Capítulo 18: "Felicidad a medias: Comentarios que duelen: Parte I"
Una emocionada castaña abrazaba a un joven de cabello desordenado que estaba parado en las afueras de su casa en medio del atardecer.
Cuando me llamaste para decirme que estabas aquí, pensé que bromeabas, decía Sanae con voz quebrada, mientras se aferraba más al cuerpo de su amado.
Pues no bromeaba princesa, aquí estoy, como verás acabo de llegar del aeropuerto y lo primero que pensé fue en venir a verte, respondió Tsubasa con dulzura.
Pero pasa, pasa cariño, decía Sanae, rompiendo el abrazo para tomar la mano de su novio y caminar con este al interior de su casa. Mis padres se pondrán felices de verte nuevamente, acotaba la joven.
Yo también quiero ver a mis suegritos, respondió Tsubasa.
En tanto: "Casa Ozora"
Una jovencita de porte atlético que vestía ropa bastante holgada, platicaba por celular mientras caminaba descalza dentro de su habitación.
Entonces en unas horas sales para Japón, decía sonriendo Maki, mientras detenía sus pasos frente a la ventana de su alcoba.
Si mi niña, en unas tres horas para ser exactos mi niña, escuchó.
Iré a esperarte al aeropuerto, decía Maki.
No es necesario mi niña, yo luego de que deje mis cosas en casa iré a verte, escuchó.
Pues te estaré esperando ansiosa, decía Maki.
¿Y tu hermano?, escuchó la jovencita.
¿Qué pasa con Tsubasa?, agregó la joven.
¿No sabes si ya está de regreso?, escuchó.
No se ha comunicado a casa, pero mi hermanito hermoso es así, le gusta volver de sorpresa, decía sonriendo Maki.
Claro, escucho, seguido de una sonrisa.
Creo que no hay nada de qué preocuparme, de seguro todo lo que dijeron las arpías de Yuna y Sachi solo fueron inventos suyos, yo confío en mi bombón y en todo lo que él me dijo tras aquel día que le apoyo a ella con su tiro, pensaba Maki.
Casa Nakazawa:
Un par de jóvenes estaban abrazados mirando televisión mientras platicaban.
No sabes lo feliz que me siento, estaremos juntos para las fiestas de fin año, después tres años de no estarlo, decía Sanae.
Cierto, aunque bien sabes que no fue porque yo no quisiera, tenía que cumplir con los contratos que mi manager pactaba, como él me decía a veces hay que hacer sacrificios para poder tener a futuro una vida más cómoda. Tú sabes amor que estos sacrificios siempre los he hecho pensando en ese futuro que quería ir construyendo para los dos, respondía Tsubasa, mientras apegaba con su brazo más a él a su prometida.
Lo sé, pero yo pensaba que tras aceptar mis sentimientos hacia ti todo sería dicha para los dos, que pasaríamos fechas especiales juntos, pero no te culpo de ello, comprendo los motivos por los cuales no podías venir, dijo Sanae.
¡Gracias princesa! respondió Tsubasa dándole un cálido beso sobre los cabellos de la joven.
Está navidad será distinta, ¿verdad?, decía la castaña sonriendo.
Si, será distinta, es más tenía pensado en que fuéramos a esquiar, hace mucho que no lo hacemos, respondió Tsubasa.
Cierto, solo esquiamos juntos nuestra primera navidad como novios, pues las otras navidades ya no pudimos pasarla juntos, dijo la castaña.
Así es, pero esta navidad si la pasaremos juntos amor, respondió Tsubasa, con una cálida sonrisa.
No tiene caso incomodarlo con tontas preguntas, de seguro todo lo que Maki y yo oímos solo son inventos de ese par de víboras, pensaba la castaña.
Al día siguiente: "Federación de Fútbol Japonés"
Vaya no pensé que retornarían tan pronto, decía Jun tras estrechar la mano de dos de sus amigos.
Pues no tenía caso quedarme más tiempo ya habiendo terminado con todo lo que tenía que hacer, respondía Hikaru.
Cierto, además cuanto más tiempo tengamos para entrenar para el amistoso, será más beneficioso para todos, recuerden que no solo tenemos que entrenar para ello sino además seguir con la observación, añadía Tsubasa.
Así es, decía Hikaru.
Bien, entonces vamos al terreno de juego para empezar con nuestro entrenamiento, allí ya está el entrenador con algunos de los demás convocados nacionales para este amistoso, y digo algunos pues algunos muchachos no pudieron venir a estas horas pues tienen encuentros de la liga, como es el caso de: Ken, Takeshi y Ryo, acotaba Jun.
Claro, agregó Tsubasa.
Horas después: "Casa Ozora"
Una jovencita de porte atlético sonreía mientras sostenía las manos de su novio.
No puedo creer que ya estés aquí, decía Maki.
Pues créelo mi niña, estoy de regreso, respondió el moreno.
Espero y no piense unirte ya a la selección para el entrenamiento del partido amistoso como lo hizo mi hermanito, decía Maki sonriendo.
