Capítulo 11: Abigail
Después de unos minutos de estar comiendo ya sólo me quedaba el caldo de la sopa y estaba dispuesta a tomármelo, pero escuché que alguien estaba bajando las escaleras
Estaba sentada preocupada y algo asustada, me quedé viendo las escaleras esperando ver a quien, sea quién sea que este ahí.. sin saber las intenciones de esa persona
—¡¿Quien eres?! -me preguntó una chica algo enana
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•••-Capítulo 11: Abigail •••
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—Yo... -Estaba contestando pero ésa chica se fue enseguida sin escucharme primero
La chica bajita se fue corriendo para arriba en las escaleras por un gran susto que se dio sin dejarme hablar
—Bhhu.. que tonta -y seguí comiendo con normalidad hasta que termine
Me quedé en silencio revisando mis ropas
Mi suéter y mi blusa habían sido rasgados cuando el asistente de King nos atacó, por fortuna a mí no me pasó nada, a diferencia de los otros 2 chicos...
-Aun te tengo en mi mente King, esto es una promesa Real, te voy a matar cuando tenga la oportunidad -Pensé muy determinante con una expresión de desagrado entrelazando mis dedos frente a mí sobre la mesa
Quería salir de aquí, pero primero tenia que cambiar mis ropas por unas nuevas
Me levante y a como pude volví a subir al cuarto donde había dormido anoche
-Pff... Me esta dando un poco de frío -pensé sin darle importancia
Abrí la puerta y entre a la recamara, avancé hasta la cómoda de la ropa y la abrí
-¿Qué...? Esto no me sirve, es pura ropa de hombre... encima de vejete, puras camisas abotonadas y a cuadros, cuadros de viejo -Pensé cerrando la cómoda -Bien, buscaré en las otras habitaciones
Salí de la habitación dónde estaba en dirección a la habitación más cercana a un lado de la mía justo enfrente de las escaleras
Al momento de abrir la puerta me percaté de un detalle
¡Aquí solo hay un cama!
-Tshhh -cerré la puerta
Y me dirigí a la otra habitación que estaba de frente a mí habitación en el pasillo
Intenté abrir la puerta pero estaba con seguro
-Esa Tonta gallina Asustada seguro esta ahí dentro
Inmediatamente pensé que se podía tratar de la tonta de hace unos momentos
-Tonta, Ábre, necesito entrar -me quedé callada por unos segundos esperando respuesta pero no me contesto -Ashh.. ¡Tu, como te llames...! -dije algo desesperada, pero mejor me empece a calmar -Lo único que quiero es cambiar mi ropa que ya me rompieron lo que tengo puesto, pero no puedo hacerlo si no puedo entrar -me empieza a enojar internamente esperando su respuesta, pero Intenté mantener la calma
Intenté volver a abrir la puerta pero no se pudo ya que tañía seguro
-Ashhh... como quieras, no me moveré de aquí -me senté en el suelo recargada de la puerta con mi pierna lastimada en reposo
Mi rodilla dolía, al igual que mi cabeza, pero solo un poco. el golpe que me dieron en la cabeza con esa daga fue muy duró y aún me duele si pienso en eso, pero no podía hacer más que intentar descansar un poco, aunque tenía muchas ganas de irme de aquí, casi como dándome igual si fallaba en el intento, pero mi vida es más valiosa
Pasaron unos minutos en los que ya me estaba quedando dormida del aburrimiento de esperar hasta que sentí que a la puerta le quitaron el seguro
Ya estaba calmada, además no es como que sea una opción ser agresiva en mi situación actual, lo mejor para todos y más para mi es mantener la calma
-Ya viene siendo hora de pensar con la cabeza -pensé recargandome a la pared
Cuando la puerta se abrió reveló a mi derecha a una chica desarmada muy delgada, no muy alta, con el cabello recogido color negro en una cola con trenza, de tes morena clara, no muy agraciada, tenía puesto un suéter color azul abrochado poco más arriba de la mitad y abajo otro suéter color blanco y encima de todo un chaleco color naranja, con unos pantalones de mezclilla que revelaban que tenia puesto abajo de ellos un pans para soportar el frío con una mochila que por alguna razón se miraba muy llena
Al verla mantuve una expresión serena y levante mi mano izquierda con el saludo hippie
-Hola...
