Siete✔️
Me cuesta abrir los ojos y al abrirlos un pálpito va directamente a mi cabeza,me sostengo con las dos manos la misma.
¿Qué me pasa?
¿Por qué me siento tan mal?
Tengo un dolor de cabeza horrible,fijo mi vista en el reloj que cuelga en la pared y mis ojos se agrandan al ver la hora.
Diez de la mañana, nunca había dormido hasta tan tarde, al reincorporarme siento como si miles de cuchillas afiladas se me clavaran en el cuerpo,no sé porqué me siento tan mal y dar un paso me cuesta como no tienen idea.
A duras penas salgo de la habitación y con cuidado bajo las escaleras buscando al intruso que pasó la noche de ayer aquí.
Durmió en una de las habitaciones de invitados,después de que tocara el piano de mamá ayer,no volvimos a hablar,solo me preguntó donde podría dormir y se esfumó,tampoco le di mucha importancia y se lo atribuí al cansancio y al hecho de que era demasiado tarde ayer.
La noche para mí paso lenta,no dejaba de pensar en lo sucedido hace unas horas,y como le haría
para entrar a esa casa,me era necesario el dinero y las rutas,no podría continuar sin eso, pues sabía que estaría perdida sin un plan fijo,no pude llegar a nada concreto y opté por la posibilidad de que tuvieran una vacante libre,eso sería demasiada suerte,por lo que anoté mentalmente buscar en internet algo relacionado con el tema.
Alrededor de las cuatro de la madrugada me quedé dormida,al menos esa fue la última vez que vi el reloj.
La puerta chirrió y dejó a la vista a Alain, llevaba unos auriculares en sus oídos y movía su cabeza de un lado a otro,podría jurar que estaba escuchando alguna canción ruidosa de esas que te sangran los oídos solo de escucharlas,su cabello rubio brillaba y formaba pequeñas ondulaciones,llegué a la conclusión de que brillaba mucho,pero no podía negar que ese color le quedaba demasiado bien, en sus manos traía bolsas de comida,su piel era demasiado pálida,pero sus mejillas concervaban un color rosa tenue por el aire fresco característico de la ciudad,sus ojos se encontraron con los míos y dejó de moverse quitándose los auriculares,frunció el seño y ladeo la cabeza.
No había caído en cuenta de que me detuve en la mitad de la escalera,solo por observarlo.
Sacudí la cabeza de una lado a otro, pero gruñí en el acto y me la sostuve.
El dolor era demasiado.
Me percaté de algo que no había observado al fijar mi mirada en él una vez más,llevaba ropa limpia, a pesar de que ayer no llevaba ninguna maleta consigo.
¿con qué compró la comida si le robaron?
Pero afortunadamente para él me siento demasiado mal ,para hacerle un interrogatorio.
—¿Dónde estabas garrapata?—me permito hacer una pregunta.
—¿Esa es una forma amorosa de llamarme? Pues si es así ,por mí no hay problema—cierra la puerta a su espalda con un puntapié y el sonido que hace al cerrarse empeora mi estado—y respecto a tu pregunta,traje el desayuno.
Agita las bolsas en el aire para que estén a mi vista,me regala una sonrisa de lado y hace un gesto con la cabeza para que lo siga.
Desapareciendo rumbo a la cocina.
Gruño,ya piensa que es su casa.
Lo sigo a pasos lentos,debido al malestar que siento,él deja las bolsas encima de la isla y saca su contenido.
En este momemto mi mente se percata de algo demasiado obvio y que debería importarme,pero no es así.
Estoy en pijama,seguramente despeinada ,con ojeras,sucia y si lo juntamos todo estoy horrible,pero me importa poco lo que piense él, pues si no le gusta lo que ve, que aparte la vista.
—¿Hamburguesas?—pregunto extrañada,al ver lo que trajo.
—¿Tienes algún problema con ello? También traje jugo de naranja y papas.
—Por mí ,genial—tomo asiento junto a él viendo las papas,tengo una ligera debilidad hacia ellas.
Sin cortarme ni un pelo tomo un puñado de ellas y las llevo a mi boca, masticandolas desesperadamente y disfrutando del sabor.
Las cosas grasientas me gustan,siento la mirada de alguien y me giro para mirar al rubio
—¿Qué?—pregunto con fastido.
¿Nunca ha visto a nadie comer?
