27
Taehyung inspeccionó alrededor para asegurarse de que ninguna persona tan agresiva como aquellas jovenes rondasen cerca del lugar. Cuando el silencio se adueñó por completo y Lis miraba fijamente por encima de un contenedor, Taehyung aclaró su garganta realizando un suave sonido para llamar la atención de su amiga. Ella se pegó de espaldas a la pared para cubrirse y Taehyung sonrió con ampitud.
- ¿De verdad te parece gracioso? - susurró Lis sin dejar de mirar de reojo a su alrededor.
- Vaya, de nada por salvarte.
- ¿De nada? - Lis frunció el ceño y se cruzó de brazos un poco enfurruñada. - ¿Me puedes decir dónde estabas?
- Siento haber llegado tarde.
Taehyung acercó su mano a la mejilla de Lis y besó su frente con dulzura, después la abrazó y la apretó contra él. Lis rodeó su cintura y apoyó la cabeza en su pecho mientras que cerraba los ojos. Fue fácil tranquilizarse y olvidarse del momento de tensión que había vivido los últimos minutos antes de que llegara Taehyung. Posteriormente, Taehyung colocó los mechones de su flequillo y la agarró de la mano para salir del callejón.
- Lis, siento mucho que algunas fans se comporten así.
- No entiendo qué tenéis para que lleguen hasta ese punto.
Taehyung puso los ojos en blanco y decidió guardar silencio para concentrarse en observar que el camino estaba despejado. Cuando nadie ofensivo habitaba en una de las calles principales advirtió a Lis subirse al coche que estaba situado a unos metros con los cristales tintados de negros y el diseño perfectamente cromado. Se aseguró de que lo entendiera y después la dejó salir primero. La siguió hasta el vehículo y le abrió la puerta para que subiera a los asientos traseros. Después, le indicó al conductor dirigirse hacia el hotel aprovechando el momento en que los demás integrantes se habían ido de excursión a las montañas a caminar.
Una vez llegaron al hotel, Taehyung ofreció a Lis sentirse como en su casa, aunque realmente ni si quiera era la casa de él y el edificio pertenecia a la empresa Klain Reinols, dirigida por el Director billonario Kim Jejun. Ambos se miraron a los ojos y Lis levantó las cejas observando el atuendo que Taehyung llevaba puesto y le favorecía con su nuevo color de cabello. Sinceramente, ¿qué no le podía favorecer a Taehyung? Él se acercó lentamente hacia Lis y se detuvo a pocos metros, quería asegurarse de que no había sufrido ninguna lesión tras la persecución. Lis lo miró por encima de las pestañas mientras que se quedaba completamente quieta, sintiendo el suave aliento del joven.
- ¿Qué ocurre? - preguntó Lis cuando Taehyung hizo una mueca de asombro mirando su cabello. - ¿Qué es lo que tengo? ¿Tengo algo? - Taehyung permaneció en silencio y después acercó su mano hacia el cabello de Lis. - Si tengo algo, quítamelo.
Ella cerró los ojos y Taehyung desvió su mirada hacia los labios de la joven. Lis los apretaba impaciente por librarse de lo que quiera que fuese que tuviese en el cabello y esto aumentó la frustración de Taehyung por no poder atreverse a darle el primer beso. Finalmente, cogió una pequeña porción de oja que tal vez la brisa la haya traído hacia el brillante y fuerte cabello de Lis. Ella abrió los ojos y preguntó curiosa por saber que era lo que tenía encima de su cabeza y Taehyung se lo mostró sonriendo con dulzura.
- Nada grave. - dijo con suavidad. - ¿Cómo has estado? - Taehyung se movió por el salón y se sentó en el sofá, esperando a que Lis lo acompañara. Sin duda, ella se sentó a su lado y apoyó su codo en el respaldo mientras que sujetaba su propia cabeza con su mano.
- Pues... podría haber ido peor después de todos los rumores que corren por ahí de nosotros. - Lis miró a Taehyung y le dedicó una amplia sonrisa. - He escuchado muchas cosas. Desde que somos amigos desde la Primaria hasta que somos novios, y lo más estúpido de todo, es que hay gente que cree que soy tu hermana. ¡No me parezco para nada a ti! - alzó las manos y soltó varias carcajadas.