Ella me vio e inmediatamente intento cerrar la puerta frente a mí, pero metí mi brazo derecho para detener su acción
-¡Espera! ¡¿Que no escuchaste que quiero entrar?! Bab... -suspiré -Voy a entrar y salir ¿ok?
Ella sin decir una palabra asintió con una expresión de entre sorpresa y miedo e intente levantarme pero por error me apoyé con mi rodilla mala y caí al pisó quejándome de dolor
Esa chica de inmediato fue a ayudarme a ponerme pié
-¿Estas bien? -me pregunto ayudándome a lavarme
-¡No! No estoy bien, unos malditos me facturaron mi rodilla y ahora no puedo ponerme de pié sin caer al pisó cada que lo intento
Luego de quejarme me senté en la cama de la habitación dónde estaba esa chica para calmar el dolor manteniéndonos en un silencio incómodo
-Pfff, ya como sea, salte de aquí, me voy a cambiar
Ella sin cuestionar se salió de la habitación cerrando la puerta respetuosamente
Me quedé viendo la puerta unos segundos y puse seguro por sí acaso
Con apoyo de la cama fui hasta la cómoda que estaba hasta el final de la cama y la abrí
Mire que había bastante ropa para mi y con bastante variedad. Como estaba haciendo algo de frío elegí unos pantalones pens tipo cargo de color negro, una camisa manga larga color blanco mitad negra y una chamarra ajustada también color negro que no abroche y quedándome con mis tenis que ya tenia
Me recosté un poco en la cama, pero luego me levanté y me dirigí hacía abajo con cuidado de no caer rodando por las escaleras pero cuando miro a la salida me encuentro con que la misma chica bajita de orita estaba ahí abajo rezando arrodillada apoyándose en un sofá
-¿Esta.. rezando? -bajando las escaleras -¿Qué haces? -Pregunté ya habiendo llegado a la planta baja
Ella se dio un pequeño susto por que no se esperaba que alguien le hablará en ese momento
-Ehh?! -me volteó a ver -Solo estoy rezando antes de irme
-¿Si sabes que pudiste haberte ido en la noche cuando esos muertos tienen poca visión?
Se quedó callada un par de segundos
-Pero es que ya llevó como 3 días aquí y ya me quiero ir, además en la noche hace frío -sonó como una excusa barata.
-¿No me escuchaste? -me acerco un poco a ella apoyada de la pared rengueando con cuidado por mi rodilla -Dependiendo del grado de putrefacción o zombificación o lo que sea, van perdiendo sus capacidades, como la vista en este caso... eso lo he estado aprendiendo mientras los observaba en el balcón de mi casa -voy a la ventana al lado de la puerta principal y veo a los muertos que vi anoche -Y esos muertos ya están en un grado de zombificación medio, así que es probable que su visión sea pobre en la noche -Intenté sonar segura
-ohhh, ¿entonces no me pueden ver? -caminó hacía donde estaba
-La miró -Si, pueden verte, pero solo en el día -volteo a la ventana -Pero aun así pueden escucharte si haces mucho ruido.... ¿Que Edad Tienes? -me altere un ligeramente
-Tengo 22 años ¿y tu?
