obsesión enferma por Lander, una que lo llevaría a comerte cosas atroces cómo por ejemplo; romper las extremidades de Lander para que no pudiera escapar de su alcance. Obligarlo hacer de todo aunque Lander no quisiera.
Al punto de querer enviar con su creador todo aquél que mirará a Lander, se volvería un amor retorcido por alguien que le había mostrado un poco de bondad. Dean vería a Lander cómo su luz, que si lo llegana a perder sería como perderlo todo.
Es por eso que no podía permitir que se fuera de su lado así tuviera que hacer cosas desagradable (es lo que se suponía que tenía que pasar en la trama de la novela, la que se llevó acabo hasta la mitad, porque Dean salió de esa manipulación mental.) dignó de un villano final porque en sí, Dean es un ser verdaderamente despiadado, lo sé mejor que nadie, lo evisto en acción dos veces.
Solo que en la primera línea quién lo encontró no fue Lander, (arruinando uno de los principales factores de la trama) fue nada menos que el Luther de otro mundo, un chico que no sabía absolutamente nada porque tampoco recordaba quien era.
Pese a eso al ver a un chico menor que él, tirado cerca de un callejón (Luther había llegado al cuerpo de un adolescente de 17 años, pero en realidad era un niño en ese momento, más joven que Dean) le causó mucho pesar, no podía dejarlo en ese callejón a su suerte. Sobre todo al escuchar murmullos de muchas personas, en ese momento Luther se dió cuenta que quién le había echo eso a Dean, se encontraba cerca, tenía que salir de ahí.
Fragmentos de la primera línea...
El adolescente detuvo su caminar al percibir unos pequeños quejidos entre la calle principal y un callejón a su derecha, no tenía pensado adentrarse a ese lugar. Tenía toda la intención de irse sin meterse en un lío, sin embargo en eso mira como cae una mano a fuera de esas bolsas negras.
Para en ese instante el adolescente ya no puedo ignorar eso, con cuidado y silenciosamente camino ha esa dirección. Quedándose estático al ver ese chico, ensangrentado, sin color y su respiración entrecorta.
‹¿Me encontraron? ¡Maldición, debí de ser mas cuidadoso al borrar mi rastro!› Disimuladamente llevo su mano al bolsillo, en busca de algo para defenderse. ‹No pienso morir aquí, tengo que acabar con todos eso bastador, e inclusive ese que se hace llamar mi padre.› Entre abrió sus ojos, queriendo analizar la situación pero lo que terminó viendo fue unos deslumbrantes ojos color miel.
Parpadeo un par de veces para quitarse lo empeñado de sus ojos, de esa manera poder enfocar su mirada en ese joven de deslumbrante cabellera plateada, suave y tersa piel palida. Bellos hoyuelos resaltado hermosamente en sus finas mejillas, solo bastaba hacer una simple acción con su boca para dejar esos hoyuelos a la vista.
—¡¿Un súcubo?!—Se preguntó entre un susurró, "¿qué clase de fantasía sexual es está?" Cerro sus ojos creyendo que estaba alucinando.
—¿Dijo algo?—Inclina su rostro mas cerca del contrario.—Todavia respira.—Se alejó.—Solo resiste un poco más.
Cuando quiso levantar a Dean en sus brazos, este abrió sus afiliados ojos y un con dificultad levantó su mano, apuntado con una navaja la garganta de Luther. El nombrado se tesón al sentir la punta de esa fría navaja, pero en vez de sentir miedo, él enfureció.
—¡Te atreves apuntarme con esa mierda!—Le da un cabezazo, Dean solo lo ve con incredulidad, ni siquiera puede frotarse la frente. Ese golpe había dolido.
—¡Tú...!
—¿Yo qué?—Lo ve desafiante.—Si ellos no te mataron yo te mataré.—Presiono con fuerza las heridas de balas en el abdomen del ojos grisáceos.—No apuntes el cuello de una persona que solo te quería ayudar, ¿esa es tu manera de ser agradecido?—Cuestiona.
—¡Te mataré por tu grosería!—Esos ojos grisáceos se volvieron tan oscuros y brillantes cual bestia hambrienta.—Y no necesito tu ayuda, vete.
