Kanon miro a su sobrino que se alejaba lentamente por el camino de piedras, cuando estuvo fuera de su rango visual se acerco al resto. 

-Ustedes también vayan a dormir, tengo que hablar con mi compañero, por favor no vuelvan a salir solos del templo. -Miro con suplica a estos que asintieron.

Shun jalo a su hermano hacía el borde de la arena, Adrien ayudo como en la tarde a An para que no fuera a hacerse daño en el camino, pero tuvo que detenerse unos momentos debido a que se acerco a Kanon, esta le miro curioso cuando le hizo una seña de que se agachara un poco, mas sorprendido quedo cuando la menor puso sobre su cabeza una corona de flores como había hecho con los chicos.

-Que tenga dulces sueños luego. -Hizo un pequeño gesto con su cabeza regalándole una sonrisa y fue con Adrien enganchando su brazo con el de este para dirigirse al primer templo, estaba mas recuperada, pero aún necesitaba ayuda para subir las escaleras, Mu ya estaba esperando con todo lo necesario la llegada del castaño a su templo debido a que su hijo mayor le había informado luego de que Kanon partiera directo al coliseo. 

Isaac se estaba incorporando lentamente cuando vio a Kanon cerca de el, ellos habían dejado de hablarse desde que estalló todo ese asunto. 

-¿Vas a ayudarme o solo viniste a recriminarme? -Cuestiono cuando se mantuvo el silencio unos minutos.

-No pienso ayudarte, pero si necesito hablar contigo. -Su tono de voz se había vuelto completamente frío, lo cual no combinaba del todo con la corona de flores que acababa de ponerle sobre su cabeza An, el solo recuerdo de la acción de la pequeña le provocaba calidez en su pecho, pero no podía distraerse en estos momentos. 

-¿De tu sobrino? -Enseguida Kanon asintió. -Así que también fue a llorar contigo y que soy un muy mal hombre ¿verdad? -Intentaba trivializar lo sucedido, pero con Kanon no le funcionaría, mucho menos con la molestia que tenía en ese punto, no soportaba ver mal a su sobrino. 

Tú sabes perfectamente lo que eres, lo único que quiero es que las cosas paren aquí Isaac, no voy a seguir tolerando lo que estás haciendo, ninguno de esos chicos está solo en la vida y aunque no necesiten que los estemos defendiendo todo el tiempo, esta noche te exijo y te ordeno que los dejes en paz, sino lo haces será a mi a quien tengas que enfrentar la próxima vez y ni pienses acercarte a la nena cómo se que has meditado. -Lo señalo frunciendo el ceño.

-Kanon por favor, solo es un juego.

-Puede que para ti sea eso, pero para mi sobrino no, el está muy dolido por lo que tú hiciste, es solo un joven inexperto en el amor y bastante ingenuo que si se enamoro de ti, se ilusionó contigo y tú lo traicionaste de la peor manera porque solo lo utilizaste para intentar provocarle celos a Hyoga porque él ya te había cambiado por alguien más y luego lo botaste y ahora no estando conforme con eso, te has dedicado a ventilar una supuesta relación sexual entre ustedes a los cuatro vientos, lo tachas de fácil, has dicho lo que te a entrado en gana de él y eso no es justo porque el jamás a dicho algo de ti, ni a tu favor ni en contra, intenta hacernos caso y trata de ser prudente, pero deja de provocarlo, pronto va a explotar y con toda la razón del mundo. -Cruzo sus brazos sobre su pecho, de no ser por el ambiente tenso que había entre dioses hace mucho que más de uno de los del santuario y dioses habrían hecho algo en contra del marina.

-Las cosas no son tan así. -Isaac comenzaba a molestarse.

-Si lo son y otra cosa, lo que mi sobrino te dijo es cierto, tu sabes perfectamente las habilidades que posee mi cuñado y a sabido enseñárselas a sus hijos por lo que no es complicado para Seiya escabullirse en tu cuarto, castrarte, drogarte y hacer lo que le dé en gana contigo ¿Cómo crees que se enteró de tu engaño? El es bastante hábil burlando seguridad y pasando barreras ¿No lo sabias?

-No, no realmente, pero él no lo haría. -Afirmo con mucha seguridad.

-Creeme que es capaz de eso y mucho más, pero aquí es donde eso se pondría interesante, si mi sobrino hace alguna estupidez de ese tipo y tú pagas con sangre lo que has hecho... cuando me pregunten por Seiya y en donde estaba la noche del ataque, yo diré que estuvo siempre en su cama y jamás se acercó a ti, se que es lo mismo que harían todos, estás advertido. -Fulmino con la mirada al contrario.

-¿Lo apoyas? -No podía creer lo que estaba escuchando, jamás pensó que Kanon le daría la espalda.

-Si, es mi sobrino y el como yo es doncel, merece el mismo respeto que cualquier otro.

-Pero soy tu amigo...

-No Isaac, no somos amigos porque yo no podría estar cerca de una escoria como tú, no te vuelvas a acercar a los niños, es la primera y última vez que te advierto.

-Espera... Nosotros hemos sido amigos por años. -No daba crédito a esto, jamás había tenido consecuencias de ese tipo.

-Eso debiste pensar antes de meterte en donde no te llamaron, Seiya es mi sobrino, es hijo de mi gemelo y siempre lo protegeré de imbéciles como tú, al igual que a Hyoga y a cualquiera de los niños, por eso te advierto que ni mires a la nena o a Shun, aunque deberías tomar en cuenta que Shaka es su novio, así que considéralo antes de intentar algo, Shaka no tendrá piedad de ti ni un segundo y la diosa Hécate le va a valer la diplomacia si te metes con la nena, así que deja a los chicos en paz porque no son lo mismo que tus amantes regulares.

-Pero...

-Pero nada, buenas noches Kraken. -Se volteó dejándolo solo con sus pensamientos, se dirigió a el templo principal  para hablar con su dios sobre lo que había pasado.