-22 años... es más grande que yo, y tan tonta que suena... su voz me irrita, tiene una voz muy chillona e irritable para cualquiera... -pensaba -Tengo 20... -le respondí y seguí observando a los muertos merodear sin rumbo a lo lejos seguido de voltear al cielo azul matutino despejado -Esta chica se ve que es inofensiva... y muy débil -suspire -Si quieres sobrevivir, te recomiendo que no te vayas ahora, o morirás muy rápido
-ella me miraba como una estudiante poner atención a su profesor -Ohhh... bueno, entonces me voy a quedar -se río un poco, como si se sintiera segura por fin -Yo me llamo Abigail ¿y tú cómo te llamas? -me extendió la mano ya habiendo entrado un poco en confianza conmigo
-Y yo Liliana, pero prefiero que me digan Lily -me quite de la ventana dirigiéndome a sentar a un sofá grande sin darme cuenta que me extendió la mano ignorandola sin querer
Abigail no más se quedó viendo quedando ignorada por error, así que para disimular aseguró la puerta con seguro y luego se fue a sentar ella también al sofá individual
-Por como están las cosas, y mi rodilla... creo que pasaré el día aquí... sobre todo para recuperarme, no puedo arriesgarme -me acosté en el sofá que me senté -¿Puedo hacerte una pregunta? -así mismo acostada la volteo a ver
-Si, claro ¿Que cosa? -dijo sonando amable
-¿Eres religiosa? -le pregunte
-sonrío como poniéndose alegre por la pregunta -Si, soy Cristiana
-Que fastidió... -dije en voz baja y deje caer mi cuchillo al pisó -ahora tendré que convivir por el resto del día con una chica religiosa y que enzima su voz suena como la de tonta... -pensé
-¿Cómo? -preguntó Abigail
-Nada...
Nos quedamos calladas por un momento hasta que Abigail se sintió incomoda y decidió romper el hielo con una pregunta
-¿Por qué? ¿Tu también eres cristiana? -me preguntó Abigail interesada en mi respuesta
-No, no tengo religión y la verdad es que no me interesa, ya tuve malas experiencias con la religión antes
Abigail se sintió algo incomoda con la franqueza y el tono de voz de Lily, así que desvió el tema
-¿Y como llegaste aquí? -preguntó ella
-No lo se, alguien me trajo cuándo estaba inconsciente -le respondí acostada viendo al techo tratando de ignorar el dolor de mi rodilla
-¿Inconsciente? -pregunto algo extrañada
-¿No sabes qué es? -la miro asombrada -Significa que estuve desmayada... Tarada -lo dije susurrando para no levantar discordia que y intente hacerme algo más adelanté
-ohh sí, claro, no me acordaba qué Significaba esa palabra -se río algo nerviosa -Pero ¿por qué te trajeron aquí?
-Dejemoslo que fue por mi bien... o algo así creo, ya me da igual, más o menos -dije acostada en el sofá mirando al techo -Pero tengo una misión personal, ir con quien me rompió la rodilla y a los responsables, por eso quiero volver
-¿Qué vas hacer? -preguntó muy curiosa con una expresión rara en su rostro
-Voy a matar a los a los que me hicieron daño... La venganza se sirve en un plato frio -pensé
-se asusta -Pero no puedes hacer eso, matar a una persona es pecado
-¿Pecado? -la miró -¿Haz visto donde estamos, en la situación en la que vivimos? Donde los muertos caminan entre los vivos, en nuestro mundo reclamándolo de a poco. Las leyes y la moralidad han desaparecido. Aún no he visto la peor parte del apocalipsis pero créeme -me siento y la miro fijamente
-Los pecados al igual que las leyes ya no existen.
