—¿Cómo te fue en tus vacaciones Edd? —

—Muy bien Patryck —sonrió —, ¿Y a ti? —

—Maravilloso...—suspiro —, Desde la semana pasada me mude con Paul a su hogar. —

—¿Enserio? —hablo sorprendido —, ¡Estupendo! —

—Lo sé...—se sobo el hombro —, Desde que vio que nadie le importaba que saliera con un chico decidió hacer nuestra relación más seria. —

—Me alegro por ustedes dos —empezó a reír —, Cuando hagan una boda no se olviden de invitarme. —

—¡E-Edd! —chillo —, A-Aun no llegamos a eso. —

—¿Y no quieres llegar a eso? —movió sus pestañas de arriba abajo.

El polaco asintió la cabeza frenéticamente nervioso mientras jugaba con sus manos.

—Me gustaría llegar al altar con él. —

Ambos estaban tan enfocados en su charla que no se dieron cuenta que un sonrojado sujeto de cejas pobladas se encontraba atrás de los estantes.

«Yo también quiero llegar al altar contigo Patryck... »miro el suelo «, Solo espera... »

—Bueno Edd te dejo —cruzo brazos —, Mi turno para cuidar la caja registradora comenzara en dos minutos. —

—Bien, suerte con eso —dijo al colocar una etiqueta en el estante.

El chico de cabello bien arreglado asintió la cabeza alegre antes de comenzar a caminar tranquilamente hacia la dirección de los cajeros.

Edd dio una pequeña risa al ver la emoción de su compañero.

Al terminar de colocar la etiqueta del precio de los cereales comenzó a colocar varias cajas nuevas mientras quitaba las más viejas, tan enfocado estaba en eso que no se dio cuenta que un chico de ojos plateados lo miraba desde una esquina feliz.

Habían pasado dos semanas y Edd le había enseñado muchas cosas a "Rojo" sobre como dibujar, obviamente sus dibujos aun eran malos pero practicaba en las madrugadas para intentar sorprenderlo algún día. Aunque siempre al día siguiente recibía las consecuencias del desvelo.

Lo que hacía por amor.

Con pasos rápidos, pero silenciosos, quedo atrás del chico castaño para intentar tomarlo por sorpresa. Tenía un buen regalo para su humano.

—Hey...—

Edd tembló del al escuchar la suave pero seductora voz de "Rojo" en su oído, eso había sido tan inesperado para él que por el susto rompió la caja de cereal logrando que todo su contenido callera al suelo, aunque para su suerte la bolsa impidió que el alimento se esparciera en el suelo.

—Eh...—rio nervioso —, Yo pagare eso...—se jalo el cuello de su ropa.

—¡R-Rojo! —chillo —, ¡¿Q-Qué haces aquí?! —tartamudeo feliz.

—Perdón Edd, no fue mi intención asustarte —hablo apenado —, S-Solo quise venir a saludarte y-y...—trago duro —, A invitarte a comer. —

El castaño sintió su rostro calentar como al mismo tiempo sintió su corazón golpear fuertemente su pecho, era la primera vez que alguien le decía eso a parte de Patryck y anteriormente Jesica.

—¿I-Ir a comer? —sonrió nervioso —, ¿Y-Yo? —se apuntó con el dedo.

—Sep —asintió la cabeza.

Edd estaba feliz de escucharlo, al mirarlo mejor noto que "Rojo" tenía una pequeña mochila casi parecida al de los carteros pero más delgada como para el tamaño de libretas escolares.

—¿Y eso? —señalo la mochila —, ¿Estudias? —

—¿E-Eh? —oculto la mochila —, N-No—rio nervioso —, Es solo que estaba practicando mis dibujos...—

—¡¿Enserio?! —chillo alegre —, ¿Me los muestras? —

—Uh...—miro nervioso el suelo —, Aun no se dibujar tan bien como tú Edd. —

—Oh vamos Rojo —junto ambas manos —, Anda muéstrale a tu amigo el progreso que llevas. —

"Rojo" miro con pena ese rostro alegre, tenía mucha vergüenza de no dibujar tan bien como su humano, sus esfuerzos de evitar enseñárselos fueron al final en vano al ver esos ojos brillante color café.

—Bien... —murmuro apenado.

Edd soltó un pequeño "Yey" feliz al ver que pudo convencerlo.

