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Se encontraba sentada en medio de su cama de piernas cruzadas con el felino negro recostado en el pequeño espacio que había creado, sus dedos acariciaban lentamente la cabeza del gato mientras su otra mano buscaba su teléfono. Una vez en su mano lo encendió y no pudo resistir rodear sus ojos al ver los ocho mensajes que su mejor amiga le había dejado, dejar en visto a Elsa nunca era bueno.

-Qué fastidiosa es a veces- dijo mientras terminaba de responder a su amiga dejando de mover sus dedos -¿Entonces que dices Chimuelo...? ¿Llamamos para que te lleven a casa?- Astrid preguntó al gatito mientras digitaba los números en su teléfono y Chimuelo simplemente frotó su cabeza en la pierna de Astrid queriendo más caricias.

El teléfono sonaba en su oído y mientras esperaba que alguien contestara regresó su mano sobre la cabeza de Chimuelo, cuando por fin escuchó una voz masculina al otro lado de la línea.

-¿Hola?-

-¡Hola! Estoy llamando porque creo tener a tu gato... ¿Chimuelo?- no logró terminar de decir su nombre que escuchó un grito.

-DIOS ERET ¿QUÉ TE PASA?!- gritó el chico al otro lado del teléfono -Perdón Hipo, es que lo extraño mucho- dijo otra voz ahora en un tono mucho más bajo y de manera muy dramática, Astrid más que confundida miró abajo hacia el gato preguntándose si la mejor solución era quedarse con el felino, al diablo con la alergia de Heather.

El chico se aclaró su garganta y habló de nuevo -Eh... Perdón por mi amigo-

-¡QUE SOY TU ESPOSO!-

-¡CÁLLATE POR DIOS!- gritó el chico, a lo que siguieron un par de segundos de silencio que solo los rompió un suspiro -Lo siento, de nuevo- dijo riendo apenado.

Astrid no sabía bien qué hacer, simplemente dejó salir una pequeña risa incómoda -No te preocupes, supongo que Chimuelo sí es tuyo-

-Sí, estoy seguro de que es él, pero puedo preguntarte una foto suya?-

-Eh sí, claro, deme un segundo- Astrid abrió la aplicación de la telecamera y tomó una foto del gato acostado cómodamente aún entre sus piernas -Ya! ¿Te llego?-

Hubo nuevamente unos segundos de silencio, pero esta vez no los rompió un suspiro, si no una risa y esta vez era genuina, la cual de forma inconsciente hizo sonreír también a Astrid.

-Chimuelooo- habló el chico intentando regañar a su gato, pero su tono divertido lo delataba -Uhm.. ¿Dónde puedo recogerlo? Veo que estás en lo que supongo es tu cuarto y no quisiera molestar, podríamos encontrarnos en un lugar diferente si quieres y- se detuvo al escuchar la pequeña risa que Astrid se dejó escapar, a quien todo esto le parecía una situación muy cómica. Hace unos minutos este chico estaba gritando con su amigo, o esposo, y ahora está intentando no lucir como un tipo creepy. Era divertida y algo linda.

-Puedes venir a recogerlo a mi departamento, sin problemas- respondió aun riendo un poco -Ya te mandé mi dirección, si te ubicas?-

-Eh... Sí. No está tan lejos unos 20 minutos y estoy ahí. ¿Puedo ir ahora mismo?-

-Si claro, creo que Chimuelo ya te extraña-

-Hmm lo dudo, parece tener buena compañía- esto provocó un pequeño sonrojo en los cachetes de Astrid.

-Uhm.. Bueno, pues aquí te espero. NO. Digo, aquí te espera, Chimuelo obvio-

Se pudo escuchar una risa por lo bajo por el otro lado de la llamada -Bueno, voy en camino-

-Sí. Okay. Bye.- soltó las palabras rápidamente antes de terminar la llamada. Se dejó caer su teléfono a un lado, retiró también sus dedos de la cabeza del gato finalmente dejó caer su rostro en sus manos, ahora más roja, qué diablos era eso.

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Después de unos 20 minutos, Astrid, siguiendo estudiando con el gato en sus piernas, escuchó el timbre del departamento y dirigió su mirada hacia Chimuelo, quien ya había bajado de la cama acercándose a la puerta de su cuarto.

El gato parece haber entendido que era para él.

Astrid abrió la puerta de su casa y se encontró con dos chicos, uno más alto que el otro y para qué mentir, bastante atractivos, sobre todo el más bajo de los dos. El chico más alto tenía cabello negro y corto, ojos color miel y un tatuaje cerca de su cuello. El más bajo tenía cabello más largo que su amigo, un castaño que tendía al rojizo, y una mirada intensa pero a la vez amigable, de un verde muy lindo. Ambos llevaban puestos unos simples jeans, el chico de cabello corto tenía una sudadera negra y el otro una camiseta verde y encima de esta una chaqueta de cuero.

De repente Astrid se sintió insegura de su aspecto, después de todo no era la única que observaba. Tenía su cabello recogido en una trenza ya despeinada por haber perseguido Chimuelo hace unos minutos atrás, unos pantalones azules de su pijama, un top deportivo blanco y como olvidar sus pantuflas de conejito. Sí, definitivamente este era uno de esos momentos en los que desearías que la tierra se abriera de repente y te hiciera desaparecer. Sus deseos fueron interrumpidos por una voz.

