Al día siguiente Chelsy entró al salón de Literatura con una sonrisa en el rostro, alzó su mano en forma de saludo hacia el moreno, quien bloqueó su teléfono al verla acercándose.

— ¿Por qué de tan buen humor? —preguntó curioso él, se acomodó en su asiento y pasó una mano por su cabello para arreglarlo. Chelsy se encogió de hombros.

—No lo sé, Calum, simplemente estoy de humor —dijo tomando lugar al lado de su amigo— Otra vez temprano, ¿Y eso?

El moreno chistó los dientes e hizo un mohín.

— ¿Recuerdas a Mikaela? —frunció el ceño y la castaña asintió algo divertida—, Ella no sabe que tengo este período de clases y es algo grato pasarla solo.

—Deberías decirle que es demasiado pegajosa.

—Eso la lastimaria —dijo con honestidad, Chelsy le miró seria y se encogió de hombros, iba a comenzar a hablar sobre la lamentable situación de su amigo, pero la voz del Sr. Teller diciendo buenos días la distrajo, haciendo que volteara a ver hacia alfrente.

Se sorprendió al ver a Luke detrás del profesor, su respiración se cortó al verle ahí, luciendo tan bien. Su cabello era un desastre de rulos, se notaba que no lo había peinado. Chelsy hubiese jurado estar muerta sino fuese porque Calum comenzó a hablarle.

— ¿Crees que me vería bien con el cabello largo? —cuestionó algo dudoso, Chelsy volteó a verlo y quiso soltar una carcajada, pero se contuvo y solamente negó rápidamente—, Sí, luciria fatal.

Ambos estaban observando al rubio hablar con el maestro. Luke parecía confundido con todo lo que le decía el profesor.

Ahí fue cuando sucedió, la mirada de ambos se dirigió en ellos, el corazón de Chelsy se detuvo por cuestión de segundos, no podía decir si estaba respirando adecuadamente. Sus ojos conectaron con los azules del rubio por un momento, pero tan rápido cómo sucedió, todo terminó porque la atención era hacia Calum y no hacia ella.

—Hood —llamó el Sr. Teller, quien sostenía su libro de registro académico. El moreno se levantó de su asiento y pasos apresurados fue hacia el escritorio del maestro, justo al lado del rubio.

Chelsy no podía creer lo que estaba pasando. Trató de enfocarse en lo que decían y después de entender lo que estaban hablando, jamás había sentido tanta envidia en su vida.

— ¿Quedó entendido todo? —le dijo el maestro al rubio, quién miró al moreno y luego al hombre, parecía algo perdido.

— ¿Tenemos que hacernos amigos? —Preguntó Calum con el ceño fruncido, Luke agradeció que hiciera esa pregunta, él seguía tratando de entender su asignación todavía.

El maestro se encogió de hombros y abrió su libro de registro de notas.

—Si lo ven necesario. Joven Hemmings, yo solamente le estoy pidiendo un ensayo donde refleje la esencia del estudiante que usted eligió de la lista de este grupo —volvió a explicar el hombre algo cansado, Luke asintió, eso lo tenía claro, pero aún estaba algo incómodo y extrañado—, Usted dijo el número veinticuatro y bueno, el joven Hood es ese.

— ¿Qué pasa si él no colabora? —cuestionó el rubio algo preocupado señalando al otro, este le vio mal y se cruzó de brazos.

—Soy un buen tipo —se justificó Calum a la defensiva. Luke le vio de reojo y dirigió su atención al profesor.

Chelsy vio cómo el Sr. Teller se apartó de ambos para ir hacia la pizarra con tiza en mano, la clase estaba a minutos de comenzar y el cuchicheo que venía de atrás se podía escuchar hasta que el maestro se dio la vuelta y escudriñó toda la sala haciendo que hubiese silencio automáticamente.

La castaña regresó la mirada al rubio y este estaba apuntando algo que le estaba diciendo Calum, en su rostro se reflejaba algo de frustración y cansancio.

Ella hubiese dado todo por estar en el lugar de su amigo, eso solamente era otra señal de que ella y Luke jamás de los jamases llegarían a ser algo.

El rubio le dio una media sonrisa de despedida al Sr. Teller y a Calum antes de salir del salón. El moreno regresó a su asiento y miró a la castaña divertido.

—Me odias —le susurró a Chelsy y esta le vio mal y enfocó su mirada en el pizarron—, Prometo no coquetearle —este alzó su menique a la altura de su rostro tratando de no soltar una risa.  La castaña negó divertida.

No era una sorpresa para ninguno de sus amigos que a ella le gustaba Luke Hemmings.

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sorpresa, es una fanfic cake.