- ¿Si fueses mi hermana no sería todo un previlegio? - Taehyung mostró su dentadura y la miró con picardía.
- Sería un previlegio no sufrir persecuciones gracias a ti. -Lis dejó salir un largo suspiro y después un pensamiento se le vino a la cabeza. - Espero que ahora no publiquen otra tontería a cerca de nosotros.
- ¿Te están afectando las noticias? - él la miró con preocupación y agachó la cabeza con levedad para mirar su expresión.
Lis solía ser una chica fuerte, con un escudo protector. Un escudo que por supuesto creció durante su infancia, cuando vivió una dura etapa en el colegio y sus padres estuvieron a punto de separarse por que Hana no estaba de acuerdo con las cosas que decía la gente del exterior a cerca de su situación económica y Seong-Jin no le daba la importancia que para su mujer sí que la tenía. Algunas personas deseaban hacerle la vida imposible a la familia de Lis, y por casi, solo por casi, lo lograron. Seong-Jin nació en Busan viniendo de una de las familias más ricas de la ciudad sin llegar a contar la de los grandes famosos. Ninguno de ellos lo eligió, pero al menos les tocó una vida mucho más fácil que para otras. Las niñas del colegio trataban a Lis como a la chica que lo compra todo por tener amigas , y por desgracia, para ellas, era todo lo contrario. Todo lo que vivió en un tiempo pasado fue incluso más molesto que las falsas noticias que estaban dando a conocer sobre ellos, por lo que Lis negó con la cabeza y revolvió el cabello de Taehyung.
- Creo que le afectan mucho más al increíble V.
Taehyung sonrió aliviado cuando vió la animada expresión de Lis, después agarró sus manos con delicadeza y las llevó hacia su cabeza. La miró entre los mechones y ladeó la cabeza levemente con su maravillosa sonrisa.
- Déjalo como estaba, por favor. - dijo él esperando a que Lis colocara su cabello.
- A sus órdenes, increíble V.
- Deja de cachondearte. - advirtió Taehyung con los ojos entre cerrados.
- Sí, increíble V.
Sin previo aviso, Lis notó los dedos de Taehyung en sus costados moviéndose con rápidez mientras que le producían unas intensas cosquillas por varias partes del cuerpo, no podía evitar removerse y mover los pies con brusquedad. Intentó liberarse de Taehyung, pero era demasiado rápido y cuando ella trataba de escapar lograba cogerla por la cintura y volver a atraparla. Mientras que Lis estallaba a carcajadas y suplicaba que se detuviera, Taehyung buscaba sus puntos más débiles. Cuando sus dedos palparon su cadera, la respiración de Lis empezó a entre cortarse y su risa no producía sonido alguno. Sujetó sus manos e intentó deshacerse de ellas con toda la fuerza que pudo. Sin embargo, fue Taehyung quien se dió por vencido. Lis lo miró con la respiración agitada y después le tiró uno de los cojines que estaba decorando el sofá. Él se cubrió con los brazos y soltó varias carcajadas.
- ¿Es así como te vengas de mi? - dijo Lis formando un puchero.
- Sí.
Ambos rieron al unísono a carcajadas y Taehyung imitó a Lis cuando ella se puso una de sus manos sobre la tripa. Se sintió orgulloso de ser el motivo por el que Lis se lo estaba pasando bien después de todo. No obstante, el sonido de la puerta de entrada y el joven asombrado por la escena les interrrumpió. Taehyung quiso evitar suspirar con brusquedad para mantener la postura delante de Lis, pero realmente aquello le frustró. Jimin empezó a estirar sus labios con lentitud y a morderse la lengua. Tras él, Jungkook entró con rapidez sin darse cuenta de que ambos estaban sentados en el sofá con una sonrisa en el rostro, hasta que Jimin saludó a propósito.
- ¡Hola, chicos! ¿Qué estáis haciendo? - Jimin se acercó por detrás a Taehyung y le agarró por los hombros. Agachó la cabeza por uno de los lados y le sopló con suavidad en la cara.
Jungkook levantó la mirada y su boca se quedo sin aliento cuando observó que Lis estaba presente, mirándole con una sonrisa. Eso le debilitaba. Ella se levantó del lugar y se acercó con los brazos abiertos para abrazarle. Jungkook se contuvo las ganas de abrazarla igual de fuerte que lo hacía ella y poner su frente en su hombro. De igual modo, disfrutó de esos pocos segundos.
- Hola, Jungkook. - dijo ella. Se separó y lo miró a los ojos con su sonrisa.
- Hola. - se atrevió a decir él. - ¿Te ha gustado el evento?
Jimin se sentó en el sitio libre que había dejado la chica para comentarle algunos secretos a Taehyung. Seguidamente, agarró por la muñeca a Lis y la obligó a sentarse a su lado, después Jungkook tomó asiento cerca de Lis y miró a Taehyung, quien estaba empezando a encontrarse algo incómodo.
- ¿No estábais en la montaña? - preguntó.
- Estábamos caminando hasta que se nos ocurrió comer allí. Por lo tanto, hemos venido al hotel para coger nuestras tarjetas y comprar comida. Si queréis, podéis veniros. - sugirió Jungkook mirando primero a Taehyung con una sonrisa.
- ¡Sí, claro que se van a venir! - gritó Jimin con ilusión. - Tenemos que estar todos juntos. Y ya que no te despegas de ella, pues que se venga.
Taehyung se sonrojó al escuchar las palabras de su compañero de habitación. Pero realmente eran ciertas y aceptó moviendo la cabeza al mismo tiempo que Lis lo hizo, convencida de que se comería cualquier cosa debido al hambre que empezaba a surgirle. Jungkook y Jimin se rieron a carcajadas con Lis y se levantaron para coger sus pertenencias. Taehyung se acercó a ella y se aseguró de que se encontrara cómoda. Ella asintió con la cabeza y cogió una de sus manos para mirarle a los ojos.
- Estoy bien. Es un privilegio tenerte. - dijo con sinceridad.
- Bien, ya lo tenemos todo. ¿Estáis listos? - Jimin se apoyó en la pared y esperó a que los demás se acercaran a la salida con él.
- Sí, yo lo llevo todo. - comentó Jungkook.
- Yo voy a cambiarme de pantalones. - Taehyung se levantó con rapidez y se dirigió hacia su habitación para rebuscar en su maleta algo cómodo. Cogió su cámara de fotos y una vez listo, salió por la puerta agarrando la mano de Lis. - Tú delante.
- ¡Espera, espera! - gritó Jimin.
Todos se detuvieron antes de salir del hotel y esperaron a que Jimin le colocara una de sus gafas de sol a Lis. Los tres jovenes sonrieron y observaron el look de la chica lo que hizo que ella se sonrojara y comenzara a caminar primero. Los cuatro se introdujeron en el interior del coche que les habían dejado y Jungkook se puso al volante. Taehyung le abrió la puerta del copiloto para que Lis tomara asiento.
- Si me ven con vosotros, tal vez acabemos sufriendo una persecución. - murmuró Lis.
- ¿Persecución? - Jimin miró confuso a Taehyung y este sonrió.
- Estamos dispuestos a sufrir el riesgo. - Jungkook se encogió de hombros y le ofreció la mano para ayudarla a subir, ya que el automóvil era más alto.
۵ ۵ ۵
Pasaron una hora y cuarenta y cinco minutos comprando todo tipo de comida para acompañar un apetitoso asado. Taehyung y Jungkook se encargaron de elegir los alimentos mientras que Jimin y Lis buscaban platos y cubiertos por otro de los pasillos del super mercado. Caminaban lentamente observando la sección de los dulces y Jimin se acercó hacia una de las estanterías. Cogió varias chocolatinas y golosinas que pudieran gustarle a los demás miembros y después se dirigió hacia las barras de pan que habitaban en otras de las estanterías. Lis lo ayudó con las tres barras de pan que eligió Jimin y después buscaron los platos por otro pasillo. Jimin miró a Lis y le dedicó una amplia sonrisa, la miró de arriba-abajo y después soltó lo que no podía permanecer mucho tiempo más dentro.
- ¿Te gusta Taehyung? - miró su expresión, sorprendida y nerviosa. Soltó su risa pillina y asintió con la cabeza dando por afirmativa la respuesta solo por el silencio que se había formado.
- No he dicho nada.
- No te preocupes. Hay detalles, que valen más que mil palabras.
- Es mi amigo. - dijo ella con seriedad.
- ¿Te gusta Jungkook? - preguntó bromeando.
- Es otro amigo. ¿Por qué me estás preguntando esto?
- Te veo muy unida con Taehyung. Me gusta por que lo veo feliz. - dijo Jimin con total sinceridad. Hacía mucho tiempo que no veía a su amigo de tal manera, le habían roto el corazón en alguna ocasión y pensó que jamás iba a poder recoomponerse. - Espero que no os separéis más.
- Lo prometimos.
Jimin se giró con brusquedad y abrió los ojos de par en par con una extensa sonrisa. Levantó las cejas y la miró fijamente entendiendo por qué Taehyung había formado un plan que ni si quiera le había comentado al cien por ciento todos los detalles. Ahora lo entendía. Taehyung era listo, pero, Jungkook también. Jimin sabía muchas cosas, pero no lograba entenderlas hasta el momento. Movió la cabeza asintiendo y después siguió su camino entusiasmado.
- ¿Qué ocurre? - Lis se confundió cuando Jimin actuó de tal manera. Estaba intrigada y necesitaba obtener la información que el chico sabía por lo que volvió a insistir. - Dime, ¿qué pasa?
- Si le prometiste no separarte de él, deberás de cumplirlo. - dijo finalmente mientras que se acercaba a los platos y cogía varios de ellos.
- Quiero. Pero sería muy difícil si os vais de gira.
Por otro lado, Jungkook comenzó a investigar más sobre Lis preguntándole a Taehyung, quien estaba concentrado en si coger pollo o pechuga para dejarlo en la cesta que Jungkook sujetaba. El menor levantó su cámara de fotos y le echó una a Taehyung mientras que actuaba de manera natural eligiendo los alimentos. Finalmente, se decantó por el pollo y después decidieron buscar alguna salsa para acompañar.
- ¿Sabes si tiene trabajo en Corea? - preguntó Jungkook.
- Seguro que pronto lo tendrá.
- Sí. He escuchado a través de la radio que muchas empresas están interesadas en descubrir su talento. ¿Crees que tendrá buena reputación?
- Espero que sí. Me preocupa que la hagan daño.
Taehyung se detuvo en seco para tragar saliva y cerrar los ojos para respirar profundamente durante unos segundos. Jungkook le puso la mano en el hombro y esperó a que se sintiera mejor. Le ofreció una botella de agua que llevaba en su mochila y Taehyung se la bebió de un trago. Seguidamente, dejó salir una sonrisa forzada y continuaron con la tarea.
- Quiero que la protejan. - dijo Taehyung.
- Es posible.
Jungkook sabía perfectamente a lo que se refería y pronto cogió su móvil para enviar un mensaje. Taehyung observó lo que escribía el joven y después le abrazó con fuerza. El maknae le dedicó su mejor sonrisa y se sintió aliviado al saber que Lis también tendría su propia protección desde a partir del día siguiente. Se preguntaron si comentárselo a Lis o si dejarlo estar por que muy probablemente ella se negaría.
- Ya está a salvo. - dijo Jungkook con suavidad mientras que levantaba la cámara de fotos para fotografiar la maravillosa sonrisa que Taehyung tenía en el rostro.
❁ ❁ ❁
Los dos tienen un plan. ¿Tienen idea de qué se puede tratar?
Espero que os haya gustado el capítulo, si es así, no olviden votar y comentar sus ideas a cerca de lo que puede pasar. Y si lo ven oportuno, compartan con sus amigos o seguidores. Gracias por seguir mi historia, espero que sigas conmigo hasta el final. ♡
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