La oscuridad transcurría en la ciudad. La noche empezaba a ser gélida y el viento se manifestó dirección oeste. Taehyung recorrió algunas calles caminando tras haberse asegurado de que Lis estaba en el interior de su vivienda. Nuevamente se despidieron con el puño cerrado y ese gesto sería siempre algo especial para ambos. El chico se miró las manos y las introdució en el interior de sus bolsillos. Repentinamente una gota surcó contra su frente y levantó la vista advirtiendo que muy pronto se manifestaría la lluvia. Por suerte, dos de sus compañeros de hotel se encontraban dando una vuelta por la ciudad y el trío se unió. Jungkook y Jimin caminaban por Mullholland Drive, una carretera con dos carriles en ambos sentidos. En el borde de las aceras habían palmeras con unos troncos muy gruesos y la longitud era apróximadamente de unos dos o tres metros. Era casi media noche y, no obstante, seguía habiendo rostros estadounidenses habitando la ciudad. Taehyung se fijó en sus compañeros los cuales caminaban sin percatarse de la presencia de él a pocos metros. Jimin estiró levemente de la sudadera de su acompañante y le pidió que le echara una foto con la enorme palmera. Hizo una mueca con sus labios y alzó los pulgares arriba.

- ¡Qué gran modelo! - exclamó Taehyung a la vez que aplaudía lentamente. El uno y el otro giraron el rostro y sonrieron al verle. Se acercaron y ambos le dieron unas suaves palmaditas en los hombros.

- ¡Hey! - dijeron al unísono.

- ¿Qué haces tú por aquí? - preguntó Jungkook con una sonrisa y sugirió seguir caminando con un gesto de dedos.

- Vengo de dar una vuelta. - mintió. Jimin lo ojeó por encima de las pestañas y sonrió irónicamente.

- ¡Oh, si! ¡De dar una vuelta bien acompañado! ¿No es cierto?

- Jimin... - advirtió Taehyung poniendo los ojos en blanco.

- Vale, soy pesado. Pero estoy muy emocionado por ti.

- ¿Por qué?

- No te hagas el tonto. - la voz de Jungkook surgió de imprevisto por delante de ellos. - Sabemos que estás quedando con ella. Nunca te habíamos visto de esta manera y ahora queremos asegurarnos de que todo va bien ahí dentro. - Jungkook señaló con el dedo índice justo el lado izquierdo del pecho de Taehyung. - Te vemos distraído en los ensayos.

- No puede ser. Me esfuerzo y estoy demasiado concentrado. - se defendió y frunció el ceño.

- Sí, eso está claro. Es tú mirada, ha cambiado.

- ¿Mi mirada?

- Tú mirada y el tiempo que le dedicas a dibujar... - intervino Jimin. Los tres caminaban por la larga acera hasta que giraron hacia la izquierda en una esquina.

A pocos pasos un niño daba pequeños saltitos y éste se chocó desprevenidamente contra Taehyung. La madre que agarraba la mano de su hijo se disculpó y él optó por asentir con la cabeza y esbozar una sonrisa.

- Mamá, ellos... - el niño buscó la mirada de su madre y le dijo algo al oído que nadie más pudo escuchar. Después la mujer se aproximó dos pasos más hacia el joven y lo escaneó de abajo-arriba.

- ¿Sois... - la mujer intentó soltar la pregunta, sin embargo, Jimin soltó una carcajada y la interrumpió.

- Sí, lo somos.

- Mi hijo os ha reconocido muy fácilmente. - ella soltó una suave risa. - Veréis, su hermana escucha mucho vuestras canciones y él me ha pedido si podéis firmarle un autógrafo.

Los tres artistas sonrieron amablemente y fue Taehyung quien se acercó primero cuando la mujer le tendió un bolígrafo que sacó de su maletín. Ella iba vestida de traje y el cabello anaranjado caía por sus hombros con forma de oleaje. El pequeño sacó un estuche de la mochila que llevaba en su espalda y se lo ofreció tímidamente a Taehyung.

- ¿Cómo te llamas? - preguntó arrodillado frente a él.

- Dy... Dylan.

Taehyung hizo su firma y dibujó un pequeño corazón en la parte superior de la última letra de su nombre. Después añadió el nombre del niño y lo unió al corazón con una fina y corta línea. Cuando terminó, sus compañeros firmaron en la funda y se despidieron de madre e hijo con una sonrisa y un ademán con sus respectivas manos. A continuación, los chicos sentenciaron volver al hotel y así lo hicieron mientras disfrutaban de la iluminación de las calles más conocidas de Los Ángeles. Nada más llegar al hotel descubrieron a Suga dormitando en el sofá con la televisión encendida. Los demás parecían estar en el interior de sus habitaciones ya descansando. Jungkook se aproximó a Suga y le despertó con un leve balanceo.

- Dios... no. Dejarme. - gruñó y se removió hacia el lado contrario, escondiendo su rostro cansado contra el sofá.

- Si está cómodo... - Jimin alzó sus hombros y soltó una carcajada que se unió con la de Jungkook.

Taehyung caminó hacia su habitación y se puso el pijama antes de que su compañero de habitación saliese del cuarto de baño. Antes de meterse en la cama miró el folio que contenía el dibujo ya realizado. Miró su móvil y abrió el chat para darle las buenas noches a Lis. No recibió respuesta y pensó que tal vez se hallaba durmiendo. Jimin apagó la luz cuando ambos se introducieron entre las mantas y él cerró los ojos para sumirse en un sueño profundo.

۵ ۵ ۵

A la mañana siguiente los rayos penetraron la ventana e iluminaron el adormilado rostro de Lis. Perezosamente abrió los ojos y estiró todas y cada una de sus extremidades cuando el despertador sonó de forma estridente. El cansancio se apoderaba de ella a las ocho y media de la mañana y se sentía atolondrada. Miró la pintura blanca del techo y después estiró su mano más próxima hacia el mueble para coger su móvil. En la pantalla podía observar el mensaje de la noche anterior que Taehyung le había mandado. Le dedicó sus buenos días y le informó de que el día de hoy iba a ser duro ya que le tocaba trabajar tanto por la mañana como parte de la tarde. Al menos agradecía el buen tiempo. Después se levantó de la cama y se dió una ducha cálida. Se puso unos vaqueros y una sudadera y después de haber terminado de secar su cabello ondulado con la ayuda del secador salió de su hogar con sus pertenencias. Enfrente pudo descubrir a Anne, quien salía apresuradamente y se dirigía a su vehículo. La saludó con una sonrisa y le hizo un ademán para que se acercara. Ella obedeció y le dió los buenos días cuando estaba a centímetros de ella.

- ¿Quieres que te lleve a algún lugar? - se ofreció Anne a la vez que abría la puerta del vehículo e introducía su mochila de trabajo.

- No, no hace falta.

- Venga, claro que sí. Últimamente te veo salir muy temprano de casa y la primera hora de la mañana siempre es la más dura. Este frío se te mete en el cuerpo de una manera insoportable... - suspiró y le hizo un ademán para que la joven subiese al asiento del copiloto. Ella aceptó y se puso el cinturón de seguridad nada más situarse en el interior. - ¿Vas al trabajo?

- Sí, al Talents.

- ¿Qué talentos tienes para acudir a él?

- No es por mi talento, es por gusto. - recalcó con una sonrisa. - Estoy trabajando como modelo para una sesión fotográfica para la temporada.

- ¿Y qué tal lo llevas? - Anne conducía con precaución por la carretera y el cemento advertía la humedad producida por la tormenta que había transcurrido durante la madrugada. Lis no se había enterado de los truenos ni del repiqueteo de las gotas contra el cristal de la ventana.

- Mejor de lo que creía. - confesó.

- Espero no ser una entrometida, pero desde Corea hacia Los Ángeles es un viaje muy largo. ¿Crees que ha merecido la pena?

- Estoy segura de que mis padres también piensan en ello una y otra vez. Yo les digo: Mamá. Papá. estoy creciendo. Sé que son solamente dos absurdas semanas, pero realmente quiero ponerme a trabajar e independizarme. Quiero hacerlo. Quiero irme de casa y vivir mi vida. Y pensarán: nuestra hija está loca. Aquí lo tiene todo y decide irse. - soltó el aire que había estado conteniendo mientras que le confesaba a Anne con sinceridad. - Además, estaba deseando viajar. Estaba deseando descubrir más mundo. Hasta ahora había viajado a Cancún pero es muy distinto cuando vas con tus padres a cuando decides dar el paso y hacerlo sola, a pesar del miedo.

- Me gusta como piensas, Lis. Tienes toda la razón. Pero es normal, son tus padres y no les gustaría que te ocurriese nada.

- Como dato importante he de decir que son exageradamente protectores.

Anne soltó una risotada y le contó que su actitud le recordaba a ella cuando era más joven. Le confesó que la había cogido cariño y que siempre que quisiera tendría una amiga nada más cruzar la calle que separaba ambas casas. Lis le dió las gracias con timidez y tras un viaje que duró poco más de quince minutos debido al atasco, Anne detuvo el motor enfrente del Talents. Le deseó suerte y se despidieron con una sonrisa.

۵ ۵ ۵

Los ensayos podían con él. Vaya si podían. Namjoon le llamaba la atención repetidas veces hasta que él lograba concentrarse. Lo había hecho bien los últimos días pero hoy se sentía realmente desconcertado. No podía dejar de pensar. Ella. Ella era la culpable. Apoyó sus manos sobre las rodillas y agachó su cabeza jadeando. El sudor le corría por la frente y debido a esto el cabello se humedeció por el esfuerzo. La esperanza se le presentó en persona con una botella de agua entre las manos, J-Hope lo circundó con su brazo y le animó a sentarse. Taehyung obedeció y se disculpó por todos los errores que había causado, realmente no sabía que le estaba ocurriendo.

La tarde transcurrió pausadamente a pesar de salir a dar un paseo por la ciudad con todos los integrantes del grupo. Siguieron las instrucciones de un guía profesional para aprender a pescar y todos parecieron niños emocionados cuando un pez se acercaba a la red. Intentaban cogerlos pero todo esfuerzo fue en vano excepto el de Taehyung quien inesperadamente atrapó un pez con amalgamas amarillentos. Todos lo rodearon y aplaudieron simultáneamente. Posteriormente, Taehyung lo dejó nuevamente en el agua y sonrió satisfecho cuando desapareció en la profundidad del mar. El pez ama el agua, no puede vivir sin ella. Nadie puede, pensó. Ella es... Entonces se quedó completamente embobado, observando el agua moverse debido al indicio que había dejado el ser vivo antes de sumergirse.

۵   ۵   ۵

Cuando llegó la noche, Taehyung fue en busca de Lis. Su indumentaria era fascinante a pesar de ser un vaquero normal y corriente y una sudadera de la marca Sfera. Él vestía con unos pantalones de traje que a la vista parecían caros y pensó que debía ocultarse un poco más antes de tener el valor de contar su mayor secreto. Ayudó a Lis a subir al vehículo cogiéndole con suavidad la mano y educadamente le tendió el cinturón. Ella saludó con amabilidad al conductor y Taehyung le indicó la ubicación.

- ¿Qué tal el trabajo? - preguntó y se pasó la lengua por los labios.

- ¡Bien! Hoy he tenido que ponerme vestidos alucinantes. Algunos de ellos eran de encajes y tenían brillantes por el cuello... - realizaba gestos mientras que hablaba y miraba al chico con entusiasmo. Además de escucharla, él se centraba en cada detalle de la chica. - He estado todo el día fuera de casa. He comido junto a más modelos y en los ratos libres escuchaba esta canción. Sonaba en una de las radios que habían puesto los estilistas y uno de ellos me la pasó. Dime que te parece.

Lis toqueteó la pantalla de su móvil y buscó en su playlist aquella canción que tanto le había gustado. Pulsó el play con el dedo y la melodía de un piano comenzó a sonar suavemente. Una dulce voz masculina aparecía por delante de las notas musicales y Lis se movía de lado a lado, acompañando a la canción. Lis había estado escuchando durante toda la parte del tiempo esta canción y como consecuencia pudo aprenderse la letra. Empezó a cantar y el joven tragó saliva. Separó los labios e intentó controlar su acelerada respiración, pudo reconocerse a sí mismo. Pudo reconocer su propia voz cantar Beautiful Life.
(cancion en multimedia)

- Es una lástima que no tenga ni idea de como se llama el artista. Tiene una voz increíble... - Lis cerró los ojos y siguió moviéndose al ritmo de la melodía. A los pocos segundos, Taehyung no pudo evitar sonreír.

- ¿Te gusta de verdad? - preguntó él.

- Su voz es parsimoniosa, dulce, encantadora. Controla las notas de sus cuerdas vocales. ¿Y sabes qué? - ella giró el rostro y miró al chico con una ceja levantada. - Creo haberle escuchado antes en algún video, pero éste se bloqueó y no pude verlo. Pero te aseguro que la voz es idéntica.

- ¿Te acuerdas del nombre del... video?

- Era del grupo favorito de mi primo. Era BTS. - dijo el nombre sintiéndose orgullosa por no haberse olvidado pues le prometió a Yeong-Gi que ya no lo haría más.

Taehyung volvió a tragar saliva y repentinamente tuvo la sensación de sentir una punzada justo en el centro de su pecho. Un nudo en la garganta apareció de repente y se puso nervioso. Lis puso la mano sobre su hombro y lo miró con preocupación.

- ¿Estás bien? Estás pálido... - susurró.

El chico asintió con la cabeza y tuvo que esforzarse por sonreír. Para cambiar de tema le indicó a Lis que mirara por la ventana, pues a través de ella se podía ver la Grand Ave, Downtown, y en ella una plaza mucho más grande que la que habían visitado. Lis abrió los ojos como platos y pausó la canción con tan solo pulsar el botón para bloquear la pantalla. Taehyung pudo sentirse aliviado pero no estaba seguro de que pudiese soportarlo mucho más ya que ella había estado escuchando últimamente a la banda y, a él.

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¿Os gustó este capítulo? ¿Pensáis que Taehyung será capaz de guardar su secreto, al menos por mucho tiempo?  Si te gustó este capítulo, sería genial que la historia recibiese tu voto para progresar en el futuro. 💜