Una vez en lo alto de la montaña los dos jovenes se detuvieron para coger aire y soltarlo mediante un suspiro. Lis observó con sus brillosos ojos las vistas de la ciudad a lo lejos y después levantó la mirada. Abrió la boca impresionada y sonrió ampliamente. Taehyung la imitó y también disfrutó maravillado de aquel momento. Seguidamente tiró levemente de su mano y la invitó a tumbarse con él sobre el suave y fino césped que cubría la colina. La chica le dedicó su mejor sonrisa y aceptó, apoyó su espalda y miró el estrellado cielo. Gracias a la oscuridad de aquel lugar podían apreciarse algunas de las constelaciones y como la lluvia de estrellas comenzaba con el primer destello que recorría el horizonte de un extremo a otro hasta que se apagaba. Era un espectáculo precioso que les estaba ofreciendo la naturaleza. Taehyung giró levemente su cuello para mirarla, tenía la necesidad de hacerlo por si el día de mañana no volvía a verla. Se grabó cada detalle en la mente y pensó que ella era una chica realmente hermosa. Comenzó a sentir una extraña pero agradable sensación en el pecho y se intensificó aún más cuando Lis cruzó la mirada con él. Ella señalaba el cielo, indicándole la estrella que descendía con rapidez.

- ¡Pide un deseo! - dijo ella ilusionada.

Lis cerró los ojos para pedir su deseo, pero Taehyung ya tenía el suyo delante por lo que simplemente la miró y soltó una pequeña risita. Observó sin detenimiento sus largas pestañas, su pequeña nariz, la dulce sonrisa que tenía en el rostro y sus labios, en los que se fijó un poco más de lo debido. Inconscientemente se aproximó con levedad, deseaba acercarse un poco más a ella. En ese momento quería experimentar que se sentía al besar a una chica como Lis. Sin embargo, desechó aquella idea de la cabeza y separó sus labios para coger aire por la boca. Se incorporó y se quedó sentando pasando una mano por todo su cabello, creía estar volviéndose loco. ¿Cómo podía pensar hacer eso con su amiga? Se estremeció en cuanto sintió la mano de Lis sobre su hombro y se levantó.

- ¿Estás bien? - preguntó.

- S...sí. Claro. - sonrió disimuladamente y evitó tener contacto visual. Miró hacia el cielo y tragó con fuerza la poca saliva restante provocando un pequeño sonido en su garganta.

- ¿Y eso que ha sido?

- Nada, nada. De verdad, estoy bien. Genial. No te preocupes. Sigamos.

- Tae... - Lis se posicionó justo en frente de él y apoyó sus manos en los hombros del chico. 

Taehyung no podía mirarla, tenía que evitarlo. Sabía que si lo hacía y se fijaba nuevamente en sus labios caería en la tentación y no deseaba que Lis saliera corriendo. Estaba seguro de que estropearía aquel momento y quería disfrutarlo sin interrupciones.

- ¿Tae? - la chica buscó su mirada. Taehyung sonreía con timidez y cerró los ojos y como consecuencia sufrió las cosquillas que su amiga le propinó en los costados. - Con que me vas a ignorar...

- ¡Lis! ¡No, dios! ¡No me hagas esto!- se reía a carcajadas mientras que intentaba escapar pero Lis lo agarró por la muñeca y empleó toda su fuerza para acercarle para proseguir con las cosquillas. 

- Jamás me detendrás. - dijo ella confiada.

- ¡Lo haré!

Taehyung estiró sus manos y la obligó a detener sus cosquillas cuando él empezó a devolvérselas sin piedad. Lis se levantó a toda prisa del césped e inició una carrera por toda la montaña.

- ¡Ven aquí! - gritó Taehyung corriendo detrás de ella.

La joven corría por la colina con la velocidad que le permitían sus piernas mirando de reojo como el chico se acercaba con las manos en alto. Por suerte, lo evitó y se dirigió hacia otro extremo mientras que rompió a reírse a carcajadas por los gestos de decepción que Taehyung le ofrecía. Él no dudó en volver a la batalla que estaban teniendo. Frunció el ceño e introdució sus manos en el interior de los bolsillos del pantalón y comenzó a caminar lentamente hacia ella. Lis no se fiaba de sus intenciones asi que siguió retrocediendo hacia atrás sin dejar de mirarle.

- ¿Qué estás haciendo? - preguntó.

- Caminar.

- ¿Por qué hacia a mi?

