¿Es una cita?
Noté un tacto caliente abrazándome.
Apreté los ojos con fuerza sin querer despertar y acurruqué mi cabeza en el pecho desnudo de J-Hope, que al sentir mi movimiento me abrazó con más fuerza.
Respiré profundamente y pude diferenciar el olor a colonia y jabón.
Me tomó un rato, pero al recordar lo que sucedió anoche mi c
uerpo se puso nervioso y mi corazón volvió a latir descontrolado.
Esto no estaba bien.
Debía parar esto pronto.
¿Pero qué puedo hacer?
Otra vez me puse a pensar en mis verdaderos sentimientos.
Me sentía muy confortada e ilusionada al estar entre los brazos de J-Hope. Nunca llegué a pensar que estaría en esta situación.
Pero al pensar en V...
Mordí mi labio frustrada sin saber que hacer.
Suspiré profundamente.
A ver, ___________, tu no tienes nada con V y además no has hecho prácticamente nada con J-Hope, así que no te preocupes.
Posé mis manos en su pecho y lo empujé ligeramente para salir de su agarre, cosa que me costó.
Salí de la cama lentamente y con el menor ruido posible abrí la puerta y fui al salón.
Para mi sorpresa, ahí estaba Jimin sentando en el sillón viendo una película.
— ¿__________? — preguntó mirándome confuso.
Lo miré de la misma manera.
— ¿Qué haces aquí? — pregunté extrañada.
— Eso digo yo... ¿Están viviendo juntos o algo así? Ay, mis pajarillos ya han abandonado el nido — dijo con burla y fingiendo cara de dolor.
— Claro que no, pero dijo que me quedara — resalté la última palabra intentando sonar descarada.
Soltó una carcajada y se movió en el sillón.
— Pero si estás saliendo con Taehyung, no creo que sea bueno hacer esto.
Alcé una ceja.
— ¿Hacer qué? — pregunté fingiendo ignorancia.
— ________ , yo sé que tienes algo con J-Hope. Es obvio. — dijo con sinceridad — No me gusta que ilusiones a Taehyung para luego acostarte con Ho Seok, aunque es algo cómico — soltó una risilla.
— ¿Qué? Espera, espera, espera — dije alzando mis manos a la altura de mis hombros — ¿Quien a dicho que me he acostado con J-Hope? ¡No lo he hecho!
Soltó una sonora carcajada y apagó la televisión para luego mirarme.
— No te creo, ________
— ¿Por qué no? — dije haciendo un puchero.
Puso cara pensativa mientras miraba al techo.
— Pues... — hizo una pausa. — No creo que ninguno te crea.
Abrí los ojos sorprendida y arrugué la nariz.
— ¿Qué? — pregunté.
Soltó otra risita y se acomodó.
— Vamos, no lo niegues — formó una sonrisa — está claro que es imposible que ustedes dos no hayan hecho nada en un cuarto solos, todos lo saben.
¿Qué? ¿Los chicos piensan que me acuesto con J-Hope?
Me sentía avergonzada a pesar de que yo nunca hice nada de eso con él. Sólo nos habíamos enrrollado.
— Pero yo de verdad no he hecho nada — Fruncí el ceño irritada.
Vamos a ver. Ho Seok tenía un gran cuerpo, no podía negarlo.
Obviamente y como podéis haber notado, a veces me dan ganas de tirármelo. Pero a pesar de ello yo aún no he hecho nada con él.
Escuchamos una puerta abrirse y nuestros ojos volaron hacia la habitación de J-Hope.
De ésta salía Ho Seok,solamente con un pantalon de pijama y con el torso aún desnudo, el pelo despeinado y con los ojos cerrados mientras bostezaba y se rascaba la nuca.
— ¿Por qué te levantaste? Vuelve a la cama — dijo casi en una súplica con un hilo de voz ronca.
Al abrir los ojos, se posaron instantáneamente en Jimin.
— ¿Qué haces aquí? — preguntó sorprendido mientras clavaba sus ojos en Jimin.
