Lizzy White.

— Bien hermosa ¿y tú? — le responde el magnate a la hija de la grandísima...

¡Respira Lizzy, respira!

— Estupendo... — responde la famosa Leyna Heber.

En serio creí que quizás solo quizás, mi día iba ser menos terrible que el de ayer, porque aunque lo pase increíble en el club, ¿para qué negarlo? Me folle a dos extraños que parecían dioses de una película griega, tuve una increíble primera vez pero no sirvió para absolutamente nada porque en cuanto me quede sola sobre la puta cama en los únicos besos que podía pensar eran en los suyos, en las únicas manos que pedía y deseaba sentir sobre mi cuerpo eran las suyas y el muy imbécil estaba con esta...

— Señores ella es Leyna Heber una de las mejores artistas del país... — la presenta como si fuera un puto trofeo y lo mejor que le ha pasado en la vida.

¿Era mucho pedir que al despertar no lo recordara, o que al menos todo hubiese sido una maravillosa, perfecta y deliciosa fantasía creada por mi subconsciente? Ni siquiera la entretenida platica que tuve con Aníbal logro distraerme como el día anterior porque el chico bota la baba por el magnate y lo único que hicimos fue hablar de él, no voy a negar que me reí muchísimo porque venga, saber que hay hombres sintiendo lo mismo que yo por Kai no deja de parecerme divertido.

— Él es Eric Bonner... — comienza a presentarla y yo me pierdo en esa puta imagen de el en mi oficina.

Verlo apoyado en el borde del escritorio, sus brazos manteniéndolo en equilibrio, sus piernas extendidas y cruzadas al frente, dándole ese aire de dueño y señor de todo lo que está delante de él, ese jodido traje a la medida de tres piezas que lo hace lucir como un gánster de películas, porque hoy el magnate no luce extremadamente elegante, no, hoy tiene un aire rebelde pero sofisticado, con los primeros botones de la camisa desabrochados y sin corbata, su cabellos peinado en varias direcciones como si hubiese estado pasando sus manos por el constantemente, y esa maldita expresión moja bragas con la que me vio...

— Y ella es Elizabeth White nuestro enlace con la prensa... — me presenta sacándome de la burbuja de admiración mental en la que me encontraba y recordándome que justo en ese instante lo quiero muerto.

— Ah Elizabeth... — dice la muy perra de Leyna, como si recordara que hablo conmigo ayer por la noche — mucho gusto — tiende su mano en mi dirección y le regalo mi mejor sonrisa.

— Un gusto... — miento con descaro posando mis ojos en el magnate que sonríe con malicia.

¡Bastardo!

En serio mi mañana hubiese sido perfecta con tan solo esa imagen de ese hombre allí, pero no él tenía que preguntar y recordarme lo que no podía tener acabando con la magia y el encanto. Como si fuera poco cuando me envía a buscar a Eric la zorra de Colette también está aquí por lo que ahora no es una sino dos mujeres a su alrededor. Bendita suerte que tiene el jodido magnate.

Leyna inicia una plática de lo más fluida y amena con todos, mientras yo me sumerjo en mis pensamientos y finjo trabajar en algo en la Tablet.

— Elizabeth — me llama la imbécil — ¿conoces por casualidad a Paul Prentis? — desvió mis ojos de la pantalla con pesar y suspiro, antes de tener que enfrentarla.

— ¿El dueño y editor general de la revista Idea? — pregunto con una media sonrisa, ella asiente.

— Si es mi jefe...— le aclaro y ella abre sus ojos como platos.

— ¿Trabajas en la revista idea? — pregunta sorprendida girándose para mirar a Kai que asiente — amor, no me habías dicho que por fin te habías decidido a permitirles llegar a ti... — ¿con amor y demás? Lizzy respira si estrellas su carita en la mesa joderas la superficie de esta y esta bonita ¿no? luego se gira y vuelve a verme.

— Paul es un amigo de la familia — comenta con una sonrisa y yo solo detesto la forma en que acaba de llamarlo amor y la poca importancia que tienen sus comentarios.

— Bueno pasaron muchas cosas para que eso ocurriera... — comenta Ajax en tono divertido mirándome con una sonrisa maliciosa.

— ¿Ah sí? — pregunta con curiosidad posando sus ojos en Ajax.

— Si, cosas muy locas de hecho

— Cosas de las que podemos hablar en el almuerzo ¿qué les parece? — los interrumpe el magnate y yo quiero ir hasta el con una enorme sonrisa y arrancarle la cabeza para no tener que ver la suya.

— Bueno Kai nosotros tenemos que irnos, debemos resolver algo antes de regresar al trabajo 3 comenta Eric poniéndose en pie, Colette lo imita y mira mal a Leyna con descaro.

Ambas se desafían con la mirada y sin si quiera despedirse Colette sale de la sala de juntas dejándome completamente sorprendida, Eric ríe negando con la cabeza y se disculpa con Leyna que le resta importancia alegando que no es monedita de oro para caerle bien a todo el mundo.

