Quince
Llego a casa, la ama de llaves me espera en la puerta, solo le sonrío, pero no digo nada. No tengo fuerzas de hacerlo, realmente ahora mismo no quiero hablar con nadie.
Es por eso por lo que yo me encierro en mi habitación, donde me quito la ropa y me encierro en el baño, abro el grifo de la regadera y espero que llene la tina de baño. Entro sin ningún cuidado, sintiendo como mi piel se eriza al no dejar que el agua tome una buena temperatura.
Y es ahí cuando la realidad de la información llega a cobrar sentido, me voy a morir pronto. Y las lágrimas no las puedo retener más, sollozos fuertes salen de mi garganta, como si quisieran desgarrarla. Me duele el pecho y siento que no puedo respirar bien, me hace falta aire, pero las lágrimas siguen saliendo una tras otra.
No se cuánto estuve en la tina con el grifo abierto, pero solo escuchaba algunas voces, mis ojos borrosos por tanto llorar, me dolía mi cabeza, realmente solo quería dormir, dormir para siempre.
(...)
Abro los ojos lentamente, siento como me arden, mi garganta esta seca y me duele un poco la cabeza, pero esta vez puedo decir que es por tanto llorar y no por... por ese tumor que crece en mi cerebro.
─Señora, ha despertado ─ escucho a la ama de llaves.
Hago una mueca, pues, aunque usa una voz baja, siento como repiquetea en mis oídos.
─Agua ─ pido débilmente.
Ella se apresura a llenar un vaso de agua y me lo entrega, me siento en la cama. Bebo el liquido vital sintiendo como mi garganta lo agradece. Le entrego el vaso de nuevo y la miro.
─ ¿Cómo llegué aquí? ─ señalo la cama.
─Discúlpeme el atrevimiento, pero, le pedí al jardinero Jungkook que me ayudara a cargarla, claro, después de que yo la cubriera por completo ─ ella inclina su cabeza. ─ En verdad señora, nos dio un susto de muerte, ¿Qué es lo que pasa? ─
La miro, quiero decirle que pasan muchas cosas, una de ellas y la más importante es que parece ser que me queda poco de vida. Pero no puedo, no puedo hacer que salgan palabras de mi boca. Realmente me siento devastada en estos momentos.
─No pasa nada ─ comento, mirando hacia otro lado.
─Con todo el respeto que se merece señora, pero, llorar encerrada en el baño de esa manera en la que la encontramos significa que es algo más que nada ─
─No me prestes atención ─ carraspeo un poco, sintiendo el ardor en mi garganta al hacerlo. ─ ¿El señor Kim sabe lo que paso? ─ pregunto, realmente pidiendo a los cielos que eso no pasara.
─No, el señor Kim no se encuentra, desde ayer salió, dijo que tenía algunas reuniones con algunas personas, aun no llega ─ asiento, y suspiro más tranquila.
─Bien, por favor, no le diga nada de lo que paso, dígale lo mismo a Jungkook, no quiero preocupar a Taehyung ─ la miro directamente a los ojos.
Ella guarda silencio por un largo momento, la veo dudar y aprieta sus labios finos en una tenue línea.
─Como desee señora ─ asiente. ─ Pero ¿no podría decirme que está pasando? Sus palabras serán un secreto para mí, no saldrán de esta boca jamás ─
Suspiro, junto mis manos en mi regazo. ¿esta bien que ella lo sepa? Había decidido que nadie lo sabría, al menos hasta que tomara una decisión de lo que haría, pero tal parece que mi cerebro se reúsa a pensar con claridad en estos momentos, estoy en blanco. Y lo decido, vuelvo a suspirar... ¿Cuántas veces van ya que suspiro así?
─Siéntate ─ le palmeo la orilla de la cama, sé que será impactante. ─ Lo que te diré es realmente importante y por nada del mundo tiene que decirle a nadie ─ ella asiente.
─Seré una tumba ─ afirma.
Y realmente pienso en si es buena idea contárselo, estoy a tiempo de echarme para atrás, de no decir nada y solo yo saber esto, pero en verdad no puedo con la carga que he dejado caer en mis hombros, tal vez hablándolo con alguien más pueda ayudar.
─Como sabes, he ido al doctor por lo de los dolores de cabeza ─ ella asiente con atención. ─ Me hizo algunos estudios y una tomografía, en ese mismo rato me dijo lo que tenía ─
─ ¿Qué es? ─
─Es un tumor que crece cada día, el cual parece que acabara con mi vida en menos tiempo, tal vez menos de un año ─ sonrío con amargura.
Veo como ella llora cubriéndose su boca, realmente esta sorprendida, si, esa misma expresión parece que la tuve yo. Y ya no siento tan pesada esa carga, parece que he hecho lo correcto, aunque termine preocupando a una persona.
