Uzi no va a ir a la escuela, tampoco es que su padre fuese a darse cuenta.

Una vez la pequeña salió de su delirio mental, rápidamente se vistió y cubrió al desnudo cadáver. Ay qué he hecho, qué he hecho... ¿Qué mierdas he hecho? Me he follado a un jodido cadaver, un puto muerto. He estado montando la polla de un muerto y encima un jodido murder drone. Uzi no paraba de cuestionarse lo que había hecho, ella era igual de asquerosa que la cerda de colas gemelas. Mierda, mierda, mierda. He besado a un muerto. Joder, me habra infectado de algo.

[Análisis del sistema]

[...]

[...]

[Limpio, ningun virus en el sistema]

Uzi exhalo un suspiro de relajación. Sus piernas temblaban, están completamente magulladas, tambaleando de lado a lado. A duras penas podía sostenerse de pie, el exuberante dolor la impide sentir algo que no sea agujetas. Ugh, vale, lo principal ahora será ducharme, así al menos me limpio de... de esto. Una punzante angustia crecía en su entrepierna.

Un enorme rubor lila se extendió por su pantalla, cubriendo sus perlas lavanda. Rápidamente corrió a encerrarse en el baño, golpeando la puerta contra el marco y la chica se apoyó contra el portón. Relájate Uzi. *respiración acelerada* Nadie sabe lo que has hecho... nadie se enterara.... nadie debería saberlo...

Las manos de la niña trataron de relajarla, acariciando su cintura en un abrazo propio. Sus piernas titubeaban pero lentamente, un pie se alzó y avanzó con vacilación, luego otro y otro y Uzi ya estaba delante del espejo, mirándose a sí misma con una sonrisa tímida pero feliz. Uff... Vale mucho mejor... ¿Pero a quién cojones trato de engañar? Me he follado a un puto cadaver...

Pero se sintió bien. Uzi intensificó su vista. Venga no seas así, sabes que nos encanto. El reflejo de Uzi puso una mirada victoriosa. Mu- muerdeme, eso fue asqueroso.

Oh, en serio. Entonces por qué estás deseando volver a estar con él. El reflejo se volvía más arrogante. Vamos, sabes que lo hemos amado. Además... nadie se fijara en ti, porqué dudarlo, tenemos a ese apuesto, caliente y lindo murder drone para nosotras. Uzi no quiso responder, es cierto. Ella estará sola, pero... con ese chico para ella siempre tendrá compañía, amor, afecto, calor y abrazos. Venga, simplemente pirateemos lo para que sea nuestro, nos obedezca y... ¡maté a esos putos abusones!

...

...

"¡Muerdeme, hagámoslo, si joder!" Gritó Uzi a todo pulmón en respuesta. El reflejo y Uzi comenzaron a reír como dos locas mientras un pentagrama hexagonal sustituía uno de sus ojos.

Una vez Uzi terminó de reír. Se acercó a la bañera y dejó caer una cascada de agua tibia. La niña tarareaba de felicidad.

Sus manos agarraron la parte baja de su sudadera y de un solo movimiento se la quitó. Una camisa malva cubría su pequeño torso y de otro movimiento rápido, su parte media estaba al descubierto, solamente unos soft cup lavanda cubrían sus moderadas tetas. Las insignificantes manos se acercaron a su busto y jugaron apasionadamente con sus mamas, Uzi echaba pequeños suspiros de calor.

Soltando sus tetas, Uzi terminó de desvestirse, quitando unos vaqueros cortos y por último un bóxers índigos que eran lo último que cubría su cuerpo.

La ahora ya privada niña miró la caliente agua, su propio reflejo distorsionado y una amplia sonrisa satisfactoria. Algo dentro de Uzi se calentó, su núcleo se sobresaltó, ella está muy, muy, pero muy feliz. Por fin encontré a alguien a quien amar y quien me ame.

Felizmente, Uzi sumergió, sin ningún reparo, su cuerpo en el agua, siendo este cubierto en casi su totalidad. Una de las manos de Uzi descendió por su torso, empezando por su pecho, bajando hasta su abdomen y rozando su clítoris. Concluyendo con su hendidura la cual desprendía una gran cantidad de pringoso líquido. Los dedos masajearon suavemente sus labios mayores, en modo de tratar de relajar el enorme dolor que le dejó ser dividida por una bestia. Realmente, esta zona está completamente herida, tanto interna como externamente. La sensación de vacío la sacudía por dentro, aunque Uzi no lo admitiese verbalmente, ahora está muy desesperada de poder volver a sentirlo dentro suya.