Yo también me pongo en pie con la intención de salir huyendo pero ¿Cómo no? El magnate como siempre cambiando mis planes.

— Elizabeth almuerza con nosotros... — sin formalismos, sin preguntar... una puta orden como con todo.

Elevo mis ojos para asesinarlo con ellos, pero el muy hijo de puta ni siquiera está mirándome, en este momento está concentrado en algo que le murmura la... respira Lizzy, respira. Entonces por un instante sus ojos se desvían a los míos y la comisura de sus labios tira ligeramente con la intensión de soltar una sonrisa, en serio lo odio, lo odio. Me siento infantil en este puto instante pero, pero respiro profundo una vez más, mientras los veo recoger las cosas para salir.

— ¿Almorzaremos aquí? — pregunto con curiosidad y el magnate me ve divertido

— No afuera, ve por tus cosas... — vuelve a ordenarme y necesito hacer un esfuerzo sobre humano para no mandarlo a la mierda.

Respiro profundo una vez más ignorando la forma en que Ajax sonríe divertido y Volker me ve con seriedad. Me giro y salgo de la sala de juntas dejándolos solos, cuando estoy en el pasillo la voz de Colette hace que me detenga.

— ¿Quién coño es esa? — Pregunta exasperada — ya se me hace bastante complicado llamar su atención como para que ahora se atraviese esta idiota... — mi ceño se frunce y me acerco a la puerta de la oficina de Eric donde ambos están conversando.

— Mi ángel, tranquilízate... sea quien sea solo es una pequeña distracción y si Kai no cae contigo, aún tenemos muchas otras opciones, te dije que podíamos ser más sutiles — esas palabras encienden mis alarmas y me acerco aún más a la puerta para escuchar mejor

— Así demoraríamos más... — responde Colette en un susurro ronco, casi un jadeo.

Cuando asomo mi rostro por el resquicio de la puerta, Eric tiene sujeta a Colette del cuello, y con su mano libre esta...

¿Oh mierda este hombre... pero que mierda pasa con estos dos?

Eric acaricia la entrepierna de Colette que tiene los ojos cerrados y la boca entreabierta.

— El tiempo es lo de menos mi ángel, pudiste haber elegido a Volker, incluso Ajax luce mucho más accesible que Metzler, pero no... — hace una pausa y lame su labios inferior — te encantan los retos y te fuiste por el pez gordo — ella sonríe con picardía y luego jadea, la mano de Eric comienza a moverse con fuerza en su entrepierna y ella comienza a gemir

>> El reto se ha hecho más grande mi ángel y sé muy bien que vas a encontrar la manera de llevar acabo lo que tienes que hacer — ella ríe y jadea al mismo tiempo mientras el intensifica los movimientos de su mano y luego comienza a besarla con pasión.

Yo doy un paso atrás sin poder creer lo que acabo de ver y lo que ellos acaban de decir, doy algunos pasos lejos de la puerta por temor a que Eric vuelva a descubrirme espiándolo y echo andar hacia mi oficina, cuando entro abanico mi cara y respiro profundo, camino con la cabeza hecha un lio y me sobresalto cuando me giro y veo a Azhar tendida en mi sofá con una Tablet muy despierta.

Sus ojos se desvían de la pantalla y me observa un instante luego sonríe y desciende la Tablet dejándome ver su rostro completo, no puedo evitar reír, lleva una paleta en la boca.

— Me gustan tus botines... — comenta sacándosela la paleta de la boca y rio.

— Gracias están a la orden... — ella asiente y luego me ve expectante.

— Genial... — hace una pausa y continúa mirándome con el entrecejo fruncido

— ¿Qué pasa Azhar?

— ¿Tu y Kai están follando? — suelta dejándome de piedra y sorprendida

— ¿Que?

— No porque si están haciéndolo, tienes que decirme como coño lo lograste llevándote de la mierda con él. Porque quiero follarme a Volker... — comenta y yo suelto el aire que estaba conteniendo para luego largarme a reír — no te rías Lizzy en serio tienes que decirme como lo hiciste — camino hasta ella y me siento a su lado.

Cuando le doy un vistazo a lo que hay en su Tablet no entiendo una mierda solo alcanzo a reconocer una cadena de AND, ¿en qué rayos estará trabajando Azhar?

— Azhar no he follado con Kai

— ¿Pero a que te gustaría?, esta divino Lizzy esta mañana lo vi cuando vino a buscarte y Dios... — en cuanto suelta eso mi ceño se frunce.

Azhar suele venir muy temprano a mi oficina para descansar y suele irse mucho antes de las 7 am para que nadie la vea, incluyendo el magnate.

— ¿A qué hora fue eso? — pregunto con curiosidad y ella suspira

— 7:30 me dijo... pero ¿si lo has visto hoy? — rio porque obvio que lo vi y entiendo el efecto que causa verlo.

— Si vengo de una reunión con el

— Joder que suerte tienes, en serio me cortaría un brazo por poder pasar más tiempo con esos tres solo para verlos... — vuelvo a reír y niego con la cabeza

— ¿y bien, que haces aquí? — le pregunto cambiando el tema, es raro que este aquí.

— Demasiada testosterona en el laboratorio y todos sintiéndose intimidados por mi tamaño... — suelta con cansancio y sonrió

No ha sido fácil para ella, la mayoría de los científicos aquí son hombres mayores que tienen varios años trabajando para Kai y Azhar solo es una nena y hace lo que muchos de ellos no.

En ese momento la puerta se abre y Volker aparece, en cuanto mis ojos se desvían a él, me sonríe, Azhar lo ve y por supuesto que suelta una de las de ella.

— Puta madre que lo pario... — suelta Azhar parándose de un salto y devorándolo con los ojos, Volker empieza a reír de inmediato y mete sus manos en los bolsillos de su pantalón sin dejar de mirarnos.

Ver reír a Volker es algo que se disfruta porque casi siempre esta serio y tiene una sonrisa encantadora, de esas que te hacen querer mirarlo por horas.

— Hola para ti también Azhar

— Ah sí, si hola, lo siento es que tu... — vuelve a verlo de pies a cabeza y se abanica la cara con la Tablet — ¿hace calor aquí verdad? — Volker y yo reímos mientras ella mira de uno al otro

— Elizabeth estamos esperándote — comenta Volker sin dejar de reír recordándome que debía venir por mi abrigo y mi bolso.

— ¿Vas a almorzar con él? — pregunta Azhar como una niña cuando quiere algo y no puede tenerlo.

— Y con Ajax y Kai si... — le confirmo y ella suspira y mira al suelo

— En serio no es justo que tú te los goces sola — vuelvo a reír mientras Volker niega con la cabeza y se acerca a nosotras.

— ¿Qué dices si nos tomamos un café en la tarde? Si no recuerdo mal te gustan con bastante azúcar — los ojos de Azhar se abren como platos y no puedo evitar reír por el lindo gesto que acaba de tener Volker.

— ¿Es en serio? — pregunta divertida y Volker se encoge de hombros

— Lo pasamos muy bien juntos ¿no? — pregunta sonriendo y Azhar se derrite

— Bendita suerte la mía, claro entonces nos vemos más tarde... — echa andar y se detiene unos pasos más allá — creo que ya no necesito esos consejos para follar — suelta girándose dejándome con la boca abierta y a Volker sorprendido.

— Azhar es...

— un personaje... — completa Volker por mí mientras reímos.

Busco mi abrigo mientras él me espera en la puerta, cuando me acerco a él, me tiende su brazo y sonrió divertida tomándolo. Cuando caminamos por el pasillo ha retomado ese semblante serio que lo caracteriza. Volker me encanta, es divertido, misterioso y además súper discreto, cosa que en este momento quizás no me ayude con lo que estoy por preguntar, pero por cosas del destino es el quien habla primero.

— ¿Cómo van las cosas con tu prometido? — pregunta haciéndome respirar profundo

Hora de mentir.

— Todo resuelto... — sonrió y el me ve un instante suspicaz

— ¿Y qué pasa con Kai? — pregunta directamente y yo me detengo

— ¿Cómo que, que pasa con Kai?

— Elizabeth no soy quien para juzgarte, de hecho soy la personas menos adecuada para hacerlo y es cosa tuya lo que haces o dejas de hacer, pero creo que es obvio para todos al menos para Ajax y para mí que entre ustedes suceden cosas ¿no? — desvió mis ojos porque no creí que fuera a tener esta conversación con Volker — ósea lo que quiero decir es que resolviste todo con james, sabes lo que quieres y Kai sale de la ecuación ¿no? — respiro profundo sin mirarlo y asiento, el imita mi acción y toma mi mentón para elevarlo y así podamos vernos a los ojos.

— ¿Quién es Leyna Heber? — pregunto sin poder contenerme y el suspira

— Su ex... — responde sin más y yo quiero morirme porque confirma todo lo que he estado pensando y asumiendo este tiempo

— ¿Están juntos otras vez? — el duda un instante y se encoge de hombros

— No lo sé, pero si lo estuvieran no importaría porque tú elegiste a James ¿no? — joder con Volker, me cae bien pero el bastardo sabe cómo hundir el dedo en la llaga y hacerte sangrar.

— Claro...

— Bueno andando deben estar esperándonos... — el inicia a caminar otra vez y yo no puedo hacerlo — ¿Qué pasa? — suspiro llenándome de valor para enfrentar lo que sea que vaya a suceder en el puto almuerzo.

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— En serio que llamarlo idiota en una rueda de prensa, válgame dios que locura... — suelta Leyna riendo divertida, mientras tomaba su copa de vino, sonreí sin ganas y mire al magnate que parece estarlo pasando en grande.

— Bueno gracias a esa locura ahora es parte de nuestro equipo... — comento Ajax riendo — y pues después de muchos roses ahora tienen una sana relación ¿no es así?