— ¡Já! ¡Lo sabía! ¡Te acuestas con él! ¡Tenía razón! — gritó saltando del sofá mientras me señalaba con una gran sonrisa en su rostro.
— ¡Que no! ¡Es un malentendido! — grité ya enfadada.
Resopló y dio media vuelta.
— Bueno, me voy. Los dejo sólos — guiñó un ojo.
Solté un chillido que llevaba aguantando desde hace un rato y me giré, mirando a J-Hope.
— ¿Qué acaba de pasar? — preguntó confundido.
— Los chicos piensan que nos acostamos — solté de golpe.
Caminó hasta una silla y cogió una camiseta que estaba encima.
— ¿Ah, si?
Levanté una ceja y entrecerré los ojos.
— ¿Cómo que "¿Ah, si?"? — pregunté — ¿No te importa que lo estén malinterpretando?
Sin ni siquiera mirarme caminó hasta el sillón y se sentó.
Crucé mis brazos.
— La verdad, pues no — dijo con una risita — ¿Deberiamos hacerlo para que ya no sea una malinterpretación? — susurró clavándome su mirada con una sonrisa.
Tragué saliva.
— Eres un idiota — Fruncí el ceño.
— ¿Por qué? ¡Eres tú la que no quiere hacerlo! — exclamó con diversión en su rostro.
¿Cómo? ¿Él quiere? ¡Yo también quiero hacerlo! Pero no quiero arrepentirme luego.
— Ah, ¿Tú quieres? — pregunté con desafío.
Soltó una carcajada.
— ¡Soy un tío! — rodó los ojos — si haces lo que has hecho hasta ahora, cualquiera querría.
— ¿Qué he hecho?
Apretó los labios.
— Provocar — dijo totalmente serio.
Alcé las cejas.
— Me provocas para luego dejarme con las ganas — puso voz de niño pequeño e infló sus mejillas.
— ¿Yooo? — pregunté fingiendo asombro.
— La prueba está en anoche — soltó una carcajada mientras alzaba las cejas.
Me lamí los labios pensando en como responder a su comentario, pero no pude.
— Eso...— murmuré sin terminar la oración.
— ¿Deberiamos ir a algún lado hoy? — mordió su labio.
Caminé hasta sentarme a su lado en el sillón y suspiré.
— ¿A dónde?
Puso una cara pensativa y frotó su brazo.
— ¿Vamos a dar un paseo? — preguntó tragando saliva con dificultad. Parecía nervioso.
— ¿Es eso una cita? — empecé a sonreír como una tonta.
Miró al suelo para que no pudiese ver que estaba avergonzado, pero no lo consiguió.
— Bien. Vamos. — rompí el silencio.
Levantó su cabeza asombrado.
— No hace falta que hagas esto si no quieres — susurró apenado.
Negué con la cabeza y lamí mi labio.
— Si quiero.
Asintió y justo después escuchamos el timbre de la puerta resonar.
—Abre tú — murmuró suplicante.
Al abrir la puerta se asomó Jimin lentamente.
— ¿Ya habéis terminado? — preguntó con una voz más aguda de lo normal.
— Oye — dije entre risas.
— Menos mal, tengo hambre — dijo entrando para luego dirigirse a la cocina.
J-Hope se levantó del sillón y ambos seguimos a Jimin hasta la cocina como ovejas.
Nos sentamos en la mesa mientras que Jimin sacaba el zumo de la nevera.
— ¿Vamos a algún lado hoy? — preguntó Jimin.
J-Hope me miró confuso.
No creo que haya sido posible que Jimin nos haya escuchado.
— Pues...
— Salgamos todos — me interrumpió Jimin mientras se metía una cucharada de cereales en la boca. — ¿A dónde podemos ir? ¿Al cine? ¿A un parque? ¡No, ya sé! ¡Al centro comercial! — exclamó antes de beberse el vaso de zumo.
J-Hope y yo nos miramos incómodos. Nuestra tarde juntos había sido arruinada.