-Hola, vine a recoger mi gato perdido- dijo el chico con una pequeña sonrisa en su cara y al terminar la frase los tres agacharon su cabeza al escuchar un "meow".

Astrid rio un poco al encontrar el gatito asomarse por el espacio entre sus piernas -Ya te vinieron a recoger lindo- la rubia se agachó para recoger a Chimuelo en sus brazos cuando escuchó un suspiro de sorpresa. Levantó su mirada y pudo ver al chico más alto con una mano sobre su boca mientras el otro tenía los ojos abiertos de sorpresa y su boca ligeramente abierta. Astrid simplemente los miraba confundida, ¿Acaso había hecho algo que no debía?

-Hiccup, se dejó cargar!- casi gritó el más alto -Tal vez ahora, si me deje a mí- dijo con entusiasmo en su voz, se acercó a Astrid para tomar Chimuelo y este simplemente soltó un bufido. -Que malo eres Chimuelo- le sacó la lengua al gato.

El pasillo se llenó con la risa de Hiccup -Le gustas mucho- dijo mirándola y esto provocó una enorme sonrisa en Astrid.

Hiccup se acercó a los dos para tomar a Chimuelo, en esta ocasión el gato no protestó y se dejó cargar por su dueño. -Gracias por encontrarlo y cuidarlo- sonrió a la chica.

-Creo que fue él quien me encontró- dijo acercándose para por última vez acariciar la cabeza el gato negro. -No vuelvas a escaparte de casa lindo, pórtate bien- el gato le maulló y la observaba con sus grandes ojos verdes, como los de su dueño y Astrid simplemente sonrió al notar esto.

-En serio déjame invitarte a un café o algo así, sé lo mucho que puede ser de travieso-

-Oh, no te preocupes en serio, se portó muy bien- Astrid, esperaba que el chico no insistiera, no tenía tiempo para esto, demasiado que hace, mucho que estudiar, pero tampoco quería parecer grosera.

-¿Segura?- ella asintió -Bueno, gracias de nuevo por todo- y parecía algo decepcionado por la respuesta de la rubia.

-No fue nada, tengan un buen día- dijo Astrid sonriendo por última vez antes de cerrar la puerta. Era curioso, pero ya extrañaba al gatito.

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Astrid estaba en su cocina, tratando de prepararse la cena, cuando escuchó un conocido “ding”. Tomó en mano su teléfono y pudo ver la notificación de un mensaje que fue enviado por un número desconocido.

desconocido

hey, gracias de nuevo por haberme
llamado por chimuelo
7:30 PM

oh hola, no fue nada.
me divertí con él, hace buena compañia :)
7:31 PM

en serio se portó tan bien???
7:31 PM

sip jaja, solo fue un poco complicado
intentar tenerlo quieto para poder leer los números
7:32 PM

pero aparte de eso, si portò bien jaja
7:32 PM

acaso el no es así contigo?
7:32 PM

oooh no, ya quisiera
7:32 PM

este pequeño es todo un travieso conmigo
no sabes la cantidad de tazas que fueron sacrificadas
7:33 PM

buenoo, yo pienso que eso es tu culpa
7:33 PM

digo, ya sabes que peligran tus tazas para
que las dejas ahí. pobre chimuelo las va a ver
y va a hacer lo que mejor sabe hacer, romperlas.
7:33 PM

ah si, tienes toda la razón
7:34 PM

este es el mundo de chimuelo y
nosotros solo vivimos en el 🫡
7:34 PM

exactamente ❗️
7:34 PM

oh se me olvidó mencionarte
una cosa no sé cuánto tiempo estuvo
fuera chimuelo pero me pareció bastante hambriento
7:34 PM

le di agua y un poco de atún, se comió todo
y parecía querer más pero ya no tenía más en casa
7:35 PM

no te preocupes, gracias por contarme :)
7:35 PM

oye, puedo preguntarte algo?
7:35 PM

eh si, dime?
7:35 PM

como te llamas?
7:36 PM

me gustaría dejar de pensar en ti como
"la chica que encontró mi gato" jaja
7:36 PM

oh, que tonta ni me presente
cuando cuando viniste a recogerlo
7:36  PM

no hay problema, también se me olvidó
7:36 PM

me llamo astrid, astrid hofferson.
7:37 PM

un gusto conocerte astrid
yo me llamo hiccup haddock.
7:37 PM

lo mismo digo hiccup :)
7:37 PM

oh lo siento, llegó mi roomie y tengo que
explicarle porqué no deja de estornudar jaja
7:37 PM

(es alérgica a los gatos)
7:37 PM

jaja suerte con eso astrid !!
7:38 PM

gracias, la voy a necesitar 😢
7:38 PM

bye bye!
7:38 PM

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Holi !!

Perdón por tardar mucho en actualizar esta historia
prometo ser más constante de ahora en adelante.

Ya tengo escritos algunos capítulos de esta fanfic así
que espero poder actualizar próxima semana !!

Estoy muy emocionada y espero que les esté gustando :3

💌:ana