-Disparame-

-¡No lo hagas, matanos a cualquiera de nosotros!-

-Disparame-

-¡Te odiare por el resto de mi vida si lo haces!-

-Hazlo, mi niña-finalizó el hombre con una sonrisa haciendo el intentó de tranquilizar a la niña.

Es horrible cuando juegan con tu desesperación. Es horrible cuando tu tienes que ser la responsable de una muerte.... La muerte de un ser querido.

-Papá...-susurro la niña mientras una lágrima recorría su mejilla.

Ya no podía escuchar nada ni a nadie.

Su cuerpo temblaba y sus manos sudaban. 

Cerró los ojos.

Un disparo resonó en toda la habitación. 

Todo se volvió oscuro.

Todos desaparecieron menos la niña, quien cayo...

Cayo....

Hasta golpear contra el suelo oscuro logrando arrebatarle un grito de dolor, dejandola inmovilizada por un largo tiempo.

Adolorida, se incorporo lentamente.

De repente, unas cadenas se enredaron en sus brazos y piernas como serpientes, hasta llegar a las muñecas y los tobillos, donde tiraron con fuerza para que cayera de rodillas. 

Por el miedo, su respiración se comenzó agitar. No sabía que es lo que le aguardaba.

Sintió un fuerte ardor en todo su cuerpo y como se abría partes su piel despacio.

La niña gritaba....

Pero nadie la ayudaba....

-¡Dejemen en paz!-gritaba con fuerza.

Una corriente eléctrica paralizo su cuerpo. 

Otras partes de su piel se volvieron abrir. 

Un fuerte calor recorrió todo su cuerpo.

Y luego, un crudo frió la golpeo.

Desgarro su garganta ante el dolor.

Todo se detuvo.

Luces se prendieron iluminadola, cegándola repentinamente. Lo único que fue capaz de visualizar fue la silueta de dos jóvenes.

-¿Por qué lo hiciste?-

-Eso no es una escusa coherente-

-No importa si eres una niña, eras consiente de lo que estabas haciendo-

-No sé si pueda llegar a entender lo que hiciste-

-Si te mantengo aquí serás una carga-

-Debes rendirte....-

-Es la mejor opción...-

Los métodos de torturas que antes fueron implementados volvieron, despertando nuevamente el dolor.

La niña tironeaba para buscar su libertad, pero las cadenas no se lo permitían en ningún momento. Gritaba con todas sus fuerzas, para ser escuchada y que alguien la salvara.

Pero eso jamas ocurrió.

Y el dolor tan psicológico como físico quedo grabado en ella.

Y de repente.....

Todo paro.

Ya no más dolor, ya no más frases hirientes, ya no más gritos ni lágrimas.

La niña sintió un ligero alivio ante las torturas proporcionadas que cesaron.

Las cadenas desaparecieron, dejándola libre, aun así, con lo débil que estaba solo cayo al suelo, donde no pudo moverse, en donde le dolía hasta respirar.

-Ayúdenme-su voz casi ni se escuchaba, era como estar en el silencio.

Quería morir, para seguir con vida si jamas iba a salir de una prisión que al fin de cuentas ella misma construyo.

Varias parte de su piel estaban abiertas, sus ojos rojos por las lágrimas que ya estaban seca, su garganta ardían tanto que hasta le costaba tragar su propia saliva,  su cabello desarreglado y sangre esparcida, tanto en su cuerpo como, en el suelo.

Cerro los ojos. 

Quería dormir y jamas despertar.

¿Para que vivir?, si nadie la vendrá a buscar, y ella ya no tiene fuerzas para salir de allí.

Unos brazos rodearon el cuerpo de la niña, transmitiéndole calor y armonía.

-Despierta, Emi-

Los ojos de la chica se abrieron repentinamente, sobresaltada, causando la caída del hurón quien dormía en su pecho.

Lentamente se fue sentando en el sillón para notar que ya había amanecido y que la lluvia desaparecio.

La chica dejo caer su cuerpo para luego colocar su mano en la frente teniendo la mirada clavada en el techo.

El hurón de mala gana volvió a subirse encima de su dueña.

¿Por qué demonios volví a soñar con eso?

-Fue ella, ¿no?-

El hurón solo movió su cola golpeando levemente el estómago de la chica. Está soltó un suspiró, se volvió a sentar colocando al animal entre sus piernas.

Eres mala, The Mother.