— Por supuesto... — afirmo el magnate sonriendo de lado mientras rascaba su barba.

— Si, ha sido una experiencia increíble — murmuro apartando un mechón de cabello y colocándolo detrás de mi oreja — por suerte Kai y yo logramos resolver nuestras diferencias y hemos logrado ser un buen equipo — agrego sonriendo.

En ese momento un camarero se acerca a nosotros y coloca una copa de vino delante de mí.

— Se la envía el hombre de allá — todos los ojos en la mesa están centrados en mí, frunzo el ceño y me giro para ver de quien se trata. En cuanto lo veo mis ojos se abren como platos.

Ángel eleva su mano y me saluda desde lejos, imito el gesto y él se pone en pie, en seguida hago lo mismo y me disculpo para ir a saludarlo. No sin antes mirar sobre mi hombro, como el magnate se tensa considerablemente. Cuando alcanzo a Ángel este me estrecha en un fuerte y cálido abrazo.

— Ángel, que casualidad encontrarte aquí... — comento separándome de él.

— Almuerzo con mis padres, estaban algo intensos porque desde que regrese no les había dedicado tiempo... — me explica y rio

— Por supuesto un modelo de tu clase... — bromeo y el vuelve a reír.

— Te ves increíble... — comenta sujetando una de mis manos y haciéndome girar, llamando la atención de varias personas incluyendo la de sus padres, que inmediatamente lo miraron mal.

Pero Ángel como siempre alocado y despreocupado ignoro a todos,

— Gracias, tú te ves aún mejor — ríe divertido y niega con la cabeza.

Luego posa sus ojos a mi espalda y señala detrás de mí.

— ¿Amigos? — me giro y puedo ver como Ajax, Volker y Leyna conversan entretenidamente pero el magnate me mira con seriedad

— No en realidad son mis jefes y la ex de uno de ellos... — le explico a Ángel que ríe divertido

— Vaya que complique... — comenta y yo frunzo el ceño

— ¿Qué cosa?

— Pensaba secuéstrate para tomarnos algo, pero si estas con tus jefes eso será complicado ¿no? — sonrió y asiento.

— Sí, pero dame tu número y quedamos para otro momento — saco mi teléfono y anoto su número — bueno mejor regreso antes que quieran despedirme por sociabilizar de ma... — Ángel ríe y rodea mi cintura con sus fuertes y tatuados brazos, pegándome a su duro cuerpo.

Madre mía, este hombre ha crecido bastante.

Cuando me libera deja un par de besos en mi mejilla y regreso a la mesa donde el ambiente parece estar un poco cargado. Cuando me siento el magnate me fulmina con la mirada y sonrió de lado, sabiendo que quizás no le ha gustado nada el acercamiento con mi amigo. En ese momento mi teléfono suena y vuelvo a sacarlo, es un sms de Ángel, rio sin leerlo y me giro para verlo divertida, el me guiña un ojo y regresa a la conversación con sus padres.

Ángel: ¿Por qué nunca tengo la suerte de encontrarte en un lugar menos concurrido? Estas hermosa Lizzy...

Sonrió ante el halago y al mensaje implícito entre líneas, Ángel fue mi última relación antes de empezar con James y si fue bastante alocada, hubo mucho sexo de por medio pero nada tan intenso como lo que tengo con el magnate. En cuando pienso en eso desvió mis ojos para verlo y allí esta esa puta mirada que hace que mi cuerpo arda y explote en cuestión de segundos. Humedezco mis labios sin dejar de mirarlo sintiendo como esa conocida y exquisita tensión sexual se hace presente.

El respira profundo y yo me olvido de donde estamos y quien nos rodea, no puedo apartar la mirada, sus ojos detallan cada centímetro de mi rostro, como si deseara grabar cada poro de mi piel, sus labios se entre abren y esta vez es el quien humedece sus labios, para luego mordisquear apenas el inferior, ese gesto tan pequeño me hace sentir tan necesitada de él, con unas ansias locas de arrasar con todo lo que está sobre la mesa, subirme a ella gatear hasta él y sentarme ahorcadas sobre sus piernas, sacar su polla y dejar que me penetre duro.

Un leve jadeo se me escapa en cuanto mi cabeza se imagina la escena, cierro mis ojos y respiro profundo, Dios, esto es imposible, ¿Cómo se supone que trabaje con él a diario? Si mi estúpido cuerpo lo quiere a diario para mí. Kai respira profundo y se remueve en la silla acomodando su espalda contra el espaldar, toma la copa de vino y da un sorbo antes de dejarla nuevamente sobre la mesa, sus movimientos, lentos y calculados me hace desearlo aún más, es un bastardo. Trago duro y me pongo en pie de un golpe.

— Necesito usar el tocador permiso... — me disculpo cuando nuevamente soy el centro de atención de todos los reunidos en la mesa.