- No hay otra persona más aquí.

- Si hubiese alguna otra persona, ¿caminarías hacia ella?

- No. - respondió Taehyung con una sonrisa pícara aproximándose a ella.

- Vale, ¡lo siento por haberte hecho cosquillas! - Lis soltó una risa nerviosa y cuando observó que las manos de Taehyung se movían intentó escapar de él, pero le fue totalmente en vano.

Taehyung dió un gran paso hacia adelante y consiguió agarrarla por la muñeca, tiró de ella hacia él y sus miradas se cruzaron. Lis se quedó completamente inmóvil cuando sus rostros estaban a pocos centímetros y tuvo la sensación de haber escuchado su propio corazón latir con fuerza cuando se fijó en los labios del chico. Se miraron durante unos segundos a los ojos hasta que Lis tuvo que apartar la mirada y bajar la cabeza.

- Jamás me detendrás. - se burló Taehyung con una sonrisa cuando Lis se sonrojó.

- Eres idiota. - susurró Lis por lo bajo evitando su mirada.

- ¿Perdona? - el chico posó su dedo índice en la barbilla de la chica y la obligó a mirarle a los ojos. - ¿Qué dijiste?

Lis se dió cuenta de que lo que le estaba sucediendo podía ser inadecuado. Su corazón se detuvo por un momento y tragó saliva sin saber que decir. La mirada que Taehyung le había ofrecido había sido igual que la que ponía cuando actuaba en los escenarios. Se estremeció cuando el chico bajó lentamente su brazo sin dejar de sujetarla por la muñeca. Ella cerró los ojos y separó sus labios como si esperara que sucediera algo. Sin embargo, Taehyung solo se atrevió a pasar el pulgar por su labio inferior con lentitud. Era un momento tranquilo pero a la vez se sentía confuso, pues quería hacer las cosas correctamente. Dió un paso hacia atrás y le soltó la muñeca con suavidad. Lis abrió los ojos y se sintió ridícula en cuanto le vió retroceder, miró hacia otro lado y se mordió ligeramente el labio, algo que Taehyung hubiese deseado hacer.

Repentinamente, ambos escucharon tras sus espaldas unos extraños ruidos que provenían del interior de la vegetación que les rodeaba. Taehyung se giró y miró con atención intentando descubrir que era lo que se escondía tras los árboles. Lis sintió verdadero terror cuando los crujidos de las ramas se intensificaron y corrió hacia el chico para esconderse detrás de él. Rodeó su brazo con fuerza y miró por encima de su hombro. Sinceramente, Taehyung también estaba asustado pero no quería parecer un gallina al lado de una chica. Se escuchaban aquellos crujidos tanto por la izquierda como por la derecha. De repente, una voz masculina provino de su izquierda y tan pronto como la persona salió de su escondite Taehyung se sintió aliviado.

- ¿Qué haces aquí? - preguntó Jin acercándose hacia ellos.

- Pues...

- ¡Hola! - Jimin casi corrió hacia ellos en cuanto descubrió a la joven. Le hizo una reverencia y le dedicó la típica sonrisa de ligoteo. - Soy Jimin, amigo de Taehyung. ¿Cómo estás, ah?

- Estaríamos mejor sin vosotros. - Taehyung se acercó al oído de Jimin para susurrarle y después le hizo un ademán para que se fueran.

- Nosotros dábamos una vuelta. Queríamos ver la lluvia de estrellas.  - la voz de Jungkook se escuchó esta vez por la derecha. Se aproximaba lentamente hacia el grupo mientras que le quitaba las últimas hojas secas a un pequeño palo. Saludó a Lis con educación y le dedicó una amplia sonrisa. Jungkook pensó que aquella chica era preciosa y sin duda, era inevitable no sentir algún tipo de atracción. - ¿Las habéis visto? - aunque la pregunta sonase en plural, realmente iba dirigida hacia Lis, pues el maknae puso los ojos en ella desde el primer momento.

۵    ۵    ۵

Alrededor de las diez y media de la noche ambos se encontraban en el hotel conversando con los tres chicos. Jungkook trató de convencer a Taehyung para que llevara a su nueva amiga con ellos y así pudieran conocerla. Él estaba realmente avergonzado por la situación y quería negarse para poder pasar tiempo a solas con Lis, pero minutos antes ella aceptó con la cabeza y después dirigió su mirada hacia él. Cuando cruzó su mirada con la de la chica supo que le debía una explicación por todo lo anterior, por lo tanto, no tuvo más remedio que aceptar. Jungkook se mostró educado con Lis y le ofreció asiento cerca de él, pero Taehyung la cogió por la muñeca y la obligó sentarse a su lado. Jungkook sonrió y se sentó al lado izquierdo de Lis, posó sus codos sobre sus rodillas y la miró fijamente.

- ¿Estás cómoda? ¿Quieres un vaso de agua, café - Lis negaba con la cabeza a medida que Jungkook pronunciaba las palabras con la voz ronca. - ..., champán?

- ¿Champán? - Jimin rió a carcajadas al escuchar al más joven y sacudió levemente la cabeza soltando a la vez un largo suspiro. 

- No, chicos. Gracias. - dijo Lis con timidez.

Taehyung observó a los tres chicos y se sintió tranquilo ante la actitud que mostraron Jin y Jimin, pero la de Jungkook le hacía sentir realmente incómodo. Este no dejaba de mirar a Lis y mostrar la máxima atención, parecía que le gustaba y era normal. Ella era preciosa y se mostraba tímida, algo que a muchos chicos le atrae, pensó Taehyung mientras que se miraba las manos distraído. Lis le dió un pequeño golpecito con el codo en el costado y le indicó con la mirada un premio dorado que estaba encima de un mueble.

- ¿Lo habéis ganado?

- Sí. - respondió Taehyung con su mejor sonrisa.

- ¿Has ido al concierto? - preguntó Jin desde el otro extremo de la sala.

- Sí. Estuvo genial. - contestó con una sonrisa.

- ¿Quién te gustó más? - Jungkook se acercó un poco más a ella y ladeó la cabeza para buscar su mirada.

- Eh... b...bueno..  Solo puedo decir que estuvo muy bien.

Lis se puso nerviosa, notó como su corazón golpeó con fuerza su pecho y  un escalofrío le recorrió toda la columna vertebral. Quien estaba aún más nervioso era Taehyung, pues al ver el acercamiento agarró entre sus dedos la prenda de ropa que llevaba puesta. Jimin vió la reacción de su compañero de habitación y rápidamente cogió a Jungkook por el brazo obligándole a levantarse.

- Venga, preparemos algo. Traigamos champán para Lis. - dijo Jimin llevándoselo casi arrastras por toda la sala de estar.

Jin estaba disfrutando de la escena a pesar de lo que estaba ocurriendo, pues el comportamiento de Jungkook siempre le resultaba gracioso. Miró a Taehyung apretando el puño y le silbó para llamar la atención. 

- ¿Te estás divirtiendo con la locura de esos dos?

Taehyung sabía perfectamente a lo que se refería pero todo estaba sonando con total normalidad para no espantar a la joven y fue un gesto que agradeció del mayor. Negó con la cabeza y después se levantó del sofá agarrando de la mano a la chica. Lis no entendía por qué la obligó a levantarse y por un momento se resistió, pero finalmente se dejó llevar con rapidez hacia la habitación de Taehyung. Él cerró la puerta tras ellos y deslizó un pestillo que obtenía la puerta. Después suspiró con los ojos cerrados y cuando los abrió pudo observar la nueva postura que había tomado la chica. Rodeaba su cuerpo con los brazos y tenía la cabeza gacha. Nunca antes se había sentido extraña ante la presencia de Taehyung, pero ahora que estaban solos encerrados en una habitación no sabía como empezar una conversación con normalidad. Taehyung admiró su timidez en aquel instante y no pudo evitar acercarse con lentitud hacia ella.

- No... no te acerques.. - le pidió Lis casi tartamudeando.

Los pasos del chico se aproximaban hacia ella produciendo que su cuerpo se estremeciera progresivamente ante tal acción. Lo miró por encima de las pestañas descubriendo una mirada acosadora a pesar de que sus ojos brillaran. Su corazón palpitaba con más fuerza que antes pero esta vez tenía un ritmo distinto, con más intensidad. Bajó nuevamente la vista al suelo y siguió alejándose de él hasta que chocó la pared con su espalda. Taehyung estaba a unos pocos centímetros de ella y repentinamente agachó la cabeza. Percibió la presencia del chico tan cerca de su rostro que logró exaltar sus nervios. Lis cerró con fuerza los ojos y cogió aire mientras que intentaba refugiarse de un beso pegando su cuerpo por completo contra la pared.

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