— Pero Noona así no debe ser — protesto por tercera vez JiMin manteniendo su expresión levemente preocupada y ansiosa.

— Y por qué no debe ser así? que sientas atracción hacia un hombre no está mal — cuestiono.

— Pero solo se enamoran los hombres de las mujeres —.

Hyuna solo rodo los ojos, ya un poco harta por la terquedad del menor — ¿Que sentiste cuando él te abrazo o cuando estabas a su lado? — pregunto repentinamente.

— Bueno... mi corazón late mucho y hay algo en mi estómago que se mueve, cuando me abrazo yo sentí mis mejillas calientes — respondió jugando con sus dedos y con la cabeza abajo, obviamente avergonzado.

— Vez? uno siente eso cuando está enamorado y no importa si es un hombre o una mujer, cuando te enamoras de verdad, simplemente, ya no hay vuelta atrás, solo te queda avanzar y caer en el amor — argumento con confianza, buscando las palabras exactas.

— ¿Y si no quiero caer? — pregunto nervioso y con el semblante preocupado — ¿Y si YoonGi Hyung no siente las mismas cosas que yo? — .

— Entonces averígualo, descubre si el solo te quiere como un amigo o talvez como algo más, si te corresponde, no temas y déjate caer junto a él, pero si no es así, solo quedara tu amor platónico del cual algún momento te olvidaras y seguirás adelante — animo la pelinegra dándole un apretón de hombro.

— ¿Un amor platónico como el de usted por Jessi Noona? — curioseo.

— Algo así — respondió la mayor con un ligero rubor en sus mejillas al verse expuesta.

— Gracias... —murmuro JiMin después de unos minutos de silencio — Siempre puedo confiar en usted ante cualquier cosa — comentó alegre y más calmado.

— Yo siempre estaré para ti JiMinie, nunca olvides eso — expreso como una madre feliz de ver a su hijo.

JiMin se quedó un buen rato en la casa de su Noona, para poder desayunar juntos, hoy era domingo y no tenía que ir al trabajo. Después de eso se despidió y regreso a su hogar, entro a su habitación, se sentó en su cama y frunció el ceño... aún tenía cierta duda con respecto a... eso, ¿Cómo sabría si su Hyung está enamorado del? obviamente no le iba a preguntar directamente, eso sería muy vergonzoso, pero, entonces ¿Cómo lo averiguaría?.

El sonido de su teléfono lo saco de sus pensamientos, agarro el pequeño aparato y busco con sus dedos la tecla para responder.

— Hola? — pregunto.

— JiMinie, soy TaeHyung — contesto.

— Tae — saludo — ¿Qué es lo que pasa? —

— ¿Tiene que pasar algo para que pueda llamarte? — pregunto fingiendo indignación — Aunque, bueno, si pasa algo — aclaro —Hyung salió desde muy temprano, es más, cuando yo desperté el ya no estaba; me aburro mucho estando solo, GiGi sigue durmiendo, ese gato solo sabe dormir y comer, y como no tengo nada que hacer me preguntaba si quisieras ir al parque a caminar o a comer un helado, cualquier cosa para des aburrirme —.

— Esta bien, también necesito despejarme un poco; pero, solo no te alejes mucho de mí, ya sabes — recordó.

— Por supuesto, seré tu hermano mayor —

Del otro lado se escuchó una pequeña risa — Nos vemos en 15 minutos — anuncio.

— ¿Tan rápido? Pero bueno ¡Está bien! — y sin más cortaron la llamada.

❇🥀❇

— ¿Vainilla, chocolate o chocolate con vainilla? — pregunto curioso mientras veía las opciones.

— Chocolate con vainilla — respondió JiMin.

— Denos, un helado de vainilla y otro de chocolate con vainilla, por favor— pidió TaeHyung al heladero y pago — Vamos a esperar aquí — anuncio y guio al peligris a una de las mesas disponibles del pequeño puesto andante.

Después de unos minutos recibieron su pedido, mientras los dos amigos conversaban felices.

— Siempre me eh preguntado ¿Cómo es que puedes orientarte tan fácilmente por la florería? Caminas como si estuvieras en tu casa, a veces, cuando te veo trabajar así pienso que no estas ciego — comento TaeHyung mientras probaba su helado.

— Mis otros sentidos están más desarrollados, por así decirlo, mi oído capta sonidos que los demás emiten y así puedo saber dónde están, a veces mi mente se imagina el lugar y otras veces mi tacto me ayuda a orientarme — informó feliz JiMin también degustando del helado.

— Es grandioso — alabo el rubio.

— Si lo es — apoyo — Mira, cierra tus ojos eh intenta caminar hasta mi — propuso JiMin dejando en la mesa el vasito de helado vació junto a la cucharita de plástico.

TaeHyung acepto eh hizo lo que JiMin dijo, cerro sus ojos y se levando con cuidado de la silla.

— Solo escucha el sonido que hare — anuncio el de cabellos grises posicionándose a unos pasos de su amigo.

De pronto, TaeHyung escucho un leve silbido no muy lejos de él, supuso que era JiMin; entonces camino despacio siguiendo solo el silbido. Cada paso que daba se sentía extraño y sumamente emocionante a la vez, el rubio caminaba con miedo a caerse, pero de todas formas siguió caminando de poco hasta que sintió unas manos en su hombro.

— Llegaste — dijo JiMin tocándolo — ¿Cómo te sentiste? — pregunto.

— Como si me fuera a caer — dramatizo el rubio abriendo sus ojos — Sentía que iba a chocar con algo y me quedaba inmóvil, enserio no sé cómo lo haces — expreso levemente sorprendido.

— Supongo que si lo haces constantemente te adaptaras — alentó JiMin, mientras empezaban a caminar por el parque acompañado de TaeHyung y su helado.

— ¿Por qué silbaste? — pregunto de repente metiendo otro bocado del dulce cremoso.

— No lo sé, fue lo primero que se me ocurrió para llamarte — respondió un poco nervioso y desviando levemente sus ojos a cualquier parte — Así fue como me encontró YoonGi Hyung — recordó murmurando para sí mismo y sintiéndose extrañamente feliz cuando las palabras de YoonGi pasaron por su mente, otra vez.

"Te juro que si te pierdo, no me lo perdonare nunca"

Aunque las palabras sonaban como un hermano preocupado, JiMin no pudo evitar ese sentimiento de sentirse protegido. "Se preocupa por mi" es lo su mente y corazón le dicen a cada instante, enamorándolo mas del pelinegro.

— JiMin — llamo TaeHyung viendo como su amigo sonreía como bobo.

Guardando sus sentimientos a dentro de su ser, JiMin salió de su pequeño mundo y presto atención a su amigo.

— ¿Decías algo? — pregunto nervioso tratando de mirarlo, pero por razones obvias no podía o no lo lograba.

— ¿Qué te pasa, JiMin Hyung? — interrogo TaeHyung mirándolo fijamente.

— Nada — respondió sintiendo la mirada en él.

— ¿Por qué sonreías así? — continuo.

— Por nada — respondió sonrojado.

— ¿Algo pasa verdad? ¿Recordaste algo bonito? — siguió preguntando el rubio, queriéndole sacar información a su amigo.

Sintiéndose atrapado y queriendo desahogarse con alguien más, JiMin decidió confesar.

— ¿Si te lo digo, no te molestaras? —

— ... No lo hare — respondió después de unos segundos.

TaeHyung boto el vasito al cesto de basura cuando vio que no había nada, luego, se sentó en una banca del parque al igual que JiMin.

— Creo... creo que me gusta YoonGi — confeso sonrojado y con cabeza abajo.

El rubio abrió la boca y pestaño un par de veces, realmente sorprendido. Esa noticia lo agarro desprevenido. Hubo unos minutos de silencio que JiMin odio en grande y pensó lo peor, pero cuando TaeHyung toco su hombro, se alivió. Levanto su cabeza y trato de observarle.

— ¿De verdad? — fue lo primero que dijo TaeHyung, quería confirmar lo que JiMin dijo.

Después de pensarlo unos minutos respondió — Si —.

— No sé qué decir... es mi hermano y tú eres mi amigo — argumento. El rubio estaba tratando de procesar todo.

— Lo sé... pero simplemente paso — balbuceo volviendo agachar su cabeza apenado.

TaeHyung noto el bajón de amigo y lo miro, si bien no estaba en contra del amor gay, le era un poco extraño que su hermano y su amigo estuvieran juntos.

Aunque no había nada de malo, el podía seguir siendo su amigo después de todo, sin importar la relación que en algún futuro podrían tener sus Hyung's.

— Todo está bien JiMin Hyung, estoy feliz por ti — y solo con esas palabras JiMin pudo suspirar totalmente aliviado al enteraste de que TaeHyung no le dijo nada malo como temía. Ambos amigos se abrazaron como si se hubieran reconciliado de una discusión.

— ¿Ya se lo contaste a YoonGi Hyung? — pregunto cuando terminaron su abrazo.

— No... aun no — respondió — Pero, se lo diré algún día — prometió.

— Espero que ese día llegue pronto — comento sonriendo.

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