Volker me ve un instante y luego ve a Kai, suspira y vuelve a la conversación en la que Ajax y Leyna están sumergidos. Me giro y echo andar hacia el baño pero me detengo en cuanto recuerdo que con el magnate aquí los baños no son muy buena idea, así que regreso sobre mis pies y camino a la puerta, siento sus ojos en todo momento sobre mí. Cuando salgo del restaurante respiro profundo y camino hacia la esquina tratando de alejarme de la puerta.

Abanico mi rostro y trato de alivianar mi cuerpo y mi cabeza, apoyo mis manos sobre mis rodillas y respiro profundo un par de veces.

— Tienes que ser fuerte Lizzy...— me repito en un susurro.

Cierro mis ojos y continuo respirando, intentado que mi cuerpo se recupere del ataque lujurioso que el magnate provoca en mí, cuando los abro un par de zapatos negros están en mi campo de visión y maldigo para mis adentros. Respiro profundo y me yergo preparándome mentalmente para verlo, sé muy bien que es el. Recorro su cuerpo con los ojos conforme enderezo mi torso, su endurecida entrepierna sobresale en su pantalón haciendo tragar grueso y morder mi labio, pero para cuando llego a su rostro finjo demencia y que no me afecta.

— ¿Estás bien? — pregunta de inmediato haciendo que todo se encoja dentro de mí.

— Si ¿por qué? — sus ojos me escrutan con detenimiento.

— Este no es el tocador... — suelta con un deje burlón en la voz que me pone a hervir la sangre de inmediato

— Tenia calor y necesitaba aire... — trato de decir alguna excusa lo suficientemente creíble pero fallo terriblemente.

Entonces como si viniera del infierno solo a tentarme a caer en el pecado, el magnate da un paso a mí acortando el poco espacio que había dejado cuando llego, el aroma de su perfume una vez más juega con mi cordura y tratando de controlarme y respiro profundo lo que por supuesto lo hace aun peor. Cierro mis ojos y miro al piso, no puedo verlo en este momento a los ojos, no con mi cuerpo deseándolo de esta manera.

Sus dedos se deslizan por mi mejilla hasta sujetar mi mentón y lo sube para que nuestras miradas se encuentren y justo allí en medio de una calla medio concurrida de Ginebra puedo decir o asegurar que este jodido hombre no es real, que es un enviado del infierno que ha venido solo a torturar mi existencia y complicara de una manera malditamente excitante y tristemente no quiero que pare de hacerlo.

Kai desliza sus manos por mi mejilla regalándome un caricia suave que me eriza la piel, su pulgar se desliza por mi cutis hasta alcanzar mis labios que se entreabren para ayudarme a respirar y darle libertad a el sobre ellos. Rosa la yema de su dedo haciendo presión sobre mi labio inferior y luego sobre el superior, de regreso al inferior y en una movida arriesgada lo desliza un poco dentro de mi boca, donde mi lengua se mueve como atraída por imán y rosa ligeramente su piel, el magnate respira profundo y suelta un gruñido bajo y ronco que me hace mirarlo.

Sus ojos son deseo, lujuria, lascivia, todos los conceptos eróticos que existente se resumen en este momento en la forma que está mirándome.

— ¿Quién era ese? — pregunta abandonando el rose que me hace jadear y desear que no se hubiese detenido.

Estoy una especie de trance post rose de labios y no respondo, es imposible que este hombre me deje de esta manera tan descolocada e indefensa.

— ¿Elizabeth quién era ese? — repite en un hilo de voz cargado de ira que me hace volver aquí, ahora a la realidad.

Me espabilo y recupero por completo en control de mis pensamientos, pero no de mi cuerpo porque el muy traicionero y vendido juega en mi contra cada que está cerca.

— Un amigo... — respondo desafiante y el suspira mirándome serio — ¿Por qué? — murmuro elevando una de mis ceja s y acercándome más a él.

Este es un puto juego, pues es mucho más divertido cuando dos son lo que juegan. Me coloco en la punta de mis pies y busco su oído, apoyo mis manos en su pecho y lo siento tensarse y como se estremece ligeramente con el contacto

— ¿Te molesta? — pregunto en un susurro cerca de su oído, la tensión en su cuerpo es tanta que puedo sentirla.

Repentinamente coloca sus manos sobre mis brazos y me separa de el

— No me provoques Elizabeth — me advierte y rio divertida

— ¿Por qué, después que matas al tigre le tienes miedo a la piel? — respondo consciente que le cabrea no poder entenderme.

— Ingles Elizabeth...— rio y me separo aún más de él lo devoro con los ojos descaradamente y suspiro

— Es una pena que ambos ya no estemos disponibles... — y sin más me giro para regresa, pero me toma del brazo y me gira con brusquedad.

— ¿De qué hablas? — su perfume y la dureza de su cuerpo al chocar con el mío bastan para aumenta la jodida calentura pero me resisto.

— Ay por favor habíamos quedado en que no eras tan idiota... — sus ojos se abren como platos y me ve con furia una furia que lo hace lucir como un trozo de chocolate después de una larga abstinencia.

Joder, humedezco mis labios y muerdo el inferior, gesto que no le pasa desapercibido y de inmediato su mano viaja a mi labio y lo libera.

— puedes dejar de hacer eso te lastimas joder... — me reprende y siento que me deshago allí delante de él.

¡Huye Lizzy, huye!

Me separo de él y echo andar de regreso al restaurante con prisa para evitar otro acercamiento. Soy fuerte pero no de hierro y aunque justo ahora odie reconocerlo, porque no debería afectarme de esta manera, Kai puede conmigo. Cuando entro al restaurante Ajax ríe a carcajadas junto a Leyna, Volker por el contrario tiene una media sonrisa en los labios en cuanto me ve ladea su rostro y no sé porque siento que sabe que Kai y yo estábamos juntos afuera. Me siento junto a él y se inclina hacia mí.

— ¿Todo en orden? — yo asiento simplemente y el me ve suspicaz.

A Volker es muy difícil engañarlo, eso lo he notado estos días que hemos estado trabajado juntos.

— Si, solo fui al baño — miento y el asiente luego eleva su rostro para ver a Kai que toma asiento con cara de pocos amigos.

Me fulmina con la mirada y coge la copa de vino y sin más se bebe el contenido de la copa de un trago, Leyna nota su actitud y sujeta su mano sobre la mesa, Kai se tensa de inmediato y posa sus ojos en ella.

— ¿Estás bien amor? — pregunta con el ceño fruncido.

Kai se limita a asentir y Ajax bufa divertido, luego atrae la atención de Leyna y ambos continúan con su plática como si Volker, Kai y yo no estuviéramos. Suspiro y tomo un sorbo de vino, mirando como Leyna permanece con la mano de Kai entre las suyas y el muy idiota no hace el menor intento de liberarse confirmando que todo lo que pienso sobre ellos es verdad y Volker solo está mintiendo para su conveniencia. Están juntos y ella no tiene que fingir para hacerme creer algo que no existe.

Poso mis ojos en el magnate que no ha dejado de mirarme, sus ojos me calcinan y yo entro en ese conflicto existencial de desearlo como a nada en el mundo y querer dejar de lado ese deseo. Desvió mis ojos y hago lo mejor que puedo hacer en este momento, hablar con Volker, que es un perfecto espectador de lo que ocurre a su alrededor.

— ¿Qué es lo primero que debemos hacer? — le pregunto y el frunce el ceño, suspira y se inclina hacia mí para murmurar en mi oído.

— Resolver lo que pasa entre ustedes, eso es lo primero que tienen que hacer... — afirma haciendo que mire al magnate que luce cada vez más tenso y no sé si es por la cercanía con Volker.

— No hay nada que resolver Volker, yo estoy con James y tome mi decisión, no pienso volver a caer con Kai... — Volker ríe con ganas y niega con la cabeza

— Claro, así como esa promesa absurda del adicto de no volver a consumir ¿no? — suelta con ironía lo que me hace verlo sorprendida, el suspira y sonríe — te demostrare que tienen mucho que resolver... — murmura.

Entonces de manera disimulada coloca su mano sobre la mesa y luego sobre la mía y comienza a acariciar el dorso con su pulgar, de inmediato lo observo sorprendida, sus ojos grises me ven con intensidad y luego sonríe, joder quedo como una tonta mirándolo.

— Kai está muriendo de los celos solo por esto Elizabeth... y soy yo, imagínate como se pondrá cada vez que te vea con alguien que no sea el... — dice volviendo a su expresión seria, entonces busco los ojos de Kai y esta asesinando a Volker con la mirada.

Volker saca su teléfono y comienza a teclear algunas cosas en el, en seguida el teléfono del magnate suena y lo toma sin dejar de ver mal a Volker, despega su mirada y lee lo que asumo le ha enviado Volker, sus ojos se desvían de la pantalla a Volker y de regreso a mí. Respira profundo y retira la mano que sujeta Leyna, esta de inmediato se gira para verlo, pero él toma el teléfono con ambas manos y mira la pantalla ella regresa a la conversación con Ajax y me quedo muda.

— No jueguen a ver quién es más tonto que el otro, porque ambos lo son... y terminaran mal — suelta Volker tomando su copa de vino y dando un sorbo me sonríe con calidez y luego suspira se pone en pie y se aleja sin decir nada más.

— Hora de irnos, tengo cosas que hacer... — suelta Kai repentinamente poniéndose en pie también — Ley regresemos al Lux Volker quiere hablar algunas cosas contigo sobre lo que paso. — Leyna se pone en pie junto con Ajax y echan andar juntos hacia la puerta del restaurante dejándome a solas con el magnate.

— Elizabeth... — me llama y yo suspiro

— ¿Qué? — suelto tratando de no sonar dura pero fallo terriblemente y el respira profundo cerrando los ojos.

— Te quiero en mi oficina en dos horas, tenemos mucho trabajo... — comenta y yo asiento

— ¿Se le ofrece alguna otra cosa? — suelto con sarcasmo porque en serio odio que me ordene las cosas, ¿le cuesta mucho decir por favor?

— Sí, que dejes de tocarme los huevos cada que tengas oportunidad... — entonces antes que pueda decir algo se gira y se va, Volker se coloca a mi lado y niega con la cabeza.

— No me refería a eso cuando les sugerí que lo resolvieran — suspiro y lo veo

— Tranquilo el trabajo saldrá bien, soy profesional y no dejare que esta tontería estropee las cosas... — Volker me ve un instante y asiente.

— Vamos.

El camino en el auto de Kai, Ajax y Leyna parecen cotorras pareciera que tienen siglos sin verse, cosa que en realidad no me importa pero su vocecilla me irrita, en serio no la soporto. Kai y Volker vienen metidos en su teléfono. Cuando finalmente llegamos al Lux salgo disparada del auto tratando de apartarme del cuarteto necesito aire y sentirme libre, pero no he dado ni dos pasos cuando Ajax me llama.

— ¿Lizzy podrías hacerme un favor? — me detengo y me giro fingiendo una enorme sonrisa

— Sí, claro, ¿Qué cosa?

— Me haces una foto con Leyna... — Leyna comienza a reír a carcajadas y lo empuja divertida.

Volker pone sus ojos en blanco y echa andar al interior del edificio, el magnate por el contrario continua con la cabeza metida en el teléfono y su expresión cada vez es peor. Me acerco a Ajax que me tiende su teléfono y abraza a Leyna que coloca sus manos debajo de su mentón y sonríe ampliamente, dios esta mujer es insoportable. Hago la foto y se la tiendo, ambos empiezan a hablar sobre la toma y yo me giro, pasando junto al magnate, pero me detengo, su expresión me preocupa.

— ¿Está todo bien? — regreso sobre mis pasos y me detengo frente a él.

Sus ojos se desvían de la pantalla del teléfono y suspira, niega y luego vuelva mirar la pantalla.

— Luther... — murmura entre dientes y suspiro.

Sabiendo que posiblemente este teniendo una discusión con su padre, en ese momento su teléfono suena y el respira profundo.

— Alo...— responde con la ira tiñendo su tono de voz — ¿fuiste tú no es así? — Pregunta presionando sus puños — claro no te basto la rueda de prensa tenías que agregar más mierda a todo — suelta elevando el tono cosa que llama la atención de Leyna y Ajax que se acercan a nosotros.

— ¿Qué pasa? — pregunta Ajax y suspiro

— Luther...— la expresión alegre de Ajax desaparece y suspira, fija sus ojos en Kai y luego en Leyna que muerde sus labios mirando con preocupación a Kai.

— Por favor, estas disfrutando de esto, te encanta enterrarme en la mierda en el momento en que perdiste el apoyo de los socios principales me viste como tu enemigo y desde entonces solo buscas una excusa para joderme... — su respiración cada vez está más agitada y yo quiero acercarme y tratar de calmarlo.

Pero Leyna se me adelanta y toma sus manos haciendo presión en ella, Kai la observa y su expresión se suaviza considerablemente, entonces mi pecho se contrae y sin decir nada me giro y entro al edificio nuevamente con unas intensas ganas de llorar.

Recojo las cosas en las que he estado trabajando y tomo mi Tablet más mi bloc de notas, debo reunirme con Kai otra vez y justo ahora no quiero hacerlo, no después de ver como ella lo relaja, no después de ver el efecto que ella tiene en él. Cuando salgo de mi oficina todo esta súper tranquilo, normalmente siempre está el ruido constante del tecleo de Kenya pero esta vez no se escucha nada, cuando llego al stand efectivamente todo esta tan silencioso porque Kenya no está, así que camino directo a la puerta del magnate, respiro profundo y toco la puerta.

— Adelante... — su voz suena tensa y ya sé que me esperan un par de horas de trabajo incómodo.

Cuando entro lo hago con los ojos fijos en el suelo, no quiero verlo, pero me obligo hacerlo y maldigo para mis adentros cuando lo hago. Kai está en su sillón sentado frente al ordenador, con los lentes puestos el ceño fruncido y expresión concentrada, ya no lleva el chaleco puesto solo la camisa y Leyna está detrás de él masajeando sus hombros con expresión triunfal.

— Permiso... — murmuro. Leyna me ve y sonríe

— Ya te atiendo... — responde Kai sin mirarme y esa frialdad en su voz me destroza — Ley gracias... — murmura tomando su mano y moviéndola detrás de la silla y colocándola a su lado.

— No hay de que, sabes muy bien que siempre contaras conmigo, — se inclina sobre él y deja un beso sobre la comisura de su labio, pero estoy segura que iba a besarlo en la boca y él ha evitado que lo haga — nos vemos en la casa ¿vale? — el asiente y luego ella libera su mano y camina hacia el perchero toma su abrigo y echa andar hacia mí — un placer haberte conocido Elizabeth... — hace una pausa y gira su rostro hacia Kai que se ha vuelto a sumergir en la pantalla del ordenador — está muy estresado, así que si no es mucho pedir, ¿podrías tratar que lo que sea que tengan que hacer se haga rápido para que pueda volver a casa? Necesita relajarse — esas palabras son como una bofetada de realidad que cae sobre mi como piedras.