Las hábiles pero torpes dedos frotaron la zona hinchada por los contundentes golpes que se dio con un jodido cadáver. Uzi introdujo dos dedos dentro de sus labios menores y masajearon la zona interna de sus pliegues, abriéndolos y dejando paso a su zona íntima.

Un aroma de vainilla impregnaba la sauna, el calor del agua hacía evaporarla y aumentar la excitación de la niña. La temperatura aumentaba, empañando el espejo. La excitación de Uzi intensificó hasta dejar su pantalla en una opaca luz neon morada, gemidos y suspiros de liberación escapaban de la boca de Uzi, amenazando con ser escuchada. Aunque una ventaja es que su padre no estaba en casa... ¿Cierto?

Bueno, Uzi siguió con su estimulación manual, pero algo se le hacía diferente. Ya no era como antes, ahora no es el mismo placer que sentía al autoestimularse. Trato de aumentar la velocidad, pero nada. Quizás probar más fuerza y pellizcos, e igualmente nada. Ella ya no sentía placer innato al masturbarse, su cuerpo le suplicaba que fuese a por él y lo volviese a montar.

Uzi trató de hacer una imagen mental de su amado, brazos anchos, pecho grueso donde puede acurrucarse, pelo metalizado y brillante, y por último, su verga ya de por sí larga, llegando a superar su ombligo. Pero igualmente falló, si aumentó su excitación pero no la ayudó a liberarse. Uzi la necesitaba dura, ella quiere verla erecta, ver toda su hombría en su máximo esplendor y que ese monstruo la use en ella.

Un ruido sacó de su paranoia sexual a Uzi.

—

Khan entró a su casa viendo un pasillo desordenado, cosas tiradas por el suelo y algunas decoraciones rotas. "Suspiro de cansancio Uzi, ¿cielo estás en casa?"

Sin respuesta, el hombre entiende que su hija le odie, o por lo menos no quiera saber de él. Pero ella debe entender que él vela por su seguridad y la de todos. Hija de su puerta, él es un héroe ¿por qué es que su hija no lo entiende? Sí es cierto que él no la ayuda, no la cuida y... quizás ha hecho comentarios crueles de ella. Pero sigue siendo su hija, él debe cuidarla y la cuida ¿Cierto?

El hombre sacó una foto de su abrigo y en ella vio a una pequeña zángana de pelo lila y ojos similares que en sus manos llevaba una llave inglesa, la niña estaba siendo sujeta por una silueta irreconocible. "¿En qué me habré equivocado Nori?"

Un ruido resonó por el apartamento y sacó de su dilema al bigotudo.

—

Ahí está, delante suya. Por fin cara a cara con la persona que la salvó, quien más ama, el único con el que su núcleo está agusto. Una pequeña mano de Worker acarició lentamente la mejilla del cadáver. "Estoy tan feliz de verte." Pequeñas lágrimas salieron de los luceros de la comunista y una dulce sonrisa de felicidad completa.

Los labios de Doll se cerraron y con alegría se acercaron a los labios de N, donde le dio un tierno y rápido beso. Raramente, a Doll le resultó que los labios estaban fríos. La roja abrió suavemente sus ojos y vio algo horrendo, ningún signo vital estaba presente. Ninguna luz, no parecía estar dormida, es más como si estuviera muerto. ¿Esa zorra lo ha matado? ¿Ha acabado con la persona que ama? ¿Esa maldita enana le ha hecho daño? Oh, Uzi no sabe bien que le hará Doll si en verdad le hizo algo malo a su amado.

Pero antes de que Doll pudiera seguir con sus pensamientos, unos pasos se acercaron hacia ella y con miedo de ser detectada. Doll agarró a su caballero y juntos se metieron en la ventilación.

El marco de la puerta se abrió y Doll pudo ver a un hombre mayor, cansado, decaído pero con una sonrisa de suficiencia. "¿Uzi cariño estás aquí?" Habló suavemente. Un estrepitoso estruendo y Doll escuchó como otra puerta se abrió pero con un golpe desastroso.

Una voz chillona y llena de vergüenza habló con miedo y pánico: "Papá puedo explicarlo." Unos pocos instantes de silencio y volvió a hablar ahora con más calma pero con mucha molestia. "¡Pero qué mierdas te dije de entrar a mi cuarto sin llamar, pervertido!" Doll no era capaz de ver bien a Uzi pero vio como le lanzó una toalla a la cara al hombre mayor.

