▔▔▔▔▔▔▔▔▔▔▔▔▔▔▔▔▔▔▔▔▔

▔▔▔▔▔▔▔▔▔▔▔▔▔▔▔▔▔▔▔▔▔

—Oye Seokjin— llamo Namjoon, sacando al menor de su concentración— ¿Qué tanto conoces a Jimin? — preguntó al recordar lo que había visto el día anterior

—Lo conozco un poco— lo pensó un poco, teniendo en mente al rubio— creo que lo esencial, ¿Por qué?

—El otro día por accidente lo encontrar con la madre de Yoongi— mencionó, llevando su mirada hacia el menor

— ¿La madre de Yoongi Hyung? — frunció su ceño un poco confundido, no entendí que podía estar mal en que Jimin conociera a la madre de su Hyung

—los encontré en una situación muy extraña— dejó el bolígrafo en el escritorio, dando toda su atención a aquella mirada clara

— ¿Qué tiene de malo el hecho de que Jimin conozca a la madre de Yoongi Hyung?

— ¿no la conoces? — dijo, esperando que el menor dijera que estaba bromeando

— no— negó con su cabeza

—comprendo— se recostó en el respaldo de su silla— ella no es una buena mujer

— ¿no lo es? — ladeó su cabeza... cada palabra que escuchaba solo lo confundía más

—no — chasqueó su lengua, recordando todas las ocasiones que presenció su mal trato hacia su amigo, esa mujer era capaz de todo, con tal de mantener a Yoongi entre sus largas uñas— prométeme que no tendrás nada que ver con ese Jimin

—suenas como un padre Nam— bromeó un poco, pero, no rio al ver la mirada seria del mayor— no entiendo lo que me estás diciendo ¿no crees que estás exagerando?

—es mejor estar prevenido— tomó su botella de agua, colocando su mano en la rosca— Jimin no me da buena espina

—Jimin es un chico muy dulce— defendió, recostándose de igual manera en el respaldar de su silla— no deberías desconfiar tanto de él

— ¿acaso no ves lo raro que es todo? — comentó, intentando que el menor comprendiera su punto de vista— ese chico apareció de un momento a otro

—Existen los traslados Nam— frunció su ceño

—Por lo que me has comentado, siempre estuvo a espaldas de Yoongi— señalo— ¿no te parece extraño?

—Cuando te gusta alguien... — intentó hablar, pero, se vio interrumpido

—Conoce a Suran— resaltó— se veían cercanos

— ¿Por qué estás tan obsesionado con esa mujer? — frunció su ceño... comenzando a sentirse un tanto incómodo por las acusaciones hacia su amigo

— Por qué no se— se trabo, mirando su botella de agua, simplemente no le daba buena espina aquella situación— solo prométeme que no tendrás nada que ver con Jimin

— ¿te sentirías mejor? — preguntó en un tono comprensivo, sonriendo al ver aquel asentimiento— no tendré que ver en nada con Jimin, solo sere su amigo, te lo prometo

— ¿Podrías venir? — dejó la botella en el escritorio, extendiendo su mano en dirección del rubio- necesito dejar de pensar

—está bien— sonrió, levantándose de su asiento, para así encaminarse en dirección del moreno, tomando su rostro, dejando un casto beso en su nariz— te prometo que no sucederá nada

— ¿seguro? — sonrió, dejando que aquellas manos acariciaran sus mejillas

— ¿Quién diría que mi profesor de inglés estaría de esta manera? — rió por lo bajo, besando los labios del mayor— estoy seguro

▔▔▔▔▔▔▔▔▔▔▔▔▔▔▔▔▔▔▔▔▔

¿Estaba cansado?... tal vez, no sabía lo que ocurría con sí mismo... se sentía tan incómodo al estar en aquella situación, que simplemente estaba inquieto... una vez más había sido citado por Min Suran, en la misma cafetería donde la había conocido y donde había iniciado todo

No comprendía el motivo, pero, esperaba pacientemente por aquella mujer; sin embargo, las personas lo observaban dado el hecho de que ya había transcurrido un largo tiempo y aun se encontraba solo

¿Acaso la mujer se había burlado de él?

— lamento la demora— se disculpó dicha pelinegra, resonando sus zapatos en el suelo, antes de sentarse en frente de Jimin— ¿has esperado mucho tiempo?

—no tanto— mintió, ocultando la molestia de su rostro

— me alegro de que no fuera tanto— se abanicaba con su mano— tuve que resolver unos problemas legales— comentó, frunciendo su ceño, mostrando su fastidio— iré directo al punto

—dígame— habló, colocando su completa atención en lo que sería dicho

—Quiero probar un poco del progreso— sonrió, confundiendo al rubio ¿probar? — quiero ver el proceso en mi Hijo

—no comprendo

—hoy es un día nublado— mencionó sin sentido la pelinegra, mirando por la ventana de cristal— oh mira, está lloviendo— sonrió— es perfecto

— ¿perfecto? — llevó su mirada hacia el mismo punto

— ¿Tienes tu móvil contigo? — preguntó, observando al rubio y como buscaba entre sus bolsillos el artefacto— llama a Yoongi

— ¿Qué? — detuvo sus movimientos, mirando a la mujer esperando una respuesta ante aquel pedido

— Quiero ver que tanto podría hacer por ti— explicó, señalando el móvil— llámalo y dile que te espere en aquel lugar— señalo, la pequeña plaza que alojaba en frente de la cafetería

Siempre estare para ti

—Señora Suran

— ¿Tienes miedo? — preguntó, observando al menor dudar— te aseguro que será divertido, hazlo

Sin esperar una nueva indicación, desbloqueó su móvil, observando la pantalla, mientras llamaba y esperaba, sobre saltándose al escuchar la voz de Yoongi del otro lado de la llamada

Llamada con Yoongi

— ¿Hola?

— Hyung

— ¿Puedes venir?

— ¿Sucedió algo?

— Solo quiero verte

— ¿verme?

—¿Qué tanto me extrañas?

—Te extraño

—ven por mi

— ...

— ¿Dónde estás?

— Estoy cerca del parque Dosan-

—Espérame en la entrada

—iré por ti

Fin de la llamada

—Wooah que decidido— felicito la pelinegra, esperando con tantas ansias el momento y escuchando a lo lejos un trueno

—Aquí tiene su paquete— comentó el hombre de mediana edad, entregando el paquete que tanto había esperado Yoongi— solo tienes que firmar aquí, confirmando que lo has recibido— explicó, mostrando unos documentos

—ya veo— tomó el bolígrafo, firmando lo necesario, tomando de antemano el libro envuelto

Resguardo el paquete entre sus cosas y colgó su mochila en su espalda, comenzando a caminar entre las personas, consideraba extraño el hecho de que Jimin estuviera en el parque Dosan, era muy alejado del restaurant, de su departamento y sobre todo de la universidad

Se acercó a la calle, deteniendo un taxi y subiendo en el

—lléveme al parque Dosan, entrada principal— comunicó, recostándose en el asiento

¿Cuánto tiempo había pasado desde la última vez que había visto aquel lugar?

Quedaba muy cerca de su antigua casa, el lugar donde se encontraba su madre

— ¿Te perdiste? — intentó especular una idea— ¿Por qué estás en aquel lugar?

Giró su rostro hacia la ventana, notando como en ella caían pequeñas gotas, anunciando la inevitable tormenta que ya había sido anunciada en las noticias

— ¿Puede darse un poco más de prisa? — preguntó, escuchando la afirmativa del conductor

Luego de unos largos minutos, el auto se detuvo

—Hemos llegado— habló el castaño, esperando pacientemente su paga, sin embargo, se sobresaltó por el fuerte trueno y por la manera en la que Yoongi había salido del auto, acercándose a la ventana delantera

—Gracias por el viaje— entrego unos cuantos Wons, enderezándose y buscando con su mirada la entrada del parque

Pero, al dar con esta, fue consciente de que el menor no estaba; miró hacia ambos lados de la calle y cruzó corriendo, sintiendo como las gotas de agua comenzaban a humedecer su cabello

—Oh mira— señaló Suran, ganándose la atención del rubio— ya llego, mira que tierno se ve

—Hyung— susurró en un tono inaudible, observando la manera en la que el mayor lo buscaba

— ¿Te está llamando? — preguntó la pelinegra al ver como Yoongi sacó su móvil, a los segundos teniendo razón— no contestes

— pero...

— mira lo patético que se ve— comenzó a reír a carcajadas— es como un cachorro, lo has cumplido

— ¿Por qué no contestas? — se preguntó el pálido, volviendo a llamar, cayendo en el buzón nuevamente

Las gotas de lluvia comenzaron a ser más agresivas, sin embargo, el pálido solo hecho su cabello hacia atrás, dispuesto a esperar al menor en aquel lugar... estaba seguro de que en cualquier momento llegaría y no quería dejarlo plantado debajo de la lluvia, claro, no hubiera sido mala idea haber comprado una sombrilla, pero, jamás tomó en cuenta que la tormenta alcanzará su tiempo

[¿Por qué sigues ahí parado?] — cuestionó el rubio, frunciendo el ceño, sintiéndose angustiado — [solo vete]

La manera en la que te mira es muy tierna

— ¿Una vez más? — preguntó, escuchando el móvil de Jimin y la manera tan insistente en la que llamaba su hijo — debe estar muy preocupado por ti

—Eso creo— se limitó a decir, sin apartar su mirada de Yoongi, algo de lo cual la mujer fue consciente

— Felicito tu trabajo Kitty— colocó su mano en el hombro del menor— eres bueno en lo que haces

—Agradezco sus palabras— llevó su castaña mirada hacia la mujer, volviendo a escuchar su móvil y los fuertes truenos, sintiendo una gran desesperación en su interior

— Hasta luego— se despidió, viendo una última vez a su hijo— que divertido

Lentamente Suran se retiró, siendo seguida por su chofer... mientras una pequeña carcajada escapaba de sus labios

—Me alegro de ver de esta manera a quien más odio en este mundo— dijo, subiendo a su auto, siendo protegida por una sombrilla— vamos a casa Nataniel

—Entendido señorita

— ¿Por qué no solo te vas? — dijo en un tono bajo, apretando el móvil en su mano— ¿Por qué me esperas?

Siempre estare para ti

Una vez más resonaron aquellas palabras en su mente

¿Por qué?

¿Por qué estaba teniendo consciencia?

¿Por qué sentía culpa?

No debía sentirlo... debía reírse

Pero, cuando solo intento reír, giró y comenzó a correr hacia la salida, escuchando la fuerte tormenta al abrir la puerta

¿Qué era Yoongi para él?

—Oye ten cuidado— se quejó una mujer, viendo la manera en la que Jimin se encaminaba hacia el parque Dosan— ¿Por qué ese chico se dirige hacia el parque en plena tormenta?

Estaba corriendo... ¿Por qué estaba corriendo? su respiración era agitada y su corazón bombeaba sin parar, estaba corriendo en dirección de Yoongi... ¿En qué momento se volvió tan bueno fingiendo? Comenzaba a creer su propia mentira...

Le importaba...

— ¡Yoongi! — alzó su voz, captando la atención del mayor, sintiendo su corazón dar un salto al conectar su mirada y ver aquella sonrisa

—Jimin — dijo, acercándose un poco hacia el menor, pero, en ello sintió como este tomo su mano y lo forzó a caminar

— sígueme— habló con su voz agitada, apresurando su paso hacia una pequeña mesa de almuerzos techada— ¿eres idiota? — preguntó con enojo, observando aquella mirada oscura— ¿Por qué solo no te fuiste?

—Esperaba por ti— respondió, quitándose la mochila y dejándola en la mesa

— ¿Por qué? — se acercó, haciendo que el mayor retrocediera unos pasos— ¿Por qué esperaste por mí?

—Porque me importas— confesó, sorprendiendo al menor

— ¿Por qué te importo? — se alejó un poco, sintiendo el preciso momento donde su corazón se detuvo

— Porque me gustas Jimin— dijo sin más

— ¿te gusto? — preguntó con un nudo en su garganta, queriendo calmar los latidos de su corazón

—me gustas— confirmó, acercándose lentamente, hasta estar enfrente del menor— esta vez, quiero confesarlo de una mejor manera

—no lo hagas Yoongi— suplicó el menor, sintiendo como las frías manos tomaron su rostro— enloqueceré

—Te amo— susurró, antes de unir sus labios junto a los del rubio

Su corazón estaba por explotar

¿Él responsable de sus latidos era Yoongi?

¿Él era quien lo hacía sentir así?...

¿Por qué se negaba a saber por qué?

Sabía muy bien el motivo

Lentamente Yoongi se apartó de los labios del menor, observando aquel sonrojo y la manera en la que sus ojos se encontraban abiertos

—me besaste— acusó, haciendo reír al mayor

— ¿Lo lamento?

—Eres un tonto— desvió la mirada, relamiendo sus labios... no había una manera de negar aquello que estaba sintiendo, era evidente

—Tengo algo para ti— comentó el pálido, deseando que no se hubiera humedecido

— ¿algo? — observó de reojo... intentando calmar sus emociones, aunque fuera inútil

—es un regalo— abrió su mochila, sacando el paquete— solo está un poco húmedo

—Me gustas— interrumpió el menor, confesando aquello de lo cual se sentía más seguro— me gustas Yoongi— no había una manera de mentirse más a sí mismo

— ¿Qué estás diciendo? — preguntó, sintiendo su corazón latir sin parar

—habló en serio— relamió sus labios

— ¿Qué haces? — se alejó, al notar la manera en la que se acercaba el rubio

—Debo besarte, así como tú lo hiciste— volvió a intentar agarrar las mejillas del mayor, sin embargo, lo vio caer de espaldas al césped, al tropezarse, ocasionando que riera— no huyas de mi— dijo, saltando el banco con el cual había tropezado el pálido, ahora acorralando al mayor contra el suelo, escuchando su gruesa risa, junto a la suya— yo también te amo Hyung— susurró, viendo el preciso momento donde sus mejillas se volvieron rosas— te amo mucho

—Ya para— simuló que estaba viviendo una tortura, al poco tiempo sintiendo los labios de Jimin contra los suyos, en un tierno beso, que seguramente nunca olvidarían...

Jimin al fin lo había comprendido... todas aquellas emociones... había sido demasiado ignorante consigo mismo; su padre tenía razón

Tal vez en un principio no gustó de él y solo lo buscara como una herramienta... pero, en ese preciso momento, nada era igual

El destino había tenido planes diferentes a los que él había planeado

▔▔▔▔▔▔▔▔▔▔▔▔▔▔▔▔▔▔▔▔▔

— ¿Qué es eso? — preguntó Taehyung, viendo detenidamente lo que escribía Hoseok

—dame tu mano— pidió con una sonrisa en sus labios— confía en mí

—confió en ti— aseguró, dejando su palma en la del mayor, recibiendo en ella un pequeño trozo de papel donde estaba escrito números junto letras— ¿Qué es esto? — frunció su ceño

—es un código— explico, señalando los números junto a las letras— así nadie sabrá lo que yo puedo decirte

—en este momento ni siquiera yo se que me dices Hobi— río, sintiendo sus mejillas arder por la vergüenza, se sentía un analfabeta

—déjame mostrarte— río, acercándose y besando la mejilla del menor, para luego observar la nota en manos del castaño, señalando los numero— este es una e, este es una a, este es una m y este es una o

— ¿Te amo? — se preguntó en un susurró— te amo— dijo en voz alta, llevando su mirada emocionada hacia la de Hoseok

—Yo tambien te amo— se acercó con la intención de besar al menor, pero, antes de que lo lograra escucho el sonido de una cámara

Ambos voltearon buscando con su mirada a la persona, pero, no había nadie, estaban completamente solos

— ¿escuchaste también una cámara? — preguntó Hoseok, viendo el asentimiento del castaño— espérame aquí— pidió, levantándose con la intención de buscar a la persona que había tomado la fotografía

Sin embargo, sintió su mundo caer al ver al chico del periódico correr por los pasillos, ¿Cómo había sido tan descuidado?... todos sabrían de su relación con Taehyung y aquella basura llegaría a manos de su padre

—Maldición— apretó sus manos en fuertes puños, golpeando la pared— ¿ahora que hago?

Amaba a Taehyung, pero, las cosas no eran tan sencillas... tenía mucho por lo que lidiar... su padre, el simple hecho de su padre le preocupaba, luego de tantas investigaciones, fue consciente de que Tae no venía de una familia aliada al dinero, ni siquiera su carrera era una que buscará la riqueza

¿Qué debía hacer?

Muy pocas personas sabían de aquella relación, pero, si otras solo se enteraban, todo sería un desastre y todo lo que había planeado se vendría cuesta abajo

— ¿Hobi? — preguntó el castaño haciendo acto de aparición, mirando por el largo pasillo— ¿Quién era?

—Alguien del periódico— respondió, intentando aligerar su temperamento— creo que muy pronto seremos famosos— sonrió

—Comprendo— sonrió, al poco tiempo sintiendo la manera en la que el mayor acunó una de sus mejillas— ¿te preocupa esto?

—No, ¿Por qué? — dejo caricias en la suave mejilla

—Te veías muy enojado— lo había visto, jamás había imaginado que algún día vería aquella faceta de aquel hombre tan alegre, era como si estuviera viendo alguien diferente

—Solo me molesta un poco que irrumpa en mi privacidad— se acercó, depositando un beso en la mejilla del menor

—Entiendo— quería creer en aquellas palabras

— ¿Quieres que te enseñe el código? — propuso, soltando la mejilla del castaño, ahora tomando su mano

—Me gustaría entenderlo — asintió, siguiendo al pelirrojo hacia aquel salón de clases, observando al final del pasillo a una persona...

—Odio a las personas del periódico— confesó el pelirrojo, soltando la mano del menor para así sentarse— son muy entrometidas

—solo hacen su trabajo Hyung— minimizó, escuchando el bufido del mayor

—viven a costillas de las vidas de las personas Tae— tomó su libreta, comenzando a anotar unas cosas— este es el código

— ¿Cuál? — se acercó, parándose a un lado del mayor, viendo lo que este había anotado con detalles— se ve un poco complicado

— no lo es, cuando llegas a comprenderlo— elevó su mirada, observando la oliva— muy pocas personas conocen este código

— ¿muy pocas? — ¿aquello era posible?

— son tan pocas que pueden ser contadas con mis dedos— hizo muestra de sus manos— no es un código muy conocido

— ahora yo tambien se de el— se agacho, escuchando la risa del pelirrojo a su lado

—Ahora no tengo dedos para contar cuántas personas saben de el

— ¿De verdad nadie sabe de este código? — lo vio negar— es impresionante

—Muy pocos desean complicar sus vidas con estas cosas— explicó, escribiendo unos números— en mi caso es diversión

— ¿diversión?

—te gusta preguntar ¿no? — rió por lo bajo

—Solo soy un tanto curioso— río, empujando al mayor— solo responde mi pregunta

—Me es divertido porque nadie además de mi sabe lo que digo

—Es como tu propio idioma— comentó Taehyung, comprendiendo las palabras del mayor

—Exacto, es como mi propio idioma

Era su propio y único idioma, pero, aunque tuviera su propio idioma, luego de que aquel periódico fuera publicado, todos sus secretos saldrían a la luz

▔▔▔▔▔▔▔▔▔▔▔▔▔▔▔▔▔▔▔▔▔

Sigan adelante y cumplan sus sueños

No permitan que nadie apague su brillo

DM los ama