-Buenos días-la voz del anciano la tragó a la realidad.

La chica le regaló una sonrisa.

Entre una conversación tranquila, prepararon el desayuno.

-¿Y tus hermanos no se han preocupado?-

-No. Pude mandarles un mensaje antes de que se agotará la batería de mi celular. Aunque dude que hayan estado del todo tranquilos-

-Es lógico, me sorprende que no te hayan buscado-

-Por que ellos saben que cuando digo que estoy bien no es mentira. Me tienen la suficiente confianza como para creer en cada una de mis palabras-

-Eso es una hermandad realmente fuerte-

-Supongo que si... Aunque, admito, que no fue nada fácil crear ese tipo de lazo-

La chica creyó que preguntaría sobre su pasado, e incluso ya había formado una carnada para evitar las posibles preguntas del hombre.

-Nada es fácil-esas palabras la tomaron de sorpresa-Ningún comienzo es fácil-

No solo dejo sorprendida a la chica, sino también a los animales, pues nadie imagino una jugada como aquella en el hombre, sin sentir ni la más mínima curiosidad del paso de esta.

-Creo que si-respondió tímidamente.

-Aún eres joven. Te falta mucho por vivir, lo entenderás luego-

Puedo asegurarle que entiendo perfectamente sus palabras.

.

.

.

.

-Le agradezco el hospedaje que me ha brindado. Lamento si llegue a ser una molestia-

-Para nada. Me hiciste pasar un grato momento-respondió el hombre con una sonrisa sincera.

La chica repitió la acción de este. Tomo bien su mochila y a su hurón.

-Nuevamente gracias-

Realizo una pequeña reverencia y se dio media vuelta para encaminarse hacia su nuevo destino.

El anciano solo se limitaba a mirarla con una sonrisa acompañado de su hermosa loba, quien aún no comprendía como la chica sobrevivo a la noche. 

Para cuando la chica desaparaciod el campo visual del hombre, volteo para volver a su casa, sin embargo, una perdida de equilibrio lo defraudo y cayo, asustando a la loba.

A lo lejos, la chica observaba acompañada de la sombra la dura escena.

-¿Eso es posible?-

-Claro que si. El contrato no se desase a menos que el Eve o Servamp lo quieran así-

-Pero él morirá-

-El trato se cancelara cuando él muera, se le dice contrato cancelo por tiempo-

-¿Y en el caso de que el Servamp decida cancelar el contrato?-

-No suele ocurrir pero de ser así rompen el contrato o este mata al Eve. Casos como esos son muy famosos en Avaricia-

La chica observo como la loba, con mucho cuidado, tomaba al anciano para adentrarlo a la casa y buscar la oscuridad.

-Pareciera que ella ya sabía lo que iba a suceder-

-Es obvio. Era cuestión de tiempo para lo que sucedería-

-Pero ¿qué le pasará sin un Eve?-

-Me temo que se debilitara. Sin un Eve, el Servamp pierde la fortaleza de sus poderes-

-Su creador fue listo-

-Lamentablemente si. Sabía lo que hacía desde el primer momento-

Visualizaron a una hermosa mujer de cabellera morada, en la casa, ayudando al anciano y tratando de no ser iluminada por la luz solar.

-Fue ella ¿no?-pregunto de mala gana.

-Si-

-¿Por qué?-

-Aún no comprendo su movimiento, fue incoherente-

-Supongamos que si-

Silencio.

-Y ahora ¿a dónde vamos?-

-A Italia, baby-

.

.

.

Extra

-Espera ¿por qué iremos a Italia hoy?-

-Por nada-

La sombra soltó una mueca.

-¡Suéltalo!-

La chica bufo.

-Bueno.... Es que mañana tengo examen de matemática y...-

La sombra no le permitió que prosiga debido a su fuerte golpe en la cabeza.

-Mañana irás al maldito colegio a rendir ese maldito examen y si apruebas iremos a la maldita Italia-

-Moo~, no era necesario la violencia-dijo la chica sobando el lugar golpeado-Aparte ¿no querías ver a tu hermano?-

-Si, pero tus exámenes son más importantes-

-¡Va a ver una posible guerra de vampiro y tu ¿preocupante por mis exámenes?!-

-Y si desapruebas un examen no irás a ninguna batalla-

La chica cruzó sus brazos e inflo sus mejillas.

-Se supone que yo soy la que manda-

-Sabes que conmigo eso nunca funcionara-