Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Capítulo 16| Entregaría mi corazón

A Z U L
🌟🌟🌟

Fue un dilema escoger mi atuendo para salir cuando todas se empeñaron en darme sus opiniones sobre como me quedaba cada cosa que me probaba, que la falda con lentejuelas era para un ambiente nocturnos, que el jean negro resaltaba mi trasero y que la falda blanca que me puse era demasiado corta para que me sintiera cómoda en una cita. Trate de decirles que no era una cita, pero fue como estar hablándole al vacío, ninguna me hizo caso porque se enfrascaron en una pelea de cómo debía ir a la cafetería con Anker sin perder mi estilo propio o parecer desesperada. Finalmente, me hicieron ponerme un vestido negro de tirantes pegado al cuerpo que me llegaba a mitad de los muslos, un saco fino corto en color rosa y unos tacones beige bajos. Me maquillaron con algo sutil para el día y peinaron mi cabello haciendo ligeras ondas que dejaron caer sobre mis hombros, al verme al espejo no me reconocí, pero me gusto el resultado.

—Perfecta, mírate Azul te ves tan bonita —comenta Becca tomándome de los hombros viendo mi reflejo en el espejo, le sonreí como agradecimiento y vi a Sam asomar la cabeza desde el fondo parándose en mi cama. Estuvo un par de días sin ir al liceo, tuvo un ataque de shock en la cafetería por culpa de Oliver y su araña, ya solucionaron las cosas, pero Lila parece que sigue enojada con el castaño.

—Esta vez no te vigilaremos ni les dispararé una flecha, no es porque me las hayan confiscado, ni porque esté castigada sino porque no quiero arruinarles el momento Azul —me dice Sam haciéndome reír, no entiendo por qué tanto alboroto, en la cita con Zay lograba entender que estuvieran tan preocupadas, pero ahora es algo casual con Anker. Somos amigos, no entiendo por qué todas se alborotaron cuando se los comente en el almuerzo, me llenaron de preguntas y usaron al pobre Colín como espía para saber si Anker estaba nervioso o no. Gracias a Nyx que Anker actuaba con normalidad, incluso nos dijo que estaba feliz y eso fue todo lo que pudo sacarle Mar con sus insistencias.

—Anker adora las hamburguesas de Emma, siempre que vamos pide una con un gran batido de chocolate es su comida favorita —escucho decir a Bunnie desde el armario, estaba doblando la ropa junto a Mar y Lila, todas fueron muy amables en ayudarme a escoger la ropa, pero dejaron mi habitación como si un huracán de categoría cuatro haya pasado por aquí.

—Gracias por la información Bunnie, gracias por todo chicas, pero están exagerando un poco. Anker y yo saldremos como amigos —logró hablar al fin logrando que todas me escuchen, no quiero lastimar a nadie en especial a Anker, él es mi amigo y sé que aún no está listo para salir con alguien nuevo. Vi demasiadas personas con el corazón roto como para saber que estas cosas no se superan en una semana o un mes. En ocasiones lleva mucho más tiempo sanarse a uno mismo y perdonar al otro por lo que haya pasado o incluso perdonarse a sí mismo por los errores cometidos.

—¿Azul, tú crees que Anker no ve esto como una cita? —pregunta Melione acercándose hasta donde me encontraba y colocando sobre mi cuello un collar con una pequeña figura con la forma de una estrella o como los humanos nos representan a nosotras. —Tu misma nos dijiste que él te dijo que no te vigilaría porque quería que tu próxima cita sea con él, adivina porqué te invito a la cafetería de la mamá de Kevin.

—Porque quería disculparse conmigo, somos amigos ya dejen de decir todas esas cosas o no podré ver a Anker a los ojos, por Nyx ya siento miedo de lo que pueda pasar hoy —confieso cubriendo mi rostro con ambas manos, ahora que comenzaba a entender mejor los sentimientos humanos sé lo que es la vergüenza y lo estaba sintiendo ahora, sentía mis mejillas arder. Unos golpes en la puerta hace que todas nos giramos a ver a la puerta y por esta apareció la cabeza del rey Hades, se sintió un tanto intimidado de ver tantos pares de ojos sobre él, pero lo disimuló viendo en mi dirección.

—Anker se encuentra abajo esperándote Azul —habló con tranquilidad y se fue dejando atrás de sí un montón de rostros emocionados y chillidos contenidos, conociendo al rey en estos momentos debe estar rodando los ojos igual que lo hace su hija.

—Azul ve anda no lo dejes esperando más tiempo —me animo Mar con una sonrisa gentil, a su costado Red asintió llevando una papa frita a su boca desde que llegó apareció con una bolsa de papas la cual no ofreció a nadie y las chicas no parecieron ofenderse por ello.

—Gracias chicas, nos vemos más tarde si es que aún están aquí cuando llegue —alegó tomando mi bolso del tocador, las manos me temblaban, pero intentaba disimularlo lo mejor posible, es solo una salida con mi amigo Anker, debo dejar de exagerar todo.

—Por supuesto que estaremos aquí, somos tus amigas y aquí a todas les encantan los chismes —señaló Calí haciendo reír a Alcíone y a mí únicamente con su comentario, el resto le dedicó una mirada ofendida. —No me miren con esas caras cuando saben que tengo razón —ahora todas desviaron la mirada como si estuvieran buscando algo más importante viendo en otra dirección, negué con la cabeza y salí de mi cuarto. Mientras caminaba por el pasillo fui respirando hondo para controlar mi sonrojo, la cara me dejo de arder y pensé en perros felices para no ponerme nerviosa mientras baje las escaleras y termine cayendo.

Tenía todo bajo control, sosteniendo mi mano derecha sobre el barandal fui bajando por la escalera viendo donde pisaba y con confianza levanté mi cabeza para ver al príncipe del inframundo. Casi no pisó bien el siguiente escalón, tuve que sostenerme del barandal de las escaleras con las dos manos y plantarme firme para no caer de bruces hacia adelante. Anker tenía el jopo alto, dándole un aspecto revedle, una camiseta básica blanca, una camisa a cuadros negros y azul marino y por encima de esta una chaqueta de jean azul clara. Un jean negro ajustado a sus piernas y borcegos grandes de color negro. Este no se parece en nada al Anker que vi en la cita que tuvo con Bunnie y mucho menos se parece al Anker que me invitó a salir hace un par de días. Mi corazón golpeó con fuerza en mi pecho, con toda la fuerza de voluntad termine de bajar las escaleras y trate de reflejar que no estaba asombrada con su aspecto, pero fue difícil no poder recorrerlo con la mirada a medida que me aproximaba a él.

—Si ya terminaste de hacerme una radiografía con los ojos ¿podemos irnos? —cuestiono con una ceja alzada el príncipe haciendo que me pusiera roja nuevamente, de seguro debo verme igual a un jalapeño.

Tártaros, mierda, joder o como sea que le digan los mortales.

A N K E R
💀🔮💀

Con algo de ayuda de Colín, Kevin, Oliver y Blake elegí mi atuendo para mi salida con Azul, no sé cuántas veces tuve que repetirle a Kevin que esto no era una cita solo un encuentro casual entre amigos. Mi manera de pedirle disculpas a la estrella por arruinar su cita con Zay, una completa farsa porque en el fondo si disfrute mucho en arruinar su cita, pero ese no es el punto ahora. Mis amigos por órdenes de las chicas vinieron a ayudarme, el único que vino por voluntad propia fue Blake y fue de gran ayuda con mi cabello. Mi madre me prestó su auto, casi me tira con una cuchara de madera cuando le dije que iría a buscar a Azul en mi motocicleta. Se negó a que la fuera a buscar de ese modo, que su hijo no le haría esos aires a ninguna estrella y me presto su auto, papá me dio algo de dinero para que nos divirtamos y muy amablemente invito a mis amigos a que se largaran de la casa.

Conduje hasta la casa de mis abuelos, estaba tranquilo, esto es solo una salida entre amigos y sé que iba demasiado arreglado para que sea una salida informal, pero si me negaba a recibir ayuda las chicas no matarían a mis amigos. Me matarían a mí. Al estacionar frente a la mansión, trote hasta la entrada donde una de las ninfas me recibió y pidió que esperara en la puerta para llamar a Azul. No fue necesario que subiera las escaleras porque mi abuelo anunció que el mismo se encargaría de llamar a la estrella, así fue como luego de unos diez minutos bajo Azul. Estaba muy arreglada, pero no dejaba de verse hermosa y mientras la veía bajar no pude evitar verla de pies a cabeza a detalle. Lo que me gusto más fue verla sonrojarse en el momento que levanto su rostro y se sostuvo del barandal para no caerse, con sus largas y tupidas pestañas parpadeo recuperando la compostura. No pase desapercibida la mirada que me dio analizando mi aspecto y le hice un comentario en broma sobre la manera en que me miro. Y al ver su rostro rojo no pude evitar reírme por ponerla nerviosa.

—Yo no te hice nada con los ojos, tan solo me asombré de tu atuendo, nunca te vistes así tan... —dudo por un segundo en que responder y cuando pareció tener la respuesta su rostro al igual que todo su cuerpo brillaron de manera sutil —Rebelde, si esa es la palabra, te vez como un chico rebelde que anda en moto y tiene a un montón de chicas esperando que las mires —admitió con un tono de orgullo en la voz, reí ante su comparación. Yo no soy un rebelde, eso encaja más con mi padre, Melione u Oliver pero no conmigo. Que tenga un estilo un poco oscuro para vestir y ver la vida no me convierte automáticamente en un rebelde sin causa o en contra de la anarquía.