─Por favor, no quiero contarle a nadie de esto, al menos no antes de que tome alguna decisión ─ aun con lágrimas en los ojos, ella asiente.
Toma mis manos y las aprieta entre las suyas, como quisiera darme toda la fuerza que ella tenía.
(...)
Los días pasaban, convirtiéndose en semanas, las cuales estuve en mi habitación la mayor parte, otras veces solo salía al jardín, claro, todo esto bajo la mirada de la ama de llaves, quien, al saber lo que me pasaba, me ponía aún más atención.
Aun no le había dicho a nadie más, pero aprecia que Jungkook, el jardinero, sabia muy bien intuir las cosas, pues él solo me dio palabras de aliento, mientras me hacía sonreír con algunas anécdotas.
Hoy de nuevo estaba encerrada en mi habitación, mirando por la ventana como el cielo empezaba a nublarse, la tormenta se avecina, solo pedía que los pequeños retoños de girasoles no se lastimaran, que no les pasara nada. Pero conociendo a Jungkook sabía que las protegería muy bien.
La puerta de mi habitación fue tocada un par de veces, me gire a verla.
─Adelante ─
La puerta se abre, dejándome ver a Taehyung entrar lentamente, un sobre amarillo esta en su mano izquierda.
─Taehyung ─ sonrío al verlo, tenía un cierto tiempo donde no lo veía, y aunque sonara tonto, me sentía feliz con solo tenerlo de frente mío. ─ ¿Cuándo llegaste? Pensé que el trabajo tardaría más en terminar ─
─Llegue hace un momento ─ comento, pero parecía algo ido, más bien como si no quisiera darle importancia a algo. ─ Tenía que entregarte algo personalmente ─ dice, y entonces veo el sobre amarillo.
Sonrió y ladeo la cabeza.
─ ¿Qué es? ─ pregunto curiosa.
─Ven, siéntate, necesitamos hablar ─ y es ahí cuando frunzo el entrecejo.
Lo veo sentarse en el sofá que está en mi habitación, lo imito, sentándome del otro lado, frente a él, tengo una pequeña salita en mi habitación. Taehyung deja el sobre sobre la mesita y después me mira.
─Te había dicho que pronto recibirías algo, y esto es ─
─ ¿Es de aquella vez en la que salió el abogado Lee de tu cuarto de trabajo? ─
─Si, necesito que veas esto, si encuentras algún error dímelo ─
Me entrego el sobre amarillo, con cuidado lo abrí, saqué los papeles que estaban ahí dentro. Leí con cuidado, sintiéndome realmente mal cuando vi de lo que se trataba.
"Petición de divorcio"
Era esto de lo que se trataba esa visita, ah, realmente todo se me estaba escapando de las manos. Leí con cuidado todo lo que decía, había algunas cláusulas, donde dejaba en claro que era Taehyung quien rompía el compromiso antes de que terminara el año que nos habían dicho, él se haría cargo de la penalización de ese estúpido contrato cuando nos casamos. También decía que me daría una cierta cantidad por el tiempo en el que estuve viviendo con él.
Levante mi vista y mire a Taehyung, él prestaba atención a todo lo que estaba haciendo.
Baje las hojas y las deje en la mesita, mire hacia los papeles sin volver a tocarlos. El divorcio, Taehyung se había cansado de mí y por eso me pedía el divorcio antes de tiempo. Ah, realmente se había cansado de vivir junto a mí, ¿Qué podía hacer ante eso? Creo que solo me quedaba ver el lado bueno de esto, al menos él no cargaría con una persona que estaba destinada a morir pronto, él en verdad me había dado una solución.
─ ¿Dónde firmo? ─ dije sin pensarlo más, haciendo que él se sorprendiera ante mis palabras.
¿A caso él no esperaba esto?
─Aquí ─ señala unas líneas en la parte inferior de la hoja.
─ ¿Tienes algún bolígrafo? ─
─Aquí ─ dice, sacando uno de su saco.
─Gracias ─ sujeto el bolígrafo entre mis dedos, me preparo para firmar. Mis manos titubean un poco, no quiero hacerlo, pero esto es lo mejor que puedo hacer.
Y firmo después de respirar hondo, después de tomar todo el valor de donde sea. Firmo el final de esto, donde ya no es necesario seguir con algo que estaba destinado a fracasar desde el principio, después de todo ninguno de los dos quería hacer esto desde el principio.
Entonces, ¿Por qué duele tanto?
Sabia que esta era la decisión correcta, pero hacer lo correcto dolía, sabia que al permitirme sentir algo por él, sufriría. Pero, de sentir ese bonito sentimiento por Taehyung, no me arrepiento, y por eso pienso llevarme las cosas bonitas hasta mi final.
...........
En unos minutos más subo el Epílogo. No me aguanté y quiero ver el mundo arder 😂.
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