Cuando me recupere lo buscaré y le haré tragarse sus palabras como está falta de respeto, pero primero tengo que salir de aquí, esas personas deben de estar acercándose. No tengo tiempo para tratar con esta persona...
—¿Tú?—Sonríe—Primero procura sobrevivir si es que puedes, y tú eres el maldito grosero.—Ambos se ven con toda la intención de matarse.—Quedate ahí.—Deja de estar en cuclillas.—No voy ayudar a nadie que no quiere ser ayudado.
Dean no iba pedirle ayuda por eso dejo que se fuera, como pudo se levantó del suelo, agarrándose de lo basureros para no volver a caer al suelo. Luther al verlo en ese estado solo frotó su nuca al mismo tiempo que lo alzó a sus hombros como un costal de papas.
Antes de que Dean empezará a decir alguna cosa, Luther optó por noquearlo para que también dejará de moverse, tenían que llegar a un lugar seguro, lejos de ese lugar. Encontrar un doctor que le diera cuidados médicos a Dean.
‹No debería de estár haciendo esto, me estoy metiendo en un lío del cuál quién sabe que logré salir ileso. Para este punto debería de estar preocupándome por mi mismo en vez de otra persona, ni siquiera se quién soy o de donde vengo.
Lo unico que recuerdo es haber despertado en una vieja casa, sin ninguna familia. Desde entonces llevo dos meses en este lugar, y mientras esperaba recodar algo de mi vida, me busque un trabajo porque no podía morir de hambre. Lo bueno es que no pago renta, esa vieja casa es mía al parecer.›
Luther entró por la puerta trasera de lo que parecería una veterinaria, dejando al pálido Dean sobre una de las camillas.
—¿Qué haces aquí?—El que preguntó era un anciano de unos 70 años, mirada amable, cabello cano.—Hoy es tu día libre...¡¿Quién es él?!—Se exaltó a ver al pálido Dean.
—Me lo encontré de camino a casa, al principio creí que era un perro herido, así se escuchaba sus quejidos. Sin embargo cuando me acerque vi que era un chico...¿Puede ayudarle?—Sera muy irritante pero no quiero que muera, es tan solo un chico de unos 13 años, creo.
—Sabes bien que soy veterinario, un médico para animales, no personas...
—Imagine que es un perro, solo verlo.—Aprieta con fuerza las mejillas de Dean.—Pra mi parece un perro, un doberman. Con eso en mente puede salvarlo, por favor.—Suplico
—Me pones en un predicamento, niño.—Suspira con preocupación, no quería terminar con la poca posibilidad de vida de Dean.—Bien.—No puedo dejarlo morir, es demasiado joven.—Ve a cerrar todas las puertas con seguridad, poner el aviso de cerrado.
—¡Sí!
Fue cumplir órdenes con diligencia, suspirando aliviado de que su jefe no lo haya echado, mucho menos le hay sugerido de que llevará a Dean al hospital.
‹Solo espero que logré sobrevivir, se ve que es alguien de mucho dinero. Esperemos sea agradecido y me de una buena cantidad de dinero, con ello podré salir de esa vieja casa...› Salió corriendo al escuchar un fuerte estruendo, el cual provino de la habitación donde había dejado a Dean.
—¿Qué sucede...?—Hubo un pequeño estremecimiento al encontrarse con ese desenfrenado color grisáceo, no solo eso, el doctor estaba de rodillas, jadeando por la asfixia.
Al alrededor del cuello del doctor se podía ver ese color acusa de las feromonas de Dean, y ese nauseabundo olor lo hace agonizar. El veterinario es alfa pero ni así puede repelar las feromonas de Dean.
—¡En verdad eres un dolor de culo!—Empuja a Dean.
—¡No me toques!—Quien se creé que es...espera, ¿por camina como si nada? Todo esté lugar está cubierto por mis feromonas.—¡¿Ugh!?—Sus ojos se abrieron en grande al darse cuenta que lo habían mordió.—¡Me mordiste!—Exclama incrédulo.