Tratando de hacer el menor ruido posible, Doll comenzó a alejarse con su héroe a rastras.

[Absolut Solver on... {zvukoizolyatsionnaya afoniya} activada al 120%]

El desesperado ruido fue silenciandose poco a poco y rápidamente, Doll se alejó a rastras con su amor.

—

"¡Puto pervertido!" Gritó la voz chillona de Uzi. De un portazo, el hombre se encerró detrás del cuarto y presionado contra la puerta. "Lo- lo lamento Uzi." Dijo con temor la voz profunda del adulto.

"Muérdeme. Vete de una maldita vez." Una vez Uzi se aseguró que su padre se había ido. El delicado cuerpo de Uzi está a la vista, con una pequeña toalla lila que cubría su cuerpo, aunque tardó en taparse debido a la precaria entrada de su padre.

"Uff... ya se fue ese viejo." Pero rápidamente. Mierdas, joder, joder, joder. Donde jodidas mierdas está el puto de mi novio. La pobre emo quedó paniqueada por la ausencia de su ahora proclamado novio.

Joder joder joder. Se ha ido, ¡cómo vergas se ha ido! La ansiosa Uzi dirigió una mano a su boca y comenzó a presionar las uñas de sus dedos, mordiéndo las con demasiado fuerza. ¡Dónde está, dónde está! Ay, ay. Por favor, por favor. Dónde vergas se ha metido. ¿Estaba vivo? ¿se hacía el muerto para poder entrar al búnker? ¿Me ha engañado? ¿Me ha utilizado para su mórbido placer sexsomniatico? Me he follado a un jodido murder drone para que encima ahora haga una matanza en el búnker por mi jodida culpa. La mente de Uzi desvariaba, por su culpa una potencial máquina asesina vagaba por el búnker, ella había servido en bandeja de plata a sus congéneres.

No, no puede ser. Tranquilízate Uzi, lo revisaste. No tenía ni un jodido signo vital, su cuerpo estaba helado y tenía una herida herida en el abdomen. Calmate. El procesador de Uzi hizo clic y le volvió a recordar su aventura sexual con un cadáver. Ella ha abusado sexualmente de un cadáver y... le ha gustado. Un enorme rubor se extendió por la pantalla de Uzi y de la vergüenza acabó tirándose contra la cama. La misma cama donde minutos antes había estado retozando con un muerto. La menor inhalo el dulce aroma a vainilla que aun quedo impregnado en el mueble, un dulce afrodisiaco invadía los receptores olfativos, pero... algo la sacó de su trance amoroso. La mano de Uzi urgo por su cama y de ahí saco un especie de pulsera o gargantilla negra con un un insignia que pone '048'. "Esto me suena de algo..."

"..."

"..."

"Si... mamá tenía una idéntica." Uzi se corrió hacia una estantería en donde hay un montón de cosas, figuras anime, colecciones de manga entre ellas evangelion, chainsaw man, Punpun, Jojo's, Jujutsu Kaizen, Tokyo Ghoul, Aku no Hana... Ahí mismo hay un marco en donde sale una bebe Uzi siendo sujetada por su madre, una lindura pelimorada con una cara redonda, lívida, tierna, noble, afectuosa, astuta, cínica, maligna, falsa. Cierto aspecto enfermizo de marfil fantasmal, labios finos y aceitosos. Un brillante cabello lavanda, un prolongado flequillo en raya que cubre su izquierda atada en una cola de caballo. Unos ojos llenos de odio amor, un óvalo Iris pseudacorus y un lucero petunio. Por último, una agradable y lúgubre sonrisa llena de felicidad y desesperanza. Pero lo que más predomina es una gargantilla similar a la que tiene Uzi en sus manos, aunque esta está muy difuminada.

Del impacto, la toalla dejó de cubrir su cuerpo y cuando ésta tocó el suelo rápidamente corrió a vestirse con su ropa habitual.

...

...

Uzi salió de su cuarto y salió disparada contra la sala principal. Allí, ella se encontró con su padre bebiendo una taza amorfa y llana de colores con [#Best Dad],Uzi sabe a la perfección que su papá bebe el aceite más amargo. "¡¡Papá!!" Llamó la niña en un pequeño chillido.

"Uhh... Hola cielo, disculpa que entrase sin-" Antes de poder seguir disculpándose, su hija le interrumpió. "Eso ahora no importa papá. Dime qué es esto.ª La niña sujeto alentadoramente la gargantilla.