—Nada—ríe divertido—me alegro que disfrutes de la comida basura y no estés haciendo dieta como la mayoría de las chicas—rueda los ojos.
Él le da una mordida a su hamburguesa y mastica lentamente,su boca se ve bien cuando come.
—Ellas son estúpidas—concluyo.
—Por cierto,encontré esto afuera—me extiende una carta y el periódico de hoy.
Lo miro extrañada y asustada al mismo tiempo ¿quien envío esto?
Estos días no dan tregua alguna.
Limpio mis manos con una servilleta y observo lo que me trajo,en mi garganta se hace un nudo y toda la comida ingerida quiere devolverse.
En primera plana aparece el titular.
"Mujer joven es asesinada terriblemente y encontrada en un contenedor de basura ¿será que el asesino ha vuelto?"
Un cadáver que es muy difícil de reconocer pero aún así sé de quién se trata ,es Dilia.
Me paro de un salto y salgo corriendo hacia al baño para vomitar,vacío mi estómago en el retrete y me quedó unos segundos arrodillada para reencomponerme,me doy asco.
Recuerdo su sangre,su mirada llena de miedo,y lo estúpida que era,pero aun así no le deseo la muerte a nadie.
Mi mente empieza sacar muchas posibilidades.
¿Quien pudo matarla?
¿Será por mi culpa?
¿Fue Stefan o Ronald?
Tocan suavemente la puerta:
—Tati ¿estás bien?
—Sí sólo...—me comienzan a dar más arcadas y no logro terminar la frase—me siento un poco mal.
Digo a duras penas,estoy algo mareada y enfermarme ahora es lo peor que puede pasar.
Tendré que huir de nuevo,odio esto,maldita sea.
Tocan nuevamente a la puerta y soplo un mechón de pelo molesto que se posiciona en mi cara.
—Puedes dejarme a solas,necesito asearme—vuelvo a hablar,me incorporo quitándome la ropa en el acto y arrojándola en un rincón del baño.
Pero siento la puerta abrirse de par en par.
Bufo,y la mirada oscurecida de Alain esta recorriendo mi cuerpo,es hambrienta y hace que la piel se me erize.
—¿Qué acabo de decirte?—le reclamo mientras intento taparme mis partes como puedo.
Me ha salido pervertido el chico rubio.
—Lo siento sólo quería darte esto—me extiende el periódico y la carta que dejé en la cocina.
—¿No podías darmélos fuera?—respondo ante tal estúpidez.
En serio agota mi paciencia.
—Supongo que fue tonto de mi parte—se arrasca la parte trasera de su cabeza con algo de nerviosismo mientras juega con sus pies.
—¿Ya puedes irte?
Digo ante su congelación.
—Claro—sale disparado cerrando la puerta muy torpemente y oigo como tropieza con las cosas en mi cuarto mientras le pide a las mismas perdón.
Sonrió, pero borro la sonrisa de inmediato ante darme cuenta porque bobada estoy sonriendo.
Me acaba de ver desnuda pero no siento vergüenza al pensar en ello y al recordar su mirada encima de mí cuerpo,como miraba mis pechos y...
Corto de raíz tal pensamiento absurdo y me adentro en la ducha.
El agua fría cae sobre mi cuerpo,aliviando un poco el malestar que tengo pero aún así el cuerpo me resulta pesado.
En vez de nejorar empeoro con cada minuto que pasa.
Suspiro y me envuelvo la toalla alrededor de mi cuerpo ,me cepillo los dientes para quitar el mal sabor que tengo en la boca al vomitar.
Miro mi reflejo en el gran espejo,y reafirmo la teoría anterior dicha,estoy horrible.
Mi cuerpo tiembla al salir,tengo tanto frío perp no le doy importancia pues se lo atribuyo a la ducha fría que me acabo de dar,pero aún se me hace raro que no paro de temblar.
El mareo no cesa,todo me da vueltas y parece que estoy en una montaña rusa,trato de aferrarme a algo pero se viene al suelo y no logro enfocar de que se trata.
Los pies se vuelven gelatina y me desplomo en el suelo perdiendo el conocimiento.
***
Me despierto en la cama,lo primero que visualizo es el techo y luego paseo la mirada por la habitación donde Alain está dormido en un sillón con las piernas estiradas y los brazos en una posición extraña, mientras la cabeza esta inclinada sobre un lado,un mechón de pelo reposa sobre la frente.