-se quedó callada por unos segundos, pero respondió -Lo que dices que quieres hacer es un pecado y te puedes ir al infierno incluso sólo por pensarlo ‐se asusta un poco por levantarme la voz
-Ahhh... -exclame en forma de suspiro -Cállate -desvio la mirada un poco en gesto de que me daba igual su opinión, pero enseguida la volví a mirar a los ojos -Solo diré que cada quien con sus creencias, yo soy atea, tu Cristiana y se acabo -sin despegar la mirada
-Pero ¿Por qué te consideras Atea? Los ateos también se van al infierno por que no creen en dios -preguntó
-Y según la religión cristiana, escuché algo así como de "El respeto" o "Respeto al prójimo" y es un significado de doble carril... -pensé en mejores palabras -Así como yo te respeto a ti, tu debes de respetar mi ateísmo y a mí
En cuanto dije eso me puse de pié y a como podía me dirigí a la cocina a ver si podía encontrar algo como café para calmar las malas vibras
Mientras yo me movilizaba con dificultad a la cocina que quedaba en forma de "L" desde el sofá en que estaba acostada, Abigail se dirigía al cuarto donde pasó la noche anterior
-Maldita seas ¿Por qué no hay café? -miro a mis alrededores -Pff... cabaña de mierda
Sin más cerré la estantería de la despensa, pero enseguida la volví a abrir y saque una sopa instantánea, puse a hervir agua y me puse a esperar sentada en la mesa sin poder hacer nada
Después de unos minutos la tetera ya estaba silbando intensamente, así que apagué la estufa y ahí sentada sin tener que ponerme de pié puse el agua en la sopa instantánea
Mientras yo hacía eso Abigail volvió a bajar viéndome tal y como fue que nos vimos hace un rato con la diferencia de que esta vez no salió huyendo
-¿Qué? -le pregunté ya que se me quedaba viendo sin terminar de bajar las escaleras
Abigail reacciono y termino por bajar las escaleras dirigiéndose a la cocina también
-También venía a comer -se ríe un poco nerviosa
-Tienes suerte, acaba de estar el agua -llene la sopa instantánea de agua hirviendo y luego le pase la tetera a Abigail
-Gracias -tomo la tetera, pero la dejo en la mesa para ir por una sopa instantánea
-De hecho, venía por un café, pero como puedes ver, no ay más que pura sopa instantánea aquí
-A mi me gusta más el Té -dijo abriendo la sopa instantánea
-Mi adicción a la cafeína me hace un poco dependiente a ella, este apocalipsis es una buena excusa para creer que no tengo ninguna adicción
Abigail no dijo nada, pero solo por que no supo como continuar la conversación
Entonces Abigail puso algo de agua hiriendo en su sopa instantánea mientras era observada por mí
-Tss, de la que no pica -pense mientras volteo a verla a la cara mientras sostenía con mis manos mi sopa la cual era de la que si picaba
Abigail se sentó también en la mesa y también de puso a esperar a que este lista su comida
Sin darnos cuenta nos habíamos quedado en un silencio incómodo, silencio que fue roto por Abigail con una pregunta
-¿Te llamas lily, verdad?
-Si, Liliana Miller, pero solo llámame Lily
-Me preguntaba... si era posible saber sobre tu fractura en la rodilla... claro sin incomodarte
-Suspiré -Ya te lo había dicho, un idiota me la rompió, junto con su otro imbécil
Me quedé callada por unos segundos y hasta Abigail ya iba a contestarme pero volví a hablar
-¿Conoces al grupo.. o Secta.. de la Santa Muerte... o lo que sea?
Ella negó con la cabeza de lado a lado sin decir nada
-Básicamente, fui descubierta por ellos en medio de una sesión espiritista y uno de esos hombres me golpeó tan fuerte que me rompió la rodilla... eso creo, no soy médica... y luego el jefe del culto me golpeó en la cabeza con una daga y me noqueo y me trajeron aquí
-Wou... brutal... que feo
-Debo de admitir que hasta yo sentí un poco de miedo, realmente creí que iba a morir, no se por que sigo con vida, como mínimo debieron haberme hecho algo... pero creó que mi integridad se vio favorecida por Samuel La Muerte
-¿Quien es Samuel La Muerte?
-Dios... su voz me irrita tanto, no se por que me puse hablar con ella -pensé
-Creo que es el máximo jefe de ese grupo -la miró -¿Cómo es que alguien de 22 años tiene una voz tan molesta al oído? -pensé
-¿Pero por que te salvó? No entiendo
-¿Y crees que yo si? -dije empezando a alterar me pero me empecé a relajar para evitar conflictos -Originalmente tenía en mente ir hasta su base y conocer en persona a ese tal Samuel La Muerte, pero tal vez estaba ocupado en otra cosa y no lo pude ver, pero se que el a mí si me conoció por que el fue el que me llevó hasta aquí, según una carta que estaba al lado mío cuando desperté -le conté mirando a mi sopa instantánea pero levante la mirada hacia sus ojos -¿Y tu como llegaste aquí?