"Oh, cielo, tú me perdonas, muchas gracias." La mente del hombre se centro en todas las veces que su hija no demostraba amor y cariño hacia él, desde hace tiempo ella se volvió distante y sombría, no sonríe y le recrimina todo a él, como aquella vez que no fue a su graduación de párvulos, o su concurso de ciencias, o sus últimos 13 cumpleaños, o navidad, o aquella ocasión en la que se comió su cena y su postre, o cuando le pillo yéndose a las hetairas. "Oh, Uzi estoy tan orgulloso, esto demuestra tu madurez."

"Muérdeme, como sea, ¿qué significa ésto?" Agitando el collarín de lado a lado, cuando Khan centro sus cuarzos en el objeto en cuestión. Su mente desapareció en un mar de inquietudes. ¿Cómo su hija obtuvo eso? ¿Ha entrado en aquella sala? El hombre recordó la trágica vida que vivió en aquel lugar, esas... torturas, los lloros, las luces, las fauces, las inyecciones, el aceite, las cámaras y ella, su 'mujer'. Aquella belleza mefistofélica, esa rebeldía innata, esa, esa, esa zorra.

Con miedo y odio en su voz. "¡¡De dónde has sacado eso!!" Era la primera vez que le hablaba así a su hija, la primera vez que en ella veía la viva imagen de Nori. "Dámelo ahora mismo jovencita."

Uzi que no esperaba tal arremetida verbal agarró más fuerte la gargantilla y la escondió en su mano. Con mucho más odio que su padre espetó: "¿Qué es y qué tiene que ver con mamá?".

El hombre mayor ya estaba despotricando contra su hija "Uzi eso no es de-" pero antes de que el hombre concluyese su discurso. "Muérdeme." Y en un tono moralista y emotivo. "Papá, tengo el derecho de saber esto... No me cuentas nada de mamá, no se nada de ella, literalmente me dejas sola todo el día, no te acuerdas de mi y ahora quieres separarme de él." Uzi ardía en rabia, su padre quiere separarla de él, quiere destansiarla de él.

"Papá cuéntamelo ¡YA!" La chica gótica rugió en rabia. El hombre miró incrédulo a su hija, está era la primera vez que su engendra le respondía así. Khan trago saliva y bajó la mirada inquisitiva de su hija, él simplemente asintió con miedo.

"Suspiro cansado Si- sígueme." El hombre se dirigió hacia una especie de armario en el que había un papel que ponía Nori's kooky insane stuff. Uzi recuerda que si padre le tenía completamente prohibido acercarse a esta puerta, cuando era más pequeña siempre trataba de forzarla pero nunca lograba nada, no recuerda el día en que dejó de intentarlo pero simplemente dejó de hacerlo por pereza o solamente porque no le interesaba saber más.

Khan sacó una llave, tragando saliva y temblando, el hombre vaciló al introducirla en la cerradura, incluso casi se le cae la llave por la mirada de su hija que le estaba perforando la nuca. Cuando por fin logró abrirla.

Uzi trató de asomarse pero su padre se interpuso en el caminó, los sistemas respiratorios de Uzi la alertaron de un fuerte aroma a humedad, terroso y algo dulce, rancio y fuerte.

Rápidamente, Khan cerró con llave, la guardó y se dió la vuelta, mirando directamente a Uzi. "¡Papá!" Uzi vio en el hombre una mirada serena, temerosa y de vergüenza.

El adulto suspiró y vaciló. "Uzi... ahora es un poco pronto para... para mostrártelo todo... te prometo que más adelante te lo contaré y enseñaré todo... todo." La niña miró impertinentemente y suspiró con aceptación. "Está bien papá, confiaré en tí."

El hombro le enseñó una vieja foto en donde salían un grupo de 6 drones. "Este... en este sitio es donde... donde tú madre y yo nos conocimos... el... el lugar era horrible... tu madre y yo queríamos y queremos protegerte de todo, todo lo que hay allí... ese... ese colgante con insignia era de allí... tú madre y otros workers eran usados como conejillos de indias..."

Sin que Uzi pudiese responder, el adulto le enseñó una gargantilla similar a la que ella tenía pero está lucía diferente, era más pequeña y con un estilo algo... raro. "Tú madre era la 'paciente' 002..."

Uzi estaba dudosa acerca de lo que le contó su padre. Lentamente extendió su mano y vacilantemente trató de agarrar la pulsera, pero ella creyó que su padre no la dejaría tocarla, fue todo lo contrario. Él se la entregó en la mano. "Y... ¿Qué más?" Volvió a dirigir sus ojos a las cansadas luces blancas.

"Por ahora... por ahora es mejor que sepas hasta ahí, cuando... cuando tú y Doll estéis juntas os contaré más... te lo prometo."

"¿Qué tiene que ver Doll con ésto?" Miró con mucha más intriga.

"Básicamente, como sabes la tía Yeva y Nori eran hermanas, ella también era un sujeto de pruebas. La paciente '048'." Cuando terminó de decir estás cosas, Uzi se dió cuenta que la gargantilla que tenía era la de Doll, esa perra se llevó a su novio. "Y ¿De dónde sacaste a tu ese collar?" Preguntó el adulto.

"Muérdeme... por ahora dejemos esto aquí... gracias papá." Uzi salió corriendo hacía su cuarto no sin antes agarrar las cosas que sacó Khan.

"Es una buena niña, quizás algo rara pero es buena." El hombre no quería preguntarle más, aunque lo niegue, una parte de él sabe que no es el más indicado para preguntarle cosas, no tiene ningún derecho.

—

Ese mismo día por la madrugada.

Un lindo sueño en donde ella está feliz, ese bastardo no está en la ecuación y ella por fin puede relajarse. Pero unos ruidos molestos resuenan por las paredes, unos llantos quejumbrosos rompen como filo frío la agradable atmósfera de tranquilidad y sacan de su muerte a la pequeña niña y con pereza abre los ojos. Un lindo y tierno bostezo sale de los insignificantes labios carnosos. Con una mano roza suavemente su ojo izquierdo y mira hacia la puerta de su cuarto, la niña se levanta suavemente de su alcoba y se dirige hacia ésta.

Abre suavemente la puerta y vislumbra una vaporosa luz procedente del fondo del pasillo, una fosforescencia Hibiscus ilumina en un fino destello el pasillo, una hilaza carmín sale de la entornada puerta de sus padres.

"ah...ah... ah." Suspiros esporádicos y jadeos suaves y agudos de voz femenina salían del cuarto, aunque empezaron a ser opacados por otros más graves y pesados. "Oh... oh... oh"

Con sigilo, la niña se acercó calmadamente y atrevida. Un paso y dos, y tres, y ya está justo delante del cuarto de sus padres. Ahí mismo, ella posicionó uno de sus ojos en la pequeña franja divisoria. Una gran cantidad de ecos corporales, la fricción de la dermis artificial, golpes suaves, sonidos húmedos y de secreciones, rechinamiento de muelles y la cama.

Una fuerte luz cegó el ojo de Lizzy, esto concluyó con la contracción del lucero. A medida que se relajaba, la potente luminosidad fue sauvizandose y dejó a la vista la delicada espalda de una mujer rubia montando a un hombre.

Ya están follando otra vez. Dios, que puto asco que dan. Malditos viejos verdes.

"Oh sí cariño sigue así... mmm." Sonó la sutil femenina.

Oh, en serio perra. Se supone que eres una madre 'ejemplar' y 'recatada', y mirate ahora gimiendo, retozando y rogando como una perra mientras que tu hija está sola y sufre hostigamientos de ese infame.

"Baja... baja la voz... despertarás a Genoveva." Suspiro de excitación la bravucona voz de su padre.

Oh sí, preocúpate ahora por tu hija, no cuando ella no estaba aquí. Uf, maldito viejo. Algo hizo clic en la mente de Lizzy. Agh... hacía tiempo que no me llamabas así maldito viejo... Ojalá nunca hubiera nacido.

Lizzy suspiró con resignación, miró por última vez la acción sexual que sucedía delante suya y... carencia, simplemente se alejó y se dirigió a la cocina.

La mente de la rosita no se centró en nada, no sentía ningún tipo de excitación al ver el escenario delante suya, nada de nada, ni siquiera un mínimo mareo o necesidad de tacto. Solamente asco, asco hacía su madre, asco hacía su padre... y asco hacía él, hacía ese sucio depredador.

Ella no siente excitación, no siente placer, nada. Desde aquella ocasión, todo el dolor que sintió y siente, todo acumulado la hace incapaz de desear el placer, le duele al tocarse, le duele rozar sus labios menores, tocar sus tetas, todo, le duele todo por su maldita culpa. Le duele de verdad, no quiere hacer nada que conlleve el coito, le produce asco y aversión. Por su puta culpa no puede desear la intimidad, no puede sentir amor, odia a todos los hombres por su maldita y jodida culpa. Le odia, le odia y le odia a muerte. Pero, no puede hacer nada, no tiene ayuda, solo a sus amigas pero como el bastardo es reconocido, normalmente se junta con ella, la manosea, la toca, le roza el cuerpo, la mira lujuriosamente. Como le odia, le odia a rabiar.

Cuando ya estaba en la cocina, Lizzy abrió suavemente la nevera y sacó un brick de leche de la cual dió un trago profundo. También quiso buscar algo para comer, rebusco un poco en los armarios y agarró una bolsa de patatas y se dispuso a dirigirse a su cuarto.

Pero antes de poder avanzar más, un golpe seco llamó su atención. Éste procedía de la puerta de entrada y, Lizzy pudo ver cómo algo se deslizaba por debajo. Instintivamente, el cuerpo de la colegiala comenzó a temblar, unas horrendas náuseas comenzaron a surgir, sus piernas vacilante mente temblaron y la niña cayó suavemente contra el suelo sin producir el menor ruido.

Lentamente se acercó gateando hacia la puerta, con miedo ella agarró el trozo de papel. Ella podía sentirlo, le sentía, él estaba justo detrás de la puerta con su estúpida sonrisa arrogante y de suficiencia.

Lizzy tragó saliva y sin esperar más, agarró sus cosas y se largó suave pero depresiva hacía su habitáculo.

Lentamente se recostó en su cama y dejó las patatas en su escritorio.

Lizzy agarró la manta y se escondió debajo de ella, cubriendo todo su cuerpecito. Llorando ahí, ella sola, en completa soledad, vacía, abandonada y dejada, tirada como un trozo de basura... se supone que ella es la más linda, la más hermosa, la más sexy, la más atractiva. Por qué debe sufrir esto, por qué ha de aguantar este acoso, por qué, por qué... por qué mierdas nadie está para ella...

Solo puede llorar, sollozar, gritar y sofocarlos contra la almohada. Pero nada más, simplemente ha de callarse todo esto...

...

...

¿Por qué?

...

...

La niña acabó cayendo rendida de tanto lamento, el dolor, la angustia, la depresión, la fuga mental. Toda la sumió en una profunda muerte onírica...

...

...

Por la mañana...

Lizzy despertó adolorida, sus ojos estaban cansados, pesados y lamentables. Los luceros decaídos y casi moribundos. Sus sistemas la urgían a volver a dormirse pero ella no deseaba eso.

Lizzy trató de levantarse, pero su cuerpo ardía en dolor. Con mucho esfuerzo ya estaba sentada en la cama y con sus manos se limpió sus llorosos ojos.

Sus orbes volvieron a centrarse en la dichosa nota, ella no quería leerla, no quería ni verla, así que la arrugó y arrojó a la basura.

Unos toques suaves en su puerta la alertaron de que alguien quería entrar. Oh, mira al menos ahora son educados...

Lizzy se levantó y se dirigió hacia la puerta sin prestarle atención a su horrible estado actual. Rápidamente posicionó su mano en la puerta y de un solo clic la abrió. Delante suya está su padre.

"Hola Lizzy, ¿Cómo te encuentras?" Habló el padre ignorando el hecho de que su hija estaba en un estado decrépito.

"¿Qué necesitas? 'papá'." Burló la niña con un tono de indiferencia, realmente a ella le da completamente igual lo que necesite o no su padre.

"Bueno... Hoy en la noche vienen los Stupratore a cenar, trata de comportarte... Adiós." Algo en la voz del hombre acabó quebrándose al decir esas palabras, es como... si sintiese culpa. Pero de igual manera él simplemente salió de la zona.

Estas palabras resonaron en Lizzy. Su maldito padre va a traerlos, va a traer aqui a ese idiota, la van a dejar en una sala con él despues de lo que sucedio... que clase de padre hace eso.

Pero Lizzy sabe que no le sirve de nada discutir, nada... su padre no le hace caso. Solamente para poder mantener su maldito trabajo del que tanto se queja... que asco de padre.

Pero, definitivamente, Lizzy ya está harta, odia esto, odia su vida, odia a todos... Solamente ha de desaparecer. De este modo, Lizzy agarró unas cosas de su cuarto, lo vital, ropa, un poco de comida, sus gameboys con Pokémon rojo, unos pocos cómics.

Lizzy tiene claro a dónde irá. Y de este modo, la niña se dispuso a abandonar su fatídica vida...

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Bueno, ¿Qué les pareció? 

Espero les haya gustado y disculpen la tardanza.