Cuarta Nevada
Han pasado tres semanas y por primera vez después de tanto tiempo NamJoon estaba feliz, contento consigo mismo desde que había tenido que despedirse de sus padres y adaptarse el solo al bosque. Cuidar de alguien más lo tenía alerta por sobre cualquier cosa aunque sabía que nada malo los rodeaba, lo hacía sentirse vivo de alguna forma, menos solo y abandonado.
Seok Jin había llegado a su vida para convertirla en una repentina lluvia de emociones, aquellas que creía se habían dormido. Su compañero le estaba devolviendo las esperanzas, su perezoso lobo que antes dormía todo el tiempo ahora se regocijaba en su pecho, levantándose antes y siempre atento a las palabras del omega que le pedía cosas dulces, obediente siempre le llevaba lo más dulce que encontraba.
Y Seok Jin las recibiría lleno de emoción.
Para ese entonces el alfa se cuestionaba como podría empezar a mostrarle a su compañero la vida, por que si bien sentir el agua fría por las mañanas o leer durante la tarde eran actividades que disfrutaban, el omega podría esperar más. Pero ¿con qué empezar si el mundo era tan grande y maravilloso? Tantas cosas y tan pocas ideas.
Esa mañana el moreno se esmeraba en cortar cada leño grueso que había conseguido, detrás de la casa en lo que podrían llamar patio trasero, por otro lado estaba el omega tejiendo o haciendo el intento, había visto a NamJoon hacerlo y quiso intentar aunque sus delgados y largos dedos estuvieran cubiertos por pequeños vendajes ante sus torpes acciones con la aguja.
ㅡHan pasado ya dos semanas y el invierno continúaㅡ murmuró al detenerse por un respiro.
Extrañamente la nieve seguía presente, los lagos ya no tenía escarcha pero su agua seguía estando helada, las aves habían llegado pero muy apenas salían de sus escondites calientes, incluso las ardillas y zorros se mantenían enrollados en sus madrigueras.
Seok Jin dejó la supuesta bufanda que estaba tejiendo y observó a NamJoon.
Le gusta mucho hacerlo, observar detenidamente sus rasgos; cabello, ojos, labios y sonrisa, habían dos puntitos en sus mejillas que el omega presionaba con curiosidad causando en el gran alfa una sonrisa encantadora que hacía desaparecer sus ojos. Para Seok Jin eran los botones de la felicidad.
Sintiendo la mirada del omega sobre él, NamJoon volteó para saludarlo con una mano a pesar del metro y medio que los separaba.
ㅡ¿Estás cansado ya, alfa?
ㅡ¡Para nada! Pero tomar energías no viene malㅡ menciona señalando su pequeño tarro, pero cuando lo llevaba hacia su boca no cayó nada.
ㅡYo te traeré agua, espera un momento.
NamJoon le agradeció dándole el tarro y rápidamente entró a la casa para llenarla otra vez.
Había un balde donde tenían agua filtrada, la que usaban para beber, tomó un cucharón y lo llenó un poco pero antes de salir se dio cuenta de las criaturas que se escondían detrás de los árboles, otros en las nieves y uno que tiró las hojas que habían juntado el día anterior para jugar en ellas.
Bufó, entrecerrando sus ojos para ver al duendecillo de cabello largo y blanco verlo por el agujero de un tronco seco.
ㅡPadre Invierno ¿por qué el espionaje? El alfa me cuida y yo a élㅡ lanzando una pregunta al viento susurró, pero sus ojos se abrieron en grande al ver una rama caer directo en la criatura ㅡ¡Cuidado Mudryy!
Una carcajada escapó de él al presenciar como el ser salía del tronco refunfuñando algunas maldiciones, regresó sus pasos para ver a NamJoon apilado correctamente los leños y le entregó el agua. Aprecio la manera en la que el agua bajaba por su garganta, el sudor perlaba su piel de una forma muy atractiva y quiso tocarlo, el alfa, el hombre la causaba curiosidad.
Seok Jin tenía la apariencia de un ser humano común pese a su belleza inusual y otros atributos físicos, después de todo era hijo de dos grandes líderes en la tierra, verse así mismo no se comparaba a apreciar a otro individuo.
Porque cuando veía su reflejo en aquella burbuja solo veía a un ser de luz sin ninguna forma concreta, ni en sus sueños lograba darse una imagen.
Pese a eso, ahora tenía una identidad, el considerarse un omega era algo que había hecho por elección propia al verse acompañado por un alfa, además él sería su pareja, su omega, en algún momento como dictan las tradiciones. Su ojos brillaron en un preciso púrpura ante esa idea y le regaló una enorme sonrisa, misma que NamJoon correspondió al instante.
ㅡNamJoon ¿saldremos hoy?
ㅡ¿Acaso quieres salir más allá del huerto?ㅡ el azabache asintió.
ㅡAntes mencionaste un lago, quiero saber cómo es.
ㅡUh, no está demasiado lejos pero se mantiene helado aún así creo que podríamos conseguir algo de pescado.
ㅡ¿Entonces iremos, saldremos?ㅡ volvió a preguntar con ilusión.
NamJoon asintió y después señaló los leños partidos que tenía aún desordenados.
ㅡVoy a ordenarlos primero e iremos. Puedes adelantarte y colocarte tus botas antes, la nieve continúa y puede ser peligroso.
El azabache quiso decir algo contra eso pero no lo hizo, obedeció y fue por las botas para ponerselas, también tomó un bolso que NamJoon le había dado. El alfa ingresó tiempo después y se colocó sus botas, tomó una canasta con tapadera bastante alta y otra más plana con algunos agujeros, incluso metió un segundo cambio de ropa.
ㅡ¿Por qué llevas más ropa?
ㅡCuando voy de pesca peleo mucho con los peces para atraparlos, termino sumergido en el agua con la ropa húmeda.
ㅡOh, eso suena agradable ¡Yo también quiero pescar!
NamJoon salió finalmente de la casa con el omega a su lado, observó el cielo y también verificó el viento, luego a su compañero que veía con confusión sus movimientos.
Comenzaron a caminar por uno de los senderos cuesta abajo, era temprano así que regresarían antes de que oscureciera.
ㅡLa próxima vez, cuando el sol esté presente, voy a enseñarte así que hoy solo puedes observarme ¿te parece bien?
ㅡCreo que no le agrado mucho al padre Sol.
La fuerza de un alfa parecía ser inmensa, así como su inteligencia y vista porque Seok Jin no fue capaz de ver la gran rama que estaba a punto de golpear su frente.
ㅡ¿Por qué lo dices?
ㅡNo lo he visto desde que aparecí.
Ante el decaído animo de Seok Jin el moreno decidió tomar su mano, entrelazando sus manos para seguir avanzando y solo así el omega olvidó esa sensación.
ㅡNo siempre seremos aceptados por todos, tampoco amados, a veces es suficiente con tener a una sola persona y otras a ti mismo.
Las palabras del alfa le dieron calma. Era verdad, él tenía a sus padres, al brujo, a las criaturas y ahora también al alfa. Antes de continuar detuvo sus pasos y le dirigió la palabra.
ㅡNamJoonㅡ el mayor se detuvo para prestarle atención ㅡDesde ahora me tienes a mi, alfa.
El corazón del alfa se aceleró, junto a su lobo que agitaba con gozo su cola mientras ladraba contento.
꒰ ❄️ ꒱
¡Gracias por leer!
Hasta el momento ¿tienen alguna pregunta? Puedo responderlas si es así.
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