Trago duro y asiento.

— Por supuesto hare lo que pueda tranquila... — ella sonríe ampliamente y se acerca a mi dejando un par de besos en mi mejilla que no solo me sorprenden me incomodan.

Sonríe una vez más y continúa hasta la puerta.

— Kai... — lo llama desde la puerta y el magnate se gira para verla expectante — te amo... — esas dos palabras me hacen abrir los ojos como platos.

Kai simplemente asiente y Leyna sale de la oficina dejándonos solos, yo quiero salir corriendo. El silencio se extiende entre ambos y yo no soy capaz de formular una sola palabra. Me quedo en el mismo lugar mirando el piso como una estúpida, hasta que finalmente el aroma de su perfume me espabila, cuando elevo los ojos está de pie frente a mí. Sus ojos están rojos y luce realmente cansado.

— ¿Estás bien? — pregunta con sus brazos cayendo a los lados de su cuerpo

— Si, perfecta... — miento y el suspira, se quita los lentes y talla sus ojos, antes de volver a verme

— Oye siento mucho lo del restaurante no debí hablarte así... — murmura y yo frunzo el ceño — necesitamos resolver esto Elizabeth, no puedo darme el lujo de estarme distrayendo en este momento, no después de saber las intenciones de Luther... — lo miro sin comprender

— ¿Las intenciones de Luther?

— Es obvio que no va a parar hasta hundirme Elizabeth y yo necesito estar centrado... — entonces respiro profundo y lo veo con seriedad

— Ya te dije que no volvería a estar contigo, no seré una distracción... — suelto cortándolo y él me ve mal.

— ¿Vas a casarte con él? — pregunta repentinamente y yo no sé qué responder.

— Es mi prometido esa pregunta es tonta... — murmuro y el suspira presionando sus manos en puños.

— Si o no Elizabeth... — me presiona y yo me exaspero y echo andar de un lado al otro.

— ¿Por qué te importa tanto? — el permanece en el mismo lugar sin responder

— Solo quiero saberlo...

Entonces me giro para verlo, sus ojos están fijos en el suelo pero su expresión exhausta ha cambiado y ahora es la furia que lo desdibuja, esta cabreado otra vez y comprendo que todo es por esto, que ciertamente esto está complicando sus cosas y justo ahora tiene bastante que resolver con su padre, así que hago lo que debí haber hecho hace rato.

— Si me casare con el Kai... — sus puños se presionan con más fuerzas al punto que sus nudillos se vuelven blancos, su mandíbula se tensa tanto que creo que va a romperse y sus labios se hacen una fina línea, luego cierra sus ojos y respira profundamente, libera el aire con lentitud y se gira para enfrentarme.

— Tenemos trabajo que hacer señorita White por favor, pase por aquí... — la formalidad la frialdad con la que está viéndome me destroza, pero elevo mi rostro y paso junto a él siguiendo el camino que me indica.

Las siguientes tres horas son una lenta tortura en la que Kai solo habla lo estrictamente necesario y en ningún momento me mira, cuando da por finalizado el trabajo suspira y se pone en pie toma sus cosas y sin mirarme camina a la puerta.

— La quiero aquí mañana a las 7:30, tenemos mucho que hacer y no quiero más retrasos ya he perdido suficiente tiempo... — hace una pausa y luego suspira — hasta mañana señorita White

No alcanzo a responder porque cuando asimilo lo que ha dicho ya se ha ido y me ha dejado sola en su oficina, me pongo en pie con lentitud y suspiro, rodeo el escritorio y me fijo en la foto donde esta con Leyna, debo reconocerlo es una fotografía hermosa, ambos sonríen y el luce perdidamente enamorado. No sé cuál es su historia pero es obvio que no se ha terminado y yo tengo a James. Suspiro y asiento dejando la foto en su lugar.

Recojo mis cosas y salgo de allí con los ánimos en el subsuelo. Cuando llego a casa me veo tentada de llamar a James, pero desisto, tomare el consejo de Winter, estoy soltera... quizás deba tomar este tiempo para mí.

Nota del autor: Hola mis gamers... por aquí otra actualización, les explico que voy hacer, actualizare cada que tenga un capitulo listo (estaré escribiendo esta nada mas de momento) hasta cierto punto en la historia donde hay un Break con los personajes... alli hare una peque;a pausa y terminare con #ZeroFeelings seguiré actualizando esta pero con menos regularidad, asi que posiblemente sigamos teniendo actualizaciones diarias de #SlaveGame. En fin, espero les haya gustado y esten odiando a cierta chica de ojos azules!XD jajajaja les amo y gracias infinitaaaas!