"Rojo" sin darse de rogar de nuevo, saco de su pequeña mochila una libreta del mismo color pero con pegatinas de gatos, bolas de estambre, pescado y pistolas. Otra de las cosas que le gusto a Edd de "Rojo" fue que su animal favorito eran los gatos, la primera vez que lo invito a su hogar Ringo se llevó tan bien con él que incluso se durmió en su regazo mientras practicaba dibujo.

Hubiera deseado que Tord estuviera en casa para conocerlo.

—Veamos...—susurro al abrir la tapa de cartón.

Cada página que daba Edd era de peor a mejor dibujo, cosa que le fue gustando puesto que le recordó cuando él mismo fue mejorando tras el paso del tiempo. Todo estaba en orden hasta que llegó a una página que lo dejo sorprendido.

El dibujo de un gato hembra junto con varios de sus bebes estaban plasmados con varios diferentes tonos de grises gracias a los diferentes lápices, si bien aún le faltaba mucho para hacer bien las proporciones admitía que era un bonito dibujo.

—¿Y esto? —pregunto curioso al mostrar el dibujo.

—No lo sé —se encogió de hombros —, Una noche en la cual estaba practicando me vino esa imagen a la cabeza —se rasco la nuca —, Supongo que es una madre cuidando a sus hijos recién nacidos—dijo sin importancia.

Edd se quedó callado, ahora que miraba mejor el dibujo notó que el gato se parecía mucho a la madre de Tord y Ringo, pero descarto esa idea rápidamente. No había forma en que "Rojo" supiera lo que les sucedió, ¿Coincidencia? Tal vez.

—Realmente has mejorado Rojo —cerro la libreta —, Estoy orgulloso de ti. —

—Gracias Edd...—hablo apenado al recibir su libreta —, ¿Entonces...?—

—¿Entonces? —

—¿Quieres venir a comer? —

—¡Por supuesto! —saco su celular —, Mi turno de la comida empieza en cinco minutos. —

—Te espero entonces —metió ambas manos en sus bolsillos.

—Bien —miro la caja del suelo —, Sera mejor esconder esto antes de que mi jefe me regañe. —

—¿Sabes que hay una cámara arriba de nosotros verdad? —apunto sin dejar de mirarlo a la cara.

Edd se tensó de golpe mientras empezaba a sudar frio, su jefe siempre revisaba las grabaciones y eso lo dejo con un miedo profundo al darse cuenta que lo regañaría por haber perdido tiempo hablando con su amigo.

—Tranquilo —dijo al colocar su mano en su brazo —, Yo iré a pagar esto mientras tú terminas de hacer lo que hacías. —

—B-Bien...—

●▬▬▬▬▬▬▬▬ Tiempo Después ▬▬▬▬▬▬▬▬▬●

—Me dijiste que no eras alguien de cosas elegantes —se encogió de hombros —, ¿Te gusta? —

—Claro que si —miro el restaurante—, Se ve cómodo—cerro la puerta.

"Rojo" había llevado a Edd hasta un pequeño restaurante cerca de una estación de trenes, el aroma a hamburguesas lograba hacer que se les hiciera de agua sus bocas, el tocino era lo que más logro identificar el ex-gato.

—Huele tan bien...—suspiro.

—Lo sé —rio —, Entremos Edd. —

—Bien. —

Ambos con pasos tranquilos entraron al restaurante, la pequeña campana hiso resonar y al entrar vieron que había poca gente, cosa que les gusto a los dos. Sin perder tiempo caminaron hasta una pequeña mesa con dos asientos.

Los dos tomaron la pequeña carta para leer le menú, "Rojo" automáticamente eligió lo que quería al ver la fotografía de la comida. Mientras que Edd le tomo un poco más de tiempo.

—Buenas tardes —dijo la mujer —, ¿Qué van a querer? —mostro su libreta.

—Yo quiero un huevo frito con la porción de tocino, mucho tocino si es posible—cerro la libreta.

—Uhh...—hablo divertida —, ¿Amante del tocino? —escribió la orden.

—Por supuesto. —

—Bien, bien —asintió la cabeza —, ¿Y usted? —

—Tres porciones de pizza de pepearon, por favor—sonrió.

—Entendido—dijo al escribir —, ¿De tomar? —

—Coca-Cola —ambos dijeron al unísono.