-¿Yo? He... bueno, estaba en un grupo de personas en un carro saliendo de la ciudad por la noche pero en medio del camino el copiloto se convirtió en un zombi y atacó al chófer
-¿Deberás? -dije indiferente abriendo mi sopa instantánea
-Si, y luego el chófer empezó a frenar pero al final chocamos algo duro contra otro carro que esgaba estacionado en la orilla y nos salimos del carro
-¿Cuántos eran? -me estaba empezando a intrigar su historia
-Eramos... -se puso a contar en voz baja -Eramos 5 personas
-¿Y que paso después? -estaba buscando un tenedor para mí pero sumamente curiosa por la historia
-Nos bajamos del carro y nuestro amigo que se convirtió en zombi, empezó a atacar a otro de ellos, así que un amigo me jalo de la mano y empezamos a correr hasta que encontramos esta casa y nos metimos
-Entonces ¿Dónde está tú amigo? -le cuestione
-Es que no sé -dijo alargando la palabra -Por qué cuando llegamos descansamos unas horas pero luego el me dijo que volvía pronto por que iba a buscar a alguien que nos pudiera ayudar a mí y a él o que si podía encontrar un carro que sirviera que volvía pronto por mí, pero ya pasaron 3 días
-No quiero desilusionarte, pero tu "Amigo" te abandono a tu suerte... o en el peor de los casos, ya de a estar muerto... o tal vez ya es una de esas cosas y espero y ruego que no sea la última opción
Abigail se quedó callada unos segundos por la franqueza de Lily pero más curiosa pregunta
-¿Por qué?
-Porqué si es el casó de que lo mordieron y se transformó en un muerto, no es como esos de afuera a unos metros de la cabaña, su cuerpo sigue en buen estado. Ya te lo dije, mediante el grado de zombificación, mayor daño al cuerpo... ya no hablemos más y ponte a comer -me puse a comer mi sopa instantánea
Abigail se paro a tomar un tenedor y luego también se puso a comer resignada con lo que le dijo Lily al final
Una Abigail que era incapaz de guardar silencio fue silenciada y obligada a comer en silencio, aunque no entendía el por qué, provocando una sensación de incomodidad ya que sentía que debía de decir algo
Mientras yo muy cómodamente estaba comiendo en silencio muy agusto de no escuchar su Irritante Voz
-Honestamente no se como estoy manteniendo mi carácter bajo control, tal vez me desahogue más tarde -la miro por unos instantes -¿Por qué siento que esta vez su presencia será diferente?
Pasaron unos minutos y finalmente termine de comer
-Ja, le gané -pensé mirándo que aun seguía comiendo
-¿Ya terminaste? -pregunto Abigail
-See, ya lo hice, hace rato que me quería ir de levantar, pero como ya te explique, mi rodilla
-Oh, claro -Abigail se apresuro a comer terminando rápidamente y luego se puso de pié poniendose a un lado mío -Yo te puedo ayudar
-Ah... Ehh... Bueno, pero limpiate primero con una servilleta o algo -cuando se apresuro a comer se mancho un poco -No quiero manchar mi ropa nueva -lo decía presumiendo la ropa que me encontré hace unos minutos en el closet
Abigail notando sus manchas agarró lo primero que pudo como una servilleta de tela y se limpio bien y luego me ayudo a ponerme de pié y me llevo hasta la habitación en la que dormí anoche
-Ufff... -exclamó cansada -Ya llegamos
-Creo que debo deee... -sin mirarla a la cara y poniéndome cómoda en la cama en una buena posición -Agradecerte por traerme hasta aquí, Gracias -la mire un poco ya que estaba cómoda -No puedo creer que me esté comprando así con ella... -pensé algo indignada
Abigail se sentó al lado de mi en contra de que pensaba que ella también se iría a la habitación en la que paso la noche y me empezó a hablar
-Uff.. esta frió ¿Verdad? -dijo
-Mm no, yo no tengo frió, casi no me hace el frío, además que tengo la chamarra puesta
-Yo tengo 2 suéteres y una chamarra y aun así tengo frío -dijo sonando con un tono de voz irritante
-Si, cada quién... yo lo aguantó... además, es un chaleco
-¿Y tienes hermanos? -me preguntó
-Si, tengo una hermana gemela, Se llama Iliana, aunque ella vive en los estados unidos con mi mamá, pero no de nada de ellas
-¿Y papá tienes?
-Pfff... ya no, el murió hace varios años cuando era una niña, pero prefiero evitar hablar hacerca de mi familia -dije algo melancólica en el fondo permaneciendo en un silencio incómodo hasta para mí -¿Y tu? ¿Tienes hermanos? -decidí romper el incómodo silencio
-Si, tengo una hermana y un hermano, los 2 menores yo soy la mayor
-¿y tu si tienes papá? -Pregunté sintiéndome algo melancólica en el fondo
-Si, yo si tengo... ahh tengo a mis 2 padres conmigo -dijo
-¿Entonces por que no estas con tu familia? -la mire cuestionandola
-Pues es que mis hermanos, mi mamá y mi papá estaban en la iglesia cuando derrepente llegaron los militares a avisar que el virus se estaba propagando por la ciudad y que los iban a evacuar ya mismo ese día, yo en esa ocasión me quedé en la casa por que tenia que hacer trabajos y tarea que no había hecho y por mi mala suerte me quedé aquí y no pude ir con ellos, pero hasta hace unos días mantuve comunicación con mis papás
-Mis curiosidad se ha despertado -pensé -¿Sabes a dónde se llevaron a la gente que evacuaron? -Pregunté muy interesada
-Se los llevaron a la capital del estado, esa ciudad que está a 3 horas pero no me acuerdo como se llama pero la que esta al sur como yéndo a Sinaloa
-Ya veo... por curiosidad ¿Sabes por que se los llevaron haya? -Le pregunté interesada en su respuesta
-No se... no me dijeron -me respondió
-¿No sabes cómo fue que se propagó esta enfermedad, verdad? -le pregunté muy interesada
-No, eso es algo que nadie sabe lo mas seguro -me respondió
-Si lo más seguro...
Me quedé callada sin decir más
Abigail notando el constante silencio mejor salió de mi habitación habiendo terminado la conversación al menos por orita
Pasaron algunas horas aburridas en las que solo la pase pensando en muchas cosas y recuperándome lentamente de mi rodilla
-¿Será que el apocalipsis llegó hasta Estados Unidos? Lo más seguro es que sí -pensé -Cuando este totalmente recuperada de mi rodilla me dan ganas de ir para haya por un pendiente... -pensé mirándo al paisaje
Yo estaba en la orilla de la cama al costado derecho sentada viendo por la ventana observando el paisaje y el atardecer
-Lindo atardecer -pensé mirándolo por la ventana sentada en la cama
Viendo por la ventana, me llegaron múltiples emociones que me provocaban un sentimiento de llorar, pero no podía hacerlo, no por que no quiera, solo que no podía
Fue entonces cuando escuche a Abigail gritar mi nombre por ayuda afuera de la casa
Yo me pare de la cama con dolor en mi rodilla y mire por la ventana para buscarla con la vista
Abigail estaba en el deposito haciendo quien sabe que cuando llamo la atención de los muertos haciendo que corra asustada hacia la casa mientras los muertos la habían visto y la estaban siguiendo a una velocidad media
Eran 3 muertos algo fáciles de matar pero será complicado en mi estado
Sin remedios, pero determinada comienzo a moverme a las escaleras mientras que Abigail entra a la casa
-¡Abigail, Cierra la puerta! -le dije mientras iba bajando las escaleras desde el segundo piso
Abigail me obedeció y cerró la puerta, pero esos muertos tontos ya no se iban a ir
-¡Van a entrar, están golpeando la puerta! -dijo Abigail
Con mucho cuidado, dolor en mi rodilla y algo de miedo bajo a como pude y bajo a la cocina que quedaba al lado de las escaleras
-Vamos a matar a esos muertos, pero tienes que escucharme -le digo desde la cocina agarrando in cuchillo
-¿Pero como lo vamos hacer? Tengo miedo -Abigail me responde viniendo en mi dirección
Mientras nosotras estábamos ahí, los muertos golpeaban la puerta cada vez más fuerte
-Mierda... ¡Escucha! Se que tienes miedo, en estos momentos yo también -me miro la rodilla -Pero tienes que ayudarme, no puedo sola en estas condiciones
Un muerto empieza a golpear la ventana al lado de la puerta rompiéndose en el proceso provocando un grito de susto en Abigail
-¡Dime! ¿Aquí hay escobas? -le pregunte cada vez más preocupada por tantos golpes que parece que pueden entrar
-Si hay una, pero en baño de arriba -ella me responde muy asustada
-Por favor, ve por ella rápido -le digo sosteniendo el cuchillo
Abigail fue rápidamente al baño y busco la escoba
-Date prisa..! -le digo desde la planta baja
Abigail agarra la escoba y baja conmigo
-Aquí esta!
-Bien... Escucha, tengo un plan, pero es algo arriesgado... -le digo a Abigail
De un momento a otro nos encontramos al lado atrás de la puerta Abigail y yo
-Vas a abrir la puerta cuando yo te diga -le digo a Abigail mientras estaba agachada en el piso con muchos nervios
Abigail estaba de pie con su mano en la manija de la puerta sintiendo los golpes de los muertos del otro lado de la puerta con mucho miedo pero intentando confiar en mí
-Ahora!!
Abigail abrió la puerta rápidamente mientras sostenía la escoba con su otra mano
Cuando Abigail abrió la puerta, 2 de esos muertos cayeron al pisó, entonces, como en el plan que le había dicho a Abigail, ella se iba a esconder atrás de la puerta conmigo e iba a dejar que se pongan de pié los muertos, para seguido embestirlos con la escoba
Pero Abigail se paralizó de miedo y no pudo salir para enbestirlos al momento de que se pusieron de pié
-¡¿Qué haces tonta?! -le susurró fuertemente a Abigail
Abigail solo se quedó tartamudeando una oración que no pudo terminar ya que yo decidí tomar la iniciativa
Espere a que se pusieran de pié esos muertos y con mi pierna buena pateé la puerta justo cuando se estaban acercando a nosotras y luego muy rápidamente impulsandome casi exclusivamente con mi pierna derecha, mi pierna buena me avalancé en contra de ese muerto tonto y le corte el cuello acabando con uno de ellos
-¡Abigail, ayúdame! -se empezaba a acercar hacia a mi el otro muerto
Otro muerto de los que golpeaba la puerta se abalanzó en contra mío, pero lo detuve con mi pierna buena lanzándole una patada en la nariz lo suficientemente fuerte para lanzar lo hacia atrás mientras le rogaba por ayuda, pero Abigail no reaccionaba y solo se quedaba viendo con una expresión de terror en su cara
El muerto al que había pateado se reincorporó y está vez trataba de morderme en las piernas, pero yo me arrastraba hacia atrás lanzando ocasionales patadas con mi pierna buena esperando lo peor
Pero Abigail, viendo como estaba en peligro, por fin reaccionó al verme en peligro y se paro y empezó a empujarlo con la escoba alejándolo lo suficiente de mí
Fue entonces cuando le di múltiples apuñaladas en la garganta
Pero aun no terminábamos, pues aún nos hacía falta uno que aun no lograba entrar a la casa, entonces le pedí ayuda a Abigail para ponerme de pié y le dije que cuando entré usará el palo de escoba en sus piernas para que cayera al pisó y para mi sorpresa, lo hizo, muy torpemente por el miedo que sentía, pero al final de cuentas lo hizo
Entonces yo aproveche y lo remate, luego me senté en el sofá agotada hiperventilando dejando caer el cuchillo al pisó seguido de mirar a Abigail
-¡¿Que te pasa?! Casi me matan ahí y no hiciste nada para ayudarme... -le digo enojada
-Perdóname... tenia mucho miedo y me paralice... -ella me dijo con los ojos brillosos -Yo si quería ayudarte... pero no podía -decía casi llorando
Al verla al borde del llanto me trague mi rabia solo para no llamar más la atención de más muertos, por no eran los únicos
-Asshhh... Ya no importa, ayúdame a levantarme, necesito quitarme esta sangre de mi ropa -le decía a Abigail
-El dolor en mi rodilla se puso peor... -pensaba
Abigail se limpio su lágrima y se puso de pié, luego se dirigió enfrente mío y me ayudo a levantarme
-¿Podrías llevarme al baño? Necesito quitarme esta sangre -le dije mientras me ayudaba a caminar
Abigail asintió educadamente y me ayudo a subir las escaleras llevándome hasta el baño
-Gracias... -en un momento algo incomodo le di las gracias por el favor que me hizo de llevarme hasta el baño
Ya dentro del baño con la puerta cerrada y apoyada en una posición en la que mi rodilla no duela mucho, me estaba mirando frente a mí reflejó, tenía algo de sangre en mi rostro por culpa de esos muertos tontos, mis manos estaban totalmente bañadas en sangre y ropa igual
-Recién me la había puesto... -pensé viéndome
Abrí la perilla del agua y comencé a quitarme la sangre de mis manos con agua y ese poco jabón que hay en el lavamanos, seguido de limpiar mi cara y haber pensado algo
-Entonces, ¿Así se siente...? -pensé habiendo recordado un evento pasado
-Ya que... supongo... por algo esa persona y yo seguimos vivas -Pensé sacándome la cara con papel higiénico
Luego salí del baño y entré al cuarto de Abigail, para mi sorpresa no estaba en el cuarto, así que aproveche y me quite la camisa manchada de sangre y me puse una blusa manga larga color rojo con manchas guindas y un chaleco color negro táctico, además de unos pantalones pens negros, pero seguí con el mismo calzado
Entonces muy difícilmente pude bajar y al llegar hasta abajo fue que me di cuenta de que Abigail estaba limpiando el desastre de sangre que se había regado
-¿De donde sacaste ese trapeador? -le pregunté a Abigail apoyándome de la base de la escalera
-Estaba atrás de la casa... -me respondió aún claramente marcada por lo de hace unos minutos
-¿Era eso lo que buscabas cuando los muertos te siguieron? -le preguntó a Abigail
-No, yo solo estaba aburrida y pensé que podía dar una vuelta por el cementerio de camiones y autos sin que ellos me vieran... -dijo continuando limpiando
Yo solo me le quede viendo, luego di una media vuelta en dirección a la cocina y me senté en una silla
-A estas alturas me sorprende que aún haya agua y electricidad... ¿No crees? -le digo a Abigail intentando ser un poco más amable aunque me salió en un tono secó
-Mmm, ¿De donde viene el agua y la electricidad? -me preguntó
-¿Qué?! ¿No sabes?... olvídalo -le dije. e
Entonces me puse de pié y dije -Estaré aquí afuera, no hay nada que hacer adentró -tomé un cuchillo y con cuidado fui caminando en dirección a Abigail -Compermiso -Abigail me dio el pasó
Al atravesar la puerta, no me fui muy lejos, me mantuve prácticamente frente a la casa
Volteo a la ventana rota
-Tal vez necesitemos arreglar eso... -pensé casualmente
Estaba viendo al paisaje, como si buscará una forma desesperada de entretenerme con algo, pero no había nada que podía hacer sin que sea muy arriesgado, además de mi rodilla
-Espera...
Se me ocurrió una idea
Tal vez podría conseguirme unas muletas improvisadas entre toda esta chatarra
Aunque eso era algo que haría en otra ocasión debido a la situación actual, mi rodilla duele demasiado como para mantenerme de pie y Abigail toco fondo, ella podría serme útil en algunas cosas a pesar de que aveces se comporta como una tonta, pero será mejor que la deje en paz, al menos por hoy y tal vez mañana
Suspiré mientras estaba sentada sujetando mi cuchillo viendo a la nada
-Para la otra
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