—Sí, ¿algún problema?—La marca de dientes yacía en el pecho de Dean.
—¿Por qué?—Dean Deja de forcejear con Luther, para poder mirarle. Ese color grisáceo fue tomando un brillo extraño.—¿Estás seduciendo a un moribundo?—¿Qué es ese extraño sonido en mi pecho? Son los últimos latidos antes de morir...
—Por nada en especial, solo quería que te tranquilices.—¿Por qué lo mordí?
Estoy loco, ya puedo escuchar las sirenas de la patrulla viniendo por mí. (El alma de Luther podría estar metida en un cuerpo de 17 años, pero en realidad mentalmente tine 10 años.)
—Deja que el doctor haga lo suyo...¡¿Aah?!—Mira esos ojos perversos grisáceos.—¡Eres un perro!—Frota su clavícula, ahí Dean dejo sus dientes figurados.
—Mira quién lo dice.—Lame sus labios.
—¡Tenía razón, eres un doberman!
Así fue como inicio la historia de ellos dos, una historia que no estaba escrita por esa voz y eso le hizo enfurecer. No podía permitir que algo si se desarrollará en su mundo.
Actualidad....
‹En la primera línea Dean no cumplió las espectativas de esa voz, si encerró a Lander pero nunca lo toco, (sexualmente) ni lo golpeó pero si lo encerró. Muy en sus adentros sabía que Lander no era lo que estába buscando, por eso solo lo encerró para descubrir que estába pasando.
Mi hermano no me dio muchas explicaciones de lo que había sucedido cuando estuvo cautivó, solo me dijo que Dean en nigún momento fue violento con él, y que si murió a manos de él en su primera vida, fue porque así lo quiso mi hermanito. Que no le tuviera odio a Dean porque de alguna manera mi hermanito, lo uso para llegar al punto en el que estamos.
No puedo odiar a Dean, pero si me oído a mismo por no saber absolutamente nada por lo que estaba pasando mi hermanito, todo porque yo solamente era alguien que ni extra llegaba, en la trama de esa voz, mi nombre solo era mencionado como hermano mayor de Lander, el protagonista omega. Se podría decir que gracias a eso esa voz no puede manipularme cómo quisiera, y es por eso mismo que Lander me confío su plan.
Él sabía sobre el trato de su mejor amigo con esa voz, también sabía que esa voz no iba cumplir ese trato. Antes de que Luther ganará esa voz prefería eliminar a Luther. Por lo que mi hermanito me pidió que cueste lo que cueste llevará a Dean a ese estacionamiento.
Lander estába convenciendo que Dean terminaría cautivado por Luther, (su mejor amigo) para ese momento ya era la segunda segunda línea y no se logró lo queriamos, a Dean no le interesó para nada Luther (para ese momento Luther original seguía siendo él mismo) si le pareció alguien de belleza extraordinaria, pero no al punto de interesarle.
Por lo que terminó yéndose del país, volviendo cuando Luther supuestamente había sido desterrado a otro país. Sin embargo no fue desterrado, Luther fue capturado eliminado por sus tíos (por parte de papá) ellos no podían permitir que sus padres (abuelos de Luther) encontrarán a su nieto, hijo de su hermano, el preferido de sus padres.
Luther fue miserable hasta él final, murió sin saber que mi hermanito había estado muerto desde que empezó la segunda línea. El alma que se encuentra en el cuerpo de mi hermanito, ha estado ahí desde el segundo reinició. Fue entonces que mi hermanito me contó todo, dos meses antes de que iniciara la trama.
Desde entonces he tratado de salvar a Luther, sin embargo ninguno de mis esfuerzos fueron de ayuda, al final en la segunda línea él terminó teniendo el mismo destino que en la primera, murió. Y luego lo hicimos todo, Dean destruyó todo en busca de su único amor. Solo espero que está vez si podamos acabar con el control de esa voz sobre nosotros.› Suspiro.
Mientras Mikel se encuentra recordando lo sucedido en estos dos últimos reinicios, el destructor del mundo se encuentra besado apasionamiente a su único amor, ese amor que había estado buscando hasta en el mismo infierno.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro