Si… Destiny se llevo tal reprimenda que Hermione le dijo que no saldría de casa hasta que empezaran las clases… claro, la cosa fue que un par de días mas tarde, la dejo salir con la condición de que los gemelos la cuidaran…

Pero los gemelos se fueron a la sucursal de bromas que sus tíos habían puesto ahí, así que ella se quedó en una cafetería haciendo gestos, hasta que Dominic cruzó por su camino.

-¡Eah! - Le gritó y el chico se volvió - ¡Ven aquí!

El entró y miró a su alrededor

-¿Estás sola?

-Los gemelos se fueron a la tienda de bromas…

-¿Y qué milagro que no los seguiste?

-La verdad - suspiró - No tenía ganas… mi madre me levantó el castigo, pero ya me había dado toda una letanía sobre mi cuidado, me recordó a Hope, se puso a llorar y fue todo un drama… Papá tuvo que intervenir, pero me molesta vivir rodeada siempre de seguridad tan extrema… antes que ahora no me siguen veinte aurores cuidándome las espaldas.

-Que tedioso…

-Lo sé - suspiró estirando las piernas y de mal genio - ¿Tu qué haces? ¿A quién buscas? ¿Qué se te perdió?

-Nadie - sonrió Dominic

-¡Ah! - de repente Tiny brincó

-¿Qué pasa?

-¡Esa chica, yo la conozco!

Destiny señaló a Hope que pasaba en ese momento, con una vestimenta mas veraniega y mostrando esa hermosa cabellera alzada en una coleta, los rizos le caían como cascada y se movía coqueta y tenaz al viento.

Dominic también la conocía… la había visto cuando Tiny la estaba deteniendo justo a la entrada del callejón nocturno… Aunque en esa ocasión, él estaba más pendiente de otro muchacho, cuya aura tenía algo en comparación con la de él.

-¿Estará de vacaciones? No creo que vaya a estudiar en Hogwarts… se nota como de ultimo año… ¿No lo crees? Es muy bonita - Suspiró maravillada.

-Claro - dijo Dominic poniendo los ojos en blanco, medio aburrido.

Pero el aburrimiento se le pasó cuando Jenne llegó corriendo tras de Hope, agitando su larga melena, la cual ya no era por cierto, tan larga como hace años, ahora la tenia a media cadera, como la de Hope.

Y Dominic se puso de pie de inmediato y la siguió con la mirada ansiosa… Tiny lo notó y alzo una ceja, su amigo por lo común, nunca se había mostrado muy interesado en las chicas del colegio, siempre lo había considerado muy moderado…

Salió a prisa y Tiny atrás de él, justo cuando vieron como Jenne abrazó a Hope, y siguieron caminando al tiempo que Dominic avanzaba…

Tiny miró extrañada a su amigo, pero sin duda, supo que iba atrás ese par de chicas y lo siguió a él... Muy extrañada por cierto…

Pero ella también sentía una necesidad de ver a esa muchacha

Y el par de "muchachas" iba directo a una librería pequeña que había en ese sitio… Hope iba por una sola cosa, un libro que hablara sobre cosas románticas y cursilerías… esperaba encontrar uno y es que, en el castillo habían muchos libros, los había leído casi todos, pero no había ninguno que hablara de relaciones entre parejas o algo parecido.

De inmediato, se lanzó sobre la literatura romántica, leyendo los títulos con cuidado, esperando encontrar algo que le ayudara a entender sus sentimientos… los que habían hecho saltar su corazón al ver a aquel pirata hermoso, cuyo nombre aún no sabía ¿Alguna vez lo volvería a ver?

-¿Qué demonios? - Gruñó Jenne mientras leía los títulos - ¿Qué clase de libro es "100 maneras de conquistar a un hechicero"?

-¡Dámelo! - exigió Hope

-¿"Caramelos para un corazón triste: La dulce historia de Jesse Jane, la hechicera"? ¿Un beso Muggle? ¿Qué es esto Zoe? ¿En verdad vas a leer porquería?

-Si - dijo entre dientes

-¡Pero tú eres muy culta! - dijo bajito

-¡Soy una ignorante de emociones humanas! Tengo que aprender si quiero tener un novio…

-¡Oh! - Gimió Jenne - ¿Quieres tener un novio y dejar a tu madre?

-¡No seas chantajista Jenne!

-¿No se supone que así tienen que ser todas las madres?

-Claro, cuando tenga cincuenta y tú sigas igual será fantástico…

Jenne soltó una risita coqueta… que luego se le congeló al ver quienes entraban a la librería, en lo que Hope seguía ojeando mas libros.

Dominic la dominó con sus tremendos ojos azules y Jenne se sintió acorralada ¿Qué podría tener ese chico para hacerle dudar de esa manera? El muchacho avanzó lentamente entre los estantes, sin dejar de mirarla y eso incomodó tanto a Jenne que rechinó los dientes.

-¿Qué?

-¡Ese chico no deja de mirarme!

Hope se volvió a ver…

-Es lindo - Murmuró y ojeo un libro rápido

-No lo soporto…

-El que te mire así, significa una cosa… Que te desea terriblemente y debes alejarte de él porque puede ser un loco psicópata ¿No sientes que te hechiza?

-No - dudó

-Entonces solo es un psicópata…

-¿Por qué lo dices?

-Eso dice este libro titulado: "Miradas que matan: interpretación de las mismas"

Jenne miró los libros y los tomo todos arrebatándoselos a Hope

-¿Qué?

-Hay que llevarlos todos, no se nada de humanos obsesivos…

-Pero son como quince libros

-¿Y qué? No tengo nada mejor que hacer…

Pero a medio camino Dominic se atravesó ante la mirada expectativa de Hope y de Destiny… Jenne dejó caer los libros que ella tenia en las manos a los pies del chico y se le enfrentó ¿Qué se creía ese? Puso las manos en su cintura y lo miró desafiante.

¿Quería probar de qué era capaz? Sin duda ella podía hacerle un hechizo potente solo con el poder de su mente, no necesitaba varita para hacerlo.

-¿Qué? - le bufó al atrevido muchacho… claro, mirando hacia arriba porque Dominic era mas alto que ella

Hope y Tiny cruzaron los ojos y ésta se maravilló más con esa guapa muchacha, pero ese era el momento menos indicado para conocerla y decirle que no sabia porque, pero la admiraba. Sin embargo, se centró en el atrevimiento de Dominic que le sonrió a Jenne, y ésta se turbó por completo.

-¿Qué te pasa chico? ¿Por qué me miras de ese modo? ¡No te metas conmigo o te irá mal! - Azuzó. Pero parecía que Dominic ni se inmutaba y eso la desesperaba más… trató de adentrarse en sus pensamientos, pero fue recibida con una defensa que le impedía leer su mente…

Le miró resuelto, le daría un escarmiento y comenzó a enviarle hechizos silenciosos con el poder de su mente… pero Dominic continuaba tan tranquilo y con esos ojos brillantes…

Y sucedió lo impensable…

Dominic se inclinó y tomó el rostro de Jenne dándole un beso…

Hope se quedó boquiabierta…

Jenne abrió los ojos al sentir como aquel muchachito le tocaba los labios de modo sugerente, succionándole hasta los pensamientos que por un momento se pusieron en blanco y eso la apanicó… ¿Por qué parecía no pensar en nada? ¿Por qué ese chico parecía bloquear su mente?

Las acompañantes no supieron que hacer…

-¡Hey, no me tiren los libros! - Gritó el dependiente al ver lo que había sucedido

Jenne lo empujó asustada… si, asustada de que sus hechizos enviados mentalmente no le afectaran… ¿Qué era ese muchacho que parecía tan humano? No era como ella, pero ¿Qué demonios era?

Y ella hizo lo que toda humana hubiese hecho ante esa situación tan embarazosa… ¡Salir corriendo!

Hope iba ya atrás de ella, cuando Dominic le tomó del brazo y le propinó una sonrisa amable…

-¿Qué?

-Yo les llevo los libros al sitio en donde se hospeden - dijo amablemente

-¡Dominic! - Interrumpió Destiny

-¿Qué?

-¡Porque besaste a esa muchacha!

-¿Por qué no?

Hope se exasperó y comenzó a levantar los libros, para alejarse de ese muchacho lo más pronto posible y ver como estaba Jenne, la cual se notaba muy alterada.

-Yo los llevo…

-¡Pero…!

-Por favor, y me disculpo con tu amiga… ¿O es tu hermana?

-Yo… eh… si…

Ella dudo un segundo, pero le urgía ver mas a Jenne, así que le dijo el nombre del hostal y salió de prisa, para buscárla, la encontró en la habitación del hostal, totalmente alterada.

-¿Cómo estás?

-¿Cómo, cómo, cómo? ¿COMO?

-Tranquilízate… solo fue un beso…

-¡Si no es el beso lo que me escandaliza!

-¿A no? ¡A mi nunca me han besado! Que envidia… ¿Entonces por qué estás así?

-¡Porque trate de enviarle miles de hechizos y ninguno le dio!

-¿En serio?

-Te lo juro… fueron varios… y nada… estaba ahí, de pie, con esa maldita sonrisa y esos ojos tan extraños…  traté de leer su mente y algo me lo impidió… no pude avanzar más allá y él … él no estaba usando magia…

-Yo no sé … lo único que puedo decir es… ¡que el modo en que te besaba!

Jenne se sentó enfurruñada… en la larga vida que había tenido, sobre todo, el cuidado de no mezclarse mucho con magos o humanos comunes, ahora se venia a encontrar con uno que la alteraba sobremanera ¿Qué tenían esos ojos azul intenso que la alteraba y le ponía la mente en blanco?

De una cosa estaba segura… no podría ser humano