Hades se movió en la cama y abrazó de mejor manera a su esposo que suspiró y abrazo mas contra su pecho al pequeño que ni siquiera se movió, An salió de la habitación y caminó a la que debería ser de ella en algún tiempo, la encontró vacía como supuso que debería de estar, solo era una habitación genérica como todas las demás no correspondientes a la familia del dios del inframundo, ella aún no venía en camino, pero no tardaría en hacerlo y en esas observaciones estaba cuando sintió una mano en su hombro, al voltearse vio a su abue que sin dudarlo la abrazo. 

-Me preguntaba cuando vendrías, sí este era su destino era ya tiempo de que llegarás. -Suspiro aliviado de tener a su nieta allí con ellos. 

-Cumpliste tu promesa, los cuidaste... -Se aferró al pecho de su abuelo sintiendo el alivio en su cuerpo, aunque fuera momentáneo. 

-Claro que los cuide, mi familia es mi vida ¿y tú? ¿tuviste un buen viaje?

-No... odio los mareos. -Formo un puchero con sus labios. 

-Ven, tenemos que hablar, tengo tanto que contarte...

Hades llevó a Antonella a su estudio, se sirvió una copa de vino y un vaso de leche a la menor que sonrió ante eso, An ávida lo bebió y se sintió mejor, miró el vino que se había servido su abue y frunció el ceño un poco.

-¿Desde cuándo tienes tan buenas relaciones con Dionisio? -Cuestiono ladeando la cabeza. 

-Desde que necesito saber lo que pasa en el olimpo, nunca he tenido una buena relación con él por su forma de vida, pero debido a las circunstancias me pareció la mejor opción, es la fuente mas confiable de información, aunque no es la única. -Sonrió de medio lado el dios. -Deméter también lo es, Perséfone también, ambas aman a tu madre, a Seiya y a Kanon, los tres en cuestión de minutos se ganaron a ambas y las tienen en las palmas de sus manos, en serio que ya tenía con estar sorprendido de que tu madre se ganará tan fácilmente a los dioses, pero Seiya y Kanon lo han hecho sin darse cuenta, Hefestos por ejemplo. 

-¿En serio? -Se sorprendió un poco debido a eso, algunos dioses solo se unieron a su causa cuando fue esa última batalla, antes de eso no, todos sabían que a Hades no le agradaba abrir las puertas de su hogar a cualquiera. 

-Algunas cosas han cambiado debido a tu ayuda, princesa. -Respondió el dios encogiéndose de hombros.

-Eso es tan impresionante. -An sonrió brillantemente, en su tiempo prácticamente habían tenido que enfrentar los ataques solos, ahora su abue se había procurado tener aliados y al parecer todos se habían asegurado de tenerlos, algo bastante astuto realmente, el dios tomo un sorbo de su copa. 

-Julián tiene un poco mas de tratos con los dioses que viven en el olimpo así que también ayuda mucho en eso, el que me ha sorprendido es Hefestos, él ha sido un verdadero aliado, el hecho de que odie a Ares ha movido las cosas a nuestro favor, a través de los años ha hecho varias armas muy útiles para nosotros y es precisamente él quien va a ser nuestra pieza fundamental en nuestra defensa, sus visitas a este castillo lo han familiarizado con tus tíos y tus hermanos, ellos juegan mucho con él y son cariñosos, eso es invaluable para Hefestos, además el me menciono a cierta chica que venía con Hécate y le dio una corona de flores. -Miro significativamente a la menor que se sonrojo y evito la mirada. -No se a olvidado de ti ¿sabes? además de que tú pequeña tía le recuerda a ti en eso, le dijo hace un tiempo que el era su príncipe, ya te imaginarás lo feliz que se puso, el ahora sabe bien que los niños y tú no juzgan la belleza física, sino que les interesa mas el interior, además de que bueno todos se lo han sabido ganar estos años. 

-Es que Hefestos es un dios con un corazón incomprendido, a sufrido mucho y pues en ese momento que me encontré con el quería animarlo, entiendo a mi tía. -Se encoge de hombros con una sonrisita. -¿Cómo están las cosas con esos dioses? ¿siguieron mandando emisarios a buscar el artefacto o a mí?

-Si y no, emisarios llegaron por algunas semanas más, pero todo cesó cuando tu abuelo Zeus se digno a conocer mas a Seiya y a nuestro primer hijo juntos, yo presenté la queja de nuevo y esta vez le mostré los cadáveres de los intrusos, además tuvimos suerte porque esa mañana atrapamos uno vivo y habló, dijo todo sin tener que torturarlo mucho, no pongas esa cara. -Se quejo al ver la preocupación en los ojos de la menor, sabía que a ella no le gustaban esos métodos por mas que sea alguien del bando enemigo. -Los caballeros dorados han confirmado que por meses luego de tu partida, habían tenido incursiones no autorizadas en el santuario, pero todas esas misiones fueron suicidas, esos caballeros son formidables la verdad, es una suerte tenerlos de nuestra parte, tus padres como supondrás han sido por demás complacientes con todo lo que hemos planteado, además de que el cariño en nuestra familia es real.

-¿Athena? -Preguntó An con obvia molestia.

-No solo ella, obviamente son Apolo, Ares, Afrodita y Artemisa también, Hefestos nos lo ha confirmado porque él está seguro de que algo están haciendo, algo están tramando, pero no sabemos qué, ahora... lo que me preocupa un poco es que Artemisa y Afrodita se llevan demasiado bien con Hera estos días, ha hecho un lado a Deméter porque sabe que es aliada nuestra y se han visto en el Olimpo a Deimos y Fobos, eso no es nada bueno en especial porque en dos días va a haber una reunión en los cielos a la que estamos invitados, es en verdad una suerte que ya estés aquí, tú... eres tú quien cambiará el curso de la historia, ahora que has llegado podemos empezar nuestro plan ¿lo recuerdas?

- Claro que si... pero abue sobre eso. -Recordó las palabras de su bis abuelo, no podía contarles todo lo que les había dicho luego de contarle sobre lo sucedido en otras líneas, dioses tenía que hablar con Hypnos sobre eso, pero primero lo primero. -Eris también está metida en todo esto. -Hades abrió grandemente sus ojos, eso agregaba a alguien mas a la lista de quienes eran el enemigo.

Antonella habló con Hades hasta muy tarde en la noche y luego de quedar de acuerdo en muchas cosas, la joven de cabellos multicolor fue a una de las habitaciones para poder descansar un poco, se sentía aún algo mareada y los vasos de leche que se tomó en compañía de su abuelo la habían adormilado un poco, uso su juguete para cambiarse rápidamente y así acostarse cuando sintió que el aire vibró en la habitación, se volteó y vio a Hypnos de pie junto a la cama, apenas lo vio sintió su corazón acelerarse, pero no quería ser tan obvia como siempre. 

-¿Sabes? tal vez sea el viaje en el tiempo o algo de eso, pero puedo sentir tu presencia de mejor manera, lo bueno es que te será un poco más difícil asustarme cuando entras a hurtadillas en donde sea que yo esté. -Comento encogiéndose de hombros, sabía que había adquirido el conocimiento mental de cuatro años aproximadamente, bueno eso era necesario después de todo cronológicamente debido a su falta de inmortalidad los años también pasaron físicamente para ella, ya no era idéntica a cuando la conocieron, ahora se podía decir que físicamente era toda una mujer, pero su esencia seguía estando allí. 

-No, no es eso, te estás haciendo más fuerte con cada día que pasa, además viajaste cuatro años en el futuro por lo que ahora deberías tener 19 o estar a punto de tener 19 años, tienes mejor control de tu cosmos y de tus habilidades, eso es impresionante tomando en cuenta que como tu mismo me contaste, habías tenido una parte de tu cosmos atado por años. -Explico el rubio dios del sueño con tono sereno, esos años sin la chica a su alrededor había tenido suficiente tiempo y de sobra para investigar algunas cosas, pero su tono enmascaraba lo que estaba sintiendo al ver a aquella que le robaba los pensamientos, la que provocaba a su corazón latir, allí estaba Antonella cuatro años, casi cinco después, igual o más hermosa que antes, con su misma esencia, pero con una notable madurez mental para algunas situaciones, pero podía notar que seguía siendo su pequeña. 

-Abue dijo algo de eso. -Relamió sus labios y se estiro un poco para sentarse en su cama, alzó la mirada para fijarla en el dios. -¿Vas a seguir esperando a que te de permiso para acercarte a mi? -Sonrió de medio lado y le saco la lengua guiñando su ojo al dios. 

-Nena sales con cada cosa. -Suelta un suspiro y niega con su cabeza, An no pudo evitar reír y abrió sus brazos, el mayor se acerco dejando que lo abrazara, dejo pequeñas caricias en su cabello lentamente. -Aunque hagas miles de viajes al futuro no dejarás de ser mi niña mimada ¿no?

-Eso es tú culpa. -Apoyo su barbilla en su abdomen para alzar la mirada. -Tú en todos los tiempos y en cualquier línea temporal siempre me has tenido así de mimada. 

-¿Y cómo estás tan segura de eso? -Cuestiono alzando una de sus cejas al mirarle.

-Pues tengo mucho sobre eso que contarte. -Mordió su labio inferior. -¿Me consientes ya que volví mientras te cuento?

-Eso me suena una excusa para que te abrace y me quede contigo hasta que te quedes dormida. -Se inclino un poco dejando un beso en sus labios que hizo sonreír a la menor. -Esta bien, pero en serio necesito una explicación de eso o tendré que ser mas severo contigo. 

-Si, si, si. -Inflo sus mejillas y se separo para poder acostarse con el dios como otras veces habían hecho y se dedico a explicarle y mostrarle con sus poderes todo lo que se había enterado, menos lo que su bis abuelo le dijo que solo ella debería tener conocimiento hasta el momento de la batalla. 

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Nota: Este es el final de esta temporada, la continuación será subida en la tercera temporada debido a que estamos viendo una nueva etapa de Antonella, un nuevo viaje en el tiempo, la tercera temporada se llamará "Hilos del destino"