No, claro que no, eso ya será mañana, hoy quiero pasarla junto a ti, respondió Kojiro, haciendo una pausa para acotar: ¿Vamos por un helado?
¡Vamos! respondió Maki, esbozando una sonrisa.
Horas después: "Campo de entrenamiento de la universidad de Tokio"
Un par de chicas platicaban en voz baja mientras realizaban una rutina de ejercicios individualizada.
Entonces ya están aquí, decía Sachi con una amplia sonrisa en su rostro.
Sí, eso es lo que escuche decir a la engreída de Maki, respondió Yuna.
Ja ja ja, ¿engreída?, hay Yuna más engreída eres tú, decía Sachi.
¿Engreída yo?, decía Yuna, mientras Sachi asentía.
Amiga, mejor no discutamos por ello, aquí lo único que debe importarme es que ellos ya están de regreso, respondía Sachi sonriendo.
Sí, es cierto, dijo Yuna.
Sabes se me ocurre algo para acercarnos más a ellos, pero para ello tenemos....., respondía Sachi, mientras Yuna la escuchaba atentamente.
Dos días después:
Un grupo de hermosas jovencitas platicaban en casa de una de ellas mientras bebían unos refrescos, mientras una de ellas platicaba por celular.
Bien, no te preocupes, comprendo, y de hecho las chicas también, decía Sanae, tras dar por concluida la llamada.
¿Qué sucede?, dijo Azumi.
Narumí llamo para comunicar que Reiko, Mei y ella, no podrán venir a esta reunión, pues su entrenador parece que las incluirá en la lista para los dos últimos partidos de la liga y las tiene bajo un estricto entrenamiento, respondía Sanae.
Pues es por un buen motivo que no pueden asistir a nuestra reunión, ¿no?, entonces están disculpadas, decía Maki sonriendo.
Kumi, tampoco podrá venir, decía Yukari tras leer un mensaje de texto que la nombrada le había enviado.
¿Por qué?, no me digas, los exámenes de fin de ciclo, añadía Yoshiko.
Así es, tiene un examen el día de hoy, respondió Yukari.
Bueno ni modo, el pastel de fresas que traje nos lo comeremos entre nosotras, decía Noriko sonriendo.
Tiempo después:
Un grupo de jovencitas miraban unas rebanadas de pastel que estaban sobre un plato, al tiempo que se miraron entre sí.
¿Y si se los llevamos a ellos?, dijo una de ellas.
A estás horas ya no están entrenando para el amistoso, de hecho, deben estar reunidos realizando la observación de los videos de seguimiento de la selección femenina de fútbol, acotó Yoshiko.
Sí, es cierto, decía Yayoi.
¿Pero cómo haremos para entrar?, decía preocupada Azumi.
No te preocupes, eso déjamelo a mí, respondió sonriendo Maki.
¿Qué piensas hacer Maki?, dijo Sanae.
Nada malo, solo lograre que todas nosotras podamos ingresar a la federación, usando mi parentesco con mi hermanito, respondió Maki sonriendo.
Entonces voy empacando el pastel, decía emocionada Noriko.
Yo te ayudo, acoto Yukari.
Federación de Fútbol Japonés:
Chicas no se hubieran molestado, decía Tsubasa, mirando a un grupo de 6 chicas, que estaban fuera del ambiente donde él estaba junto a sus amigos.
No es molestia Tsubasa, sabemos que están trabajando por muchas horas no solo entrenando para el amistoso, sino también observando el buen desempeño de las chicas que militan en la liga de fútbol femenino, respondía Sachi.
Y ello pues es algo agotador, aunque no lo parezca, por ello les preparamos este pequeño aperitivo, decía Yuna, mirando a Kojiro, quien se sentía algo incómodo por la actitud de la joven.
Todo lo que preparamos lo hicimos con mucho cariño para ustedes, ¿no es así chicas?, agrego Megumi, mientras las demás jóvenes asentían.
Pues gracias, dijeron los jovencitos, mientras las hermosas jovencitas colocaron los depósitos que habían llevado sobre una mesa, para empezar a repartir el contenido de los mismos en pequeños tazoncitos.
Luego de algunos minutos las jovencitas se acercaron a los jóvenes a entregarle los mismos.
Sírvanse, decía con amabilidad Harumi, mientras les entregaba unos tazoncitos a Ken y Takeshi.
¡Gracias! respondieron el par de jóvenes.
Espero y les gusten, agregaba otra hermosa joven mientras les entregaba un par de tazoncitos a Genzo y Taro.
¡Gracias Miki! dijo Taro.
Se ven deliciosos, respondió Genzo.
Espero que te gusten, acotó la joven posando su mirada en el joven de gorra.
De seguro me gustaran, respondió Genzo.
A Genzo le gustan to...digo, todos los pasteles, sean del sabor que sean, decía Ryo, haciendo reír a sus compañeros.
¿Y a ti también te gustan todos los pasteles?, o tienes algún favorito Hikaru, decía Mizuki, mientras Ryo miraba al par de jóvenes.
No, me gustan todos los pasteles, respondió Hikaru con calma, mientras recibía su depósito de las manos de la joven.
Y este es para ti Ryo, dijo Mizuki, sonriendo.
¡Gracias! que amable, respondía Ryo con cara de bobo.
Y estos son tuyos, decía Megumi, entregándoles un tazón a Jun.
¡Gracias! respondió Jun.
Espero y sean de tu agrado, acotó la joven.
De seguro si, respondió con amabilidad Jun.
Y estos dos depósitos que sobran son de, decía Sachi.
Uno es de Kojiro y el otro de Tsubasa, acotó Yuna, tomando uno de ellos, para luego acercarse al moreno.
Es para ti, además te traje una soda, para la sed, sé que es tu bebida favorita, decía Yuna, mientras le entregaba el tazón y la lata de soda.
¡Gracias! respondió Kojiro.
Vaya, esta chica te conoce bien Kojiro, decía Ryo, ganándose una mirada de reproche del nombrado.
Soy su fan, por ello trato de informarme de todo lo que se relacione con él, respondió sonriendo Yuna, mientras el moreno, solo esbozó una sonrisa.
Bueno, este es tuyo Tsubasa, decía Sachi, entregándole un tazón al nombrado.
¡Gracias! respondió Tsubasa.
Los hice con mucho cariño para ti, acotó Sachi, haciendo que todos los jóvenes posen sus ojos en ella y en el joven de cabello desordenado, que solo sonrió de manera nerviosa ante las palabras de la joven.
En realidad, cada una de nosotras elaboramos estos pastelitos pensando en cada uno de ustedes, es nuestra manera de agradecerles por habernos elegido y por guiarnos cada vez que lo requerimos, dijo Mizuki.
Sí, claro, dijeron los jóvenes mientras sonreían.
Los jóvenes degustaron los deliciosos pastelitos, luego de ellos las chicas se retiraron del lugar dejando solos al grupo de jóvenes.
Tiempo después:
Ande, no sea malito, decía Maki sonriendo.
Pero a la federación solo pueden ingresar los seleccionados señorita, respondía el hombre con calma.
Pero ya le dije quién soy, acotaba Maki.
Sí, la hermana del gran Tsubasa Ozora, decía el hombre.
Y la novia de Kojiro Hyuga, así como ellas son las novias de algunos de los chicos que están dentro,...., añadía Maki.
Minutos después:
Bien, solo por esta oportunidad les permitiré la entrada, decía el hombre.
¡Gracias es muy amable! respondió Maki sonriendo.
Bueno pasen, pero ya saben no pueden estar más de media hora dentro, decía el hombre.
No se preocupe, no demoraremos mucho, solo queremos llevarles este pastel, añadía Sanae.
Vaya que esos chicos tienen suerte, ¿acaso es el cumpleaños de uno de ellos?, decía el hombre.
No, dijo Yayoi.
Entonces solo debe ser casualidad, respondió el hombre.
¿Casualidad?, dijo Azumi.
Mejor pasemos, no podemos perder tiempo, decía Yukari.
Sí, es cierto, acotaron Yoshiko y Noriko, mientras entraban junto a sus amigas al interior del lugar.
Vamos al aula de reuniones, allí nos dijo el vigilante que estaban, decía Maki.
¿Y sabes cómo llegar?, respondió Yoshiko.
Yo sé cómo llegar, dijo Yayoi, haciendo una pausa para acotar: Haré prácticas en la federación, por ello vine hacer hace algunos días el reconocimiento de sus ambientes.
Luego de ellos el grupo de jóvenes continuaron su camino, llevando un delicioso pastel, sin siquiera presagiar lo que pasaría unos minutos después.
En una habitación:
Un grupo de jóvenes platicaban sin notar que habían dejado la puerta entreabierta.
Ya no se hagan, aquí no están sus chicas, reconozcan que ellas son hermosas, decía Ryo.
Si es cierto, ya sincérense chicos, ¿a poco no les parecen hermosas?, acotaba Genzo.
Sí, son lindas, dijo Taro.
Y muy talentosas, no solo para el fútbol, sino además para la cocina, añadía Hikaru.
Cierto, sus pastelitos estuvieron deliciosos, decía Jun.
Ven aprendan de ellos, sean más sinceros con ustedes mismos, como todos nosotros, respondió Genzo.
Si chicos, solo acepten que les gusto, escuchaban un grupo de chicas que habían llegado al lugar, pero al escuchar la parte de la plática decidieron quedarse fuera aún.
Bien me gusto, escucharon.
¿Y a ti Tsubasa?, decía otra voz, mientras una castaña escuchaba atentamente la respuesta de su novia.
También, para que negarlo, escucharon el grupo de jóvenes.
¿De qué hablaran?, decía Azumi.
No lo sé, respondió Noriko.
¿Y si pasamos?, acotó Yoshiko.
No, aún no, dijo con firmeza Sanae, mientras los jóvenes seguían hablando sin notar aun la presencia de sus novias.
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