Me incorporo y un paño húmedo cae sobre mi regazo, al parecer tenía fiebre,eso explica porque sentí tanto frío.
Estoy tapada con una manta,pero me siento demasiado "ligera" y al levantar un poco la manta puedo ver que estoy completamente desnuda.
¿Se quedó con ganas de seguir viéndome?
Le lanzo una mirada asesina y al parecer siente como lo estoy cortando en trocitos en mi mente porque se despierta.
Se estira libremente, donde lleva sus manos de un lugar a otro desperezandoze.Dobla los brazos por detrás de la cabeza y bosteza para luego decir:
—Buenos días.
Me alarmo ,estuve dormida un día entero,vaya perdida de tiempo y sabrá Dios lo que hizo Garrapata al estar inconsciente,tal vez me fotografió o peor aún, tiene habilidades para pintar y me hizo un retrato de mí desnuda para luego venderlo a precios exuberantes.
Me muerdo el labio con nerviosismo y de un salto salgo de la cama sin acordarme del pequeño detalle de que estoy desnuda y es curioso que hace un segundo estuviera debatiendo sobre ello internamente.
"Maravilloso"
Y como ya es habitual en él,se bebe mi cuerpo con la mirada,me incomóda un poco pero al saber que soy admirada por él me hace sentir un sentimiento raro que no había experimentado.
Descarto la idea de taparme ,ya no tiene caso.
—Puedes verlo tranquilo,seguramente te lo sabes de memoria.
Se acerca a mí sigilosamente.
—¿También puedo tocarlo?—lleva una de sus manos a mi senos y la aparto rápidamente.
—Eso no.
Me dirijo a la mesita donde guardo mi ropa interior ante la atenta mirada de él,luego voy al armario para ponerme algo de ropa.
—¿Podrías al menos disimular?—digo de espaldas a él.
—Bien—toma una revista y se la pone en el rostro y cada tres segundo la retira para verme.
—Eres un tonto—digo riendo.
—Un tonto que te ama—se acerca a mí ,después de que estoy completamente vestida, me abraza por la espalda apoyándo la cabeza en mi hombro.
No lo aparto pues siento que no soy capaz de hacerlo.
—¿Amor? Una palabra demasiado grande para ti.
—Jum...¿y eso porqué?
—No puedes amar a alguien sin siquiera conocerla—ruedo los ojos.
—¿Quien dice que no te conozco?
—Eso es absurdo—frunzo el ceño.
—¿Cómo te sientes?—pregunta pegado a mi cuello e inspirando hondo.
Cambia de tema,pero le sigo el hilo fingiendo que no me di cuenta.
—Mejor.
—¿Sabes que me gustas mucho,cierto?
Poso mis manos por encima de la suyas y siento el calor de estas.
—Cada vez que te miro a la cara, lo noto—le afirmo.
—Entonces ¿ no te gusto?—me pregunta dudoso.
—No es eso— aparto sus manos de mí—no puede estar en una relación ahora.
Me giro hasta quedar frente a frente.
Él es más alto que yo, por lo que tengo que inclinar un poco la cabeza para lograr verlo.
—¿Y si no la tenemos?
—¿Cómo se supone que estaremos juntos no estando juntos?—hablo extrañada.
—Que seremos Alain y Tatiana dos personas que se dan un poco de cariño ¿te lo demuestro?
Se acerca lentamente hasta posar sus labios encima de los míos,besándome de una forma tierna pausada y sin prisa,donde nuestras lenguas danzan y donde nos brindamos un poco de ¿amor?
No sé el significado de esa palabra,es deconocida para mí.
Siento mariposas en mi estómago y mis manos pican queriendo tocarlo,las coloco en su rostro suavemente,mientras el toma el final de mi blusa y la alza con intención de desnudarme, se lo permito y le facilito la tarea alzando los brazos para que luego la prenda caiga a mis pies.
Su boca abandona la mía para pasearse por mi cuello donde deja pequeños besos a su paso.Mientras se deshace de el sujetador al mismo tiempo.
Un pequeño gemido se escapa de mis labios al sentir el calor de su boca en mis senos donde su lengua traza círculos que me hacen tocar el cielo.
Tomo su cabello incitandolo a seguir pero se aparta por un momento besándome de nuevo y obligándome a dar pasos hacia atrás donde me tumba con cuidado en la cama.
—Para—digo con voz débil.
Parece que no me escucha porque sigue regando besos húmedos sobre mi estómago.
—Alain,para—digo tomando una gran bocanada de aire.
No puedo hacer esto,no ahora y no con él.
Esta vez si se aleja de mí con un largo suspiro de pesar.
—¿Hice algo que no te gustara?
Se tumba a mi lado en la cama.
—No,sólo que no estoy preparada.
—¿Eres...
—Sí—me mira claramente sorprendido,ruedo los ojos y busco mi sujetador y mi blusa que yacen por el suelo, colocandómelo deprisa.
—Bien iremos despacio.
—¿Y quién dice que quiero ir ha algún lado contigo?—le digo seria.
—creía que...—Dice desilusionado.
—Sólo nos divertiremos juntos nada más, y sí,vas a ir despacio no porque tu quieras si no porque yo lo digo,total si el interesado eres tú.
Digo una pequeña mentira porque yo también estoy interesada y aunque me haya hechado para atrás sólo porque no quiero hacerlo con alguien que no conozco de nada,quiero dejar de ser virgen pero no puedo acostarme con cualquiera ¿se me entiende?
Me gusta Alain aunque me cuesta admitirlo me gusta tanto como quiero cortarlo ,pero todo no se puede tener en la vida así que me tocará conformarme con sus besos.
Encima del tocador se encuentra el periódico y la carta del día anterior que aún no he abierto,la tomo en mis manos y la abro con cuidado admirando cada detalle de esta para que no se me escape nada,dentro ahí una nota.
"Pagarás por esto"
Se refiere al periódico,y por lógica piensan que yo la asesiné pero obviamente eso no ocurrió,por lo que el único que sabe de mi existencia es Ronald.
No tengo ninguna referencia de él por lo que no puedo deducir si es peligroso o no,pero por otro lado hay una posibilidad de que Dilia antes de morir le haya dicho a Stefan, a pesar de que afirmó que no lo iba a hacer.
Mi cerebro saca muchas posibilidades y por lo tanto debo largarme de aquí ya que saben mi paradero,tendré que buscarme un lugar ,esto sólo reafirma que tengo que sacar las malditas ubicaciones y el dinero de casa de Stefan cuanto antes.
Tocará huir de nuevo,gracias al cielo ya me siento mucho mejor y al parecer lo de ayer fue el aire helado de la madrugada que me afectó de mala manera,tomo las pocas cosas con las que vine y me despido una vez más de la casa donde crecí.
Alain se fue al terminar nuestra conversación de hace un rato por lo que salgo a buscarlo , después de colocarme la mochila al hombro,ponerme la peluca y colocarme una grandes gafas de sol,junto con una gorra.
Alain no me ha preguntado sobre mi tono de pelo real por lo que no le dió mucha importancia y eso es genial porque me ahorra de inventarme mentiras rápidas.
—¡Garrapata ilumináme con tu presencia!
—Ya sabía que no te podías resistir—aparece de la nada—¿donde vas?
—Me toca irme,no puedo estar aquí por ende ,tú tampoco,pero si te quieres quedar, problema tuyo—me encojo de hombros.
Agarro el pomo de la puerta principal.
—Espera,apenas empezamos y ya estas huyendo.
Me reclama.
—Eso es lo que siempre hago—abro la puerta.
—Voy contigo,en serio piensas que te dejaré ir de nuevo—niega con la cabeza.
—No tienes idea en lo que te estás metiendo—se lo digo de corazón no quiero arrastrarlo a esta vida.
—Déjame,me lo estoy buscando ¿no?
Me quedo en silencio , de todas maneras no estoy obligándolo a nada y me vendrá bien un poco de compañía.
—Espérame un segundo,recojo unas cosas y ya vuelvo.
Después de un rato baja las escaleras con una mochila en los hombros.
—¿De dónde sacaste la ropa?
—Ayer cuando fui por el desayuno, pasé por el hotel y recojí mis cosas y un poco de dinero que me quedaba allá y ya estaban a punto de tirarlo a la basura porque la noche de ayer no estaba pagada.
Asiento y salimos de la casa,a diferencia de los días anteriores hoy el sol brilla en lo alto del cielo, es un bonito día para quien pueda disfrutarlo.
—¿hacía donde nos dirigimos?—me acomodo la gorra y luego le respondo.
—A casa de una muerta.
Frunce el ceño extrañado y gira la cabeza levemente hacia un lado.
—Cero preguntas—digo antes de que pueda decir algo.
Caminamos en silencio mientras el sudor corre por mi frente al estar un rato caminando.
Al llegar a la casa en la que había estado dos días atrás, la puerta roja brillante se divisaba desde el otro lado de la calle.Alain había sacado un cigarrillo de sus bolsillos, no sabía que tenía ese vicio aunque no me molesta.
Le da una calada y expulsa el humo en el aire.
—Sí entramos como dos ladrones a esa casa sin que nos vea nadie ,a plena luz del sol ¿te parecería descabellado?
Sonrió de medio lado y sus ojos brillosos destilan malicia.
—Un poco de diversión nos nos vendría mal—tira el cigarrillo al suelo y después lo aplasta con la punta del zapato.
—Mi reina—me ofrece el brazo derecho.
—Me empiezas a caer bien—le digo enganchandóme a su brazo.
—Me adoras desde la primera vez que me viste.
—¿Perdón? Creo que me estás confundiendo con alguien más—lo miro de arriba a bajo,mientras cruzamos la calle.
Guardo las gafas en mi mochila y saco la presilla de pelo para abrir la cerradura en cuestión de minutos ,esas son unas de las cosas que aprendí y que sé muy bien.
Alain mira de un lado a otro vigilando que no venga nadie.
Mi frente forma pequeñas arrugas por la concentración y relamo mis labios.
—Viene alguien, rápido levántate—dice alarmado.
Me enderezo rápidamente fijando mi mirada en él,sin saber que hacer y para no parecer ladrones, lo beso para pasar desapercibidos como una pareja de enamorados común.
Al dejar sus labios me giro con sutileza a ver quién viene, pero él me toma de la barbilla y hace que vuelva a mirarlo.
—Buenos reflejos.
Le doy un golpe en el hombro indignada.
—¿Te los has inventado?—hace un puchero—Imbécil ,esto es algo serio.
—Yo también tengo mis necesidades ¿sabes?
—Silencio garrapata—le ordeno mientras sigo con la tarea que dejé a medias.
—En esa posición me torturas—dice con voz triste.
—Sí dejaras de mirarme el culo no te torturaras.
—No es justo—típico de niño mimado.
—La vida no es justa garrapata,ahora aparta la vista de mi culo y vigila.
Hago un par de movimientos y giros hasta que oigo el:
¡Click!
Que me indica que la cerradura a cedido,entramos y todo está como lo recordaba, no se ha movido nada.
La silla,las sogas,el jarrón que rompí incluso las gotas de sangre seca cerca de la pared y me emociono de más al encontrar mi navaja tirada en un rincón.
Y esto sólo indica que a Dilia la asesinaron antes de regresar a casa esa noche.
—Hola Nayi ¿me extrañaste?—le limpio la sangre que tiene pegada.
—¿Nayi?—cuestiona Alain a mi espalda,reprimiendo la risa.
Me giro y juego con Nayi en mi mano.
—¿Quieres probarla?—en el fondo quiero que diga que sí y alimentar mis ganas de abrirle la piel.
Le miro el pecho mientras imagino toda la escena.
—No gracias,no soy comestible—se mueve hacia un lado para que lo deje de mirar y clava su mirada en una foto.
—¿Esta es la dueña de la casa? Está buena, me atrevería a decir que más que tú.
Una ira incontrolable me domina y lo próximo que sé es que la foto ha volado por los aires.
El cuadro se estrella contra la pared haciendo que se oiga un estruendo mientras grietas adornan el vidrio.
Quiero ir y saltar sobre él, hasta volverlo cachitos ,luego quitar la foto,romperla en un millón de pedacitos pequeños y luego quemarla y cuando sólo quedan cenizas se las voy a hechar en la comida de Garrapata para que coma a gusto.
—¿Celosa?—levanta una ceja.
Lo sigo mirando con odio ante tal comentario pero me obligo a calmarme para contestarle.
—Para nada sólo no toques nada—digo con fingida calma— y al cuerpo que estás loco por comerte, en estos momentos se lo están comiendo los gusanos.
Empieza a toser debido al nerviosismo.
—Te avisé que vendríamos a casa de una muerta.
Instagram:Elianny.arcia
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