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Capítulo 8

Humanos: 4

Dioses: 3

Los Dioses consiguieron una victoria más, Hermes se encontraba en un cuarto circular corriendo sin parar para apagar su electricidad de su cuerpo. Zeus lo miró para después ir a su palco al mismo tiempo que notaba como Geir iba acompañada de un hombre grande con traje rayado. Iniciando la Octava Ronda del Ragnarok, la arena volvió a ser arreglada tal como un coliseo normal.

Heimdall: ¡¡Muy bien, veamos si los dioses consiguen otra victoria en este enfrentamiento!! ¡¡Del lado de los Dioses se encuentra este Griego!!

Del Cielo comenzaron a asomarse diversos ángeles acercándose a la arena.

¡¡El Primer hijo legitimo de Zeus!! ¡¡Fue el que se enfrentó al Héroe Hércules aún cuando había bebido la ambrosía!!

En eso, un pegaso aparece entre todos volando más rápido que el resto trayendo a alguien en su espalda.

¡¡Muchos no creen en él!! ¡¡Algunos se decepcionaron al conocerlo!! ¡¡Pero hoy luchará por el Orgullo de los Dioses!!

¡¡Recibamos al Príncipe del Olimpo!!

¡¡El Dios de la Guerra!!

¡¡ARES!!

El bando de los Dioses solo dio unos leves aplausos y algunos silbidos a lo mucho, cosa que avergonzó al Dios mientras se bajaba del pegaso.

Humano: Hasta los dioses tienen sus preferencias.

Heimdall: ¡¡Y del lado humano, tenemos al Héroe Clase S más Débil de la Asociación de Héroes!!

En eso, algunos prisioneros comenzaron a tocar armónicas o usar utensilios como instrumentos en las gradas mientras las puertas se habrían.

¡¡Su fuerza no es comparable al de sus compañeros, pero sigue siendo sobrehumana!! ¡¡Él desde siempre fue tratado más débil incluso por Héroes más bajos que él!!

En eso, el Humano comienza a caminar hacia la arena con una bola de prisión encadenada al pie.

¡¡Talvez no sea el Clase S más poderoso!! ¡¡Pero sin duda es el Prisionero más Fuerte!!

Los prisioneros cada vez hacían más ruido con sus cosas mientras el representante les hacía poses un tanto extrañas.

¡¡Recibamos al Líder de la Prisión!!

¡¡El Hombre menos masculino!!

¡¡El Héroe Clase S Rango 17!!

¡¡PRISIONERO LINDO LINDO!!

Prisionero: *con una pose* Hola guapos ♡

Todos los hombres humanos se sintieron incómodos al ver de quien se trataba.

Heimdall: ¡¡Está será una batalla de lo más curiosa!! ¡¡Qué la Octava Ronda del Ragnarok empiece!!

El Clase S más Débil

VS

El Dios de la Guerra más Débil

Esta pelea iba a ser una de las más...curiosas, ya que, en vista de todos, se estaban enfrentando los más débiles de la lista de participantes, el dios cuando fue reconocido por los demás dioses, solo lo recordaban como el hijo de Zeus, la decepción del Olimpo, entre otros apodos denigrantes, el Humano también era menospreciado, sobre todo por sus orientaciones.

Ya que cuando veía a un tipo guapo, no dejaba de acosarlo e insinuarle cosas, lo cual lo obligo a ser arrestado, ganándose su título de héroe, ambos son lo más bajo en sus bandos, los dos nunca han resaltado por encima de sus allegados, pero ahora, tenían la oportunidad de demostrar lo contrario. Ares saca una espada de su espalda y se lanza contra el Prisionero, quien esquiva el ataque y con la bola de prisión que tenía en su pie.

Golpea el estómago del Dios mandándolo unos metros atrás por el impacto, el Humano lanza un golpe en la cara del Dios desarmándolo y comenzando a golpearlo repetidas veces, a lo que Ares responde sosteniendo su puño, elevarlo por los aires y estrellar a Prisionero contra el suelo generando un pequeño temblor.

Prisionero: *tono* Oye, no seas tan duro conmigo.

Ares: Tsk, cierra la boca humano.

El Dios intenta aplastar su cara con su pie pero el humano lo detiene y lo lanza hacia una pared, en eso, cuando Ares iba a reincorporarse, Prisionero le atina un puñetazo al rostro que unde su cara en la pared de la arena para sorpresa de muchos espectadores, el héroe lo saca de ahí y le aplica presión con un abrazo.

Prisionero: Este es tu fin guapo, nadie ha podido sobrevivir a mi "Sentencia de Beso Profundo"

Ares: ¡¿A tu que?!

Prisionero: descuida, seré gentil contigo.

Ares: ¡¡Aaah, aléjate de mi!!

Ares le da un cabezazo al prisionero por reflejo de incomodidad extrema, acto seguido, da varios pasos hacia atrás alejándose de su oponente.

Prisionero: Oye no te vayas, me haces sentir solo *caminando hacia él*

Ares: ¡No te me acerques, humano cochino!

Prisionero: auch, eso hiere mis sentimientos.

Atenea: Jajaja, ay hermanito, y pensar que estás así después de lo de Apolo.

Hace varios años, cuando Ares era un niño, le encantaba pelear, al igual que su padre, de hecho, su primera víctima fue un lobo al que ahorcó con sus propias manos, cuando tenía como 10 años humanos, caminaba con su hermanastro Apolo, el cual ya comenzaba a mostrar sus mañas desde joven, ambos terminaron cayendo en una fisura natural al viajar por la Tierra.

Ambos terminaron atrapados ahí durante 10 días, días en los que Apolo no se le apartaba ni un centímetro, bromeando con él sobre sus gustos curiosos, cosa que hizo que el Dios Griego de la Guerra odiara a ese tipo de personas, pero sobre todo, provocó que esa incomodidad se apegara a su personalidad, volviéndolo en un dios ingenuo y soberbio solo por ser el Señor Griego de la Guerra.

Pero cuando Apolo hacia acto de presencia, Ares no le molestaba por ser arrogante, al menos no solo por eso, sino por culparlo de ser el causante de que tenga esa debilidad, esa poca firmeza al mostrar dominio sobre los dioses inferiores, ahora en este torneo, le tocó la mala suerte de enfrentarse al único humano de la lista que tiene esa actitud afeminada.

El Prisionero era para él un reflejo de Apolo, haciendo que su ira e irritación se vea incrementada y dirigida hacia su oponente. El Humano se lanza contra el Dios, quien en respuesta le atina un golpe en el rostro que tumba al prisionero empotrándolo contra el suelo, en eso, este con su bola de prisión le golpea en la cara a Ares rompiéndola en el proceso, en eso, le atina un fuerte puñetazo en el estómago al Dios, quien pierde aire por el impacto.

Provocando que su casco cayera de su cabeza obligándolo a retroceder.

Prisionero: *se reincorpora* Muy bien, veo que puedes resistir la mitad de mi poder, pero veamos que tal te va cuando libere todo mi ser.

Ares: ¿Cómo que la mitad de tu poder?

Prisionero: *pensando* señorita ¿Podría ayudarme un poco?

???: De acuerdo, Prisionero.

Alvitr, Décima hermana de las Valquirias

Alvitr: solo espero que nos puedas dar una victoria a diferencia de tu amigo robot.

Prisionero: *pensando* Descuide señorita, ganaremos y usted podrá volver con ese hombre guapo de la venda que estaba con usted en ese cuarto.

Alvitr: *ruborizada* ¡Si le dices a alguien te mato!

Prisionero: *pensando* a veces las mujeres me dan envidia, siempre consiguen a los hombres que quieren y nadie las juzga.

Alvitr: *sarcasmo* ¿Por qué será?

En eso, el Humano junta sus brazos haciendo poses a lo Sailor Moon para después ver como su ropa se rompe tras incrementar el tamaño de sus músculos con un brillo verde esmeralda.

Prisionero: ¡¡PRISIONERO LINDO LINDO...!!

¡¡ESTILO ÁNGEL!!

Ares: ¡¡Rayos, está desnudo!!

El prisionero lanza un golpe a Ares que lo manda contra la pared de las Gradas nuevamente, el Humano corre hacia él siendo esquivado por Ares, pero su rival atravesó de golpe la pared excavando dentro de ésta para sorpresa del dios, quien se dirige al centro de la arena, de repente, del suelo sale el Humano dándole un golpe en la quijada que lo tira al suelo.

Ares al intentar levantarse es detenido en el suelo por el pie del héroe presionando su pecho contra el suelo de la arena, pero el dios nota su espada a su lado así que la levanta y le hace un corte en la pierna al prisionero, obligándolo a retroceder, Ares se lanza contra el héroe y con su espada le genera varios cortes, a lo que el prisionero se cubre con sus brazos.

Para después golpear la hoja de la espada y atinarle un puñetazo al Dios en la cara para después seguir atacando con una tanda de golpes a Ares, este intentaba resistir los ataques de su adversario, pero igualmente comenzaba a ser empujado hacia atrás con cada impacto.

Hlook: Me puedes recordar ¿Porqué elegiste a este tipo para pelear contra Ares?

Geir: Simple Hlook, el Prisionero Lindo Lindo tiene habilidades y características que lo hacían perfecto para pelear contra Ares.

Hlook: pero que yo sepa, habían otros héroes en la Asociación aquella ¿No? Metal Bat, Tank Top Master, incluso ese engreído de Amai Mask sonaba mejor opción.

Geir: Metal Bat tiene gran poder físico, pero no podría ser elegido, por dos cosas, la primera, es que si se enfada pierde razón y solo se concentra en matar a su oponente, y segundo, porque su hermanita no quería verlo pelear, y créeme, ella es peor que tú cuando te enfadas.

Hlook: ¡¡Oye!!

Geir: en el caso de Tank Top, su fuerza es increíble, pero la verdad es que, analizando sus hazañas y comparándolas con las del prisionero...simplemente es inútil compararlas.

???: pues espero que ese tipo nos dé una victoria asegurada.

Qin Shi Huang

Antiguo Representante de la Humanidad

Qin: No es que me lo tome personal, pero si le pasa algo a Alvitr, juro que te haré pagar por eso, Geir.

Geir: descuida Qin, bajo los análisis, es imposible que el Prisionero pierda esta pelea.

Del otro lado...

Atenea: Padre Zeus, ¿Recuerdas el nacimiento de Ares?

Zeus: Oh pero claro, recuerdo que ese día fue de las pocas veces en las que me veía involucrado con la Humanidad de manera directa, cuando me dijeron que mi hijo ya había nacido no me lo esperaba tan rápido, es como si hubiera tenido prisa por salir.

Atenea: Pues para nada salió tan rápido solo para terminar así.

Zeus: .......Atenea...

Atenea: *lo mira* ¿Si, Padre?

Zeus: Sabes que soy bueno guardando secretos ¿No?

Atenea: Claro padre.

Zeus: Pues hay algo que nunca te conté sobre Ares, cuando lo vi de bebé...tenía los mismos ojos que yo tengo en este momento.

Atenea: *sorprendida* ¿En serio?

Zeus: Así es, en el momento que lo vi a los ojos, pude ver sin darme cuenta a mi yo del futuro, al instante tuve expectativas muy altas sobre él, creí que sería tan fuerte como yo algún día, y talvez derrotarme como yo lo hice con mi padre, ya sabes, por tradición.

Atenea: Lo recuerdo padre.

Zeus: Pero desde que cayó en ese pozo con Apolo...mis expectativas se habían ido, su valor y amor por la guerra parecían haberse esfumado de un instante a otro, no parecía ni poder soportar un golpe mío sin quejarse, pero a pesar de todo ese menosprecio, a pesar de toda posibilidad perdida, muy en el fondo esperaba que algún día, aunque fuera por solo un momento, que Ares demostrara ser un Dios como nosotros.

Humillación, menosprecio, burlas, apodos, bromas, todo eso fue sentido por Ares desde que salió de ese pozo, él nunca obtuvo buen aprecio por los otros dioses, si nunca se metían con él era porque era el Hijo del Dios Supremo recién nombrado como tal, pero dentro de él, siempre hubo una chispa, una fogata que nunca había sido encendida, el sentimiento que Ares nunca pudo mostrar en su máximo esplendor.

Con cada golpe del Humano, se le venían recuerdos de todas sus humillaciones y menosprecios.

"De todos eres el más inútil"

"Eres una Vergüenza para el Olimpo"

"Creí que serías mejor de lo que yo esperaba"

"Parece que los rumores solo eran exageraciones"

"De todos los Dioses de la Guerra, eres el peor de nosotros"

"¿Perdiste contra un humano en la Tierra? que decepción"

"Jamás serás digno de tu título"

"Hubiera sido mejor que Hera abortara"






























Ares: Ya tuve suficiente.

El Dios detuvo el puño del humano como si nada, para después levantar la mirada y...

Ares: *serio* ¡¡Ya tuve suficiente de todos ustedes!!

El Dios dio un golpe tan potente que mandó a volar al prisionero contra la pared del lado de los dioses, dejando ver que ahora este estaba sangrando de la nariz y había escupido un diente.

Heimdall: ¡¡Increíble amigos, tal parece que Ares ha despertado un poder desconocido para nosotros!!

Ares comenzó a caminar a la arena mientras desprendía un aura muy poderosa que dejó sorprendidos a los dioses presentes. Zeus al haber visto esto no pudo evitar su sorpresa, cosa que también afectó a Atenea.

Zeus: ¡¡Wojo, Ares ha despertado su Sangre!!

Atenea: ¿De que hablas padre?

Zeus: Cuando Hércules tomó la ambrosía que contenía mi sangre, Ares me dijo que en su mirada había notado la mía mientras peleaban, sus ojos solo mostraban un círculo azul en medio de un vacío de oscuridad, ya que Ares es mi hijo, posee mi sangre, y gracias a cualquier estimulación como la ira, es capaz de despertar el poder divino que le he heredado, esa debe ser...

La Ares's Fury

El Humano se reincorpora y se lanza contra el dios pero este de un golpe en el estómago pone a su oponente de rodillas debido al dolor recibido, Ares entonces lanza una ráfaga de golpes hacia el Prisionero.

¡¡PUÑOS FUGACES!!

Cada golpe iba con la fuerza de una bala de cañón, el héroe se cubría con sus brazos para intentar resistir tan potentes ataques para después ser mandado a volar de un golpe en el rostro, el humano estaba siendo apaleado por el Dios.

Prisionero: *pensando* Maldición, se ha vuelto más fuerte, debo darlo todo ahora.

Al instante, el prisionero corre hacia Ares, da un salto y al caer lanza una lluvia de golpes en contra del Dios de la Guerra.

¡¡ATAQUE ANGEL!!

Los golpes lograron generar un gran cráter hundiendo a Ares en el suelo de la arena, solo para tomar el brazo del héroe y atinarle una tunda de golpes en el rostro al Prisionero, quien no podía resistir semejante paliza, al mismo tiempo, el Humano tambien comenzó a recordar batallas pasadas, con los mismos comentarios de siempre, que él era raro por sus gustos y que les daba miedo a las personas que intentaba salvar.

Entonces recuerda su pasado, antes, era tal cual como cualquier hombre, hasta que conoció a un chico de su edad del cual terminó enamorándose, y él estaba seguro que ese chico sentía lo mismo, pero un dia, hubo un ataque de Monstruos en el instituto al que iban ambos, donde él...terminó muriendo tras ser comido por un monstruo, esto hizo que el prisionero se sintiera culpable, ya que al no estar con su amor, su amado no pudo salvarse.

Y en consecuencia, ahora pensana en estar siempre al lado de los hombres que le gustaban para que no sufrieran el mismo destino que su amado, ¿Pero que recibió a cambio? Burlas, insultos, exclusión de la sociedad, pero a pesar de eso, no dejó de cuidar a los ciudadanos, porque si no pudo proteger al hombre que amaba, al menos podria proteger a su raza de las amenazas que se presentan.

Entonces Ares iba darle otro golpe en el rostro, pero para su poca sorpresa, el Humano detiene el golpe mirando al Dios con una mirada seria.

Prisionero: *serio* Yo también me puedo poner serio ¿Sabes?

Ares: Pues hazlo humano, deja esa actitud poco varonil y pelea como hombre.

Ambos combatientes se lanzaron el uno contra el otro, antes, cuando habían empezado, las gradas estaban simplemente expectantes, pero ahora, poco a poco la multitud comenzaba con sus ovaciones hacia el Dios y el Humano, los Héroes también estaban apoyando a su compañero, en eso, todos notan algo peculiar...

Prisionero: *serio* esto termina ahora dios.

El tono, la forma de hablar del prisionero había cambiado, su expresión mostraba...masculinidad, no había ni una pizca de lo que era antes el prisionero, lo mismo para Ares, los dioses ya no veían ese dios ingenuo y soberbio, veían a un verdadero Dios de la Guerra, los golpes se hacían cada vez más fuertes, la sangre comenzaba a caer al suelo, el héroe y el dios no dejaban de golpearse mutuamente.

5 minutos después...

Ambos seguían dándose golpes mutuamente, en eso, Ares esquiva un golpe del prisionero y le atina un golpe en la parte izquierda de las costillas del prisionero haciendo que escupa sangre.

Ares: ¿Cómo puedes resistir tantos golpes sin caer?

Prisionero: He aprendido a resistir el dolor.

Ares: Pues no más, este es tu fin.

Ares la atina un golpe en el estómago al humano, uno en el rostro y después una lluvia completa de estos, en eso, por un momento, vio la cara de su hermanastro Apolo en la cara del humano, a lo que Ares dice...

Ares: Finalmente, mi venganza será consumada.

El Dios lanza un golpe que es detenido por el humano, quien se deja caer para mandar a volar a su oponente con una patada de sus piernas, para después embestir al Dios contra la pared de las gradas pero Ares se lo quita de encima con un golpe a dos manos para después mandarlo a volar de una patada, el Humano se reincorpora y lanza un derechazo, pero se sorprende al notar como su brazo fue cortado por la espada de Ares.

El cual vuelve a lanzar un tajo generándose un gran corte al humano, entonces Ares suelta su espada y de un golpe....atraviesa el corazón del humano con su brazo derecho, todos se quedaron callados por esto, el prisionero intenta ahorcarlo con su brazo restante, a lo que Ares saca su brazo del cuerpo del Prisionero, quien cae de rodillas al suelo.

Ares: Luchaste bien humano, lo admito.

Prisionero: no lo digas en pasado, aún no he oído la campana.

El humano se lanza contra el dios atinandole un potente izquierdazo que hace sangrar al Dios de su nariz para su sorpresa, el Humano podía seguir de pie a pesar de ya no tener corazón.

Prisionero: ¡No importa si me quitas el corazón, el amor por la Humanidad jamás se irá de mi alma!

Los Humanos comenzaron a alentar al Héroe, su voluntad si que era fuerte, ambos peleadores siguieron peleando, de repente, los ojos de Ares comenzaron a perder su forma, volviendo a su color normal, quien al darse cuenta de esto recibe un golpe en la cara que le saca algunos dientes al Dios, pero aún así, este seguía atacando, la pelea continuaba hasta que el cuerpo del humano comienza a quebrarse como cristal.

Alvitr: *en su mente* Se acabó, perdimos.

Prisionero: ¡No, aun no termino!

El humano seguía atacando con un solo brazo estando igualado con el Dios, el cual al darle un golpe al humano, este soltó trozos de cristal de jade por el impacto.

Ares: estás muerto, ¿Porque sigues peleando?

Prisionero: Porque es lo que un hombre debe hacer, ¡Luchar hasta la muerte!

El humano seguía golpeando, golpeando y golpeando, los humanos se dieron cuenta de que su derrota era inevitable, algunos le decían al prisionero que se detuviera, que había hecho suficiente, pero él no les hacía caso, sus piernas comenzaban a romperse junto con su abdomen brillando de un color verde jade, su puño aún no se agotaba, seguía firme a defender a su raza.

Ares seguía golpeando pero notaba que sus golpes no eran lo que afectaba al humano, él seguía golpeando luchando no solo contra el dios, sino también con su propia vida, su cuerpo se rehusaba a ceder ante la muerte, en eso, siente un...¿Abrazo?

Ares: *abrasando al humano* ya detente.

Prisionero: ¿Y ahora que haces?

Ares: trato que tu muerte sea menos dolorosa.

El cuerpo del humano comenzó a verse envuelto por ese brillo verde con más intensidad, en eso, el Humano corresponde al abraso para después...atravesar el pecho del dios con su brazo, ares escupe sangre con una sonrisa en el rostro.

Ares: Es justo, te la debía.

Prisionero: jeje, ahora estamos a mano.

Finalmente, el Prisionero más Fuerte...desapareció en polvo Cósmico.

Geir: *con lagrimas* ¡Hermana Alvitr!

Qin: *mira al suelo con un aura seria*

Heimdall: ¡¡El humano ha caído, el Ganador de la Octava ronda es Ares!!

Los dioses: ¡¡Bien hecho Ares!! ¡¡Así debe ser un dios de la Guerra!! ¡¡Enorgulleciste al Olimpo!!

Ares comenzó a retirarse de la arena hacia el pasillo, al adentrarse, se encontró con Qin Shi Huang.

Ares: Oh, estas aquí.

Qin: *serio* si, así es.

Ares: ¿Vienes a vengarlo?

Qin: No exactamente.

Unos momentos después...

Geir: *con un moretón y lágrimas* estupido Qin, como si no me doliera perder a mi hermana.

En eso, la menor de las Valquirias nota como el mencionado regresaba al sitio...con su ropa manchada de sangre.

Geir: *sorprendida* ¿Qué hiciste?

Qin: .....solo me desquite un poco.

Continuará...

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