¡Vamos por más!
¡Vamos por más!
Hoy, miles de imágenes danzan frente a mi mirada y dentro de mi corazón.
¡Un año más! ¡Qué maravilla!
Hoy soy esta mujer que se fue formando a través de los años.
Me veo de niña y sonrío. La magia siempre me rodeó de la mano de papá, por sus cuentos y por "hacer aparecer cosas" en los lugares más estrafalarios. Mamá hacía magia a carcajadas y a chancletazos, además de la que hacía en mi cabeza con el más lindo de los moños que mi vecino no demoraba mucho en desarmar. Con abuela conocí a Tirichino y abuelo me llevó a conocer la magia sempiterna de los libros y los circos.
En mi hogar jamás hubo palabras prohibidas porque tuve la libertad de decirlas y papá se encargaba de explicarme su significado y alertarme de no repetirlas porque "eran feas".
Fue con mamá y papá que aprendí a no temerle al ridículo, ni a sentir vergüenza y a reírme de mí misma.
En ese ambiente distendido, en el que felizmente abundaron las peleas con mis hermanos y también la complicidad con ellos, llegué a mi adolescencia. Me prohibieron muchas cosas, me enojé con mis padres en reiteradas ocasiones, desobedecí muchas veces y enfrenté las consecuencias con la soberbia propia de una leona. Más de una vez golpeé mi cabeza contra la pared del baño mientras las lágrimas rodaban por mi rostro. ¡Me sentía incomprendida! Hoy me río de todo "ese teatro" porque hace rato que comprendí que mi adolescencia fue verdaderamente fantástica.
Lo vivido, lo "sufrido" y lo disfrutado en mi infancia y adolescencia me hicieron la mujer que soy hoy, con miles de errores cometidos y con algunos aciertos, pero segura de que pesan más estos últimos que aquellos.
Hoy, ya casi comenzando un nuevo año, repito una vez más que soy una mujer afortunada y agradezco todo lo que la vida me brinda.
¡Amo todo lo que tengo!
Pero cuando suenen las doce campanadas anunciando el inicio de un nuevo año brindaré no solo por ello, por mi familia y mis amigos, también lo haré por una sociedad más justa, menos indiferente, más comprometida en lograr un mundo mejor para todos.
Por un mundo sin hambre, sin guerras, sin abusos de ningún tipo; por un mundo con valores verdaderos y derechos respetados.
Por un 2023 donde sean soberanos la paz, la justicia y el amor ... ¡Salud!
ilargiluna
12/2022
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