La mujer dio una pequeña risa al escucharlos hablar al mismo tiempo, en cambio Edd y "Rojo" se miraron sorprendidos mientras que un sonrojo apareció en sus rostros.

El chico de ojos plateados dio una pequeña risa nerviosa al querer romper ese pequeño e incómodo silencio que se formó.

—Bueno—dejo de reír —, En un momento les traigo sus pedidos. —

—Gracias —dijeron los dos nuevamente al unísono.

Edd y "Rojo" de nuevo se quedaron callados.

—Esto es nuevo para mí...—susurro.

—¿Eh? —parpadeo —, ¿Cómo dices Edd? —

—Esto —miro alrededor —, Que alguien me invite a ir a comer que no sea un compañero o Tom. —

—Oh...—murmuro triste —, ¿Enserio? —

—Enserio...—suspiro —, Como te habrás dado cuenta no soy muy social...—pauso —, Además, la poca gente que se molesta en hablarme termina aburriéndose. —

—Pues son unos idiotas. —

—¿C-Como? —miro sorprendido.

—Edd, eres un gran chico —sonrió —, Divertido, amable, educado y eres muy interesante para mí. —

—Oh vamos no es para tanto...—

—Es la verdad —tomo su mano —, Venga anímate, soy tu amigo y te estoy diciendo la verdad. —

Edd sonrió nervioso, los dos pulgares del oji plateado no dejaban de acariciar sus manos y eso lo relajo bastante. Además de que las palabras de "Rojo" le subieron algo la autoestima.

—Gracias...—

—Descuida Edd —apretó sus manos —, Recuerda que siempre contaras conmigo. —

Antes de que el castaño pudiera responder eso la mujer con delantal llego con su comida, Edd se lamio los labios al ver que las rebanas eran grandes y los condimentos olían muy bien. En cambo "Rojo" le brillaron los ojos al ver la gran cantidad de tocino grasoso en su plato.

—Provecho. —

—¡Gracias! —

La mujer nuevamente rio al escucharlos hablar al unísono.

Ambos dejaron la plática a un lado para poder comer, mientras Edd se comía su primera rebanada de pizza, "Rojo" se comía varios trozos de tocino a la vez.

Tras el paso de los minutos sus platos fueron quedando más y más vacíos hasta el punto en que uno de ellos quedo nada más la orilla de pan mientras que en el otro quedo simplemente la grasa de la comida.

Los dos sonrieron de oreja a oreja al acabar de comer, ambos tenían los ojos cerrados mientras dejaban reposar sus estómagos ahora llenos. Pero el de sudadera verde no pudo evitar abrir un ojo para ver a su amigo.

Ese rostro pacífico y neutral lo dejo ver detalladamente su rostro, su piel era algo clara pero no tanto como para ser pálida, se podía notar que sus mejillas estaban algo rosadas por lo cálido que se encontraba y esas diminutas pecas le lograron gustar de cierta forma.

Su propio rostro se sonrojo un poco al ver los colmillos de su amigo en cuanto bostezo.

—Eso estuvo delicioso...—se estiro —, ¿Verdad Edd? —

—Uh... uh, si...—murmuro.

"Rojo" abrió los ojos al escuchar la forma algo lenta de hablar de su humano, pero al hacerlo lo único que encontró fue un rostro sumamente sonrojado casi como un tomate mientras miraba a otro lado.

—¿Estas bien Edd? —hablo preocupado.

—E-Estoy bien Rojo —rio nervioso.

—¿Seguro? —suspiro al verlo asentir la cabeza —, Antes de volver quisiera darte algo...—

—¿Enserio? —pregunto curioso.

El oji plateado no dijo nada, en cambio coloco su mochila entre sus piernas para poder abrirla. Mientras él buscaba algo entre sus cosas la mujer apareció para dejarles la cuenta y al mismo tiempo para poder recoger los platos.

—Aquí esta. —

"Rojo" no se hizo de rogar y rápidamente coloco una pequeña caja blanca en medio de la mesa con un gran listón rojo.

Edd miro asombrado eso.

—¿Y-Y esto? —tartamudeo.

—Un regalo —movió la caja —, Para ti. —

—¿P-Para mí? —

El oji plateado asintió la cabeza a pesar de saber que no lo estaba viendo por mirar la pequeña caja decorada. Edd estaba totalmente mudo, nunca nadie le había dado un regalo, claro sin contar sus cumpleaños, pero nunca de esa forma tan repentina.

Al ver que "Rojo" le empujo un poco más la caja no pudo evitar tomarlo con manos temblorosas, estaba nervioso, emocionado y al mismo tiempo excitado de saber que era ere regalo con bonita caja.

"Rojo" sabia como podía actuar su humano y prefirió no presionarlo dejando que abriera la caja cuando estuviera listo.

Estaba emocionado de ver su reacción.

Edd aun con manos temblorosas tomó la tapa y lentamente comenzó a alzarla dejando un diminuto y casi inexistente sonido de algo deslizarse.

Su boca se abrió de la sorpresa al ver lo que era.

Un celular sumamente nuevo y moderno estaba adentro de la caja, la pantalla era más grande que el de su propio celular y al tomarlo noto que la tapa de atrás era de color verde, su sorpresa creció al ver el pequeño adorno que colgaba en forma de lata de Coca-Cola.

—R-Rojo...—lo miro sorprendido.

—¿Te gusta? —

—Claro que me gusta—tembló —, P-Pero no puedo aceptar esto, se ve que es muy caro y-yo...—

—Te lo compre para ti Edd —sonrió —, Vi tu celular y note que ya es de varios años atrás, ¿No me había dicho que incluso ya hasta empezó a fallar? —

—S-Si, pero...—se mordió el labio.

—Por favor acéptalo —lo miro a los ojos —, No solo por ser un gran amigo, sino también tómalo como un agradecimiento por tus clases de dibujo. —

Edd estaba a punto de negarse nuevamente hasta que "Rojo" envolvió sus dos manos en la mano con la cual sostenía el celular.

—Por favor —suplico —, ¿Por mí? —

Y esas palabras fueron las necesarias para que su última fuerza de voluntad terminara en el olvido, con un pequeño suspiro nervioso asintió la cabeza.

—Gracias. —

—Gracias a ti Rojo —miro el celular —, En verdad. —

"Rojo" solamente sonrió de oreja a oreja dejando a la vista sus dientes blancos mientras que dos de ellos en forma de colmillo dejaron algo sonrojado a Edd, no podía mentirse que le gustaba la sonrisa de ese chico oji plateado.

[...]

—Hasta mañana Tom. —

—Hasta mañana señorita Monroy—bostezo —, Dios que día tan pesado. —

El cielo se había vuelto naranja, las calles por donde salían los jóvenes estaba totalmente vacío y apenas en esos momentos estaban saliendo los maestros del instituto para poder dirigirse a sus hogares.

El oji negro se quedó parado en medio de la calle sin emoción alguna, su auto estaba en reparación y no tenia de otra que irse en transporte público, lo cual odiaba mucho. Gracias a sus alumnos desobligados no tuvo tiempo ni para comer su almuerzo, varios le suplicaron de rodillas poder volver hacer el examen musical, cosa que termino aceptando puesto que los chicos de esa escuela son muy molestos y sería algo muy difícil de librarse.

—Joder...—suspiro.

—¡Tom! —

El mencionado abrió los ojos de la sorpresa al reconocer la voz, al voltear sonrío enormemente al encontrar ese rostro tan conocido. Su propio rostro enrojeció enormemente al verlo.

—¿M-Max? —

—Eso soy yo —se apuntó alegremente.

—¿Qué haces aquí? —

—Vine por ti. —

—¿Eh? —miro sorprendido —, ¿Por qué? —

—Me dijiste que tu auto estaba en reparación. —

—¿Lo hice? —arqueo una mueca —, Yo no recuerdo eso...—murmuro —, Ni siquiera a Edd le he dicho. —

"Max" empezó a sudar frio, se había confundido de forma muy torpe, Tom solamente le había dicho a él pero en su forma original. No como humano, estaba a punto de inventar alguna excusa hasta que el oji negro volvió hablar.

—Tal vez no me acuerde —se encogió de hombros.

El peli naranja dio un suspiro bastante bajo como para ser escuchado.

—¿Entonces nos vamos? —

—Claro —sonrío —, Realmente me harías un gran favor. —

"Max" soltó una pequeña risa mientras sacaba sus llaves, hace una semana atrás le mostro a Tom su propio auto y este último no pudo evitar ver el auto con asombro al igual que lo hiso con el auto de "Rojo".

El auto de "Max" era una copia exacta que el otro, la única diferencia era que el auto era de color purpura y además de que tenía aromatizantes con aroma a cítricos.

Cosa que no le molesto al oji negro.

Al llegar, "Max" apretó el botón para desactivar la alarma y al entrar le abrió la puerta a Tom, el cual este último dio un suspiro cansado al sentarse en el cómodo asiento de cuero.

—¿D-Día pesado? —sonrío tímido.

—Ni te lo imaginas...—

La forma de hablar de Tom fue tan bajo que casi pareció un susurro.

—Tuve que saltarme el almuerzo para poder atender a mis estudiantes. —

Antes de que el peli naranja prendiera el motor del auto, un sonido logro resonar de forma muy fuerte. Tom se enrojeció enormemente en cuanto su estómago gruño.

—¿Quiere que pasemos por algo de comer? —sonrío al encender el motor —, Yo tampoco eh comido nada. —

—Oh...—pauso —, ¿Qué hora es? —

—Las seis con treinta minutos. —

Tom se quedó callado, su amigo peludo llegaba algo tarde y al hacer algunos cálculos predijo que él llegaría antes que Matt.

—Claro, pasemos a un lugar de comida rápida —se estiro —, Realmente tengo hambre. —

—Oki doki —rio.

"Max" no tuvo que preguntar hacia donde quería que lo llevara, tenía toda la ciudad memorizada gracias a Laurel. Al girar algunas calles logro llegar hasta un pequeño establecimiento de McDonald's.

—¿Hamburguesa? —

—Con doble carne —se lamio los labios.

El peli naranja soltó nuevamente una pequeña risa al ver la actitud infantil de su humano.

—¿En qué les puedo ayudar? —hablo la voz masculina de la bocina.

—Una hamburguesa de doble carne con todo y...—extendió la última letra —, Una cajita feliz. —

Tom miro sorprendido al escuchar eso último.

—¿La cajita feliz con Nuggets o con papas? —

—Nuggets. —

—¿El refresco? —

—De naranja y para mi amigo...—lo miro.

—Manzana. —

—¡Manzana! —

El sujeto del micrófono se tuvo que tapar los oídos por el grito.

—Avancen...—

El peli naranja siguió las indicaciones y al llegar frente a la ventana una chica los encontraba esperando con su orden. Al pagar la chica de cabello negro les entrego la comida, con un pequeño gracias continuó su camino para llegar a su hogar.

—¿Debo preguntar porque la cajita feliz? —dijo al tomar su comida.

—¿Tienes? —cabeceo —, ¿Hay algo de malo en pedirla? —

—Bueno, no...—pauso —, Es solo que es para niños...—

—Pues yo no le veo hasta que edad no se pueda comprar—rio —, Además, yo quería el juguete. —

Tom solo sonrió débilmente, la personalidad algo infantil del oji esmeralda lo dejaba un tanto consternado, al recordar que perdió a sus padres intento darle sentido a su forma de ser.

«¿Intentara llenar la falta de paternidad con juguetes? »miro la comida.

"Max" no tardó mucho en llegar hasta su hogar y al quedar frente a la cera volteo para ver con sorpresa a Tom.

El oji negro no le había dado ningún mordisco a su comida.

—Pensé que tenías mucha hambre...—

—Lo tengo —asintió la cabeza —, Pero quería que te estacionarias para comer juntos. —

El peli naranja le brillaron los ojos al escucharlo.

—¿Entonces comemos Max? —

—¡Sí! —chilló alegre.

Tom no pudo evitar un pequeño sonrojo al ver el rosto de felicidad del peli naranja, ambos sacaron su comida de sus respectivas cajas y sin decir nada más empezaron a comer tranquilamente.

El oji negro no dejaba de mirar la cara sonriente del chico peli naranja, "Max" estaba tan enfocado en el pequeño juguete de plástico que no se dio cuenta como su acompañante se le quedaba viendo.

Ambos comían en silencio, pero ese simple silencio era sumamente tranquilo para los dos, ninguna palabra salía de sus bocas y lo único que podían hacer era comer esa comida con carbohidratos algo elevados.

Todo estaba en paz, hasta que el sonido de un fuerte derrape logro llamar su atención.

—¿Y eso? —murmuro con la boca llena de Nuggets.

—Ugh...—hizo una mueca.

Tres autos sumamente lujosos pasaron de forma rápida dejando un gran estruendo en toda la calle. "Max" miro boquiabierto eso puesto que incluso dejaron en el suelo las marcas negras de los neumáticos.

En cuanto desaparecieron por completo dejaron a lo lejos un gran sonido de otro derrape.

—¿Qué paso? —cabeceo.

—Veras Max...—suspiro —, Del otro lado de la ciudad habían unos tipos que organizaban carreras ilegales—dio un sorbo a su bebida —, Pero desde que la policía se puso duro en esa zona tuvieron que cambiar de lugar. —

—¿Y lo hicieron por aquí? —

—Sep —asintió la cabeza —, Por cierto, ¿Tú por dónde vives? —

—R-Rojo y yo vivimos cerca de la playa...—

—¿Rojo y tú? —pregunto sorprendió —, ¿S-Solos? —

—¿S-Si? —

—Ah, qué bien...—

"Max" no lo notó, pero Tom estaba gritando internamente como un loco, no le agradaba mucho ese tal "Rojo" y por alguna extraña razón imaginárselos viviendo en la misma casa lo hiso perder los estribos.

—¿Estas bien? —

—Claro que estoy bien...—sonrió falsamente.

—¿Seguro? —parpadeo.

—Si...—gruño —, ¿Por qué preguntas? —

—Porque acabas de asesinar lo que quedaba de tu hamburguesa —señalo con su dedo.

El oji negro quito su enojo unos segundos para poder mirar hacia abajo, logrando notar como entre sus manos tenía solamente dos pequeños pedazos de la exprimida hamburguesa.

—Eh...—rio nervioso —, Perdón, estaba pensando en algo. —

—Descuida —sonrió.

Tom se comió lo que quedaba de su comida para poder tomar la servilleta y poder limpiarse las manos. No quería ensuciar el auto de su amigo.

—Esto... Max. —

—¿Si? —

—¿Tienes algo que hacer este fin de semana? —

—No. —

—¿Te gustaría ir a algún lado? —

—¡Eso seria genial! —pauso—, ¿Uh? —cabeceo —, ¿Ese no es el auto de Rojo? —

Tom giro la cabeza al escuchar el nombre y efectivamente, el auto de Rojo se acercaba tranquilamente hasta parar frente a la casa de Edd.

Ambos salieron para saludarlos, pero en cuanto vieron a "Rojo" abrieron la boca de la sorpresa.

—¡¿Q-Que te paso?! —chilló asustado.

—¿Edd? —pregunto el oji negro.

—Yo tampoco lo se...—

"Rojo" se quedó callado, su rostro estaba totalmente serio y se podía ver que le salió sangre de la nariz, pero eso quedaba de más puesto que lo que llegaba a resaltar más era ese ojo algo hinchado que estaba tomando de color morado alrededor.

—¿R-Rojo? —pregunto "Max" preocupado —, ¿Qué le paso a tu rostro no tan perfecto como el mío? —

Silencio.

Tom y Edd solo pusieron una cara algo aburrida al escucharlo, habían tenido una pequeña intuición de que el peli naranja era un narcisista y con esas palabras lograron confirmarlo por completo.

—...—suspiro —, Nada realmente...—murmuro aun molesto.

▂▃▄▅▆▇█▓▒░ Flashback ░▒▓█▇▆▅▄▃▂

—¿Entonces ya casi acabas? —

—Sep —rio —, No tienes que esperarme, puedes irte si tienes otra cosa que hacer. —

—En realidad...—vacilo —, No tengo nada más importante que hacer más que compartir tiempo con mi amigo. —

Edd solamente rio de nuevo, aunque sus mejillas se lograron poner rosadas por el pequeño guiño de ojo que le dio el otro.

—En un momento vengo, voy al baño. —

El oji plateado asintió la cabeza al ver como señalo con su pulgar la puerta que estaba del lado derecho. Edd se quitó unos momentos su pequeño delantal azul para dejarlo frente a la caja registradora, no sin antes cerrarla para evitar algún robo.

"Rojo" siguió recargado en la pequeña maquina en donde se metía el dinero, el oji plateado no pudo evitar sonreír al ver a su humano entrar al baño. No podía creer que su humano estuviera solo, para él era perfecto.

Tenía bonitos ojos, un hermoso cabello castaño tan brillante, una piel suave y cálida, una voz tan angelical como el canto de los ángeles, y esa sonrisa, esa hermosa y brillante sonrisa tan cegadora como los rayos del sol.

Toda su felicidad se fue de golpe al ver a dos sujetos más mayores que él cerca de la puerta del baño, notó como los dos estuvieron murmurando al ver a Edd pasar frente a ellos y con algo de curiosidad empezó a mover las orejas intentando escuchar la conversación, no hace mucho descubrió que aún conservaba algunas habilidades de su forma animal.

—¿Qué piensas de él? —susurro el más chico.

—Se ve bien —rio levemente —, Como para llevarlo a la cama. —

—¿Enserio? —pauso  —, No lo sé, estoy seguro que puedes encontrar algún polluelo mejor que él. —

—No me importa —gruño —, Lo único que quiero en estos momentos es poder vaciar estas malditas rocas que mi esposa no quiere hacer. —

El otro sujeto solamente rio en cuanto su amigo empezó a sobarse su bulto por encima del pantalón de forma grotesca y sin pudor.

«¿Polluelo, rocas, esposa? »cabeceo confundido «, ¿De qué mierda hablan estos sujetos sobre mi humano? »

Antes de que "Rojo" se lograra plantear otra pregunta, el sonido de una chasquido de dedos junto con un fuerte dolor de cabeza le llego de golpe, al calmarse abrió los ojos como platos.

Cientos y cientos de conocimientos aparecieron de repente en su cabeza y volver a escuchar a los sujetos no dudo ni un segundo en comprender cada palabra que antes lograba desconocer de su existencia.

Querían tener sexo con Edd, Edd, su humano.

—¿Entonces? —sonrió —, ¿Él será? —

—Claro que sí, joder —se sobo las manos —, Ya quiero escucharlo pedir más y m...!—

La mano de "Rojo" en su hombro logro impedir que terminara de hablar.

—¿Y tu eres? —pregunto molesto.

—Rojo —se señaló con el pulgar.

—¿Y qué mierda quieres Rojo? —

El sujeto de forma brusca empujo la mano que lo estaba tocando.

—Oh nada —se encogió de hombros —, Solo vine para enviarte al hospital. —

Antes de que el sujeto lograra comprender las palabras que le dijeron, recibió un fuerte rodillazo en sus parte bajas para después recibir un puñetazo en su cara.

▂▃▄▅▆▇█▓▒░ Fin Del Flashback ░▒▓█▇▆▅▄▃▂

—Dinos la verdad Rojo —hablo secamente el oji negro.

—Bien...—suspiro —, Un maldito sujeto me ofreció dinero para acostarme con él. —

En parte no mentía puesto que el otro sujeto que estaba afuera de pelea le ofreció dinero por si estaba interesado en cambiar de lugar con Edd, cosa que solamente lo hicieron molestar más al ver cómo le estaban "comprando" como si fuera un objeto. "Max" cabeceo confundido al no comprender eso mientras que los otros dos abrieron los ojos como platos.

—¿Te desagradan los homo...? —pregunto el castaño.

—Nah —pateo una piedra —, Soy de ambos bandos. —

Nuevamente los dos chicos quedaron estupefactos mientras que "Max" volvió a repetir el gesto.

"Rojo" no mentía, antes de que sintiera algo por su humano tenia sentimientos encontrados por la gatita blanca de la vecina de enfrente, aunque nunca tuvo ningún pensamiento sexual puesto que no sabía de su existencia hasta ahora.

—¿Ustedes no se ofenderían que les dijeran eso? —

—Definitivamente —hablo rápidamente Tom.

—Estoy de acuerdo...—se mordió el labio —, Pero estoy seguro que pudieron dialogar sin terminar con el puño en el rostro del otro. —

—Perdón...—miro el suelo —, No lo pensé...—

La forma de hablar del chico de sudadera verde logro sonar como un regaño, cosa que "Rojo" no pudo evitar mostrar una cara triste. Edd al ver nuevamente el ojo morado no dudo ni un segundo en echarle un vistazo, pero al rosarlo con su dedo "Rojo" chillo de dolor.

—Es hora de irme Edd —tomo sus manos —, Te veo mañana ¿De acuerdo? —camino hasta su auto.

—B-Bien...—

Los tres miraron sorprendidos por la forma rápida de despedirse.

—Yo igual me voy—dijo el peli naranja —, Adiós Tom, Edd. —

—Max—dijeron los dos nuevamente sorprendidos.

En cuanto el chico de ojos esmeraldas se subió al auto, los dos autos comenzaron a ponerse en marcha para desaparecer a la distancia.

—¿Cómo te fue con Max? —

—Bien —sonrió —, Me invito a comer algo rápido. —

—Oye que bien —devolvió la sonrisa —, Rojo lo hiso en mi descanso. —

—Entiendo —asintió la cabeza —, Oye...—

—¿Si? —

—¿Sabías que ellos dos viven juntos? —

—¡¿Qué?! —grito.

Algunos pájaros que estaban en los arboles salieron volando por el fuerte grito del castaño.

—Créeme —se destapo los oídos —, Yo también me puse de la misma forma. —

—¿Y sabes donde viven? —trago duro.

—Solo sé que cerca de la playa. —

—Uh...—murmuro —, No está lejos...—

Edd cerró los puños inconscientemente, la idea de que "Max" viviera en la misma casa con "Rojo" lo logro molestar de cierta forma.

—¿Crees que ya llegaron Matt y Tord? —

—Tal vez Edd —bostezo —, Sera mejor comprobarlo. —

El castaño de sudadera verde asintió la cabeza, al llegar a su hogar abrió la puerta y sonrió enormemente al ver a los tres animales sentados frente a la puerta.

Aunque el perro y el gato castaño miel se encontraban bastante alterados como si hubieran corrido.

—Sep —cruzo brazos —, Ya llegaron. —

Tom sonrió al ver a su amigo peludo, pero Edd en cambio quito su sonrisa del rostro al ver como alrededor del ojo de su gato estaba algo hinchado.

—¡Tord! —hablo preocupado —, ¿Qué te paso? —

El gato de ojos plateados abrió los ojos como platos, creyó que por todo su pelaje sería difícil de notar el golpe.

Pero al parecer no fue de esa forma.

—I-Iré con Karen para que lo revisen. —

—Bien...—asintió la cabeza.

—Cuida de Ringo mientras no estoy Tom. —

—Descuida Edd, con cuidado —miro la calle —, Ya anocheció. —

—S-Si...—

El castaño aun con gato en brazos camino hasta el patio en donde tenía encadenado su bicicleta, ese día no se fue en ella puesto que su compañero Patryck lo llevo al verlo salir de su hogar.

Al colocar al gato en la canasta empezó a pedalear rápidamente hacia una dirección en especial.

●▬▬▬▬▬▬▬▬ Tiempo Después ▬▬▬▬▬▬▬▬▬●

—¿Cómo está? —pregunto nervioso.

—Está bien Edd —rio —, Aunque el golpe parece que si fue algo fuerte. —

El castaño miro a su amigo peludo ahora que Karen se movió, Tord tenía la parte baja del ojo cocida con hilo y gracias al líquido que le pusieron estaba totalmente morada esa parte.

El gato oji plateado no podía dejar de tener las orejas bajas, no quería preocupar a su humano de esa forma.

—¿Debo preguntar que le paso? —arqueo una ceja al cruzarse de brazos —, Esa herida no pudo haber sido un accidente, posiblemente recibió una patada. —

—Yo, no lo sé...—murmuro al tenerlo en sus brazos —, Tord ha estado saliendo con Matt a la calle mientras voy a trabar y siempre regresa al mismo tiempo cuando yo regreso. —

—¿Sale de tu hogar? —

—Sí. —

—¿Ya intentaste encerrarlo en una jaula? —

—No me gusta la idea de amarrarlo o encerrarlo...—

—Entiendo...—suspiro —, Si necesitas algo más no olvides de venir aquí. —

—Claro que sí, gracias Karen. —

La mencionada no pudo evitar sonreír al ver como Edd comenzó a restregar su rostro con el del gato, que para su sorpresa pareciese que en verdad lo estaba disfrutando enormemente puesto que empezó a ronronear.