— Está bien. Vayamos todos — forzó una sonrisa.
///////////////////////////
— ¡Ah, hace frío! — exclamó Taehyung mientras me abrazaba con una sola mano.
Realmente hacía frío, así que agradecía que Taehyung fuese tan pegajoso en este tipo de momento.
— ¿Cuándo van a llegar? — preguntó Jungkook irritado.
Faltaban Suga, Jin y, como siempre, Helen.
— ¡Ah, ahí están! — exclamó Nam Joon.
Al levantar la vista observamos cómo los tres venían corriendo agotados.
— ¿Cómo podéis llegar siempre tarde? — les regañó Jimin.
— Perdón, perdón — susurró Jin sin aliento mientras se apoyaba en sus rodillas.
— Bueno, vamos — dijo Taehyung, agarrándome del hombro.
Miré a J-Hope apenada y él también lo hizo. Tenia ganas de ir a su lado, pero no podía.
Dimos un largo paseo por la ciudad, compramos refrescos, fuimos al parque... Pero yo aún seguía distraída.
Yo de verdad quería salir hoy con J-Hope.
— Pero, _________, ¿qué les pasa a ustedes hoy? — preguntó Helen sacándome de mis pensamientos.
Todos estaban en un circulo mirándonos a J-Hope y a mí.
Y ambos mirábamos a la nada distraidos.
—¿Qué? — reaccionamos al mismo tiempo.
— ¡Ves! ¡Justo eso! ¿Qué os pasa a vosotros hoy? — volvió a preguntar.
— Helen, escuché que estás saliendo con Suga — dije con una sonrisita para ilusionarla y que cambiase de tema.
Todos me miraban más confusos que antes y Suga se rascaba la nuca nervioso.
— Bueno, eso....— murmuró con una gran sonrisa en la cara y con las manos en sus mejillas. — No lo pensábamos decir aún — dijo canturreando mientras soltaba una risilla.
— ¿En serio? — saltó Rapmon — felicidades entonces — sonrió.
En un par de segundos, ya todos estaban felicitándoles y hablando sobre cómo fue.
________, eres una genia.
Miré de reojo a Ho Seok y él también lo hizo. Ambos resoplamos.
///////////////////////
— Bueno, la pasé muy bien. Nos veremos mañana — se despidió Jungkook.
— Si, hasta luego — se despidieron todos.
Nos quedamos Taehyung, Ho Seok y yo sólos.
— ¿Te acompaño a casa? — preguntó V, acariciando mi brazo.
— Se quedará en la mía — interrumpió J-Hope. Sus mirabas eran pesadas.
— ¿Por qué te tienes que quedar en su casa? — frunció el ceño — Tú tienes una — ahora me miraba a mí.
— Tío, ¿tienes algún problema? — se acercó J-Hope.
— No, ¿qué te pasa? ¿Por qué eres así?
— ¿Qué te importa dónde se quede ella? ¿Acaso eres su novio?
— Tú tampoco lo eres — contestó.
Ambos se quedaron en silencio.
Si las miradas matasen...
— De todas formas, se irá conmigo — exclamó J-Hope agarrando mi codo y tirándome hacia él.
— ¿Qué eres de todas formas? ¡Déjala...— J-Hope lo interrumpió.
— No te incumbe.
Y al terminar de decir eso, giró y me agarró con más fuerza del brazo, me arrastró detrás suya rápidamente y resopló furioso.
— ¿Por qué has sido así con él? Sólo era amable conmigo — susurré asustada al verlo tan enfadado. — ¡Me haces daño!
— __________, lo conozco. Esto es sólo el principio, si lo dejas pasar se convertirá en un chico obsesivo. Lo hago por ti.
Mordí mi labio para no hablar más y cagarla. Yo no conocía a Taehyung, así que no podía protestar.
J-Hope frenó en seco y giró para mirarme.
Por sus ojos pude ver que dudó en hacerlo, pero rápidamente depositó un rápido beso en mis labios y sonrió.
— Tengamos ahora nuestra cita
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro