capitulo 16
Los tres hijos de la familia Astier, se despidieron con un abrazo y beso en las mejillas de sus padres. Iba vestidos elegantes, pero sin ser exagerado. Moderado ya que, tampoco querían dar una mala impresión al llegar a ese campo de golf.
Alguien cómo Luther, que en su vida no a usado un palo de golf y mucho menos ropa relacionada con ello, se sentía extraño con ese traje para el golf, casual elegante gris negro. Él quería ir de chaqueta y jeans, pero sus dos hermanos, le dijeron que eso no va acordé al lugar que se están dirigiendo en estos momentos.
Por lo que no le quedó de otra, y aceptar ir vestido de esa forma. Para empezar, no se veía para nada mal, esa ropa le quedaba demasiado bien, resaltado sus atributos en especial su sexy trasero. Por lo qué optó, ponerse un abrigo largo que cubrirá uno de sus tantos sexis atributos.
—¡¿Luther, hermanos?!—¿Que está pasando aquí? Luther no me dijo nada sobre salir hoy, en la noche y mucho menos junto a sus hermanos. ¿Por qué ya no me dice nada? Él no era así.
Lander se sorprendió al verlos vestidos de esa manera, llevando palos de golf. Eso era algo extraño para él. Ya que, sabía que Luther no es fanático del golf.
—Lander, ¿que haces aquí?—Cuestioné su repentina visita.
Últimamente me estado topado mucho con él. Ahora que recuerdo, Luther era quien siempre iba trás de Lander, sin embargo, los papeles se están invirtiendo, ¿no?
¿Y por qué viene vestido de esa forma tan rara y con dos recipientes con palomitas? Espera, es cierto hoy es el día que se estrenaría esa serie.
—Vine por ti.—¿Olvidó que día es hoy?—¿Tan tarden van al campo de golf?—Preguntó mirando a Luther, esperado una respuesta.—Hoy es el día que se estrena la segunda temporada de "lluvia sangrienta" ¿Lo olvidaste?
Se suponía que ambos veríamos juntos los primeros dos capítulos. Luther y yo, estuvimos esperando esa serie de zombies desde hace más de un año.
—Lo lamentó, Lander.—Erin en serio se estaba disculpado.—Luther, si comentó que este día se reuniría contigo.
Lo dije solo para no acompañar a mi hermanos mayores, porque la verdad, no me acordaba para nada de esa serie hasta que vi el nombre en los vasos de palomitas que sostiene Lander.
—Sin embargo, ya confirmamos la asistencia de Luther en ese lugar.—Expresa Erin.
—Lo entendió.—ve a Luther.—¿Es necesario que vayas?—Preguntó esperanzando.
Creí que Luther, estába volviendo hacer cómo era antes. No obstante, todo lo que hace es muy diferente. Ahora ya consiguió un nuevo amigo y ni siquiera me había contado.
—A ti no te gusta el golf después de todo, ¿quedarte?
Tanto Eren cómo Erin se tensaron, no querían que Luther siga cayendo por los pedidos de Lander. Porque para empezar, el Omega solo vio la mitad de la primera temporada con Luther, ya que, Lander la terminó de ver con Charles.
Eso fue cómo una tracción para Luther, se suponía que era algo de ellos dos, como mejores amigos que eran. Se quedó un buen tiempo esperando a Lander, pese a eso, el Omega solo le envío un mensaje diciendo; "Luther, lo siento. He quedado con Charles para ver la última parte de la serie."
—¿Podremos verla mañana?—¿Lander acaso no se puso a pensar que no ir con mis hermanos, solo los metería en aprietos?
No puedo dejar como un mentiroso a mi hermano mayor, Erin también comentó que Eren, sea esforzado mucho por obtener está oportunidad.
—Ya quedé con mis hermanos, no puedo retractarme a mí palabra.—Mas bien Eren, tomo esa decisión unilateral.
Sin embargo, mientras vivo con los Astier tengo que darles ánimos por lo menos, antes de que me destierren... espera, ¿si obtienen esas tierras no sería algo contradictorio para mí? Si los Astier obtiene poder, el destierro no será posible para mí.
Pero, no puedo permitir que está buena familia se derrumbes. Tengo que pagar mis comidas y el ver tomado posesión de este cuerpo...¡maldición, que predicamento!
—Pensándolo bien...
Erin le cubrió la boca a su hermano menor, al mismo tiempo que lo empuja al interior del auto. No iba a permitir que se retracte. Sin embargo, Luther no iba a quedarse con Lander. "¿Por qué no fuiste con Charles" eso es lo que quería decirle antes de que Erin, le cubriera la boca.
—En verdad, lo siento Lander.
Cerro ambas puertas con seguro, por más que Luther quisiera abrirla, no podría, solo se puede abrir desde el conductor y, Eren no iba hacerlo.
—¡UGH!
Erin se aferra fuertemente a su estómago, Luther si que golpeaba muy fuerte. Tenía una mano muy pesada y su segundo hermano, acaba de darse cuenta de ello.
—Espero no haya una próxima porque vas a recibir algo peor.—¿Cómo se atreve a empujarme de esa forma?—Deja de exagerar, a penas te toque.
—“Sí, a penas.”—¿Desde cuándo se volvió tan ridículamente fuerte?—Vamos a ver si también puedes soportar...
—Erin, detente.
Su gemelo se quedó con su puño en el aire, no quería obedecer a su hermano mayor. Sin embargo, terminó por bajar la mano no sin antes amenazar a Luther, de que se las pagará. Qué no se confíe.
—Espero que ambos se comporten.—Expresó Eren.—No quiero presionarlos.—Apretó con fuerzas el volante.—Sin embargo, necesito firmar ese trato con alguien como él.
Si no logró obtener nada, de igual manera no me voy arrepentir, hice todo lo que está en mis manos y mis padres lo saben. Sin embargo, no me daré por vencido y seguiré buscando otras maneras.
No hago esto por dinero, no. Lo hago para no ser obligado ha enviar lejos a Luther. Es desagradable aceptarlo, pero la familia Turner, puede llegar a someter a mi familia. Si llegase a pasar eso, todo lo que hemos construido hasta ahora se convertirá en nada.
Solo espero que mis abuelos, nos perdoné por permitirme eso. No obstante, prefiero matar a cada uno de esos sujetos antes de permitir que Luther, se vayan lejos de nosotros. Nadie va alejar al pequeño de la familia Astier.
—¿Está tan mala la situación de nuestra familia?—Pregunte.
No tenía porqué sentir algo al respecto, de igual manera hay un pequeño malestar en la boca de mi estómago, es molesto ver la expresión cansada de Eren. Se nota que sigue sin poder dormir bien.
—No te preocupes por eso, nada que no pueda ser solucionado por mí y Eren.—Ve a Luther por el retrovisor.—Solo divertirte como siempre lo has echó.—Sonrío un poco.
—No tanto, anda con cuidado.—Comentó Erin.—Ten esto en mente, la persona con la que nos vamos a reunir es muy importante, evita verlo directamente y se muy respetuoso.
Si nuestra familia no estuviera pasando por mala racha, ni siquiera nos hubiéramos involucrado con el Ceo Dean Bennet. Es mejor mantenerse alejado de cualquier Bennet. Sin embargo, si es para proteger a Luther, estamos dispuestos a reunirnos con el diablo y firmar un contrato.
—¿Es el presidente?—¿Solo me están metiendo miedo, verdad?
Luther disimuló su leve sonrojo, ese "presidente" le hizo recordar lo que sucedió hoy, por la mañana. Cuando estuvo tan cerca de esos ojos grisáceos.
—Mucho más importante que el presidente.—Respondieron ambos hermanos.
—Poder obtener una reunión con él, es un privilegio y para otros una bendición.—Expresó Erin.—Es por eso, que Eren debe de salir victoriosos en está reunión.
—Lo tendré en mente.
¿Hay alguien más importante que los protagonistas? ¿Debe de ser una figura imponente como para que las personas piense asi de él? Sin embargo, no creo que sea mejor que ese hombre de hipnoticos ojos grisáceo. El no tiene comparación...¡Que diablos estoy pensando!
—Llegamos.
Eren se adentro por esas grandes puertas, conduciendo hasta llegar al estacionamiento. Luther, quién en su momento no estaba feliz con la idea de acompañar a sus hermanos. Se emocino al ver las olas del mar el levantarse no muy lejos de ahí.
—¿Nunca dijeron que este sitio quedaba cerca del mar?—Majestuoso.
Si lo hubiera sabido, no me hubiera negado con tanta determinación, y mucho menos me hubiese sentido una persona secuestrada.
—No preguntaste.—Comentó Erin.
—¿Puedo ir a la playa en vez de quedarme aquí?—Preguntó con ojitos de cachorrito.
Solo puedo ver personas estiradas con expresiones serias, arrogantes, juzgando unos a los otros. Observando quien es más digno. No es algo que quiera ver durante todo nuestra estancia.
—Puedes.—Permitió Eren.—Sin embargo, primero vamos ha saludar a la persona que nos invitó.
—Bien.—Ese no es un gran problema.
—Jovenes maestros, ¿ya están aquí?—Saludo Fausto, por poco y dejá salir un suspiro de alivió. Estaba preocupado de que Luther, no viniera después de todo.
¿Esa persona no es el asistente de ese celestial hombre, llamado Dean? No, imposible. Dean no es la misma persona que se reunirá con mis hermanos, ¿verdad?
Luther estaba meditando el entrar o no entrar a ese lugar, sin embargo, se dijo a simismo que, Fausto podía tener dos trabajos y que Dean, no es la persona que se reunirá con sus hermanos.
—¿Venimos tarde?—Preguntan nerviosos.
—No, mi jefe acaba de llegar.
Mentira, ese hombre de raro comportamiento llegó hace más de una hora, todo para practicar posees en las que mejor se vea. Enloqueció más de lo que ya está. Fue horrible de ver, horrible.
—Siganme, por favor.—Sonrie amablemente.—Mi jefe nos está esperando en la sala privada.
¿Por qué mi corazón se está comportando extraño? Con cada paso que doy, algo raro se va alojado ahí. ¿Es nerviosismo o qué? ¿Por qué?
—Solo tengo que saludar, ¿verdad?—Susurró.
—Sí.—Responden.
—Luego, ¿puedo irme a la playa?
—Sí.—Vuelven a responden.
—Bien, lo tengo.—Susurra.—Solo tengo que saludar, dar mis respetos y luego largarme. Pongamos la mejor sonrisa...—Luther se sorprendió al ver a Dean.
Se estremeció al momento en que sus ojos, hicieron contacto visual con esa espléndida mirada, que no tenía la más mínima intención de dejar de verlo.
Dean quería ver todas las expresiones de Luther, la reacción de saber que es él, quién se reuniría con sus hermanos mayores. Saber si dejará de mirarlo con esa mirada altanera, o si eso ojos celeste se volvería temblorosos de miedo.
—¡Mierda!—Solto mucho sin más, mucho antes de poder evitarlo. Fue demasiado el asombró.
Lo peor es que ese "mierda" fue escuchado por todos, sus esperanzas de que está reunió fuera bien, se redujo espontáneamente por Luther.
—¡Luther!—Las miradas de los gemelos, se encuentra en su rostro. Reprendido el grosero comportamiento.
Sin embargo, eso era lo demos para los gemelos. Ellos estaban preocupados de que, Dean quiera descargar su furia en su pequeño hermanito.
—Ceo Bennet, espero que trate de entender a nuestro hermano menor, él no está...
—¿Acaso vio un fantasma, joven Luther?—Preguntó Dean. Interrumpido a Eren.
Pese a, que sabe quién soy. Su mirada celeste sigue viéndome fijamente sin miedo. En vez de tener miedo por lo que hizo eso incluye golpearme, está preocupado por ver arruinado la reunión de su hermano mayor, conmigo.
—Los fantasmas no tiene esa "personalidad" qué el Ceo Bennet, tiene—¡Joder, Luther! ¿Por qué estás diciendo eso? Eso es lo que pasa cuándo estoy sorprendido, o las cosas no van como quiero, habló de más.
"¿Desde cuándo Luther es tan elocuente?" Se preguntaron ambos hermanos, los cuáles no había entendido las palabras de Luther?
—Oh, ¿En serio cree eso?—Sus ojos grisáceos sonrieron pícaros.
Nigún de los presentes a excepción de Dean, entiendo a lo que se refería Luther. Y eso, fue cavar su propia tumba para el alfa de ojos celestes. Se expuso ha él mismo sin tener en cuenta que Dean, no lo tomaría como un complido a su persona. Pensado en usar ropa que muestre piel del cuello hacia abajo.
—Tampoco les tengo miedo a los fantasmas, los vivos son los que deberían dar miedo.—Mentiras, soy un maldito miedoso que no podría dormir solo, luego de ver una película de terror.
"Eren lo siento, este hermano menor tuyo, le dijo de todo a ese hombre y hasta se atrevió a darle un puñetazo" Luther estaba ensayando en su cabeza como decirle a su hermano mayor, que alguien como él, había arruinó su arduo esfuerzo.
—Yo...
—No es necesario que te disculpes, estoy acostumbrado a darles miedo a las personas.
—No le tengo miedo.—Esos ojos grisáceos se contrae por la sinceridad de Luther.—¿Por qué debería?
‹Luther, callarte, dejá de hablar de esa manera. ¿No vez a tus hermanos frotándose la nuca por tu insolación?› se regaña asímismo.
—¿Es así?—Que Sucubo más insolente, solo provocas que quiera seguír viéndote...¿Si supieras de lo que soy capaz seguirás pensado lo mismo?—Evitemos los saludos innecesarios.—Les indica que se siente.
Luther vio a su hermano mayor, esperado su permiso para salir de ese lugar. Sin embargo, cuando vino a darse cuenta ya estaba sentado cerca de Dean. Fausto había impedido que Luther se marchara o tomará asiento junto a sus hermanos.
¿Quién soy? ¿Qué hago aquí? ¿Por qué el mundo están pequeño? en está ocasión el país. Joder, ni siquiera se a donde ver. Este hombre está demasiado cerca.
—Comamos unos aperitivos antes de ir a jugar golf, allí hablaremos de los negocios.—Sugirió.
—Me parece bien.—Responde Eren, dándole una mirada a su hermano menor.
"No hables, quedarte callado" es lo que decía sus ojos. Temía que Dean, termine explotado por algún otro comentario de Luther.
"¡Ah!" Un gritó ahogado murió en los labios de Luther, ya fuera sin querer, o de hecho. Ese roce de los dedos de Dean, contra los suyos tomo por sorpresa a Luther.
—¿Le sucede algo? ¿No le gusta los aperitivos?
—No es eso.—Todavía se atreve a fingir que no pasa nada.
¿Rozo sus dedos con los míos a propósito? ¿Qué diablos está planeado este hombre? ¿Acaso quiere vengarse por el golpe que le dí?
—Ya veo.
Cómo si la estática invadirá mis cuerpo, los vellos de toda mí piel se erizaron al sentir sus largos y fríos dedos rozandose con los míos, nuevamente.
Quise alejarme antes de que mi corazón bajará sus defensas, y terminara por salirse de mi pecho. Sin embargo, me fue imposible porqué mis dedos terminaron por enredarse con los Dean.
No es la primera vez que tocó la mano de alguien, pese a eso, la sensación es completamente diferente. Esa corriente electrónica se genera en mis dedos hasta cubrir por completo todo mi cuerpo. ¿Eso no tendría que hacer así?
—Soltarme.—Susurró.
Luther forcejear, pero se siguen enredado todavía más con los de Dean. Cómo si estuvieran pegados con pegamento, o como si fuera un hilo invisible entrelazado en sus dedos.
Dean, disimuladamente se inclina muy cerca del oído de Luther. El alfa esperaba que sus hermanos, vieran la desvergüenza de Dean. Sin embargo, Fausto estaba haciendo su trabajo en distraerlos con lo que sea que estén hablando. Tenía que seguir aumentando ceros a su cheque.
—¿Y si no quiero?—Las puntas de sus orejas se tiñeron de rojo, ¿tiene mucha sensibilidad ahí?—Tu me tocaste primero.
Luther, movió inconciente o por reflejo sus hombros al sentir el aliento de Dean, impactar con su cuello. Provocado ese repentino escalofrío en su ser.
—¿Qué?—Lo vio indignado.—¿Cuando hice eso?—Quisiera darle otro puñetazo, pero antes de hacerlo hay que esperar que firme ese bendito contrato.
—Pusiste tus manos así.
Luther se estremeció y sus piernas flaquean un poco al momento que sus manos, fueron puestas en el firme, grande, duro y a la vez suave pecho del contrario. Su hermoso rostro se volvió rojo e humeante como un volcán.
—¿Se encuentra bien?—Puso sus manos sobre las de Luther.
¿Por qué todas las expresiones en su rostro me parecen seductoras? Él sigue tentando a mi cuerpo, provocado que haga cosas como estas solo para ver sus adorables expresiones.
—¿Es normal que su rostro este tan rojo?—Preguntó, al mismo tiempo que con la ayuda de sus manos, movía las de Luther, sobre su pecho.
—¡Dios!—Exclame ruidosamente sin darme cuenta, esto es demasiado para mí corazón.
—¿Luther?—Los gemelos se asustaron al verlo tan rojo. Dean, tiene una expresión serena, como si el no fuera el culpable de eso.—¿Qué pasa?
—La comida que prove está muy pincate—Mira de reojo a Dean.
Maldito me las pagarás, podrás ser más importante que el mismísimo presidente, pero ni piense que esto se quedará así. Maldicion que vergüenza parezco un tomate pervertido.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro