—No puedo decirle —

—Era el padre de ese niño. Merece saberlo — pero bartra no estaba convencido, sabía que sí llegaba a decir esa información meliodas se iba a volver loco de remate. Iba a sufrir tanto que sin duda podría llegar a ponerse violento o peor, podría ir y matar a aquel que asesino a su amada pese a no saber quien fue —Los policías estarán investigando hasta dar con el culpable. Por el momento sólo pueden velar y enterrar el cuerpo, mire yo no conozco a ese chico pero aunque se ponga mal merece saber que su novia estaba embarazada — el viejo asintió cabizbajo, su pecho a ardía  con tanta intensidad que sentía que iba a morirse también. Aun recordaba a esa pequeña niña de ojos bicolores brillantes que le sonreía mientras le pedía cargarla; y ahora ella estaba tendida en una cama mientras la preparaban para su velorio.