Azul no esperó mi respuesta, camino a la salida con la frente en alto y la seguí afuera, subiéndonos juntos al auto de mi madre, esta comida será interesante.

Me senté en la mesa de siempre, tía Emma nos atendió con amabilidad y me trajo mi comida favorita, una hamburguesa triple, con papas y malteada de chocolate. Azul pidió una hamburguesa grande, papas con queso cheddar y una malteada de chocolate, para ser de complexión pequeña comía el doble de su peso.

—¿Cómo van tus heridas? —pregunto para romper el hielo, lo único que estaba reteniendo a Azul en la tierra eran las heridas que tenía en su espalda y desde que deje de cuidarla no había sabido mucho de sus avances.

—Se están cerrando bien, quizá en un mes o dos ya pueda regresar a casa con mis hermanas —responde emocionada, su rostro se iluminó al igual que el resto de su cuerpo de manera sutil, su enorme sonrisa le llegó a los ojos y no pude apartar mi mirada de ella para memorizar desde sus hoyuelos hasta sus ojos entre cerrados por la alegría.

—Me alegra escuchar eso —alegó sincero —¿Tienes todas tus preguntas resueltas? —interrogó viéndola fruncir el ceño, apoyó su codo en la mesa dejando descansar su mentón en la mano y me miró analizando mis palabras.

—No, sigo sin saber bien por qué terminé aquí en la tierra, no entiendo del todo los sentimientos humanos y porque luego de dar un beso tus intestinos se contraen como si tuvieras gases que no soltaste. Entre otras muchas cosas que aún no tuve oportunidad de resolver mis dudas —responde con simpleza la rubia, como si todo lo que me acaba de decir es que se olvidó de cerrar la ventana un día de lluvia y se le mojó la cama. No pude contestarle porque tía Emma trajo nuestro pedido, comimos en silencio mirándonos y sonriendo con complicidad.

—¿Anker te puedo hacer una pregunta incómoda? —interroga Azul, limpiando su boca con una servilleta, la miré a sus profundos ojos azules asintiendo con la cabeza y ella soltó un largo suspiro antes de preguntar. —¿Sigues enamorado de Bunnie? —su pregunta me tomó desprevenido, la papa frita que estaba comiendo se fue por donde no debería y comencé a toser con fuerza golpeando mi pecho. Cuando hablé con Bunnie las cosas quedaron claras entre ambos, aún persistían sentimientos, pero es que el amor no se borra tan simple como un documento que mandas a la papelera y te olvidas de que alguna vez existió. Para algunos no cuesta nada olvidarse de una persona, es fácil cuando dejas de verla, pero es difícil olvidarte de alguien que vez todos los días, que tienen amigos en común y sin querer lastimarte vive su vida al lado de alguien más.

—No —con un hilo de voz respondo, aún me estaba recuperando de esa papa frita que se me fue, tenía un nudo en la garganta y tome un poco del batido aclarándome la garganta para continuar hablando. —No sigo enamorado de Bunnie, pero la sigo queriendo como mi amiga y la verdad es que estoy bien con que seamos amigos. Quiero ver feliz a Bunnie aunque no sea conmigo —mire a los ojos a Azul, ella me estaba viendo con una sonrisa de labios sellados y estiró su mano encima de la mesa tomando la mía que sostenía una arrugada servilleta.

—Eso es el gesto de amor más bonito que he visto a alguien hacer, me alegra ver que estás superando todo lo que paso con Bunnie y me pone feliz saber que estás sanando. No me gusta verte triste, entregaría mi corazón si eso me asegurara verte siempre feliz —comentó con una amplia sonrisa, estaba brillando de nuevo esa aura la recorría y se veía espectacular. Jodidamente espectacular.

💀🔮💀
#FelizMiércolesDeHechiceros

Hola llamitas, la tan esperada cita paso y me encanto como transcurrieron los hechos, Azul hizo muy bien en aclarar primero que siente Anker con Bunnie. Los sentimientos no se borran de la noche a la mañana y está bien pasar por una etapa de duelo por ese amor no correspondido. ¿Les gustaría ver más escenas con Azul y Anker solos? Comenten y voten, eso ayuda a motivarme a escribir. Antes de que se vayan les recomiendo guardar en su biblioteca mi nuevo libro de escenas extras de HDD por si aún no se enteraron, este catorce tenemos el primer especial. Espero que les guste tanto como a mi.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro