Días después

- Muchas gracias por la comida Jenn. - Dijo Jisoo

- No es nada, sabes que me gusta que vengas a visitarme

Antes de que Jisoo se fuera, Lisa llegaba a casa. Justo quería hablar con ella.

- Jisoo que bueno que te encuentro aquí. - Dijo Lisa. - Necesitamos hablar

- ¿Sucede algo? - Preguntó

- Nada grave tranquila, solo que mis padres me comentaron que estas saliendo con mi hermana. - Habló y Jisoo sintió que estaba enojada

- Lisa no te enojes, te juro que mis intenciones con ella son buenas

- No estoy enojada, solo quiero protegerla, ya ha sufrido demasiado, no quiero que juegues con ella

- ¿Cuáles son tus intenciones con Rosé? - Preguntó su hermana

- Las mejores, solo quiero hacerla olvidar todo lo que sufrió

- ¿Qué sientes por mi hermana? - Preguntó Lisa. - Habla con la verdad

- La quiero. - Contestó

- ¿La quieres? ¿Para qué la quieres?

- La amo Lisa. - Confesó. - Estoy enamorada de ella desde hace mucho tiempo, quiero conquistarla

- Le haces bien a mi hermana, hace tiempo que no la veía sonreír, mis padres la escuchan reír cada que vas a la casa, solo te pido que la cuides

- Lo haré Lisa, no te preocupes

***

- Rosie. - Dijo su madre entrando a su habitación. - Jisoo está allá afuera esperándote

- No me dijo que vendría. - Sonrió. - Bueno ahora voy

- Sí corre, no la hagas esperar

Rosé salió de su habitación y bajó para ver a Jisoo.

- Hola Rosé ¿cómo estás? - Preguntó

- Bien Jisoo. - Respondió. - No me avisaste que vendrías

- Quería darte una sorpresa, mira, pedí prestadas unas bicicletas, pensé que tal vez podríamos salir y pasear un rato, vamos. - Invitó

- Me parece bien. - Sonrió. - Mamá regreso más tarde

- Claro hija no te preocupes, diviértete

Jisoo y Rosé salieron de la casa, tomaron sus bicicletas, se montaron en ellas y se fueron de ahí. Esta era la primera vez que Rosé salía de casa, no solo para ir a la escuela, era la primera vez que salía a divertirse. Estaba tan feliz por ella.

- ¡Te gané Kim! - Dijo Rosé sonriendo bajando de la bicicleta

- ¿A qué hora comenzó la competencia? - Preguntó bajando de la bicicleta. - Me hubieras avisado, obviamente hubiera ganado yo

- Se una buena perdedora Jisoo. - Fue hacia una banca del parque a donde habían llegado y se sentó

- Iré por unos helados. - Avisó la mayor

A los pocos minutos, Jisoo llegaba nuevamente con ella y se sentaba a su lado entregando su helado.

- ¿Por qué nunca antes me habías hablado? - Le preguntó Rosé

- No lo sé, creo que tal vez tenía miedo. - Dijo un poco nerviosa

- ¿Miedo de qué?

- De que no me hicieras caso, aparte nunca he sido buena socializado

- Pues que bueno que te atreviste a hablarme. - Sonrió mirándola a los ojos. - Tu compañía me hace muy bien, después de lo que me pasó, tu llegaste y me has ayudado a ir superando eso día con día

Semanas después

- ¿Qué pasa Lili? - Preguntó Jennie a su esposa abrazándola por detrás. - ¿Estás bien?

- Se que es un mal tema para hablar después de hacer el amor, pero no dejo de pensar en lo que le pasó a mi hermana. - Confesó. - No puedo Jenn, siento que me ahogo al no saber nada del desgraciado que abusó de ella, no se que hacer

- Se que lo vas a encontrar, todos confiamos en ti, solo ten paciencia. - Besó sus labios. - Lo harás mi amor

- Me gusta que tu hermana y la mía estén más unidas, Rosé ha vuelto a sonreír desde que comenzaron a salir

- A mi me gusta el cambio que ha generado Rosé en Jisoo. - Comentó Jennie. - Se ha vuelto más responsable, ya no se mete en problemas, al parecer Rosé la está ayudando a aprobar sus materias para que por fin este año se gradue

- Espero que sigan así, hacen bonita pareja

- Así como tu y yo. - Se colocó encima suyo. - Disfrutemos esta noche aún más

- Sí Nini, lo que tu digas. - Sonrió

***

- Hola hija. - Saludó su madre entrando a su habitación. - Jisoo te está esperando allá afuera

- Dile que ya estoy dormida

- ¿Qué? ¿Por qué? - Preguntó confusa. - Pensé que entre ustedes dos había algo ¿Qué sucedió?

- En la escuela la mire con otra chica

- Bueno Rosie tal vez era solo una amiga, ve abajo y habla con ella. - Invitó. - Dile lo que sientes, dile que para dónde va lo que se que tengan

Rosé hizo caso a su madre. Así que bajó y salió para ver a Jisoo.

- ¿Qué haces aquí Jisoo? - Le preguntó

- No fuiste hoy a mi departamento para que me ayudaras a estudiar ¿pasó algo? - Preguntó

- Te miré con una chica, no quería molestarte

- ¿Cuál chica?

- ¿Cuántas tienes?

- ¿Estás celosa? O ¿por qué me hablas en ese tono? - Preguntó sonriendo

- No te rías Kim, yo solo...- Estaba nerviosa. - Solo quiero saber hacia dónde va todo esto, lo que sea que tengamos ¿va enserio?

- Claro que sí, solo que aún no quería decir nada, no quiero presionarte. - Dijo acercándose a ella. - Tu me gustas mucho, quiero algo bien contigo

- ¿Por qué no lo haces de una vez? - Preguntó nerviosa

- ¿Estás segura de dar este paso?

- Lo estoy Jisoo. - Se acercó a ella y tomó su mano. - Tu has venido a mi en el momento que más lo necesitaba, me sacaste de ese infierno, no tengo dudas Jisoo, yo también te quiero

- ¿Quieres ser mi novia? - Preguntó sonriendo

- Sí. - Respondió con una sonrisa enorme en su rostro

Jisoo la tomó de la cintura. Se miraban a los ojos, había demasiada tensión, la cual necesitaba desaparecer. La pegó más a su cuerpo, acercaron su rostros y después unieron sus labios fundiéndose en un lento, dulce y tierno beso.

Sabía perfectamente que tal vez era muy pronto para iniciar una relación. Pero Jisoo la había ayudado tanto, al igual que su familia, pero con ella era diferente, se había enamorado de su forma de ser con ella, lo dulce, tierna, cariñosa y comprensiva. La necesitaba y que mejor que ser su novia y tenerla con ella a cada momento que lo necesitara.

Meses después

- Muchas gracias por ayudarme con este problema Rosé. - Le dijo aquel chico

- No es nada Chanyeol. - Sonrió. - Cuando necesites algo aquí estoy para ayudarte

- Me gustaría que me dieras asesorías por las tardes ¿qué opinas?

- Claro que sí. - Accedió. - Solo dime cuando comenzamos

- ¿Puedes mañana?

- Sí

- Entonces los Miércoles y Jueves ¿esta bien?

- Me parece bien, entonces nos vemos mañana

- Adiós Rosé. - En cuanto el chico se fue, sintió que alguien la tomaba fuertemente del brazo

- ¿Qué hacías con ese tipo? - Preguntó Jisoo furiosa 

- Solo me pidió ayuda, sueltame. - Intentó zafarse

- No te quiero cerca de él ¿entiendes? - Continuaba bastante enojada

- ¿Qué? ¿Por qué?

- ¿Acaso no te diste cuenta de cómo te miraba? - Nunca había visto de esa manera a su novia

- Jisoo sueltame, me estas lastimando. - Jisoo la soltó. - ¿Por qué te comportas de esa manera?

- No me gustó la manera en la que te miraba, tu eres mi novia eres bonita y hay muchos y muchas que quieren estar contigo. - Se acercó a ella y la tomó de la cintura. - Estoy celosa ¿si? - Besó sus labios. - Tu eres mía, solo mía Rosé