EPÍLOGO
Una castaña junto a una peliroja acomodaba unos maletines mientras platicaban entre ellas.
Entonces tras la final se lo dirás, decía Yayoi sonriendo.
Sí, respondió la castaña sonriendo.
De hecho, se podrá muy feliz, aunque a la vez se llevara una gran sorpresa, decía Yayoi sonriendo.
Si, de hecho, aún recuerdo el rostro de mis padres y de los padres de él cuando se lo s comente, respondía la castaña sonriendo.
Si, ya lo imagino, decía la joven, haciendo una pausa para acotar: Las chicas me dijeron que estarán en la tribuna para alentarlos con todas sus fuerzas.
Sí, eso me dijo Maki, respondió Sanae.
Maki, ¡qué bueno que ella haya podido obtener el permiso para estar en esta final, decía Yayoi.
Ya sabes que ella siempre se las ingenia para apoyar a su bombón en los encuentros que él disputa, así como él la apoya a ella, respondió la castaña sonriendo.
Cierto, dijo Yayoi, al tiempo que la puerta del lugar se abría.
Ya está todo listo hijas, decía un hombre maduro de mandil blanco.
Si doctor, dijeron a una sola voz las chicas.
Bien vamos, el bus con los muchachos ya partió, agrego el hombre.
En tanto: "Bus"
Te has tardado mucho amigo, hasta Ryo te gano en casarse, decía Taro sonriendo, mirando a su amigo de gorra.
Es que primero quería probar como sería una vida a su lado, respondió Genzo sonriendo.
Y sí que te tomo tus buenos meses para poder tomar tu decisión, decía Jun.
Cierto, acoto Hikaru.
Yo creo que más bien no le quedo de otra, decía sonriendo Ken.
Oye, no digas eso, respondió Genzo.
¿No me digas que Noriko?, decía Tsubasa intrigado.
Claro que no, no sean mal pensados, el hecho de que hallamos optado por la convivencia antes de casarnos no significa que ella este embrazada ahora y que por ello ya me quiera casar con ella, simplemente me di cuenta que ya es el momento de dar ese paso, es todo, más bien ustedes, los que ya llevan más de dos años de casados, díganme para cuando hay novedades, respondió Genzo, mirando a Hikaru, Jun, Kojiro y Tsubasa.
Pues tal vez pronto Yoshiko y yo las tengamos, decía Hikaru sonriendo.
Yo igual, lo estamos planificando con Yayoi, respondió Jun.
A mí ni me miren, Maki aún tiene campeonatos y yo también, creo que al menos por este año, no tenemos en mente el tener un bebé, decía Kojiro.
¿Y tú Tsubasa?, dijo Ryo sonriendo, mientras Taro lo miraba expectante.
Pues la verdad no lo hemos hablado con mi princesa, pero de hecho me encantaría ser padre pronto, respondió Tsubasa.
¿Se imaginan que nuestros hijos hereden nuestro talento?, decía Ryo.
¿Talento?, respondieron los jóvenes que iban en el bus.
Pero de que talento habla Ryo, decía Soda, haciendo reír a sus amigos.
Supongo que el de su famosa técnica facial, esa sí que es inigualable, acotaba Nitta.
Cierto, dijo Takeshi.
Oye, no te unas a las porras, respondió Ryo haciendo sonreír a sus amigos.
Ya, chicos, fuera de bromas, sería increíble, que algún día nuestros hijos siguieran nuestros pasos, dijo Tsubasa.
Sí, respondió Kojiro.
Los nuevos "Soccers Angells" dijo Taro.
Pensé que no volvería a escuchar ello, respondió Jun.
Azumi siempre me dice que soy su "Soccers Angells", dijo Taro.
A mí también me lo dice Yoshiko, respondió Jun.
Oye Ken, ¿y qué sabes de la selección femenina de Futbol de Japón?, y no nos vayas a salir con que nada, porque bien sé que tu tras más de dos años de amistad con Harumí Nikashikawa te hiciste su novio, decía Genzo.
Pues las chicas tuvieron un buen desempeño en la copa mundial, un tercer lugar para ser su primera vez, no es malo, respondió Ken.
Cierto dijeron los demás jóvenes.
Estadio:
Chicas extiendan más la pancartita, decía Kumi.
La pancartota, dirás Kumi, respondió riendo Reiko.
Chicas creo que exageramos, está muy grande nuestra pancarta, decía Mei.
No, yo no lo veo así, está bien, ¿o ustedes que opinan chicas?, acoto Narumí.
Que esta perfecta, así todos podrán verla, decía sonriendo Yukari.
Bueno, solo nos falta ensayar una vez más la porra, decía Noriko.
Pues a ensayarla, dijeron a la vez Yoshiko y Azumi.
2 Horas después:
Un grupo de chicas miraban emocionadas a sus amados tomar sus posiciones en un terreno de juego.
A ganar mi amor, pensaba Sanae, que estaba junto a Yayoi, sentada en una de las bancas que pertenecía al equipo médico de la federación de su país.
Campo de juego:
Por la victoria, dijo Tsubasa con fuerza.
Sí, dijeron a coro los demás jóvenes.
Tras el silbatazo del árbitro el encuentro dio inicio.
Llegamos a tiempo, decían un grupo de chicas mientras tomaban su ubicación en unas graderías.
Tsubasa lleva el balón, dijo una de ellas.
Corre, corre, acotó una peliroja.
Dispara, decía otra joven.
No que se la pase a Kojiro, tiene mejor ángulo de disparo, respondió una peliroja.
Lo sé, pero estamos hablando de Tsubasa, dijo la joven.
Cierto, respondió sonriendo la peliroja.
Casi, dijo otra joven tras el disparo del joven de cabello desordenado.
La siguiente anotará, respondió la pelinegra, mientras pensaba: Tsubasa Ozora, siempre serás mi modelo a seguir, tu juego me inspira, y así como hoy tú has llevado a nuestra selección masculina de futbol a una nueva final mundial, yo prometo llevar nuevamente a la selección femenina de futbol a otro mundial y esta vez ganarlo.
Adelante Kojiro, decía Yuna.
Cuidado te oiga la esposa, dijo sonriendo Saiko.
Solo lo estoy animando, yo soy su admiradora y ella lo esposa, eso lo tengo ya claro, respondió Yuna sonriendo.
2 horas después:
Genzo era felicitado por sus amigos tras haber atajado el tiro que hubiera llevado el partido final de la copa del mundo al alargue, con el resultado a su favor, la selección de mayores de Japón obtenía una copa mundial.
Lo logramos, somos una vez más campeones, decía Ryo sonriendo, mientras el estadio estallaba en aplausos a aquella generación de jugadores que le había regalado tantos triunfos desde que se iniciaron en el mundo del futbol, copas mundiales juveniles y copa de fútbol de mayores.
Tras la premiación de las selecciones, y el respectivo agradecimiento a los presentes, el público del estadio empezó a abandonar el lugar.
Es el momento, dijo Yayoi a la castaña.
Lo sé, respondió la joven, mientras se ponía de pie para ir a darle el encuentro a su amado.
Tiempo después:
¡Felicitaciones! decía Sanae.
¡Gracias mi princesa bella! respondió Tsubasa, mientras recibía el cálido abrazo de su amada.
Te tengo una sorpresa, decía Sanae con dulzura.
¿Cuál amor?, respondió Tsubasa, mientras se alejaba con pesar de la joven.
Serás papá, dijo la castaña.
¡Papá! respondió sorprendido Tsubasa.
Sí, dijo la castaña.
Seré papá, seré papá, empezó a decir Tsubasa, haciendo que sus amigos lo miraran y sonrieran.
Amor calma, calma, que aún no termino con la sorpresa, decía Sanae sonriendo.
¿Hay más sorpresas mi princesa bella?, respondió un sonriente Tsubasa, mientras tomaba las manos de su amada.
Sí, dijo Sanae.
No me digas que Maki, también, acotaba Tsubasa intrigado.
No, Maki, aún no, ella aún quiere disfrutar solo de la compañía de Kojiro, decía Sanae sonriendo.
¿Entonces?, ¡ah, ya sé! Ya sabes el sexo de nuestro bebé, es más estoy seguro que será niño, ¿verdad?, acotó Tsubasa.
Si, serán niños, respondió la castaña sonriendo.
¿Serán?, dijo Tsubasa elevando una ceja.
Tendremos gemelos, acotó la castaña, dejando sorprendido a su esposo.
Años después:
Siete parejas de esposos observaban a un grupo de niños que tenían entre 7 a 9 años tomar unos acuerdos.
Oye Genzo, aunque tu hijo es el más chico del grupo te saco todo el carácter, decía sonriendo Taro.
¿A qué te refieres?, respondió el nombrado.
Ya se siente la estrella del equipo, acotó sonriendo Ryo.
Pues nuestro hijo es el futuro Soccers Angells del futbol, por algo heredo el talento de su padre, decía Noriko con orgullo, mientras miraba a su pequeño hijo acomodarse los guantes.
Pues el hijo de Kojiro, no se queda atrás, y es otro de los más chicos, acotaba Hikaru sonriendo.
Pero si mi hijo no es ningún engreído, decía Maki, mientras Kojiro asentía.
Si es cierto, mi sobrinito no es ningún arrogante, es un niño muy talentoso, sin duda será el futuro goleador de la selección, respondió Sanae.
¿Y nuestros gemelos?, dijo Tsubasa.
Bueno ellos serán los genios del equipo, respondió Sanae sonriendo.
Pues no serán los únicos genios, los hijos de Jun, Hikaru y Taro, vaya que son talentosos, decía Yukari, mientras los padres de los niños, miraban con orgullo a los mismos.
Pues tu hijo no se queda atrás es un buen defensa, decía Maki.
Sí, es cierto, de hecho, será mucho mejor defensa que su padre, acotó Genzo, haciendo sonreír a sus amigos.
¿Qué has dicho?, dijo en tono ofendido Ryo.
Bueno, no te esponjes, a veces el discípulo supera al maestro, ¿no?, respondió Genzo.
Eso es cierto, dijeron a la vez Taro y Hikaru.
Si tal vez tengan razón, además si mi hijo llega hacer mejor que yo me hará sentir muy orgulloso, decía Ryo.
Los futuros angelitos del futbol, dijeron a su vez las esposas de los jóvenes.
¿Qué?, respondieron a coro sus esposos.
Pero ustedes siempre serán los pioneros, dijeron las chicas.
Hay chicas, respondieron los jóvenes, mientras abrazaron a sus esposas y les dieron un beso en su rostro, al tiempo que dirigieron sus miradas hacia sus hijos, haciendo que la misma cobre un brillo especial.
FIN
Nota:
Los personajes no son míos le pertenecen al gran maestro Yoichi Takahashi, yo solo hago de ellos para mis historias tratando de mantener en lo posible las personalidades de los mismos.
Esta bella historia de amor como abran notado llego a su final, agradezco de antemano a cada persona que se tomo el tiempo de leerla, dejar sus votos y comentarios, para mí fue un placer escribirla.
Espero el final y el epilogo haya sido de su agrado y mi historia haya llegado a cubrir sus expectativas, así mismo les informo que el día 15 de Junio estaré se empezara a publicar "Por aquel error", una historia que estoy empezando a escribir con mucho cariño para ustedes y que espero llegue hacer de su agrado.
Con mucho cariño.
PrincesaLirio
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